.

.

.

🐧🌃🌨🐻

Hacía frío en la ciudad, después de todo estaban en Diciembre, podían observar los escaparates de las tiendas repletos de adornos conmemorativos a la temporada y el montón de luces adornando las avenidas principales y lugares estratégicos de la ciudad.

Y pese a que JongIn tenía tiempo viviendo en aquel lugar, era la primera vez que podía disfrutarlos de aquella manera, puesto que antes, con todas las preocupaciones y sus estudios encima, no había tenido tiempo de verlos apropiadamente.

Sin embargo, el caminar al lado de KyungSoo por as bulliciosas aceras, pese a que el mayor recomendaba ir en el automóvil, le pareció de lo más favorable. El hombre había aceptado hacer lo que él quisiera porque lo había prometido después de haber ido a su despampanante fiesta.

ㅡ Quiero ir al cine, tomar chocolate caliente con bombones en una de esas cafeterías bonitas y caminar contigo por las calles de la ciudad.ㅡ JongIn había dicho, inflando los mofletes y arrugando los labios en uno de sus preciosos pucheros.

Estaban desayunando después de hacer el amor y el ambiente en el departamento se sentía tranquilo pese a que a JongIn le seguía dando vergüenza que Gabi-Yah los hubiese escuchado más temprano mientras estaban en la cama.

KyungSoo había dejado de lado su periódico y le había dedicado una mirada después de observarlo por un par de segundos.

ㅡ Parece que has visto demasiadas películas de romance. ㅡ KyungSoo sonrió y tomó el trinche para seguir disfrutando de su fruta picada.

ㅡ Y eso que aún no vemos una película de esas melosas juntos, ah... papi ni siquiera me ha llevado en una cita decente. ㅡ JongIn se quejó exageradamente mientras le daba un sorbo a su vaso de leche ― a veces parece que papi ya se cansó de osito.

KyungSoo no lo miró, siguió comiendo pequeños trozos de fruta, llevándolos a su boca con parsimonia mientras cerraba los ojos y degustaba su sabor, haciendo que JongIn se exasperara por no tener respuesta inmediata ante lo que había planteado.

JongIn frunció más los labios al igual que el ceño y se cruzó de brazos, recargándose en el respaldo de la silla mientras observaba al hombre volver a enfocarse en el periódico.

ㅡ Yah... papi está siendo muy grosero justo ahora ㅡ JongIn chascó la lengua, siguiendo con su berrinche ㅡ papi debería ser castigado también.

Lo último lo había susurrado, por supuesto, pero KyungSoo lo había escuchado a la perfección, haciéndolo levantar la mirada, arqueando una ceja mientras lo observaba detenidamente.

ㅡ ¿Te estás rebelando bebé? Porque no me gustaría nalguearte en la mesa. ㅡ KyungSoo soltó demasiado serio, y sin embargo se sentía un poco divertido al ver cómo el sonrojo se apoderaba de las mejillas morenitas de su osito una vez mencionado el castigo que podría darle.

JongIn murmuró algo de manera que él no pudiera entenderlo y KyungSoo se resignó, suspirando mientras negaba y dejaba el periódico sobre la superficie de la mesa. ㅡ Anda, ven aquí.

El morenito amplió su puchero, pero se levantó ante la orden de su papi y dio el par de pasos que lo separaban, al tanto que KyungSoo recorría su silla y se palmeaba la pierna, indicándole que se sentara en ella.

Así lo hizo, el osito se sentó sobre la pierna de su papi, que colocó su mano en su cadera estratégicamente y le apretó en la zona, haciendo su agarre firme para que se estremeciera con el puro contacto de sus manos varoniles. JongIn respiró profundamente y KyungSoo sonrió más amplio, observándolo a los ojos detenidamente, haciendo que su corazoncito latiera demasiado apresurado.

Se sonrojó por la cercanía y todo el mar de emociones que su hombre le hacía sentir pese a que llevaban tiempo juntos y se descubrió sintiéndose muy bien, sin saber siquiera qué esperar de su siguiente movimiento.

ㅡ Ni siquiera pienses en huir, porque papi no te dejará ㅡ KyungSoo susurró casi imperceptible y después sus labios alcanzaron parte de su piel descubierta en su cuello, dejando un besito sobre la piel dorada, mientras JongIn se estremecía con el mero contacto. ㅡ Elige el lugar, iremos a donde tú quieras.

El corazón de JongIn no podía más con esa respuesta, con la manera suave en que la mano de KyungSoo se deslizó por su cadera y cómo lo estremeció por completo, sacudiendo su corazón sin remedio. Incluso pese a que habían hecho el amor más temprano, le encantaba la sensación de que KyungSoo pudiera reclamarlo como suyo incluso si su cuerpo no estaba a su entera disposición para poseerlo.

Así que ahora estaban ahí, su mano escabulléndose entre los dedos abrigados por los guantes de su amante, para entrelazarlos con suavidad y caminar juntos, como él tanto había querido. KyungSoo atrajo su mano hacia el bolsillo de su caro abrigo y la sumergió dentro, mientras avanzaban por la acera.

ㅡ Sólo a mi bebé se le ocurre salir en invierno y no abrigarse correctamente ㅡ KyungSoo le reprochó, como venía haciendo desde que se encontraron fuera de la oficina ㅡ ¿Debería reprenderlo? Podría dejarlo sin premios ni regalos por un tiempo. Hasta que aprenda a cuidarse de manera apropiada.

JongIn bajó la mirada y puchereó con sus labios, indignado por los castigos que su papi estaba meditando en voz alta mientras caminaban por la ciudad, pero ver de reojo su perfil varonil, con los lentes de pasta gruesa puestos todavía porque acababa de salir del trabajo, con su traje y su abrigo caro mientras que él había llevado ropa casual, lo hacía sentir feliz a la vez.

Su corazón era un revoltijo de emociones y se sentía extraño, pero se sentía rotundamente feliz a la vez.

ㅡ ¿Debería dejarlo sin sexo por un par de semanas? Quizá hasta el nuevo año chino... ㅡ KyungSoo se había acercado repentinamente hacia su oído, solo para susurrarle aquellas palabras que lo congelaron en el acto.

¿Hasta el año nuevo chino? ¡Eso era súper extremo! Faltaba mucho para eso. Maldición.

ㅡ Papi es malo con nini ㅡ fue todo lo que pudo mencionar, para no replicar y que efectivamente su papi juguetón le aplicara el castigo de manera seria.

ㅡ ¿Eso piensa nini? ㅡ KyungSoo preguntó, mientras ambos entraban en el enorme y colorido centro comercial, donde irían a ver una de esas películas románticas y con demasiados clichés, que JongIn se encargó de elegir.

ㅡ Sí... piensa que puedes castigarlo de otras maneras. ㅡ JongIn se relamió los labios de manera sensual y KyungSoo esbozó media sonrisa en sus labios.

ㅡ Eso no sería castigo para ti realmente, porque te gusta. ㅡ KyungSoo volvió a susurrarle, pese a algunas miradas curiosas puestas sobre ellos. ㅡ ¿Qué película vamos a ver?

JongIn dejó su indignación y suspiró, eligiendo la película más cliché de la cartelera y sonriendo descomunal porque se sentía satisfecho de su elección. Mientras que KyungSoo le extendió su tarjeta para que pagara las entradas, para él encaminarse a la fila de los aperitivos y no perder más tiempo haciendo doble fila.

El morenito se sentía soñado, suspirando por estar ahí, disfrutando de una noche en una cita como cualquier pareja de la ciudad, con un hombre de ensueño y con el corazón latiéndole a mil por hora porque cada día que pasaba KyungSoo lograba meterse de lleno en su vida, bajo su piel, en el fondo de su corazón.

Todavía no le decía abiertamente que lo amaba, que en verdad lo amaba con todo su ser, y tampoco lo había escuchado decirlo a él.

Pero esperaba que ocurriera pronto, mientras tanto, se dedicarían a disfrutar de la plenitud de su romance, en aquel cine, en el centro comercial, con risas y miradas indiscretas que seguramente muchos no aprobaran, pero que para él, no podía hacerlo sentir más feliz.

.

.

.

N/a:

Quiero ofrecer una disculpa por la falta de actualizaciones en OM, he tenido muchos problemas en el trabajo, con mi salud y con mi estabilidad emocional; no es excusa, no me gustan las excusas. Pero sentí repentinamente que me había desviado del camino y quise retomar OM como lo pensé desde sus inicios, así que me he tardado más.

Agradezco honestamente a las personas que pese a ello, esperan por esta historia, aunque sean poquitas, les adoro.

Besos posholatosos

🌠Ary