21, Agosto de 2022

Después de estar en la recepción y que nos explicaran todo el juego aparezco en la isla verde.

—Hola, hola — saluda Carre a través del micrófono.

Soy de la isla naranja, así que no se que hago en la verde.

—Ayuda, estoy muy perdida, gente — digo moviendo mi monito de Minecraft.

Ibai se para frente a mi.

—Tranquila, ¿Quién eres? — pregunta el español.

Le doy un golpe.

No es raro que no me conozcan, llevo apenas medio año en la plataforma.

Auron se para a un lado de Ibai, los dos me miran analizándome.

—Tío, que es madison, la mexicana — habla Auron.

—Ey, ey, Ostia, Auron no seas racista — menciona el otro chico.

Auron y yo reimos.

Ambos españoles ya me conocen y eso es súper emocionante para mí.

—Oh que es madison la que siempre peleaba con Mariana, ¿No? — cuestiona Ibai.

Asiento con mi muñequito.

Danirep aparece de la nada.

—Oigan, que me he besado con Deqiu y creo que ahora estoy en el pasado.

Ibai camina hasta Carre.

—Hola Carre.

Llego yo a su lado.

—Carre, ¿Tu con quién te besaste? — pregunto entre risas.

—Con tu hermana.

Le doy un golpe.

—Pendejo, no tengo hermana.

Él rie.

—Ya se, Oye Madi, ven acá.

Nos alejamos un poco de los demás en una esquina.

—En un rato ire por vos al pueblo verde para presentarte a un amigo — comenta el argentino & Te va a caer re bien y es de tu pueblo.

Hago que mi monito asiente.

—Acepto, ahora me voy porque a esta hora salen los mounstros — menciono corriendo.

—Vete con mucho cuidado, Madi — grita mi amigo.

Me acercó al puente.

—Nos vemos, Madison — dice Ibai.

—Adios, Madi Madi — exclama Auron y me despido.

Me voy al pueblo Naranja riendo.

Estos chicos eran muy divertidos.

—Bueno chat, a ver tenemos que buscar un lugar donde vivir — musito recorriendo el terreno — Y también decidir el rol que queremos jugar aquí.

Es mi primer evento así de grande y me emociona bastante.

De pequeña era muy fan de Auron, lo solía ver mucho con Sam y ahora ya me conoce.

Empiezo a talar arboles para hacerme mis herramientas de madera y poder picar piedra.

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Jor_fun donó 100 bits

"Madi ve a molestar a Mariana"

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Rio levemente y muerdo mi labio para aguantarme un poco la risa.

—No, debe de estar ocupado.

Miro el chat por unos segundos.

Sigo un rato más preparando mis cosas hasta que llega Carre.

—Llegue, boludita.

—Oye, no sé qué significa eso, pero chinga a tu madre también.

Él ríe levemente.

—Ven, te llevaré a que conozcas a Spreen, sigueme.

—No estás tan lejos de donde esta él — comenta Carre.

Lo sigo en silencio hasta que llegamos a un sitio muy explotado.

—Ey, entren a mi casa — habla alguien que por su acento se que es argentino.

Me giro y veo la skin del Mariana y otro chico con skin de oso.

—¡Madison no vayas a entrar!, Te vas a morir — grita Osvaldo.

Río levemente.

—Hay una mina, ¿Verdad? — pregunto.

Su monito asiente.

—Spreen, mira ella es Madi — anuncia Carre.

Miro al osito que es Spreen, al parecer...

—Oh, hola, soy Spreen.

—Hola, soy Madison, pero dime Madi.

—Golpeense simulando un puño — dice el otro argentino.

Hago caso y le doy un golpe al chico frente a mi.

Spreen me lo devuelve.

—Mad ya nunca le pegues, es mejor tener a Spreen de amigo que de enemigo — informa Osvaldo poniendose frente a mi.

—Bueno.

Spreen quita a Osvaldo de un golpe y se acerca a mi.

—Oye, escuche que estudiaste diseño grafico — menciona el chico.

—Si — afirmo.

—Bueno, ¿Querés hacerme la publicidad de los pollos hermanos? — pregunta.

—Ni lo has construido.

—Mad, mañana que entres ya tendré Disneylandia y la mierda el Spreen.—exclama Osvaldo.

—Che boludo, andate a terminar tu casa.— le dice Spreen a Osvaldo.

—Ey no, a mi no me vas a andar corriendo hijo de tu madre — y así es como se empiezan a pelear hasta que obviamente Spreen mata a Osvaldo.

—¿Lo mataste? — interrogo llegando a donde estaban ambos peleando.

—¡Mad!, Levantame — Escucho a Osvaldo.

Lo revivo y se levanta.

—Vamonos Mad, son unos hijos de puta aquí.

—Si, espera — camino hacía Spreen y Carre — Spreen mañana que entré te buscaré para lo de la publicidad.

Ellos asienten y me voy detras del de lentes.

—¿Ya decidiste que serás? — pregunto a mi acompañante.

Él niega.

—Queria vagabundo, pero mi conciencia me dice que Barca me ganó y ¿Tú?

—Creo que seré publicista y la persona que te molesta — contesto.

Él se gira quedando frente a mi.

—No, Mad, no podemos regresar a eso — musita con desespero.

Suelto una carcajada.

—¿Roleamos de que nos odiamos? — cuestiono y él niega frenéticamente.

—No, no, eso es jugar con fuego — responde.

Le pego dos veces.

—Osea que, ¿Podrías volver a odiarme? — menciono con sorpresa.

—Ay, Mad no podría odiarte ni aunque quisiera.

Suelto un suspiro cuando mi corazón se acelera y sin pedir permiso mis mejillas toman color rojizo.

Desvío mi mirada al computador y me veo a mi misma sonriendo como estupida.

—¡Mira!, Un mono capuchino — dice él.

Camino hacia donde esta.

—¿Tienes plátanos, Mad? — pregunta cuándo estamos frente al mono.

—Si, pero solo te daré si me prometes que será mono de los dos y no solo tuyo.

—Si me dejas ponerle Timo acepto.

Le doy mis plátanos y él lo hace nuestra mascota.

Lo llama Timo y le pone que es propiedad de ambos.

Vuelvo a sonreir.

No me juzguen, él es muy tierno.

—El que saqué la cuerda primero se lo lleva a casa — dice rápidamente el de lentes.

Y obviamente me tendió una trampa, el ya tenía cuerda preparada y se lo llevo.

—No confío en ti para cuidar de él — anuncio.

Él se gira y suelta un suspiro ofendido.

—Mad, estas muy agresiva hoy.

—¿Quieres que te recuerde lo que paso con Tilín?

—Bueno, pero eso es la vida real — se excusa.

Niego repetidas veces.

—Te estaré preguntando por el y pobre de ti y se te olvide alimentarlo — lo amenazó.

—Lo cuidaré bien, te lo prometo Mad, por nosotros... digo porque es nuestro.

Y ahí va la sonrisa de nuevo.

Ni siquiera podía rolear tranquila por sus comentarios...

¿Él siente lo mismo?

Creo que me moriré si no lo hace.

—Ok, te creo, vete con cuidado y por la sombra, Lalo.

Él carraspea.

—¿Lalo? — pregunta.

Asiento.

—Mi apodo es ingenioso, tomalo o dejalo.

Suelta una risita.

—Que creativa — lo escucho murmurar por lo bajo — Hasta mañana Mad, te dejo para que te hagas millonaria y nos mantengas a Timo y a mi, mira Apa nos va a mantener y tendrás muchos platanos.

—Adios, cuidense por favor.

Y se va.

Me veo en el stream y aún estoy sonrojada.

Que bueno que apague los bits y veo el chat ser de puros emotes.

Gracias mods.

Tengo esa sonrisa tonta en mi rostro que quiero quitar, pero me acuerdo de él y no puedo, simplemente no puedo.

Tengo esa sensación calida en el pecho y esa seguridad que solo él me da.

Ese cosquilleo en el estómago y esos nervios en las manos.

No, Madison, cabeza fría no puedes arruinar la amistad que apenas estamos teniendo...

No quiero arruinar nada.

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Hola chicuelxs

Inicio de Maratón :p
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