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Capitulo 9.- Disparos

La enfermedad había azotado la prisión con fuerza.
Lo bueno de todo era que Drako había sido uno de los pocos que no se habían enfermado y tenia mucho que ver su aislamiento con los demás junto a sus miles de pastillas que consumía que le hacían combatir cualquier virus con sencillez.

Los primeros enfermos habían sido Karen y David, mismos cuerpos que aparecieron calcinados en uno de los patios de la prisión e intentaron descubrir quien lo había hecho, incluso se había señalado a Drako como el culpable pero estaba muy claro que eso no podia ser cierto cuando dormía encerrado en la celda, cuando ya tenia tiempo sin un episodio psicótico y cuando normalmente su compañía era la de Daryl.

Entonces la idea que se había propuesto fue descartada al instante.

Luego de eso los enfermos continuaron hasta el punto de que algunos murieron de lo mismo, se transformaron y un pabellón completo sufrió las consecuencias, por lo que se opto por mantener a los enfermos aislados.

Necesitaban medicamentos y un pequeño grupo iban a ser los encargados de ir por ellos.

Daryl espero tras la cortina de una celda por Drako, en ese instante debía estar con Rosie en una de sus sesiones y quería asegurarse de que se encontraba bien antes de marcharse.

— ¿Que pasa...? — preguntó Daryl confundido cuando visualizó a Drako salir de la celda con los ojos llenos de lagrimas.

— Rosie ya no podrá atenderme — respondió Drako y la confusión tiño el rostro de Daryl al instante, pero entonces otra persona salió tras la celda y el chico se puso tras de Daryl al instante mientras lo sostenía de la orilla del chaleco.

Era Rosie y por su aspecto parecía ser que comenzaba a tener los primeros síntomas de la enfermedad.

— Me aislare — indicó la mujer — Lo siento, Drako. Prometo recuperarme. Cuídate y ya sabes que hacer si esas molestas voces regresan, ¿bien?

— Bien.

— Así sera — aseguró Daryl — Traeremos esos medicamentos y todos podrán recuperarse.

— ¿Puedo ir contigo? — preguntó Drako en un murmullo.

— Preferiría que te quedes aquí por tu seguridad — respondió Daryl dándose la vuelta para mirarlo — Lo mejor es si no convives con todos los demás que ya hemos sido contaminados.

— Es cierto eso, Drako — añadió Rosie — Es mejor no enfermarse.

Rosie entonces comenzó a toser y prefirió irse antes de que se sintiera más mal.

— ¿Crees que pueda ayudar en algo? — murmuró Drako con su mirada puesta por donde Rosie se había marchado.

— No lo sé — respondió Daryl — cualquier cosa es peligrosa.

— Y yo soy miedoso.

— Si.

— No quisiera sentir miedo — admitió Drako — ¿Que debo hacer?

— En tu caso es comprensible que sientas miedo — dijo Daryl — pero en realidad eres muy valiente como para soportar día a día esa mier... enfermedad.

— No es una enfermedad — dijo Drako — Rosie me dijo que era un trastorno.

— Si, bueno, eso — señaló Daryl — No cualquiera pudiera sobrevivir a lo que hay en tu mente.

— ¿Estarás mucho tiempo fuera?

— Espero que no — respondió Daryl — si salimos ahora y tenemos suerte podríamos llegar en la noche. ¿Estarás bien mientras no estoy?

— Si — respondió Drako — Esperare.

— Bien, nos vemos en la noche — dijo Daryl una vez estuvieron frente la celda de Drako — ¿Quieres que cierre completamente?

— Si — respondió Drako — No me gusta que este abierto cuando no estas.

Daryl asintió con la cabeza y se aseguro de cerrar bien la celda antes de marcharse.

Drako dio un fuerte respingo cuando escucho disparos, su ojos vieron al instante a la entrada de su celda pero ciertamente no había nada ni nadie ya que Daryl le había puesto una cortina para darle privacidad.

De cualquier forma se sintió asustado sin saber que ocurría, tenia miedo porque Daryl no estaba y sentía que en cualquier instante le harían daño hasta el punto de matarlo. 

Era aterrador, completamente y no sabia que ocurría.

Lo mejor era esperar por Daryl, porque el siempre sabia que hacer y siempre le ayudaba.
Si, podia hacer eso.

Daryl y los demás habían llegado a la prisión después de unos pequeños inconvenientes en su transcurso por ir por esos medicamentos.

Fueron recibidos por Rick quien junto a Carl se encargaron de los caminantes que tumbaron la reja.

Al instante Daryl fue en dirección del pabellón de los contaminados, el lugar se veía demasiado vació en comparación en la mañana y eso fue debido a que algunos no lo lograron, uno de ellos se transformo y mato a algunos otros. Había sido un completo desastre.

Los ojos de Daryl entonces reconocieron un cuerpo muerto en una celda y lo único que pensó había sido en Drako.

— La mordieron — dijo Hershel a sus espaldas.

— No se como vaya a tomar la noticia — señaló Daryl refiriéndose a Drako — No se si debo decírselo.

— El muchacho confía en ti, lo mejor es no traicionar su confianza — dijo Hershel — Debes decírselo.

Daryl asintió con la cabeza y una vez se aseguro que todo estuvo bien con Hershel fue que avanzo en dirección de los baños, iba a darse una ducha para quitarse toda esa enfermedad y virus que había estado envuelto antes de ir con Drako y contarle la verdad.

De ninguna forma tenia idea de como tomaría la noticia y solo esperaba que no fuese de una manera fuerte.

Había pensado muchas formas para decirle la noticia y no fue hasta que estuvo frente a su celda que sintió el corazón acelerado a causa del nerviosismo, pero sin darle más vueltas al asunto fue que abrió la celda, aparto la cortina e ingreso completamente.

No supo como sentirse cuando lo encontró dormido, una parte de el se sintió aliviada pero la otra ya quería quitarse aquel peso en los hombros ante esa noticia, quería decirle.

— Drako — murmuró Daryl finalmente inclinándose hacia el chico para moverlo del hombro.

Drako apenas y abrió los ojos, entonces Daryl recordó que por la hora no debía tener mucho de haber tomado sus medicamentos de manera que la somnolencia era algo normal en él.

Daryl entonces decidió que mejor al día siguiente le diría la noticia pero entonces la mano de Drako alcanzo a sostenerlo de la muñeca captando su atención.

— Daryl — llamó y el castaño lo observó haciendo el esfuerzo por sentarse y mantenerse despierto — ¿Conseguiste los medicamentos?

— Lo hice — respondió Daryl en voz baja y sentándose en la orilla de la litera.

— ¿Y Rosie se encuentra mejor? — preguntó viéndole con atención — He soñado con ella.

Daryl tan solo guardo silencio.

— Drako..

— Me dijo que comeríamos dulces juntos — murmuró Drako — ¿Cómo esta?

— Ocurrió un incidente — comenzó a decir Daryl finalmente — Alguien a muerto, se transformo y termino mordiendo a algunos del pabellón.

— Oh — soltó Drako cuando comprendió.

— Rosie fue una de esas personas. Lo siento tanto, Drako.

Daryl espero por una reacción volátil pero en cambio lo noto sin expresión alguna, su mirada había dado un destello triste pero fuera de eso nada paso.

— No cumplió lo que dijo — dijo Drako finalmente — No se recupero.

— No lo hizo — asintió Daryl — Puedes sentirte de cualquier forma ante ello. Eran amigos.

— Entonces el matrimonio se anula.

— Técnicamente.

— No quiero estar casado solo contigo.

— Eso ya se escucha grosero — resopló Daryl — ¿Tan malo seria?

— Seria extraño — murmuró Drako tomándolo del brazo — porque eso significaría que realmente se ha ido.

Oh, Daryl entonces lo comprendió.

Las dos personas que Drako más apreciaban eran él mismo y Rosie, ante la falta de la mujer eso indicaría que realmente no volvería a verla, que una de las personas que realmente le querían no estaba, una persona que no le trataba distinto, ni le ofendía y en cambio le entendía.

Entonces el matrimonio con anillos de dulces significaba amor incondicional para Drako, señalaba que seguían vivos y que eran reales.

Y Rosie había fallado aquel voto.

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