En cuanto había llegado a la mansión fue directo al baño, sabe que en su habitación no tendrá privacidad aunque quiera, todavía dentro del baño aún tiene oportunidad de estar sola, rápido saco el celular de su falda y lo prendió, ya había un mensaje.

❝Si estas segura de estar sola, por favor envía un mensaje. ❞

Ya sospecha que ese chico sabe mas de lo que debía, sus dedos actuaron por si solos envió un mensaje, asegurando que se encuentra sola, de verdad necesita algo de apoyo, necesita saber...

El teléfono empezó a vibrar, muy inteligente por parte del muchacho por haberlo puesto en modo silencio, ella contestó al instante. —Hola...—Susurró.

—¿Yui?.—Reconoció aquella voz tan suave y dulce, era él sin duda.

—¿Yuichiro, hermano eres tu en verdad?. —Dijo con gran emoción, su padre la había abandonado pero bien sabía que su hermano no haría tal cosa, sonrió con felicidad.

—Si soy yo, te he estado buscando desde hace tiempo, le pedí a un amigo que te encontrará y te entregará el celular. —

—Hablas de Yuu-Kun... Tiene el mismo apodo que te puse de cariño. —Agregó lo último.

—Si. Pero la diferencia es que él se llama así... Bien no hay mucho tiempo así que mañana cuando vayas a la escuela, ve a la enfermería él ya te estará esperando fingiendo que se siente mal.—

—¿Uh?.—Acaso era un plan él que le estaba diciendo, pensó ella, sin duda su hermano es muy inteligente.

—Vete con él.—Dijo por ultimo.

—Eh, pero yo...—

—¡Chichinasi!.—El grito de Ayato la alertó, rápido escondió el celular entre su ropa, ya había colgado cuando lo hizo, salió rápido del baño.

Entró él Sakamaki a su habitación, la rubia se encontraba de pie, posando sus manos en su pecho plano según Ayato. —Ayato-Kun necesitas algo.—

—Tu sabes lo que quiero.—Sonrió con malicia, la Komori se limitó a cerrar sus ojos y negando levemente con su cabeza.

—Yo no me siento muy bien hoy así que...—Pero su voz fue ignorada, él Sakamaki ya la tiene entre sus garras, y entonces siente como sus colmillos se encajan en su cuello, vive de nuevo el dolor, mientras Ayato se siente vivo al beber la sangre espesa y dulce de Yui, ella se limita a quejarse.

Ella creyó haber colgado pero no fue así, su hermano pudo escuchar como su hermana sufre al ser arrebatada su sangre, tan sólo estruja fuertemente el teléfono entre sus manos, se sentía un inútil al no poder ayudarla, no podía seguir escuchando así que finalizó la llamada, sin duda debe triunfar su plan que estuvo planeado desde hace un tiempo, esta vez la protegerá.

†††

Sus nervios están de punta, antes de salir de la limusina le aviso a Reiji que se sentía algo mal e iría a la enfermería, él segundo hermano accedió ante eso y hasta le dijo que podía tomarse su tiempo si era necesario, Subaru se dio a notar preocupado cuando lo escuchó, así que la acompañaría aunque ella no se daría cuenta de eso, Ayato por su parte también estaba igual pero no lo demostró, seguramente terminando las clases estará con ella, Kanato no se vio tan interesado, Laito se mantenía neutral ante aquello, Shu no le dio mucha importancia o eso dio a notar.

Ella fue directo a la enfermería, cerro la puerta, y efectivamente allí estaba ese chico castaño acostado en la cama al parecer dormía tranquilamente, Yui tímidamente se acercó a él para sacudir un poco, a la vez esta pendiente de que nadie entre, en un instante ya esta sentado en la cama y se levantó de esta al mismo tiempo. —Vámonos. —Ella asintió dudosa, no sabe si esta bien irse así, claro que extraña a su hermano y eso, pero admitía que creo un lazo con los Sakamaki's o eso cree ella, quien sabe, tal vez no se ha dado cuenta que puede estar sufriendo el síndrome de estocolmo, aunque bueno ha tenido oportunidades de escapar pero no lo ha hecho, por una parte era miedo, y otra era cariño. —Ten.—Yuu le había acercado un pantalón.

—¿Para que es esto?.—

—Para que los uses.—

—Yo...—

—Así es, eso nos dará mas chance de irnos, oh si también esto.—Le dio una peluca rubia. —Puedes cambiarte, mientras yo me quedo fuera vigilando —Dicho eso él castaño salió junto con la mochila donde tenía guardado la ropa y peluca, y así dejo a la Komori sola, sin duda su hermano había preparado todo bien.

Mientras Yuu esperaba en la puerta, miraba a su celular, ansioso esperaba que ella estuviera lista, de repente sintió una presencia, o mas bien tres, solo que una esta muy cerca, trato de ver disimuladamente a los lados para encontrar a la persona que esta cerca. —Ah. Pobre chica siempre esta aquí en la enfermería me da pena, sólo esperó no tenga algo serio.—Dijo en voz alta, como si quisiera ser escuchado. —Bueno la dejaré descansar.—

La Komori se acomodó la peluca lo mejor que pudo, vaya que si podía parecer chico de esta manera, salió y vio a Yuu, quien hizo un ademán con su cabeza para que lo siguiera. —Anda que vamos tarde a clases.—Dijo, actuando todavía, vaya que él amigo de su hermano es muy inteligente.

Tuvieron la suerte de alejarse de la enfermería sin ser perseguidos por los hermanos, mas Yuu esta preocupado dado que no sabe cuando tu tiempo su aroma pueda cubrir a Yui, debía darse prisa antes de que ellos sospecharan, pues bien sabe que no podrá con los vampiros, su prioridad es llevar a la Komori a una estación del metro para alejarla y así les sea mas difícil encontrarla. —Um. Yuu-Kun no se como agradecer todo lo que has hecho por mi y mi hermano... Poniendo tu vida en riesgo. —Se calló al instante no sabe si ha hablado de mas o no, sabe y Yuu que sabe y los Sakamaki's son peligrosos, pero se pregunta si sabe porque se les considera así.

Él castaño hizo como que no escuchó lo último, mostró una sonrisa tímida a la chica que se vistió de hombre. —Es mi deber hacerlo.—Contesto.

—Um. ¿Deber?.—Se pregunta si él se habrá hecho muy amigo de su hermano mientras ella estuvo fuera, pues vaya que se esta esforzando mucho por una desconocida. 

Llegaron fuera de la escuela, al parecer hay una presencia que los acecha aunque se encuentra lejos, no sabe si precipitarse o seguir actuando normalmente, maldición al último si levantó sospechas. —Ah.—Suspiró tendrá que hacer aquello, de verdad y eso lo pensaba dejar en caso de que estuviera seguro que no podrían irse los dos. —Bien, hora de hacer algo de ejercicio, corre.—Dijo y entonces tomo la mano de la rubia, solo espera le pueda seguir el paso, lo intenta pero su anemia no le ayuda mucho, chasquea la lengua, se mantiene tranquilo no debe perder la calma o el plan se puede echar a perder, pero lograron salir de la vista del vampiro, aunque no sería por mucho tiempo, habían llegado a las calles donde casi no hay gente gracias al horario, además se escondieron en un callejón.

La respiración de Yui esta entrecortada vaya que había corrido mucho, menos mal Yuu estuvo tomando su mano todo el tiempo o seguro se hubiera tropezado. —Yuu-Kun por favor deja esto, esta bien si vuelvo con ellos.—Tan sólo no quiere arriesgar la vida del castaño, no se quiere imaginar de que harán los hermanos contra la persona que intento ayudar escapar a su querida presa.

—Pero falta tan poco...—

—Pero es muy arriesgado para ti, dile a mi hermano que lo siento... —En verdad quiere volver a verlo, pero no a cambio de la vida o sufrimiento de un inocente, además le basta saber con que esta bien, puede usar el celular que le dio para seguir comunicándose con él. —Que me perdone por no avanzar mas.—

—¡Que no!.—Exclamo con desesperación, Yui no esperó tal reacción abrió su boca sorprendida. —Tanto tiempo planeando esto, sin duda tu saldrás de aquí. —Sentenció, para así empezar a sacar algunas cosas de su mochila.

—Yuu...—No entiende porque esta haciendo todo esto por ella, porque se sacrifica tanto por una desconocida.