[Dorian]

Estuve un rato intentando dormir pero no podía manteneme relajado ni cinco minutos sabiendo lo que Brais pensaba de mi ahora. Quería explicarle todo pero eso implicaba haberle mentido para alejarlo por culpa de Dereck.

Dereck me había arruinado todo y él sabía correctamente como hacerlo, pensaba en explotar, en decirle todo a todos y dejar de esconderme pero el miedo siempre estaba ahí. El miedo nunca me dejaba solo y era lo que más odiaba, me odiaba a mi y a mis jodidas debilidades.

Por la noche escuché a mi padres de Brais pelear y la verdad le sorprendió, creo que nunca había escuchado discutir a ninguna de la parejas de la cabaña y menos así de fuerte, deseaba que eso no pasará tan seguido por qué seguro eso dañaría demasiado a Brais.

Desperté con la sensación de que lo de anoche fuera un mal sueño pero la realidad cayó cuando Brais había recogido sus cosas y ya no estaba en la cabaña.
Comencé a juntar mis cosas y salí a dónde todos estaban almorzando.

Dereck a su lado como siempre.

Yo me senté a un lado de Paige y me dieron un plato con huevos fritos y tocino.

— ¿Habrá más juegos para hoy? — preguntó Turner.

— Este es el último juego, debido al empate hemos tenido que improvisarlo — explicó.

— Todos hemos dormido está noche con personas diferentes a las usuales, además de vivir una noche a la intemperie nos ha ayudado a crear un vínculo con las personas con las que hemos pasado estás lindas vacaciones — quise maldecir en ese momento por qué tenía miedo de que podría pedirnos.

— ¿Y que haremos entonces preguntó Luck? — por favor, no quiero tener que ser sincero, ya no sé serlo.

— Serán unas cortas palabras, en las que describiremos como ha sido hasta ahora compartir con él o ella, está noche y los anteriores días, ustedes deciden por dónde comenzar.

Lo miré al instante en el que Sara termino de hablar, él también me miraba, ¿pensábamos lo mismo?

No podía decirle lo que de verdad significaba para mí y todo lo que había provocado en tan pocos días, él había provocado algo en unos días que yo tardaría años en borrar de mi mente, incluso olvidarlo me daba miedo.

Todos hablaron, para nadie fue difícil y solo quedaban dos parejas, nosotros y otra de la otra cabaña.

Mis manos sudaban tan solo de pensar en todos mirando que iba a decir, puedo decir que ha sido hacer amigo, eso sería lo correcto, ¿no?

— Van ustedes — me apuntó.

Nuestras miradas se encontraron sabiendo que ninguno de los dos iba a decir lo que verdaderamente habíamos cambiado el uno en el otro.

— Yo, — comencé, movía mis manos y dejé de mirarlo — He hecho buenos amigos aquí, cosa que la verdad no creí que pasaría — reí — Si no saben, me obligaron a venir — ahora sí reí y los demás también — Pero, — lo miré, quería decirle tangas cosas — No me arrepiento, Brais fue de las mejores cosas que me pasaron — hice una pausa que a mí me pareció eterna y sonaba muy mal — En el verano, su amistad, fue — comencé a grabarme y tenía miedo que mostrarán lo mal que estaba en mi cabeza — Su amistad fue de las mejores cosas de este verano.

Todos aplaudieron cómo lo hicieron con todos los demás. Entonces suspiré por qué al menos lo difícil para mí ya había pasado.

— Dorian puede ser muy pesado a veces — dijo y habló rápido, ojalá yo tuviera esa seguridad — Pero a pesar de vivir de la tecnología ha logrado adaptarse bien a esto, es un chico muy inteligente y fuerte, estoy muy orgulloso de lo que puede lograr y me alegro mucho de haberlo conocido — terminó.

Aplausos, otra vez. No pude dejar de verlo, ¿cómo llegamos a esto? por qué no pudimos hacer bien las cosas desde el principio y olvidarnos de toda esta mierda.

La última pareja eran Luck y Jo, si ellos lo hacían bien entonces sería empate, si no, entonces ganaríamos. Está vez puse atención en ellos quienes se veían bastante extraños.

— Yo creo que Luck no fue tan imbécil este verano y logró hacer algo además de ejercicios para intentar ser una mejor persona físicamente y una mierda por dentro — hablo tan rápido que nosotros los procedamos hasta el final.

— ¡Jo! — gritó su madre.

— ¿Dirás algo más? — preguntó Sara — Por que si no, está claro quien es el ganador.

— No diré nada más — terminó.

Luck no respondió nada, ni siquiera parecía el mismo.

— Entonces, es un placer cabaña — se dirigió a nosotros — Anunciar que ¡Han ganado este verano!

Papá se levantó emocionado de su asiento y todos nos abrazamos, no supe cómo hicimos para abrazarnos entre todos pero lo logramos. Sentí que habíamos hecho todo bien.

La mirada de orgullo de papá era algo que no quería borrar nunca.

Todos comenzamos a caminar de vuelta a la cabaña y luego al auto para volver a nuestra cabaña.

— ¡Dorian! — gritó Mitch casi cuando subía al auto.

— Hey — le dije.

— No olvides lo que te dije, no hay nada mejor que hablar y decir la verdad — apuntó con su dedo mi pecho.

Suspiré — No creo que sea fácil.

— Lo que vale la pena, nunca es fácil.

Le sonreí, Mitch era esa persona que da tan buenos consejos que ni siquiera sabes cómo seguirlos.

— Lo intentaré — le dije.

— Te quiero — me abrazó y sentí que podía hacerlo.

Tener a alguien así, me hacia sentir que podía todo.

Subí al auto de papá, está vez no podría con la incomodidad.

Llegamos y subí a mi habitación mientras la mayoría se quedaba abajo festejando haber ganado, papá quería ganar desde que era un niño y entendía su emoción.

Me acosté en la cama y sentí mis párpados pesar de inmediato.

Unos golpes fuertes en la puerta me hicieron pararme adormilado y con un bostezo a la mitad.

— No entiendo que tienes en la cabeza — Harry en mi puerta parecía molesto pero yo no entendía por que.

— ¿Ahora que hice? — pregunté volviendo a la cama.

— Es que no entiendo Dorian en serio, siempre te olvidas de todo — cerró la puerta y entró — ¡La puta cita triple es en una hora!

— ¡¿Una hora?! — pregunté subiendo el tono de mi voz.

— Si, otra vez se hace tarde por tu culpa, ya báñate.

La verdad no entendía por qué siempre terminaba pensando en otras cosas menos en las salidas que hay.

Busqué algo lindo para vestir, no tenía idea de a quien vería pero si era lindo quería verme bien, tal vez él no fuera con quién quería tener una cita pero tenía un poco de esperanza en que la pasaría.

Me bañé y vestí rápido por qué Harry dijo que el restaurante estaba un poco lejos y tardaríamos unos treinta minutos en llegar.

— Te espero abajo — le escuché decir mientras aún me vestía.

Salí y me peine un poco frente al espejo, mi cabello de noche se veía más negro que de costumbre.

Me puse un poco de perfume, izquierda, derecha, en el centro y un poco en los pantalones por si acaso.

Bajé y estaban todos en la terraza, según nuestros padres tendríamos una noche de chicos, lo que no saben es que acá hay tres citas y dos de ellas son homosexuales.

Antes de llegar al restaurante nos desviamos a un lugar que pensé que nos asaltarían en cualquier momento, era México al final de cuentas. Al parecer ahí vivía la chica de Harry y él bajó.

Ella es un poco mas baja que yo, su cabello era negro y abundante y tenía un vestido café claro muy bonito, tal vez si fuera heterosexual me interesaría.

— Ella es Havana chicos — la presentó.

Havana oh na na.

— Cuñada — alargó Brais y ella rió.

No me parecía una mala persona pero no la conocía lo suficiente como para decir que me caía bien.

Llegamos al restaurante y nos sentamos en una de las mesas más grandes del lugar.

— Bueno, ¿Y mi cita? — pregunté por qué ya estábamos ahí y ni una pista de mi chico.

— No sé, dijo que estaría aquí a las ocho — Harry revisó su muñeca.

— No tienes reloj idiota — le recordé.

— Si, pero quería parecer interesante — respondió.

Suspiré cansado, en el peor de los casos estaría de doble mal tercio durante toda la noche y para acabarla, una de esas parejas era el chico que yo quería ya ahora me odiaba.

— Sin las ocho y cuarenta ya — dijo Dereck.

A ti nadie te preguntó.

Pensé pero claramente no lo dije. Intenté mantener un poco la cordura y no molestarme, incluso creí que tal vez era mejor que un chico malo o que no me gustara.

Ahora Brais y Dereck se besaban frente a mí, intenté no verlos y darles la espalda pero era casi imposible, ¿que podría ir peor?

No, mejor no digo esa frase por qué entonces sucede algo... peor.

— ¡Hey! — dijo Harry saludando a alguien que se encontraba detrás de mí.

¿Mi chico?

Me giré para verlo y ¡oh sorpresa!, ni siquiera tuve que decir esa frase en voz alta para que las cosas fueran peores.

— ¡Hey! — él también pareció sorprendido de verme — ¿El servicio acá no es una mierda?

Bueno, hay que verle el lado bueno a todo, ¿no? él no dejo de ser igual de guapo que en aquel restaurante, y los nervios que me dieron cuando me dió su número de celular, volvieron, tal vez esta cita si sería interesante después de todo.

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Holaaaaaaaaa

Quería explicarles algo que fue mi error al principio de la historia y son los nombres de las hermanas de Dereck y Dorian. Como ya saben está historia ya está escrita en su totalidad pero a la hora de escribir aquí decidí cambiar los nombres y suelo confundirlos un poco.

Paige es la hermana de Dorian y Megan la de Dereck, muchos perdón por ese error tan grande jaja:(

Muchas gracias por leer<3