Hace una semana los latinos le contaron al bloque comunista su plan para anexar por la fuerza a México a su territorio.

Era de lo único que se hablaba estos días, era un plan definitivamente arriesgado pero que les daría la inminente ventaja sobre el estadounidense y probablemente también la victoria si jugaban bien sus cartas.

Egipto... no sabía cómo sentirse al respecto.

Los latinos habían convocado una reunión entre todo el Bloque cuando estuvieron listos para lanzar su ataque, reunión que tuvo que hacerse mayormente a través de llamadas y videos debido al poco tiempo y la distancia entre todos, Egipto, como representante de la Gran Arabia había sido de los pocos que había estado físicamente presente y fue sólo por pura casualidad, ya que había estado en el continente discutiendo un tratado comercial con Brasil cuando recibió el aviso y días después se dirigió hacia la capital de Chile.

Y sentado entre Uruguay y Colombia, con otros asientos siendo ocupados por algunos europeos y africanos que pudieron hacer tiempo para viajar al continente en tan corto aviso, con más de una docena de Countrys en altavoz o a través de una cámara, escuchó el plan que la Unión Latina tenía.

Y no era un mal plan, los misiles tendrían a USA mucho más concentrado en defender su país e ir tras los "responsables" del bombardeo a Texas, que no podría brindar ayuda a México, aunque quisiera y México tenía a sus tropas concentradas en el sur del país, apenas prestándole atención a sus costas, era un plan bastante sólido.

Pero... la forma en la que hablaban de México, era increíblemente irrespetuosa, y eso era algo viniendo de él, al menos él y sus esposos veían a Israel como un ser vivo, un ser vivo al que no le tenían respeto, pero un ser vivo, al fin y al cabo.

Si era sincero, Egipto respetaba al mexicano, antes de todo este conflicto estallara, en realidad tenían relación bastante buena, pero el egipcio no mentiría al admitir que se sintió un poco emocionado al ver que se encontraban en lados opuestos de la guerra, porque México era el tipo de enemigo al que podía respetar y no le duele admitirlo.

Pero con la forma en que Chile hablaba de México... casi parecía como si estuvieran hablando de alguna mascota mal entrenada y no del mayor aliado que USA aún poseía de su lado, es como si para ellos, él solo fuera una mascota a la que ningún latino parecía tenerle el más mínimo aprecio o preocupación, a pesar de que toda su "razón" para invadir el país era la aparente (falsa) preocupación por el mexicano y su seguridad a manos del estadounidense.

Mirando alrededor de la mesa vio como los únicos que no se veían incómodos por la forma en que hablaban del mexicano eran los mismos latinos, los europeos parecían vagamente incómodos, sus hermanos presentes (y no presentes) se movían incómodos en sus asientos o usaban todo su autocontrol para no dejar a la lástima mostrarse en sus rostros.

Porque, ¿no era México su hermano? ¿Tan mala era la relación entre ellos que ahora ya no podían ver a México como su hermano sino como nada más que un recurso por obtener? Era casi triste pensarlo, ¿la relación era así de mala solo con México o era así de mala entre todos?

No lo entendían, los hermanos africanos, ni siquiera en sus momentos más oscuros se habían siquiera acercado a tratarse de esa manera, el ver a Chile reír mientras planeaba dañar física y mentalmente a su hermano era desconcertante para todos ellos, y para cuando la reunión termino y Rusia dio el visto bueno para su plan, la lástima... era el mayor sentimiento que sentían, ninguno podía imaginar odiar tanto a uno de sus hermanos.

(Sobra decir que cuando la reunión termino y empezaron a irse, todos los africanos que tenían amistades con algún latino se acercaron y, algunos con más sutileza que otros, trataron de averiguar cómo era la relación entre los latinos comunistas).

Egipto acepto la oferta de Senegal de quedarse esa noche en el mismo hotel en el que él, Tanzania y Mozambique se estaban quedando, Ghana y Sudán habían decidido quedarse con sus amigos latinos para averiguar más sobre toda la situación.

Esa noche, después de llamar a sus esposos para saber su opinión sobre el plan y, bueno, hablar en general, se puso un pijama, hizo un "nido" de mantas en el suelo de la habitación del hotel y envolvió a sus hermanos en sus alas, todavía sacudido ante las palabras llenas de desdén e indiferencia que Chile lanzó contra México sin dudar ni un momento, sin que ninguno de sus hermanos estuviera en desacuerdo.

¿Egipto podría haber terminado hablando de la misma manera de sus hermanos si URSS no le hubiera ofrecido un terapeuta y sus compañeros lo hubieran convencido de asistir a las sesiones y tomar sus medicinas?

El mero pensamiento lo asustaba, incluso con sus hermanos haciendo lo posible por calmar sus dudas y asegurarle que, incluso si no hubiera conseguido ayuda, él nunca los habría tratado así ni ellos lo hubieran tratado así, ellos no se fueron a dormir hasta que los convenció de que ya estaba mejor.

Pero, realmente no durmió mucho esa noche.

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Y tal como lo predijeron, no tomo más que una semana para tomar control del país, se despertó una mañana con Irak informándole de la reciente victoria, el ejercito fue apenas un problema para las tropas combinadas de todos los latino-comunistas y el presidente básicamente les entregó a México con tal de continuar en el puesto cuando tomaron el Palacio de Gobierno.

Cobarde, al menos la representación mexicana realmente lucho hasta el final.

Fue casi una lástima, que la mayor pelea que los latinos enfrentaran fueran algunos civiles con machetes y la misma representación del país, tomados por sorpresa o no, fue casi patético cuán rápido cayo el mayor aliado estadounidense.

Las noticias no habían dicho nada todavía sobre el ataque así que probablemente tenían una o dos semanas más antes de que el estadounidense se enterara sobre la anexión forzada (si es que México no tenía alguna forma secreta de contactarlo, por supuesto).

Y, por primera vez en años, Egipto volvía a pisar suelo mexicano.

Se encontraba aquí nuevamente como representante de la Gran Arabia, Saudí esta vez junto a él, junto a un gran grupo de seguridad, anexo o no, México aún era territorio enemigo.

Y es que no es que se encontraran aquí para una visita casual, oh no, venían para "dar la bienvenida" al miembro más nuevo del bloque comunista.

Él y Saudí no habían los primeros en dirigirse al palacio nacional, donde México pasaría unos días más antes de ser llevado a la capital Chilena (¿o era a la Argentina? Estaba seguro que hubo una discusión al respecto, pero realmente no le prestó atención).

Era una buena táctica de intimidación, el mexicano estaba experimentando tener su "espacio seguro" siendo violado una y otra vez por claros enemigos que fingían amabilidad, la moral de muchos países habría caído al estar en una situación así.

Pero este era México, el país que fue conquistado por España y Francia y lucho con uñas y dientes para ser independiente, que además sufrió muchos más intentos de conquista por parte de otras potencias, que vio la mitad de su territorio ser arrancados de él por el mismo Country que ahora defendía con tanto fervor...

Así que no, Egipto (y sus compañeros árabes una vez explicó su razonamiento) sabía que lo único que esta táctica estaba logrando era causar más ira en el mexicano, no había forma de que él formara parte de esta farsa, solo vino a hablar con México y luego se hará a un lado y mirará el "espectáculo" desarrollarse.

(Él solo quería volver a casa con su familia y dejar de preocuparse por todo este maldito conflicto, ya tiene todo lo que quería, ¿por qué debería seguir luchando una batalla que ya no le beneficia?)

Al entrar al Palacio de Gobierno, fue recibido por un muy sonriente Cuba, quien por primera vez desde que vio el video de la muerte de Israel, en realidad parecía feliz de ver a Egipto entrar.

¿Quién diría que todo lo que se necesitaba para que dejaran de temer a la facción árabe era más poder?

A su lado, Saudí no parecía saber si tensarse o relajarse ante su actitud, acostumbrado al miedo y cuidado con el que Cuba y sus hermanos solían actuar alrededor de todos los integrantes de la Gran Arabia.

Rozó ligeramente su ala contra su espalda para calmarlo y prosiguió a saludar al cubano pare terminar rápido con esta farsa.

- ¡Cuba, que alegría verte de nuevo! Felicidades por tú gran logro militar. -Dijo, viendo como Cuba inflaba inconscientemente el pecho ante el alago, sin siquiera molestarse en ocultar la mirada presumida que se formó en su rostro, Egipto lo encontró ligeramente adorable, era como un niño. -Vine para darle la bienvenida a nuestro más nuevo aliado-. El sarcasmo era casi palpable y sacó una risa al cubano, quien les hizo una seña para seguirlo y empezó a caminar fuera del Palacio, dirigiéndose a una Casona no muy lejos de ahí.

Caminaron en silencio por un momento antes de que Saudí hablara. - ¿México les ha causado algún problema? Imagino que no solo se habrá quedado de brazos cruzados luego de que lo anexaran. –

-Oh claro, el imbécil no aceptar la derrota tan fácil, es por eso que nos alegra que hayan llegado, ¡en especial tú Egipto! Si pudieras hacernos el favor de "calmarlo" un poco, te lo agradeceríamos mucho, es divertido verlo tratar de actuar todo fuerte y valeroso, pero sinceramente preferiríamos si pudieras hacerle un poco de lo que le hiciste para quitarle esa misma mirada a Israel. -Cuba ni siquiera miro hacia atrás mientras decía aquello.

Si lo hubiera hecho tal vez habría visto a Egipto casi tropezar y a Saudí mirándolo preocupado, al primero estabilizarse y compartir una mirada con el otro.

No fue por la mención de Israel (ese nombre ya no lo afectaba, no como antes), si no por la implicación tras lo que dijo el cubano.

¿Siquiera entendía todo el dolor físico y psicológico por el que él y sus compañeros hicieron pasar al israelí, comprendía el hecho de que toda esa tortura duro casi un año que, si no fuera por lo que Israel le hizo a él en su último intento de escape, habría continuado por quien sabe cuánto tiempo?

¡¿Y Cuba quería que le hiciera lo mismo a MÉXICO?! ¿Tanto lo odiaba como para querer verlo así de destrozado?

Si, no, definitivamente no iba a hacer eso, la tortura a Israel, o al menos todo lo que duro era la prueba viva de cuán perdido estaba entre la ira y la venganza, nunca podría hacer algo ni remotamente cercana a eso sin arriesgarse a una recaída.

-Hey, me alaga que creas que puedo "domesticar" a México tan fácilmente, pero debó negarme, desde que mi tratamiento psiquiátrico comenzó se me recomendó encarecidamente alejarme de la violencia por unos años, atacar físicamente a México podría terminar muy mal si termino con una recaída. -Era una verdad a medias, pero no planeaba tener un corazón a corazón con Cuba de todos los Countrys.

El latino claramente estaba decepcionado de escuchar eso, pero una mirada mordaz de Saudí le hizo pensar dos veces antes de vocalizar esa decepción.

-Vamos chico, no es como si Egipto necesitara violencia para meterse con tu 'hermanito'. -Dijo Saudí despreocupadamente, sin molestarse demasiado por los sentimientos de Cuba al respecto.

Pero de todas formas sus palabras parecieron complacer a Cuba, así el resto del camino estuvo mayormente silencioso hasta llegar a la casona.

Era bastante pintoresco, en otras circunstancias Egipto habría tratado de averiguar más sobre la arquitectura del lugar, pero no dijo nada y solo se dejo guiar dentro del edificio, ahí se toparon con algunos otros latinos, pero sinceramente ya no estaba concentrado en ellos, su objetivo se encontraba en otro lado.

Finalmente se pararon frente a una puerta, donde el mexicano se encontraba, Cuba solo abrió la puerta gritando "¡Tienes visitas, sonríe y saluda!" ... parecía como si le hablara a un perro.

Los dejó solos a los tres con solo un "Diviértanse con él todo lo que quieran" hacia él y Saudí antes de dejar la habitación.

Hubo silencio y Egipto pudo ver la apariencia de México, bolsas bajo los ojos, no parecería que se hubiera cambiado de ropa desde el ataque y había lo que parecía un plato de comida en el suelo, pero a pesar de su lamentable apariencia, su mirada seguía firmemente obstinada y llena de ira.

Bien, lo que estaba apunto de hacer sería aburrido de lo contrario.

Porque la decepción de Cuba toco una fibra sensible y ahora una parte de él quería mostrarle a cuánto deño podía hacer sin necesidad de mancharse de sangre, quería borrar la imagen del bárbaro ensangrentado que acabo con la vida de Israel.

Quería quitar esa mirada de la cara de México y lo haría si ponerle un solo dedo encima y se aprovecharía del obvio estado de estrés y cansancio que este tenía encima.

Justo cuando llego a esa resolución, México hablo, claramente cansado del silencio. - ¿Qué tanto me miras Piolín? Vamos, tú y el otro idiota, solo ríanse como sé que quieren, nos ahorrara tiempo a los tres. –

Saudí a su lado de tenso, pero Egipto simplemente dejó una sonrisa aparecer en su cara, preparándose para decir las palabras que rondarían las pesadillas de México por un largo tiempo.

-De nada. -El silencio fue su respuesta, la ira fue mezclada con indignación y una pizca de confusión.

- ¿De nada? Oh cielos. estas más loco que esos pendejos a los que llame hermanos, ¿crees que tengo algo que agradecerte, a ti, un vil asesino? -

-Sip. -La palabra salió con un tono cantor, Saudí escondía su sonrisa en su bufada, dándose cuenta de lo que estaba por hacer.

- Ah, ¿sí? Entonces, ilumíname, ¿Por qué debería estar agradecido contigo, oh gran "Faraón"? –Para irritación del mexicano, el apodo solo incremente la sonrisa de Egipto.

Y las siguientes mentiras salieron de sus labios con tanta facilidad, que, si él no hubiera estado ahí, podría habérselo creído.

-Bueno, gracias a mí y a mis esposos... tú ya no tienes a nadie que se interponga entre tú y tu amado USA. -Y por primera vez desde que entraron a la habitación, la obstinación cayó por un momento, dejando ver la incredulidad y un pequeño, pero conforme Egipto hablaba, creciente horror.

-Oh vamos México, no te veas tan sorprendido, no eras realmente sutil con respecto a tus celos por la cercanía de USA e Israel, y por si también lo olvidaste, hasta antes de este conflicto éramos aliados y recuerdo una o dos veces que, cuando me quejaba de Israel, murmurabas y cito "No se que le ve el gringo a ese judío", la muerte de Israel te trajo tantos beneficios como a mi ¿o no? -

México parecía no saber que decir en respuesta, y Egipto no le dejaría pensar en una, no necesitaba que pensara mientras continuaba contando su mentira.

-Sé que no lo admitirás, pero se que una parte de ti disfruta de saber que Israel nunca volverá, una parte de ti esta feliz de que haya muerto y ahora tú seas la prioridad de USA, porque seamos sinceros México, ¿crees que USA te mantendría tan cerca si en lugar morir, Israel hubiera logrado escapar o lo hubiéramos liberado? -México ya no lo miraba a los ojos, y aunque intentaba ocultarlo, había empezado a temblar, el horror y la negación claros en su cara, trataba de convencerse de que le decía no tenía verdad alguna.

Pero esta, Egipto no estaba mintiendo por completo, era verdad que México había demostrado celos ante la cercanía entre la potencia y el no-país, y parecía ser cierto que en el fondo se alegraba de que Israel estuviera muerto, esas dos verdades evitaban que México se diera cuenta de las mentiras.

Solo un empujón más, pensó Egipto antes de hablar una última vez.

-Umm, me preguntó qué diría USA si supiera que su más leal aliado viera la muerte de su amante como una oportunidad para seducirlo. -Fue en ese momento en que Saudí puso su granito de sal a la herida.

-Probablemente te dejaría pudrirte aquí, donde "perteneces" rodeado de traidores y dobles caras, ¿no sería eso genial, 'Xico? -Y ahí estaba, la obstinación se había ido, la cabeza de México no parecía tener espacio para la ira, completamente ocupada por la 'horrible' imagen de USA abandonándolo a su suerte.

Sus ojos habían comenzado a humedecerse cuando Egipto decidió que habían terminado ahí, así que solo se dio la vuelta para encontrarse con Uruguay y Argentina, quienes claramente habían estado escuchando a escondidas, el primero parecía casi preocupado mientras miraba a México, pero el segundo se veía como un niño en Navidad mirando la forma temblorosa del mexicano.

Los dos árabes simplemente pasaron de ellos con un rápido "Todo suyo" de parte de Saudí antes de salir hacia el pasillo, sabían que México no estaría en este estado "derrotado" mucho tiempo, pero definitivamente desgastaría su salud mental con cada día en que USA no viniera a 'salvarlo'.

Pero realmente no les podría importar menos a ambos árabes, Saudí estaba demasiado concentrado y vagamente preocupado por la mirada nebulosa de su amigo y Egipto...

Egipto realmente, solo quería irse a casa, la complicada relación entre los latinos y lo que le acababa de decir a México le estaban revolviendo el estómago.

Ya nada se sentía como una victoria y no sabía qué hacer con esa información.

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Egipto es una 'mala' persona, pero un buen hermano, así que ver a los latinos siendo malas personas y malos hermanos no le sientan bien ni a él ni a los demás africanos (ni a muchos otros de sus aliados).

Las actualizaciones se van a hacer más irregulares, ya volví a la escuela y debo concentrarme en mi clases, así que no se cuando será la próxima actualización.