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Se junto el lavado con el planchado

Izuku entra al salón de clases, cargando su mochila y con una expresión tranquila, listo para comenzar el día. Al abrir la puerta, se encuentra con Mineta y Kaminari llorando dramáticamente mientras se agarran de los hombros mutuamente. Ambos corren hacia él en cuanto lo ven entrar.

Mineta: ¡I-Izuku! ¡No sabes lo horrible que fue! le agarra del brazo, sollozando.

Kaminari: ¡Tuvimos que aguantar a Monoma todo el intercambio! ¡Fue lo peor! cae de rodillas, como si recordara algo traumático.

Izuku: ¿E-eh? ¿Qué pasó con Monoma?

Mineta: ¡Eso, eso mismo! ¡¿QUÉ NO PASÓ?! Ese tipo no dejó de molestarnos ni un segundo. comienza a temblar solo de pensarlo.

Kaminari:  ¡Y Bakugou casi explota el salón cuando Monoma se le puso en frente! Fue como tener un volcán a punto de hacer erupción cada cinco minutos...

Izuku no puede evitar reír nerviosamente al imaginar la escena, ya que conoce bien el temperamento de ambos, tanto de Monoma como de Bakugou.

Izuku:  Ya me imagino... Monoma no puede resistirse a provocarnos...

Mineta: ¡Izuku, estuvo más allá de eso! Cada vez que abría la boca, Bakugou lo miraba como si quisiera explotar todo el edificio. ¡Teníamos que sujetarlo para que no lo hiciera!

Kaminari: Y cuando por fin logramos que se calmara, Monoma se puso a hablar de cómo "la clase B siempre supera a la clase A". Y claro, ¡eso desató otra pelea!

Izuku: Me pregunto si algún día podrán llevarse bien... Justo en ese momento, Bakugou entra al salón de golpe, empujando la puerta con un gruñido. Al ver a Mineta y Kaminari llorando, frunce el ceño.

Bakugou: ¿Qué están lloriqueando ahora? ¿Todavía se quejan de esa basura de Monoma?

Mineta y Kaminari: ¡AAAAAAAAAH, BAKUGOU! ambos gritan y retroceden, cubriéndose la cabeza.

Bakugou: Si no lo soportan, ¡entonces háganse más fuertes y denle una paliza! Tsk, ese estúpido Monoma cree que puede burlarse de la clase A. aprieta los puños Ya quisiera verlo intentarlo otra vez...

Izuku: B-Bakugou, seguro que también fue difícil para él... los intercambios son para aprender, no para pelear.

Bakugou: ¿Difícil para él? ¡¿Difícil para él?! Cada vez que ese tarado abre la boca, a alguien le sube la presión en esta escuela. ¡Especialmente a mí!

Mineta: ¡Izuku, dile algo! le susurra, mirando a Bakugou con miedo.

Izuku: Bueno... tal vez todos podemos aprender a tolerarnos un poco más... además, es bueno practicar con compañeros que piensen diferente.

Bakugou: Tolerarlo, ¿eh? le lanza una mirada afilada a Izuku A ver si cuando lo tengas gritándote al oído "¡Clase A es basura!", todavía puedes decir eso con esa cara de tonto.

Kaminari: Sí, Izuku, Bakugou no está exagerando esta vez. Monoma no paró ni un segundo. Y la próxima vez que haya un intercambio... ¡nos tomamos vacaciones!

Izuku estaba almorzando junto a Komi en el salón de los cursos generales, disfrutando de la tranquilidad y la compañía. Komi seguía comiendo en silencio, mirando a Izuku de vez en cuando con una leve sonrisa tímida. Izuku se sintió inspirado y pensó que sería una buena oportunidad para presentarla a sus amigos de la clase 1-A.

Izuku: Komi-san, ¿qué te parece si vamos a la cafetería? Me gustaría que conocieras a mis amigos.

Komi asintió, algo nerviosa pero decidida, y ambos se dirigieron hacia la cafetería principal. Mientras caminaban, ella mantenía su cuaderno cerca, lista para comunicarse en caso de ser necesario. Al llegar, encontraron la cafetería llena de estudiantes, y Komi pareció detenerse por un momento al ver la cantidad de gente, visiblemente abrumada. Izuku lo notó y le dio una sonrisa tranquilizadora.

Izuku: No te preocupes, Komi-san. Mis amigos son recordando a Mina, ellos, recordando a Bakugou, seran bu... Recordando a Mineta, les caeras bien.

Komi asintió con una sonrisa temblorosa, y ambos continuaron hacia la mesa donde los amigos de Izuku conversaban. Kaminari y Kirishima reían mientras Mina hablaba con entusiasmo, y Ochaco y Tsuyu charlaban tranquilamente. Todos miraron con curiosidad cuando vieron que Izuku venía acompañado.

Ochaco: ¡Izuku! ¿Quién es tu amiga? Le sonrió a Komi, quien rápidamente bajó la mirada, un poco insegura.

Izuku: Chicos, ella es Komi-san, una amiga de los cursos generales.

Komi, visiblemente nerviosa, sacó su cuaderno y escribió una breve presentación, mostrando la página con una pequeña sonrisa.

Komi (en el cuaderno): "Hola, soy Komi. Es un gusto conocerlos."

Tsuyu: Kero, ¿por qué hablas a través de un cuaderno, Komi-chan?

Komi miró a Izuku en busca de apoyo, y él le dio una sonrisa alentadora. Con un leve rubor, Komi escribió otra nota en el cuaderno para explicar.

Komi (en el cuaderno): Me cuesta mucho hablar en público, pero me esfuerzo por comunicarme.

Kaminari: ¡Eso es genial, Komi-san! Aquí todos hablamos suficiente para que puedas quedarte tranquila. Le sonrió amigablemente, tratando de hacerla sentir cómoda. Komi le devolvió una pequeña sonrisa, un poco más relajada.

Sin embargo, en ese momento, alguien interrumpió la tranquilidad al sentir unos brazos rodeando sus hombros y alguien subiéndosele encima.

Yotsuba: ¡Izuku-kun! Izuku apenas logró mantener el equilibrio y reconoció a Yotsuba, quien se había subido a su espalda con una sonrisa radiante.

Izuku: ¡Y-Yotsuba! ¿Qué haces aquí?

Antes de que pudiera decir algo más, Ichika, Nino, Miku e Itsuki también llegaron, cada una con una expresión distinta. Ichika sonreía de forma divertida, Nino fruncía el ceño como si no le gustara la situación, Miku observaba con sorpresa y curiosidad, e Itsuki mantenía una expresión seria. Los amigos de Izuku intercambiaron miradas de sorpresa y confusión.

Nino: Izuku, ¿no piensas presentarnos? ¿O acaso tienes algo que esconder? Le lanzó una mirada sospechosa.

Komi miró a Izuku con una expresión confusa, buscando entender la situación. Izuku suspiró, intentando calmar el ambiente.

Izuku: Komi-san, estas son las hermanas Nakano, unas amigas de... hace un tiempo. Chicas, ella es Komi-san, una amiga de los cursos generales.

Komi, aún tímida, escribió una breve presentación en su cuaderno y se la mostró a las quintillizas, quienes la leyeron con interés.

Komi (en el cuaderno): "Hola, es un placer conocerlas."

Ichika: ¡Qué encantadora! Hablas a través del cuaderno, ¡es tan original! Ichika le sonrió de forma amable, y Komi, aunque tímida, respondió con una sonrisa nerviosa.

Miku: Komi-san, ¿te importa si leo lo que escribes? Le preguntó curiosa, y Komi asintió.

Itsuki: Parece que Izuku nos ha estado ocultando algo. ¿Desde cuándo tienes amigas en otros cursos? Itsuki sonrió con una chispa divertida, mientras Izuku intentaba no parecer nervioso.

Nino, sin embargo, observaba a Komi con escepticismo.

Nino: ¿Así que no puedes hablar en absoluto, o prefieres no hacerlo?

Komi negó rápidamente y escribió en su cuaderno, con letras grandes para que todos pudieran leerlo.

Komi (en el cuaderno): "Prefiero escribir porque me da vergüenza hablar."

Ochaco, notando la incomodidad de Komi y queriendo que se sintiera bienvenida, le sonrió con entusiasmo.

Ochaco: ¡No te preocupes, Komi-san! ¡Nos alegra tenerte aquí! Nos gusta conocer amigos nuevos. ¿Verdad, chicos?

Kirishima, siempre positivo, asintió de inmediato.

Kirishima: ¡Claro que sí! ¡Cualquier amigo de Deku es nuestro amigo! Le dio una sonrisa alentadora a Komi, que respondió con una tímida sonrisa de gratitud.

Mientras todos conversaban, Komi comenzó a relajarse. Incluso respondió algunas preguntas de forma escrita, y cada uno de los amigos de Izuku, incluyendo a las quintillizas, mostraban interés en conocerla. Yotsuba se inclinó hacia Komi, susurrándole con entusiasmo.

Yotsuba: Komi-chan, ¡nos encantaría que te unieras a nosotras cuando quieras! Seguro Izuku ya te lo dijo, ¿no?

Komi (en el cuaderno): "Muchas gracias... Esto es nuevo para mí, pero me siento agradecida."

Mina, que había estado observando, se inclinó hacia ella, interesada.

Mina: Entonces, Komi-san, ¿te gusta algo en especial? ¿Algo que te haga feliz?

Komi miró a Izuku buscando un poco de confianza, y luego escribió en el cuaderno.

Komi (en el cuaderno): "Me gusta dibujar y escuchar música tranquila."

Kaminari: ¡Eso es genial! Tal vez podríamos intercambiar música algún día. Le sonrió, entusiasmado por conocer más de ella.

Poco a poco, Komi se sintió más incluida. Aunque seguía comunicándose por el cuaderno y con tímidas sonrisas, estaba comenzando a disfrutar de la compañía, rodeada de personas que la hacían sentir aceptada. Izuku sonrió al ver que Komi se estaba abriendo poco a poco, sabiendo que había encontrado un lugar especial entre sus amigos y que, poco a poco, estaba superando su timidez.

Era el final del día escolar, y el grupo de la Clase 1-A caminaba juntos hacia los dormitorios. Izuku, algo adolorido tras su entrenamiento especial del día anterior, apenas podía mantener el paso. Mientras caminaban, escuchó un susurro que le erizó la piel. Ahí, en una rama de un árbol al lado del camino, estaba Miu Furinji, esperándolo con una sonrisa amigable.

Mina: ¡Oye, chicos! ¿Ven lo mismo que yo o estoy alucinando? Señalando a la chica en el árbol.

Kaminari: ¿Quién es esa? ¿Y por qué está en un árbol? Eso es... raro, ¿verdad? Parpadeando.

Izuku: Ehhh... ella es... Miu-san.

Miu: Izuku, qué bueno encontrarte. Vine a buscarte, Saltando ágilmente del árbol y aterrizando frente a ellos.

Uraraka: ¿Buscarlo? ¿Por qué? ¿Es algo importante?-

Miu: Simplemente es hora de que Izuku vuelva a entrenar en el dojo.

Izuku:  Ehhh... Miu-san, no creo que sea necesario... ya entrené ayer, ¿recuerdas?

Mineta: ¡Izuku! ¡¿De dónde sacaste a esta increíble chica?! ¿Por qué nunca nos presentaste? Observando a Miu con admiración y algo mas.

Kirishima:¡Sí, hermano! No nos dejes en la oscuridad. ¿Desde cuándo tienes contacto con alguien tan genial?

Tsuyu: ¿Entrenamiento especial, ribbit? No mencionaste nada de esto antes.

Izuku: Bueno... es algo complicado. Miu-san es... una amiga que me ha ayudado con ciertos... entrenamientos.

Miu: Así es. Izuku tiene mucho potencial, pero aún queda mucho trabajo por hacer. Vamos, Izuku, no podemos perder tiempo."

Uraraka: Izuku... si entrenaste ayer y todavía estás adolorido, ¿no sería mejor descansar? No queremos que te lastimes.

Mina: Sí, además, ¡acabas de terminar un día de clases! Mereces un descanso, Izuku.

Miu: El entrenamiento en Ryozanpaku es intensivo, pero es necesario para fortalecer no solo el cuerpo, sino también el espíritu. Izuku lo sabe, ¿verdad?

Izuku: Sí... es cierto. Pero es que... aún estoy algo adolorido del último entrenamiento."

Mineta: ¿De qué estás hablando, Izuku? Si yo tuviera una instructora así, ¡no me quejaría de nada!.

Kaminari: ¡Sí! Ya quisiera yo ser entrenado de esa forma.

Kirishima: Sí, hermano, nos preocupas. No te obligues a hacer algo que podría lastimarte, y mas despues de lo del campamento.

Izuku: No-no se preocupen tanto ya estoy saludable *oh eso dice recoveri antes de los bastonasos*.

Miu: Entonces, Izuku... ¿vendrás? Solo será un par de horas. Prometo que no será tan intenso como ayer.

Izuku: Está bien, Miu-san... iré contigo. Pero sólo un rato, *Porque siento que vendi mi alma al doablo*.

Mineta: Ahh, Izuku, ¡qué afortunado eres! Entrenando con una chica como ella, mientras nosotros sufrimos con Aizawa.

Kaminari: Cuéntanos cómo te va, Izuku. Queremos saber todos los secretos de ese entrenamiento tan 'especial'.

Izuku: Sí, claro... les contaré... cuando vuelva.

Miu:Gracias por cuidar de él. Izuku está en buenas manos.

En cuanto Izuku abrió la puerta de su departamento, una escena caóticamente adorable lo recibió. Apenas cruzó la puerta, escuchó una serie de risas, balbuceos, y pequeños sonidos que parecían esperarlo desde hacía horas. Rem, quien estaba en la sala cuidando de los pequeños, lo saludó con una sonrisa.

Rem: ¡Bienvenido de vuelta, Izuku! Parece que los pequeños estaban muy ansiosos por verte. Al instante, Yoshiko, con su mameluco de abeja, estiró los bracitos desde el suelo y emitió un sonido de puro entusiasmo. Izuku no pudo evitar sonreír mientras la alzaba, sabiendo cuánto disfrutaba ser cargada. Yoshiko se acurrucó en su pecho, contenta de estar entre sus brazos.

Izuku: ¡Hola, Yoshiko! Parece que tenías muchas ganas de ver a papá. En ese momento, Rin se acercó rápidamente y tiró de su pantalón, con un puchero en el rostro. Su expresión posesiva lo decía todo; quería toda su atención. Izuku rió suavemente, agachándose para acariciar su cabecita. Tranquila, Rin.  tengo abrazos para ti. Yasu comenzó a reír alegremente desde donde estaba sentado, agitando sus manos y mostrando su gran sonrisa bajo su mameluco de vaca. Sakura, su hermana, no tardó en unirse, balbuceando un animado "Moo" como si intentara imitar a una vaca real. Ambos parecían disfrutar de la pequeña broma compartida y del ambiente familiar.

Rem: Si igualmente Take no lo dejo de esperar.

Izuku: ¡Vaya, vaya! ¿Tú también, Sakura? Esos disfraces les quedan geniales. Creo que tengo una granja de pequeños aquí. Mientras acomodaba a Yoshiko y le daba un suave abrazo a Rin, Inko empezó a llorar, atrayendo su atención. Sabía que Inko era difícil de calmar y, sin perder tiempo, la cargó, balanceándola suavemente mientras le murmuraba palabras de consuelo. Ya, ya, Inko. Papá está aquí.

Rem sonrió mientras observaba cómo Izuku mantenía su calma con cada uno de los bebés, quienes parecían tener su propio turno para captar su atención. De repente, Shiro, con sus grandes ojos brillantes, extendió las manos y comenzó a hacer palmas, invitando a Izuku a que jugara con él. Izuku le sonrió y, aún sosteniendo a Inko en un brazo, comenzó a chocar palmas con Shiro.

Izuku: ¡Eso es, Shiro! ¡Eres todo un campeón de las palmas!

Mientras tanto, Nomi, que prefería observar tranquilamente, miraba a Izuku desde una pequeña manta en el suelo. Izuku, con un toque de cariño, se inclinó hacia ella y la alzó suavemente en el aire, provocando una pequeña risita de la bebé, que se aferró a su camiseta.

Después de unos minutos de abrazos y mimos, Izuku miró a todos los bebés, agradecido por el cariño y la alegría que cada uno de ellos traía a su vida.

Yo eligiendo que en el siguiente aparecerá Juvia:


Esto me recuerda a cuando entre a Karate y una niña de 8 trapeo conmigo

En efecto es cine

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