Entrenamiento + una sorpresa
Izuku Midoriya se encontraba una vez más en la playa Dagoba, el lugar que había sido clave en su entrenamiento con All Might. Sin embargo, esta vez no estaba solo. Pony Tsunotori e Ibara Shiozaki lo acompañaban, listas para mejorar sus habilidades y aprovechar al máximo su entrenamiento conjunto.
Izuku: Es bueno regrear despues de tanto tiempo, hablo mientras estiraba, mas de un hueso trono solo por eso, lo hacia sentir mas joven, no se arrepentia de sus hijos pero volver a entrenar lo ponia muy de animos esperaba traer a sus hijos oh a Rem pero para desfortuna y fortuna Pony y Ibara pidieron entrenar como dijeron, ya extrañaba el sol y el aroma a playa.
Pony: Verde amigo, lista para pelar, hablo con muchos errores pero Izuku estaba igual seguia usando el traductor de su celular para hablarle
Izuku les devolvió la sonrisa, emocionado por la sesión. Aunque entrenar con ellas significaba un desafío para él como su compañero, estaba decidido a aprovechar al máximo la oportunidad para ayudarlas a mejorar.
Ibara: Gracias por ayudarnos a entrenar, Midoriya, dijo la religiosa, inclinando ligeramente la cabeza en señal de respeto.
Pomy: ¡Sí! ¡Gracias, Deku!, exclamó la estadounidense con energía, sus orejas de caballo moviéndose con entusiasmo.
Izuku sonrió, algo avergonzado, pero decidido. Sabía que las dos chicas confiaban en él, y eso lo motivaba a dar lo mejor de sí. Comenzaron con una rutina de calentamiento, corriendo por la orilla. Pony, siempre enérgica, bromeaba mientras corrían, retando a Izuku a una carrera. Ibara, aunque más reservada, también sentía cómo su corazón latía con fuerza, no solo por el esfuerzo físico, sino por la presencia de Izuku.
Izuku: O-oye no es justo, hablo mirando a Pony correr sin siquiera avisarle para el dar todo lo que tenia intentando alcanzar a esa tramposa
Después de correr, Izuku las guió a una serie de ejercicios diseñados para mejorar su resistencia y control sobre sus quirks. Pony trabajaba en mejorar la velocidad y precisión de sus patadas de aire con sus cuernos, mientras que Ibara practicaba sus habilidades con sus lianas sagradas, tratando de aumentar la velocidad y precisión con que podía controlar sus enredaderas.
Durante el entrenamiento, Izuku se mostraba cansado y agotado, pero atento, ofreciendo consejos y animándolas con palabras de aliento.
Izuku: ¡Lo estás haciendo genial, Pony! Solo concéntrate un poco más en el punto de impacto, hablo para ella quedarle biendo para Izuku golpearse en la cara debia aprender ingles si queria hablar con ella, concentrate to amplify impact, hablo con cierto conflicto con el ingles y el acento
Pony sonrió, sintiendo una calidez extraña en su pecho cada vez que Izuku le hablaba. Se encontraba admirando no solo su habilidad como héroe, sino también su dedicación y su humildad. A medida que el entrenamiento avanzaba, Pony notaba algo más: su corazón latía más rápido cada vez que Izuku se acercaba para ayudarla.
Pony: I will do it Izuku. [Lo hare Izuku], hablo para Izuku ahora no entederle usando otra vez su telefono, esa diferencia de idioma era algo a resolver,oh al menos en lo que ella entrenada con ellos... tal vez un curso con All Might y Present Mic lo resolveria.
Por su parte, Ibara también se sentía afectada por la actitud de Izuku. Él siempre había sido una persona amable, pero su dedicación y atención hacia ellas ese día la hacían sentir una conexión más profunda. A medida que sus lianas se movían en el aire, su mente se distraía ligeramente, notando cómo el viento jugaba con el cabello de Izuku, y cómo él, a pesar del sudor y el esfuerzo, mantenía una sonrisa cálida y genuina.
Izuku: Shiosaki-san, estás haciendo un excelente trabajo controlando más enredaderas al mismo tiempo, pero no te distraigas, dijo Izuku, acercándose para observar de cerca cómo manipulaba sus lianas.
Ibara: ¿Que?, mirando a Izuku regresando tras que el peliverde le reventara la burbuja en la que estaba, Oh claro.
Izuku: Excelente, hablo alzando un pulgar.
Ibara sintió su corazón acelerarse, no solo por el esfuerzo del entrenamiento, sino por la cercanía de Izuku. Era un héroe admirable, pero en ese momento, no podía evitar ver en él algo más, algo que la atraía de una manera que no había anticipado.
Cuando el sol comenzó a ponerse, los tres se sentaron en la arena, exhaustos pero satisfechos con el entrenamiento del día. Izuku, sin saberlo, había dejado una impresión profunda en ambas chicas. Pony, siempre extrovertida, lo miraba con una mezcla de admiración y algo más que aún no se atrevía a identificar del todo.
Pony: Izu... digo, Deku, ¡gracias por todo! Eres increíble, dijo Pony, con una sonrisa que ocultaba un ligero rubor en sus mejillas.
Izuku: Gra. gracias, cualquiera lo haria por un amigo *es extraño que me llamen asi cuando no viene un insulto de Bakugou oh algo amable de Uraraka-san*, pero creo que exageras, solo es ayuda solo me gusta ayudar.
Ibara, siempre más reservada, simplemente sonrió y asintió, pero en su interior, sus sentimientos hacia Izuku se habían vuelto más complejos. La dedicación y la amabilidad de Izuku habían tocado algo profundo en su corazón, y aunque no lo expresaba tan abiertamente como Pony, sabía que algo en su relación con él había cambiado.
Izuku, ajeno a los sentimientos de las chicas, sonreía satisfecho por el progreso que habían hecho. Para él, había sido un día más de entrenamiento, pero para Pony e Ibara, había sido un día en que sus corazones habían comenzado a latir de una manera diferente, guiados por la atracción creciente que sentían hacia su compañero y mentor
Izuku: Necesito dormir, hablo recolectando conchas marinas, escucho a Rem que queria una, pensaba en que asi podria agradecerle por cuidar a los bebes, me pregunto si puedo hacer pasadores oh diademas con estas conchas, hablo recogiendo un par, casi le da diabetes imaginandose a sus hijas con el cabello recogido y con un pasador pegado a una concha, todo con una gran cara de felicidad, hasta que recordo cuando termino de recoger la playa, otra vez ese gran sonido.
Le gustaba la paz que ofrecía el sonido del mar, y la soledad del lugar le permitía pensar con claridad. Caminaba por la orilla, dejando que el agua mojara sus pies descalzos, cuando vio una figura a lo lejos.
Al principio, pensó que era solo otro paseante solitario, pero a medida que se acercaba, notó que la persona parecía inmensa y estaba sentada en las rocas, mirando hacia el océano. A pesar de la oscuridad, la luna revelaba un destello rosado en el cabello de la chica. Izuku sintió curiosidad, pero también preocupación. Algo en su postura denotaba tristeza.
Izuku: Disculpa, ¿te encuentras bien?, preguntó con cautela, deteniéndose a unos pasos de ella.
La joven levantó la mirada, sorprendida al ver a alguien más. Sus ojos grandes y brillantes parecían reflejar el resplandor de la luna, y su expresión era de sorpresa.
???Oh... sí, lo siento, respondió, su voz era suave y algo nerviosa, No esperaba que hubiera alguien aquí a esta hora.
Izuku sonrió levemente, tratando de tranquilizarla.
Izuku: Yo tampoco, pero a veces es agradable venir a la playa cuando está tranquila —dijo, sentándose a una distancia respetuosa en la arena. ¿Te gustaría hablar? Parece que algo te preocupa.
La joven, que seguía observando el agua, guardó silencio por un momento antes de responder.
Shirahoshi: Me llamo Shirahoshi, dijo finalmente, sin mirarlo. Vivo cerca de la costa, y siempre he sentido una conexión especial con el mar. Solía venir aquí cuando era más pequeña, pero... ver cómo ha cambiado me hace sentir triste.
Izuku inclinó la cabeza, interesado. Había algo en el tono de su voz que lo hacía sentir que había mucho más detrás de esas palabras.
Izuku: ¿A qué te refieres?, preguntó.
Shirahoshi suspiró profundamente y empezó a relatar su historia.
Shirahoshi: Cuando era niña, venía a esta playa todos los fines de semana con mi familia. Me encantaba el mar, sentía que era un lugar mágico. Pero con el tiempo, las cosas cambiaron. La playa empezó a llenarse de basura. Cada vez que venía, encontraba más y más desperdicios esparcidos por la arena: plásticos, botellas, redes rotas... Y el mar, que antes se veía limpio y azul, comenzó a estar lleno de cosas que la gente arrojaba sin pensar.
Izuku frunció el ceño, imaginando la escena que describía pero ahora desde el punto en que una chica vio como el lugar que mas le gustaba se volvia cada vez mas horrible hasta el punto en que termino en como el li conocio. Podía entender su tristeza. No solo estaba viendo la degradación de un lugar que amaba, sino también el impacto del descuido humano.
Izuku: Eso debe haber sido muy difícil de ver, dijo en voz baja. No puedo imaginar cómo se siente ver algo tan especial para ti volverse... así.
Shirahoshi asintió lentamente, sus ojos se llenaron de melancolía.
Shirahoshi: Cada vez que venía, intentaba limpiar un poco continuó, pero parecía inútil. No importaba cuánto recogiera, siempre había más. Y me sentía tan impotente. Este lugar, que antes me traía tanta paz, se convirtió en un recordatorio constante de lo poco que la gente cuida el océano. A veces me pregunto si vale la pena seguir viniendo, empezando a llorar para sus lagrimas al impactar crear pequeñas olas mojando a Izuku, afortunadamente soloeran gotas, no queria imaginarse si estaba
Izuku miró hacia el mar, sintiendo el peso de sus palabras. Sabía que la contaminación era un problema serio cosa que el arreglo con All Might, pero escuchar a alguien que lo había vivido tan de cerca le daba una perspectiva más personal. Se quedó en silencio por un momento, pensando en cómo podría animarla.
Izuku: Es frustrante, ¿verdad?, dijo finalmente. Sentir que no puedes hacer lo suficiente para cambiar las cosas. Pero lo que hiciste, incluso si parecía pequeño, importa. Cada pedazo de basura que quitaste es uno menos que termina en el océano. Y si más personas pensaran como tú, quizás las cosas serían diferentes.
Shirahoshi lo miró por primera vez desde que empezó a hablar, sorprendida por la sinceridad de sus palabras. Estaba acostumbrada a la indiferencia de los demás sobre el tema, pero Izuku parecía realmente entender.
Shirahoshi: ¿De verdad crees eso?, preguntó con un leve destello de esperanza en su voz.
Izuku asintió, sonriendo, para extenderle el sueter, para ella tomarlo secandose las lagrimas con el.
Izuku: Lo creo. Y no tienes que hacerlo sola, prometo que mientras siga siendo un lugar especial para ti mantendre la playa intacta, nadie pondra basura aqui, ese es mi deber como heroe.
Los ojos de Shirahoshi se llenaron de emoción. Nunca había pensado que alguien más podría compartir su preocupación por la playa, y mucho menos estar dispuesto a ayudarla.
Shiraoshi: ¿De verdad te gustaría hacer algo así?, preguntó, con una pequeña sonrisa que comenzaba a asomarse en su rostro.
Izuku: Por supuesto, respondió Izuku con convicción. Quiero ayudar a proteger este lugar, y no solo porque sea un problema ambiental. Es importante para ti, y eso también lo hace importante para mí, y mi nombre es Izuku... Izuku Midoriya.
Shirahoshi lo miró, conmovida por su amabilidad. Durante tanto tiempo se había sentido impotente y sola en su lucha, pero ahora, con alguien dispuesto a ayudarla, las cosas no parecían tan desesperadas.
Ambos se quedaron en silencio por un rato, escuchando el sonido de las olas y disfrutando de la calma que los rodeaba. Aunque la situación seguía siendo difícil, la idea de trabajar juntos para mejorar la playa daba a Shirahoshi una nueva esperanza.
Shirahoshi: Gracias, Izuku, dijo finalmente. No sabes lo mucho que significa esto para mí.
Izuku sonrió, mirando hacia el horizonte.
Izuku: No tienes que agradecerme, respondio con una gran sonrisa y un fuego en sus ojos. Esto es algo que vale la pena ensuciarse las manos.
La luna seguía brillando sobre el agua, iluminando la playa con su resplandor suave. En esa noche tranquila, bajo el cielo estrellado, Izuku y Shirahoshi se dieron cuenta de que, aunque pequeños, sus esfuerzos podrían tener un gran impacto si trabajaban juntos. Y con ese pensamiento, la playa Dagoba, que una vez estuvo llena de basura, parecía tener la posibilidad de convertirse en un lugar de esperanza y renovación.
Y ya acabó el capitulo
Eso si ya debería ser degradante
Okumura: No para mi.
Kenji: Pobre quien sea la mujer con quien te cases.
Raiden: Sí es que alguien aguanta su cara horrible.
Okumura: Entrale cabron - empezando a pelear-
Kenji: De 14 millones de exorcistas me toco un par de pelmasos
El de lemillon es 100/10
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