El chico se paro al leer la carta, y se dirigió al pizarrón y comenzó a escribir la respuesta, sin importar lo que los otros murmuraban, a el no le importaba.

Todos voltearon, ya que sabían lo que venia, un extraño bakugou escribiendo rarezas en el pizarrón, el lo escribía y mantenía corto, revelando información que solo la chica de la carta sabría, para que nadie mas supiera que le gustaba ni el por que, mientras contestaba las tonterías de la chica de las cartas.

¿por que lo hacia?, el se divertía, es como si, pudiera tener la suficiente confianza con alguien, hablar sin que su orgullo o enojo se entrometa, una faceta de el, que ni el mismo sabia.

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La chica envidiosa de las cartas.

No no tengo, pero sabes algo, mi mama es rara.

Con eso me basta.

Mándale saludos de mi parte a TH.

¿No será que me tienes envidia o serán acaso celos?.

No te preocupes ya luego te darás cuenta de mi belleza.

Atte: El chico que piensa que eres muy ¿trabajadora?.

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El chico miro a su alrededor, para ver alguna mirada peculiar de burla, para acecinarlo, o para dar algún indicio de la chica que escribía las cartas.

A los 2 minutos borro el mensaje, el se aseguraba de borrar el mensaje, no era tonto, sabia que los maestros lo regañarían.

Luego se dirigió a su asiento, guardo la carta en su bolsillo y comenzó a hacer cualquier cosa que se le viniera a la mente.