Varios días habían pasado desde la primera incursión de caza y la invasión bestial al pueblo Uihk.

La tensión entre los aventureros y los guerreros curtidos que preferían ser catalogados como mercenarios creció por el choque de intereses.

Las castas "nobles" conformadas principalmente por los terratenientes ricos del bosque Uihk. Convinieron en solo contratar guerreros especializados en sus juegos privados.

Los ricos usaban a quienes quiera que mostrarán talento ya fuese para cazar especimenes de criaturas raras. Buscar tesoros perdidos pertenecientes a su linaje, o organizar pequeñas peleas entre luchadores.

Aquello que no podía ignorarse, era el hecho de que la familia Ranzon, tenía serias dificultades para recuperarse tras el asedio de las bestias. En su caso, no sólo acudieron las rechonchas y salvajes bestias conocidas como jabalíes de Uihk.

Los brutales monstruos de tierras norteñas también habían llegado para asegurar un gran daño en la familia granjera y sus tierras.

Aun no se habían aclarado partes de los relatos, pues la mayoría de los jóvenes de la familia se encontraban en el pueblo cuando todo el caos comenzó.

No teniendo la oportunidad de volver a su hogar para comprobar el estado de sus parientes. Ninguno tuvo noticias de los suyos hasta el día siguiente.

Marshall mismo escolto a sus trabajadores de vuelta al rancho de los Ranzon. Donde se topo con una imagen que le helo la sangre.

Las cercas y murallas estaban hechas completamente añicos. Animales de granja y bestias salvajes estaban regadas por igual, destrozadas con ferocidad o por armas cortantes blandidas con desesperación.

Todos los guardias y sirvientes de la familia lucharon con gran fervor. Pies haya donde se mirase, podían verse tanto siervos como guerreros aun con sus armas empuñadas. La mayoría, solo reconocibles por las prendas ensangrentadas pegadas a sus desilachados cuerpos.

Conforme Marshall se fue internado en el lugar. El avistamiento de marcas de saqueo en los almacenes, corrales y casas lo hacian sospechar que las bestias no fueron las únicas en asaltar a la familia Ranzon.

Sus jóvenes trabajadores dieron un grito de terror, cuando, en la mansión principal, atisbaron una muralla improvisada con costales, carretas y animales muertos. Donde al otro lado, una hueste de cadáveres pequeños de piel verde se hallaban tirados en el suelo y aguijoneados con flechas.

La última defensa de los Ranzon..quienes se vieron obligados a esconderse en la mansión que tanto les había costado fundar.

Fue un verdadero alivio ver que no todos habían perecido.
La familia se había refugiado tras sobrevivir a hordas completas. Y solo se vieron superados cuando los goblins aparecieron. Atraídos por el ruido de la batalla y la oportunidad de hacerse con un gran botin, los asquerosos pieles verdes atacaron sin piedad.

A según le contaron al mil negocios. Los Ranzon y sus últimos guerreros no habían conseguido matar a toda la hueste piel verde. El resto de los goblins que no se apelotonaron en una carga mortal patrocinada por el maravilloso talento de los centinelas de los Ranzon y la afición al tiro con arco de algunos miembros de la familia, habían huido sin mirar atras. Si no hubiese sido por eso, los goblins habrían entrado a la mansión y ellos se habrian topado de frente con un cruel final.

Fue una noticia desgarradora saber que faltaban algunas mujeres del servicio, así como la hija menor de Herness. El segundo hijo del abuelo Ranzon.

El hombre estaba devastado ante este descubrimiento, y le rogó a Marshall que lo ayudase a organizar una cuadrilla de búsqueda para encontrar a su pobre hija y a las mujeres de servicio. Ya que se conocía las crueles y asquerosas costumbres de los pieles verdes.

Para ese momento..Marshall ya podía temerse que era demasiado tarde, y el estómago se le hizo un ñudo al intentar explicarle a Herness que posiblemente, de encontrar a su hija, el preferiría que estuviese muerta.

Se obligó a callar sus palabras, y consideró razonable convenir con el pobre Ranzon devastado.

Las cosechas y riquezas de los Ranzon habían sido saqueadas. Así como la vida de los suyos tomadas.

El resto de los miembros de la familia. Juraron venganza contra los pieles verdes, y luego de comenzar las reparaciones de su hogar y el reclutamiento de nuevos guardias para reforzar la seguridad. Prepararon jugosas recompensas con préstamos hacia Marshall para pagarle a todos los aventureros que llevasen una cabeza de goblin.

.............

Marshall volvió al pueblo, apesadumbrado. La época dorada del pueblo se vio opacada por los monstruos que lo asolaban.

Pero el mil negocios no se dejó doblegar..esa pobre gente lo necesitaba. Sabía como manejar los recursos que había ganado. Sabía como motivar a esos jóvenes aventureros y a los curtidos mercenarios.

Así que pronto se puso a trabajar en una campaña masiva de misiones, para acabar de una vez por todas con los aparentes dos problemas principales de Uihk.

Los jabalíes brutos y los goblins.

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Mientras tanto. En el corazón del bosque, una espesa neblina recorría las raices de los árboles como si fuese una serpiente.

La neblina maniobraba en silencio, buscando...nada...

Solo fue, hasta que envolvió un bulto de pelaje. Que se detuvo por completo.

Una bestia había estado durmiendo hasta que la neblina pasó por casualidad junto a ella. Y ahora estaba envuelta sin saberlo, por un siervo de la oscuridad.

La neblina tenía consciencia propia, y obedecía a la voluntad de su oscuro amo.

Curiosa por lo que había encontrado, llamó a Boarkh para que investigara más a esa extraña criatura.

....Parecía ser un hombre bestia bastante primitivo...

Roncaba suavemente mientras de vez en cuando, olas de vapor salían de sus fosas nasales y la criatura refunfuñaba un poco.

Para cuando el vástago de su amo llego, el monstruo dormido dio un repentino salto.

Había olido la carne fresca cerca de el, y ahora miraba agitadamente en todas direcciones.

No había nada a su alrededor más que la espesa neblina...

Un silencio absoluto en el bosque, que lo hizo tranquilizarse de nuevo.

¡!.

Hasta que un gigantesco jabalí robusto lo embistió contra la cortesa del árbol en el que había estado recargado dormitando.

Ambas bestias se ensarsaron en una lucha de fuerza y zarpasos.

Boarkh agitando su cuerpo y estampando a su rival una y otra vez contra el árbol centenario. Mientras la otra bestia lanzaba rugidos temibles y con sus zarpas desgarraba la cara del jabalí.

De manera sorprendente, la neblina noto un cambio repentino en el ambiente, y se vio obligada a abandonar a los dos combatientes feroces cuando la criatura que Boarkh atacaba solto una bocanada de fuego de sus fauces.

El cambiante recibio un fogonazo en su lomo y las llamas lo envolvieron por unos breves segundos. Los suficientes, para causarle un gran dolor y unas terribles quemaduras.

El jabalí solto a la criatura, pero esta ya lo había trabado por la quijada y lo alzaba con suma facilidad.

El monstruo resultó ser terriblemente fuerte, pues aunque Boarkh altero su cuerpo para ser más robusto y pesado, su contrincante seguía siendo capaz de cargarlo con una sola mano.

-Orsik sitkar morater..-.
Hablo la criatura bestial mientras esbozada una cruel sonrisa.

Con la neblina disipada. Boarkh fue capaz de ver su forma completa. Su rival era un bestial. De aterradora complexión guerrera y feroz apariencia. Era un tigre monstruoso, que parecía saber que el legendario Boarkh nada podía hacer en esa posición.

Si el cambiante trataba de volver a su forma humana. Le rompería el cuello con aun más facilidad. Por lo que intento engrosar el cuero de su cuello y su vientre cuando sintió como una de las garras de la criatura intentaban rasgarlo.

-¿Ashanethg...volparne?..-.
Gesticulo el tigre mientras parecía intentar que Boarkh lo entendiese.
-¿Raghoull...Savagge?-.

-¡!-.
La mente del cambiante se ilumino de repente, cuando comprendió que lo que aquel monstruo intentaba, era clasificar el tipo de criatura que era el.

Savagge era la rama cambiante que su amada le había conferido...y con ella, una lengua antigua universal para comunicarse con las bestias salvajes y otros criaturas de esta misma estirpe.

-¡¡Sa!!..¡¡Vagge!!-.
Artículo como pudo, y ante su respuesta, el tigre suavizo su agarre y terminó soltandolo.

-Lo supe por tus ojos..algún día fuiste humano-.
Le contesto el monstruo mientras ambos eran envueltos nuevamente por la niebla.

Esta le transmitió a Boarkh la voluntad de su amo..

"Traelo a mi".

   .................

Lejos de tal acontecimiento. Y relajándose en la choza de uno de sus amigos.

Dos aventureros curaban sus heridas leves y disfrutaban de un buen gustado de jabalí.

Por una buena temporada, hiban a disfrutar de generosas porciones de carne. Ya que el mercado local se inundó con semejante inventario.

Allesia y Allen se miraron por unos breves segundos, los suficientes para que su tenue ambiente de relajación se disipara.

Ellos no estaban en Uihk por el mismo motivo que los demás. Aguardaban el momento oportuno, para darle caza al monstruo que masacre a su aldea...

Un bestial tigre...