Cristhian, tu carta me ha dejado confundida, realmente no sé tu a lo que quieras llegar. No me estás dejando continuar esta historia de la forma que espero contarla.

Deberías de dejar de ser tan egocéntrico y abrir los ojos de una vez.

Un día quizás te pude prometer cielo, mar y estrellas, pero eso querido ha quedado en el pasado. Deberías de aprender que hay cosas que se pierden y jamás vuelven.

Continuando con mi historia, ese día en Septiembre 10, quizás fui felíz, hasta que la última hoja del árbol cayó en Octubre me di cuenta, que para ti yo no era la única. Y no te juzgo, ni tampoco soy tan masoquista para decirte que no me dolió tu partida, porque lo cierto es que mi corazón se rompió cuando dijiste "Adiós".

Los días pasaron y era de costumbre que me dijeras que te tardarías más de lo habitual en el trabajo. Siempre supe que te ibas con Sabrina en aquel lujoso motel.

¿Enserio me creías tan ilusa? Siempre supe de tu engaño y tu querido siempre creíste que en mi vida lo eras todo. ¿Quien vivió más engañado, tú o yo?

Espero leyendo las cartas te encuentres sentado y relajado.
No te precipites, ni llegues a conclusiones, lee con calma
mis letras que aquí fueron plasmadas.

Att: Eleonor.

Nayely Robles