Feliz cumpleaños a mi y a todas las personas que cumplen años

Se actualizó el 04/12/2019 a las 06:46 hora Paraguaya

Naruto estaba en medio de un campo de entrenamiento se notaba que estaba cansado, pero la verdad no le importaba mucho esa situación, estaba en un entrenamiento muy riguroso por parte de Jiraiya que al ver el potencial que tenía Naruto no iba a estar perdiendo el tiempo y más cuando el rubio amenazaba con irse del entrenamiento. Jiraiya hacía que Naruto pelee contra cinco de sus clones, y sin duda alguna el rubio lo hacía muy bien, durante 5 horas fue esta rutina y sin duda alguna las habilidades del rubio son muy peligrosas, el chico no actuaba para dejar inconsciente a sus contrincantes, por su estilo de pelea notaba que el rubio iba a matar. Aunque sus clones desaparecen con un fuerte golpe, el rubio tomaba un kunai y se lo incrustaba en cualquier parte del cuerpo, donde cualquier persona iba acabar muerta por la pérdida de sangre que le generaba la herida. Agregando algo más, el rubio tenía una resistencia envidiable, aún no había parado de entrenar, al parecer el enfrentarse contra el Hyuga, hacía que su enfoque sea mucho mayor a lo que esperaba. Jiraiya miraba a los ojos al rubio y lo único que podía mirar era furia pura, no sabía qué clase de conflicto tuvieron esos dos para que el rubio deseara aplastar al Hyuga.

Naru – El entrenamiento de detuvo cuando esa voz sonó, se trataba de Hinata que llegaba con una canasta de comida, a su lado se encontraba Kurenai que estaba seria como siempre, al parecer ellas dos dejaron de entrenar o se tomaron el día libre para venir a visitar o mejor dicho observar el avance de Naruto, eso iba directamente por Kurenai que estaba pendiente de todo lo que el rubio hacía, al igual que Hinata – Espero no interrumpir su entrenamiento...es que pensé que ibas a tener hambre.

Por supuesto que no...la comida siempre es bienvenida – Jiraiya iba a acercarse a Hinata, pero Naruto le lanzó un kunai, que le provocó una herida en su mano derecha, el sannin de los sapos se dio cuenta al instante que era mejor no seguir caminando, Naruto protegía mucho a la Hyuga y no iba a permitir que un pervertido como Jiraiya se acerque más de lo usual a un ángel como Hinata – Porque actúas tan agresivo...solo me quiero probar la comida de la niña...o estas celoso.

No quiero que toques con tus sucias manos a Hinata y Kurenai - Naruto dejaba en claro las cosas, aunque Jiraiya era un Sannin, él no iba a dudar en atacar con tal de proteger a esas dos mujeres que miraron atentamente – Y más tratándose de un pervertido como tu...que va todo los días a los burdeles por ser un necesitado – El rubio se acercó a Hinata que con cariño le entregó un bocadillo ante la atenta mirada de Kurenai que miraba de mala manera a Jiraiya, ya que seguramente intentaba llevar a esos lugares al rubio Uzumaki – Acaso dejaron el entrenamiento.

Es nuestro día de descanso, no todos tenemos el privilegio de entrenar todos los días sin parar – Hinata inflo sus mejillas, ya que eso era un indirecta hacia Naruto y su resistencia inhumana, que solamente alzó sus hombros ya que no era su culpa de provenir de un clan como el Uzumaki, que podía romper toda las barreras de lo natural si deseaba – y como va con tu entrenamiento...algo interesante.

No entiendo como el vejestorio sea un sannin – Naruto tiró otra de sus palabras sutilmente ofensivas hacia Jiraiya que solamente se quedaba mirando con la mirada gacha, ya que Naruto nunca perdía la oportunidad de restregarle algo en su cara, era como si lo odiara, aunque eso no estaba fuera de la realidad - Aunque tengo que admitir que puede ser un buen maestro...pero no volviera a entrenar con él.

Naruto lo tenía decidido desde hace mucho tiempo eso, es cierto que Jiraiya cuando se proponía puede enseñar grandes cosas, pero tenía algo que siempre lo interrumpió y era las mujeres, cada vez que veía una que llamaba su atención se volvía loco, como un perro en celo. Eso sin contar que la mayoría de las veces tomaba mientras entrenaban y se quedaba dormido por tanto que bebía, eso sin duda alguna hacia enojar al rubio que solamente seguía entrenando en con el anciano, por pedido de Kurenai que miraba atentamente lo que pasaba. Sin duda alguna el rubio no tenía interés en seguir este entrenamiento, y lo podía notar por sus ojos, mientras que Jiraiya ya no sabía que enseñarle, el rubio aprendía de forma veloz todo lo que se le ponía en su camino, era como su padre en ese sentido no importaba los difícil que sea cuando se trataba de Ninjutsus era un experto comparado con los Uchihas, aunque sin el poderoso Sharingan. Y en batalla se parecía mucho a su madre, en sus peleas con los clones noto ese estilo de pelea, adaptable a todo, Kushina tenía un estilo de pelea adaptable, o mejor dicho no tenía un estilo de pelea, sino que ella se adaptaba al terreno al cual entraba. Eso mismo lo hacía temible, el poder copiar el mismo estilo de pelea y superarlo, como también modificarlo hacia que no deseas enfrentarte en un mano a mano a Kushina.

Era una de las razones por las cuales Kushina no se pudo llevar muy bien con los hyugas en su tiempo, claramente sin mencionar a Hiashi y su difunta esposa, que eran muy amigos de Kushina. Claramente alguien que mientras luchaba podía copiar tus mimo estilo, y superarlo era algo que los hyugas consideraban un insulto, por supuesto nadie decía eso en voz alta porque tenían miedo a Kushina, aunque no había nada que lo confirme, el clan Hyuga odiaba al clan Uzumaki, porque ellos eran el mayor enemigo que ellos podían tener. Personas que pueden abrir tranquilamente sus redes de chakra sin problema, por su enorme cantidad de chakra. Y para mala suerte de todos, Naruto era la combinación perfecta, que Konoha no estaba valorando como debía ser, y ya era prácticamente tarde porque al parecer al rubio no le importaba para nada lo que le pasaba a Konoha, solo estaba en esta aldea porque Kurenai y Hinata estaban aquí, pero si algo les pasaba a ella, que iba a ocurrir, quién iba a detener al rubio de irse de la aldea. Aunque el intenta entablar una relación, el rubio no estaba interesado ni siquiera en acercarse a Jiraiya, desde el primer momento dejó en claro que solamente entraba con él, porque Kurenai se lo pidió y nada más.

Sabes...es frustrante – Jiraiya sabía que Kurenai la estaba escuchando, después de todo Hinata y Naruto se estaban alejando del sannin a pedido del rubio, y Kurenai iba a seguirlo ya que no tenía nada que hablar con el sannin de los sapos – ser su padrino...pero que te odie

Fin Del Capitulo

Espero Que Les Guste

Voten Y Comenten 

Gracias