Jack
Jamás pensé que me alegraría regresar a casa de Elsa, pero tenía una razón muy importante para hacerlo, podíamos quedarnos en el hotel en lo que construíamos el que sería nuestro nuevo hogar, pero necesitábamos llevarnos los muebles y cosas de la casa.

Estacione el carro frente a la casa de la platinada y ambos bajamos, tuve que dar dos vueltas para poder bajar todos los peluches que les gane a mis dos chicas. Los acomodamos en el sillón y nos dispusimos a desayunar, yo preparé nuestra comida y Elsa la leche de Cassie, extrañamente la bebe no dejaba de llorar, parece que se había despertado de mal humor.

Elsa no dejaba de refunfuñar y Cassie de llorar y alejar el biberón de ella, una sensación extraña me invadió, era como si algo dentro de mi me dijera que estaba apunto de pasar algo malo, muy malo.

Jack- déjame intentarlo, tú come

Elsa- tomo a la bebe y me la paso por encima de la mesa- no entiendo que le pasa, nunca había hecho esto

Jack- tal vez solo esté algo cansada o...enojada

Elsa- ¿enojada? ¿Porque?

Jack- puede que le haya gustado estar en el sur

Elsa- puede que tengas razón, aunque...

Jack- ¿que sucede linda?

Elsa- no lo sé, me siento nerviosa y... con miedo, aunque, puede que solo sea yo y mi paranoia

Jack- no, yo también me siento igual, nervioso, con miedo, inseguro, muchas emociones y no son nada positivas

Elsa- mantengámoslos tranquilos, puede que no sea nada

Elsa me sonrió, pero supe que no era sincera, ella se veía realmente asustada, yo también lo estaba, pero no quería demostrarlo, tenía que estar sereno por ella, no quería que se preocupara más de lo que ya estaba.

Habíamos planeado que ese día comenzaríamos a empacar, pero decidimos quedarnos en casa viendo películas.

No dejaba de mover mi pie de manera insistente, algo me estaba preocupando y no tenía ni la menor idea del porque.

Cassie estaba en medio mío y de Elsa tomando su mamila, pero son sus ojitos rojos y aún llorosos, me sentía mal por no saber que le pasaba a mi bebé y Elsa se sentía mucho peor.

Jack- y si ¿pedimos una pizza para comer?

Elsa- es buena idea

Jack- de acuerdo, voy a llamar y pedirla

Me levante de la cama y salí del cuarto, sentía la tensión acumulada en mi cuerpo, llame y pedí una pizza de pepperoni, pero, al terminar la llamada tocaron a la puerta, ¿tan rápido había llegado?

Baje las escaleras y al estar a unos pasos de la puerta mi cuerpo comenzó a temblar y sentí la adrenalina correr por mi cuerpo, como si estuviera apunto de asaltar una tienda o algo así.

Abrí la puerta y un hombre trajeado con porte elegante y cara seria me extendió una carta.

Hombre- señor ¿Jackson?

Jack- si, soy yo, ¿que sucede?

Hombre- tenga- tome la carta

Jack- ¿que es esto?

Hombre- soy el abogado del señor Hans, la persona que demanda a la señorita Elsa y el señor Jackson

Jack- ¡¡DEMANDA!! ¿¡¡DE QUE O PORQUE!!?

Hombre- lo lamento, pero eso no me concierne, será mejor que lea el papel- el hombre se comenzó a alejar dejándome parado leyendo el papel.

No lo podía creer. Hans nos estaba demandando por los daños que supuestamente le ocasionamos, a él y a su auto, además de que demandaba en nombre de los Foster, por su pequeña niña Sofia.

Continuará

Intenso ¿no?

Esperen la continuación, el martes.