Media hora después de dar la ordén Stilwell se mostró más concentrado en la pantalla que tenía al frente, ya estando al tanto de que Lamplighter había ido a solucionar el problema. Y eso realmente no lo reconfortaba mucho, esperaba que fuese Black Noir, o Queen Maeve, alguien más capacitado, y menos impulsivo. Está era una amenaza de verdad, quizás un intento de otra marca para hacer ver más débiles a los héroes, y si era así, enviar al eslabón más débil del equipo no era una buena decisión.

De todas maneras no tenía opción, Payback se encontraba en "una aventura por el cosmos" y los G-Men eran incluso una peor opción que Lamplighter, no tenía opciones, cosa que lo llevo a confiar en él héroe de vestimenta amarilla, que tan pronto descendió de los cielos ayudo con la evacuación de los civiles que quedaron atrapados en el caos.

-¡No se preocupen, yo me encargaré!- Dijo con total seguridad, sacando de la zona a dos hombres, y una mujer, a la cuál acercó más a su hombro para poder sentir sus pechos. Luego de ello se encaro con el hombre cocodrilo, que tan pronto se dio cuenta de su presencia dio una especie de chillido.

El no nació con esa apariencia, de hecho, era un humano bastante corriente respecto a su físico, pero a medida que fue creciendo una extraña enfermedad se fue desarrollando en su organismo, todo gracias a que la granja de sus padres era abastecida con el agua que Vought contaminó al desechar una gran cantidad de V. Su piel se torno escamosa con el tiempo, y sus dientes filosos, hasta que ya no cabían en sus labios humanos, y poco a poco deformaron su boca, creando un hocico torcido que le daba la apariencia de un animal. Y para cuando tenía dieciséis años ya era un reptil, una criatura que solo fue aceptada en el bajo mundo como mono de circo o mercenario, lo cuál acepto para poder costear los tratamientos que calmaban levemente las torturas con las que vivía por el hecho de ser un mutante.

-Eso no queda bien para las películas, pero bueno, los editores ya te podrán un rugido que no te haga sonar como un retrasado.- Afirmó el héroe observando como el imponente hombre cocodrilo se acercaba, chillando de manera grotesca al no poder hablar. Y tan pronto lo tuvo cerca Lighter lo golpeo en la mandíbula inferior, haciéndolo retroceder por el dolor.

-¡Lamplighter domina a Killer Croc!- Exclamó un chico que grababa la escena con su celular, buscando un contenido más original para su canal de Bitch.

-¡No seas idiota, vete de aquí!- Grito el héroe antes de ser golpeado desde arriba por Killer Croc, atravesando el suelo debajo de sus pies y cayendo en una alcantarilla, dónde el brilló de su traje se perdió al ser manchado con la mierda.

-Y como pueden observar, el hombre cocodrilo es más fuerte que Lamplighter, nos vemos en el próximo capítulo de ¿Puede ésto ganarle a...- Dijo antes de ser cortado tanto en su oración, como físicamente, ya que el mutante lo agarro del cuello y le arrancó la tráquea antes de saltar detrás de Lamplighter, cayendole encima con ambos pies, y sacándole el aire.

-¡Muerete maldito hijo de tu perra madre reptil!- Grito Lamplighter mientras disparaba una llamarada de la que el mutante se cubrió con ambos brazos, esperando con paciencia hasta que el héroe se cansó.

Momentos después Stilwell se encontraba ofuscado, no podía creer lo sucedido, pero al menos lo había prevenido. Antes de que Killer Croc saliera del lugar ordenó que todos los reporteros fueran dispersados, y vaya que fue una buena decisión, ya que momentos después de haber caído sobre Lamplighter salió del agujero con sus manos llenas de sangre.

Esa misma tarde el resto de los siete fueron reunidos, en una mesa larga con asientos oscuros se encontraban los seis héroes más importantes del mundo, además de su lider, en medio se encontraba Stilwell. A su lado derecho estaba el símbolo del empoderamiento Femenino junto al hombre más rápido del mundo, y a su lado izquierdo el rey de los mares. También se encontraba Black Noir a un lado de The Deep, Jack The jupiter al otro, y de pie detrás de Stilwell se encontraba Homelander, apretando los puños cuál niño regañado.

-Todos somos conscientes del pequeño error de Jack y A-train, un error que le costará millones a está empresa.- Afirmó el empresario mientras paseaba su mirada de enojo por encima de los héroes.

En una de sus tantas sesiones de placer, el velocista y el alienígena llegaron a Gotham, una ciudad completamente dominada por el crimen, dónde el programa de héroes era completamente rechazado. Se cogieron un par de mujeres, y la noticia fue ignorada por todos, menos por Cobbelpot, quién no estuvo para nada contentó al enterarse.

Una vez el programa de héroes fue aprobado Stilwell supo que el último lugar en el que quería poner a sus héroes era Gotham, porque esa era la única ciudad con super humanos.

Si, Homelander, Queen Maeve y otros héroes eran fuertes, podían volar, y otras cosas, pero eran producto del V, solo eran mutantes. Por otra parte, en ciudad gótica habían hombres que habían roto sus limitadores, algunos podían esquivar balas, otros regenerarse incluso después de perder una extremidad, y todo eso sin el V. Eso logro intimidar un poco a Stilwell, quién decidió buscar el apoyo del gobierno antes de siquiera pensar en meter a sus héroes en Gotham.

La globalización de los súpers casi fue el detonante para algo más, el señor Cobbelpot solicito una reunión con Stilwell, y a sabiendas de la oportunidad que eso representaba decidió aprovecharla. Viajo hasta la ciudad del crimen, y se reunió en una de las mansiones del Pingüino, acompañado por Black Noir.

Homelander era fuerte, pero solo era eso, fuerte, Stilwell por su parte era poderoso, podía hacer lo que quisiera con el mundo, igual que el Pingüino, y cuando ambos estuvieron frente a frente estuvieron a nada de desatar una guerra.

-Señor Cobbelpot, ¿Que se le ofrece?- Preguntó Stilwell con una mirada inexpresiva, que contrastaba con la sonrisa de Cobbelpot, misma qué siempre tenía al ser consciente de lo poderoso que era.

Y es que, con el mundo a sus pies, ¿Quien no tendría una sonrisa de oreja a oreja?

-¿Tienes idea de lo que significa el programa de héroes, Stilwell?-

-Si no la tuviera, no sería el presidente de Vought American.-

-Es gracioso considerando que en una empresa que fabrica superhéroes, tú eres el único super humano.- Dijo mientras exhalaba humo de su tabaco - Pero bueno, a lo que vinimos, negocios. Gotham a pesar de tener altos indices de criminalidad, es la ciudad que más contribuye a la economía mundial, mucho más que una compañía que busca venderle niños con poderes al gobierno.-

-Negocios...- Repitió Stilwell sin cambiar su expresión, no tenía intenciones de charlar más de la cuenta con Cobbelpot, solo quería saber si sería un aliado o un enemigo. Y por los hombres que lo acompañaban, tenía la sensación de que sus intenciones no eran precisamente buenas.

No eran solo guardaespaldas, y si bien el llevo a su sujeto más fuerte, era poco considerando que estaba en los dominios del Pingüino. Detras el se encontraban Floyd Lotton, mejor conocido como Deadshot, y Killer Croc, visiblemente tranquilos, pero en espera de un solo movimiento brusco para armar una carnicería.

-Sere directo, no quiero ningún super en Gotham, y tampoco estoy interesado en adquirirlos.- Afirmó mirando fijamente a Stilwell -Pero eso no significa que lucharé contra el programa de súpers, puedes hacer lo que quieras fuera de mis dominios.-

-Gotham es una ciudad caótica, ¿No cree que sería beneficioso tener algo más que simples mercenarios para controlar el caos?- Pregunto en un intento de convencer a Cobbelpot, no había viajado por eso, pero si la oportunidad se daba no perdería la chance de venderle héroes al Pingüino.

-Escucha, Stilwell, no repito las cosas, no estoy interesado.- Dijo con molestia -Y si uno de los supers pasa las fronteras de Gotham, usaré cada uno de mis recursos para enterrarte a ti y a los tuyos.-

En ese momento Black Noir dejó su postura estática, y movió levemente las manos, cosa que alertó tanto a Deadshot como a Croc, quienes también dieron mínimas señales de estar a punto de atacar.

Ese día no hubo una guerra, por suerte se llegó a un acuerdo, Cobbelpot no interferiría con el programa de súpers, y Stilwell no enviaría ninguno a Gotham. De igual forma tampoco usaría las acciones y negocios de Coppelpot para enaltecer a sus héroes.

Stilwell recalcó muchas veces que la única persona con la que no debían meterse era el Pingüino, muchas veces les dijo que de poner a Vought en contra de Cobbelpot, sería más sencillo sacrificar al héroe que lo provocará que defenderlo, y aún así A-train y Jack no se controlaron, lo que nos lleva al presente.

-Saben perfectamente que son libres en todo el mundo, menos en Gotham.- Dijo Stilwell con los ojos cerrados -¿Y tenían que descontrolarse justo en Gotham?- Preguntó mientras golpeaba la mesa, a sabiendas de que Cobbelpot ya los tenía en la mira, y Stilwell sabía que no sé detendría ahí.

-¡Fue un accidente!- Exclamó A-train de forma entrecortada por el miedo, los ojos de Homelander estaban impregnándose por el carmesí de su visión calorífica, y sabía que una vez Stilwell abandonará la habitación le iría fatal.

-¡Podemos arreglarlo!- Dijo Jack en un intento de persuadir a Stilwell, consiguiendo para su sorpresa la aprobación de éste.

-No tengo dudas de que lo harán.- Dijo mientras se levantaba del asiento, caminando hacía la entrada antes de salir y dejar una sala en silencio.

-¿¡Tienen una maldita puta idea de lo que acaban de hacer!?- Grito Homelander antes de partir la mesa a la mitad con un golpe, provocando que los héroes se dispersarán. Una vez centro su mirada en A-train se lanzó para agarrarlo de la camisa y lanzarlo contra una pared. Al voltear y ver a Jack The Júpiter esté gritó su palabra por el miedo a que Homelander lo atacará.

La visión calorífica del héroe paso por la habitación, partiendo a la mitad varias cosas y rozando a The Deep. Queen Maeve lo esquivo, y Black Noir saltó, cayendo en frente de Homelander.

-Tu me caes bien, pero si quieres resistirte, podrías servirme más tarde.- Dijo mientras lo tomaba de la parte superior de su traje, provocando que Black Noir temblará.

Quizás no por el miedo, sino por las ansias.

Stilwell escuchó el alborotó, pero decidió ignorarlo, cuando charló por primera vez con los siete sobre el peligro que representaba Cobbelpot fue muy claro en que sus vidas no valían lo que costaría luchar con el Pingüino. Y aunque le provocará frustración saber que perdería las ganancias de A-train y Jack, también sabía que no había otra opción.