05

Para empezar, no sabía la razón por la que debería comenzar a maldecir, pero estas sobraban.

Porque tenía pocas horas de sueño encima.

Porque me dolía la cabeza por haber bebido tanto durante esta madrugada.

Porque Freen había sido realmente inolvidable para mí y ahora era mi jefa.

Freen me mira con una sonrisa en el transcurso de los segundos en los que el silencio es ensordecedor y yo sólo pienso en qué estará asumiendo realmente de mí.

¿Tendrá una idea mala sobre mi persona por lo fácil que fueron las cosas con ella hace tan sólo unas horas?

Probablemente pensaba mal de mí, pensará que soy una irresponsable por haber estado bebiendo en un bar siendo que hoy empezaba a trabajar en su empresa.

¿Y si eso era suficiente para que no quiera que trabaje para ella?

Entiendo si rompe el contrato en mi cara.

- Bueno... -me animo a romper el silencio con algo de nervios.

- Tal vez sueno un poco intensa. -dice Freen y se cruza de brazos.- Pero me alegra esta coincidencia, porque ya que empiezas a trabajar para mí te podré ver más seguido.

- Lo siento. -no hago caso a sus palabras por la angustia de darle una mala primera impresión.

Pese a que esta misma madrugada la pasamos muy bien, mi mente no deja de maquinar sobre la idea de que a pesar de eso, había empezado con el pie izquierdo respecto a nuestra relación de trabajo.

En serio, ¿por qué ella tiene que ser mi jefa?

- ¿Por qué te disculpas? -Freen pregunta con el ceño fruncido.

- Por la primera mala impresión. -respondo y cruzo mis brazos apenada.- Sé que como jefa no es lindo ver bebiendo en un bar una noche antes a la persona que le das una oportunidad para volver a trabajar.

- Pero siguiendo tu lógica, yo como jefa tampoco debería haber estado allí. -hace un gesto de desinterés.- No me diste una mala impresión, Becky. Además la pasamos bien... -se sonroja ligeramente.

Sus palabras logran tranquilizarme y nos miramos con una sonrisa por algunos segundos.

Que intenso todo.

Luce como una persona de carácter fuerte, pero sólo son apariencias.

- Bueno... -habla de nuevo.- ¿Firmas el contrato?

Asiento y nos acercamos a su escritorio, en el que firmo unos papeles y Freen me da las últimas indicaciones para empezar a con mi trabajo.

- Perfecto. -extiende su mano.- Bienvenida a mi empresa, será un placer trabajar contigo.

- Gracias, el placer es mío. -acepto su mano.

El día había sido menos agotador de lo que pensaba.

Un ambiente acogedor que me hizo sentir a gusto, la empresa contaba con mucha atención a las comodidades de sus trabajadores; desde un horario corto para que no resulte agotador, descansos generosos, snacks e incluso había duchas, una habitación para tomar una siesta y productos para el cuidado personal.

Todo era una fantasía. El único problema era mi jefa.

Freen no tiene nada de malo en un primer análisis a su persona, exceptuando a que era mi jefa.

Siempre me habían dicho muchas cosas sobre los jefes, y una de ellas era que jamás debía involucrarme sentimentalmente con ellos por diversas razones. A pesar de que con Freen sólo habíamos compartido una noche de pasión, algo dentro de mí me había hecho sentir que fue lo suficientemente especial como para que no quede como una chica que conocí en un bar y nos dimos un revolcón.

Aunque no sé lo que ella quiere, ella merecía algo más que eso.

Fue atenta a mi bienestar sin dejar de hacerme disfrutar, estuvo al pendiente de todo lo que quería e incluso me llevó a casa aún cuando podría ser molesto para ella levantarse de la cama después de tener sexo, hecho que si es lo suficientemente bueno te deja sin energía -y lo fue-.

Es inevitable dejar pasar que ella tampoco quiso dejarlo en algo de una noche, que es linda, atenta y torpemente tierna.

Aunque odio las comparaciones, ni siquiera Catherine me había conmovido de la manera en la que lo hizo Freen durante el tiempo que estuvimos juntas.

Me comporto como una idiota al irme de la empresa y no saludar a Freen. No es que sea irrespetuosa, simplemente no quiero verme como una intensa.

Llego a mi departamento que está lo suficientemente desacomodado como para provocar un suspiro de frustración que resuena en todas las paredes del lugar.

Tomo mi celular y sé que he dicho que no quiero verme intensa, pero envío un mensaje a Freen.

Rebecca: Creo que me fue muy bien en el trabajo hoy.

Rebecca: Aunque mi jefa me cae algo mal.

Me doy la libertad de bromear con ella porque no luce como alguien que se enojaría por ello.

Freen: Jajajaja.

Freen: Entonces deberías conocer mejor a tu jefa, ella estaría encantada de llevarte a cenar.

Tapo mi boca por la sorpresa y no puedo evitar soltar un chillido de la emoción.

No mezcles lo profesional con lo sentimental.

No mezcles lo profesional con lo sentimental.

No mezcles lo profesional con lo sentimental.

Rebecca: Y yo estaría encantada de cenar con ella y conocerla mejor.

Envío mi mensaje y pasa unos minutos en "leído", me tiene tonta la espera hasta que Freen llama.

- ¿Hola? -respondo de inmediato.

- Hola, Becky. -habla Freen al otro lado de la línea.- ¿Entonces te gustaría conocerme mejor?

Suelto una risita porque, por alguna razón, Freen se comporta nerviosa cuando se trata de mí.

NO MEZCLES LO PROFESIONAL CON LO SENT-

- Sí, me encantaría. -digo y muerdo mi labio.

Silencio por unos minutos hasta que escucho un suspiro.

- ¿Te parece bien si el viernes por la noche te paso a buscar por tu casa? -vuelve a hablar y su voz tiembla.- O puede ser otro día, incluso a la mañana o a la tarde, cuando te guste, ya sabes...

- El viernes por la noche está bien. -digo con una voz tranquila para tratar de contagiarla un poco.

- De acuerdo, conozco un restaurante... -se detiene por unos instantes.- ¿Hay algún restaurante en específico que te guste?

- Elige tú, lo único que me interesa es conocerte mejor, Freen. -me sincero.

Esto está siendo demasiado intenso y me asusta.

Pero elegiré disfrutar de lo que sea que ocurra entre nosotras antes que preocuparme.

Creo.

🥀🌸

N/A: Bueeenas. No sé que decir pero no quiero dejar este capítulo sin una nota mía. Chaaau.

Ahre. Besos <3 y gracias por el apoyo.