Extra 2

Pov Angelitza:

Estoy emocionada, veré a mi querido hermano, este año apenas y lo he visto un par de veces pues se mudó a una isla tropical a inicios del año, realmente lo extraño ya que éramos muy unidos. Al bajarme del avión me dirijo a una cafetería, me siento hambrienta. De inmediato noto el cambio climático y me deshago de la bufanda y el abrigo. Una brisa fresca agita mis cabellos, pero ese viento es bastante agradable y el calor del sol comienza a sentirse de inmediato sin importar que estoy en un aeropuerto con aire acondicionado. A diferencia de mi tierra que siempre esta nevada el cambio es drástico. Olvido el café caliente que estaba por pedirme y ordeno un Moka helado, un frappe, este decorado con crema batida y galletitas, se ve delicioso. Me siento en una cómoda silla acolchada y marco el número de mi hermano para avisarle que ya le estoy esperando. Recibo su respuesta, ya está en camino y llegara en unos minutos.

No tarda mucho en aparecer, luce guapísimo debo admitir, se ha bronceado un poco, lleva puesto un sencillo pantalón de mezclilla y una playera azul sin estampado, se ve alegre. Corro a su encuentro y nos abrazamos, meses sin verlo. Él me alza con facilidad y me gira en el aire.

─Pequeña, No sabes qué alegría me da verte. Estás preciosa.

Me da un par de vueltas más antes de dejarme en el piso. Levemente mareada le lanzo un golpe al hombro.

─Idiota, la gente pensara que somos novios.

─No me gustan las chicas, soy gay, no incestuoso.

Hace poco nos revelo su sexualidad, fue una sorpresa, la más escandalizada fue mamá, papá se encogió de hombros y dijo que ya lo veía venir, no sé cómo o porque, puesto que nunca dio pistas de ello, él no actúa como un típico gay, no viste, habla o se comporta como tal. No, nada de nada, cero pistas y ha tenido novias. Aun así, le di mi apoyo completo, pero sigo pensando en porque papá se lo intuía, En serio mi padre es raro, siempre lo he dicho.

A mamá no le gustó la idea, dramatizo un poco, lloro, le pregunto si no era solo una etapa, y luego pregunto si no era bisexual. Podría aceptar eso, no estaba mal que le gustasen los chicos si también le gustaban las chicas, ella quería una nuera y nietos. Jediel dijo que no, solo los chicos y nada más, las novias habían sido sólo pantallas, Mamá se resignó. Ella no es homofóbica y como artista de hecho conoce y trabaja con muchos homosexuales, tiene varios amigos así, pero se le rompió la burbuja de que su hijo se casara con una linda chica y le diera nietos. Recuerdo que me miro y me dijo casi suplicante. Por favor no me digas que eres lesbiana, se me hizo cómico, le dije que no y suspiro diciendo ahora. Bueno, tú serás quien me dé nietos.

Ahora sí que fruncí el ceño, si bien soy hetero, no tengo muchas ganas de ser madre, de hecho, no tengo nada de ganas, quizá le lleve un cachorro como nieto. Lo siento mama, pero...No hay como ver el video de un parto como para tener eso en la mente como un muy fuerte anticonceptivo. No, no, no quiero embarazarme, ni niños. Lo siento mami.

Bueno volviendo al tema se me hacía raro la facilidad y felicidad con la que Jediel hablaba sobre su orientación sexual. Ambos subimos a su auto y él me llevo justo a su nuevo hogar, nada más estacionarse y antes de que bajásemos del auto me tomo de la mano y me miro de forma extraña, había miedo, nervios, remordimientos.

─Puedes molestarte mucho conmigo, en serio, puedes ponerte furiosa, pero espero que me dejes explicarte y por favor no me odies.

Eso me dejo sorprendida, pero asentí. Bajamos del auto y él abrió la puerta de su casa. La cual a simple vista era bastante pequeña a comparación de la mansión familiar.

Nada más entre y pude darme cuenta que la casa era acogedora y sencilla, pero al momento salió una persona de una de las habitaciones y se encamino a la sala a recibirnos. Me quede atónita al verlo. Podría decir que me congele, aunque no hubiese frio, que me petrifique, sentí tantas cosas, sorpresa, incredulidad, un fuerte mareo. Era él, él, Raven. ¿Acaso estaba viendo visiones?

Él me sonrió tímidamente y se acercó más.

─Hola ángel.

No, no puede ser, no era real, estaba enloqueciendo. Esa voz tan suave y gentil, esa mirada, el cuervo, mi querido cuervo, con quien no había dejado de soñar con rasgos de culpa y tristeza, con aquel accidente, con todo lo que conllevaba, pero allí estaba él, caminando hacia mí. Tomo mi mano y sentí su calor. Era real, estaba vivo, vivo. Lágrimas poblaron mis ojos y se deslizaron por mis mejillas.

─ ¿Co...Cómo es posible?

─Te oculté que estaba vivo, fui...Fui egoísta. Lo siento hermana yo....

Ahora entendía porque me dijo aquello. Sentí una furia que se transformó en agresión. Mi palma se había estampado con total fuerza en la mejilla de mi hermano. Mis ojos aun desbordando lágrimas, mis labios temblorosos y mis manos apretadas en puños. Puños que deseaban impactar contra ese miserable traidor, ese desgraciado, ese...De pronto no veía a mi hermano de la misma forma. El pensar en lo horrible que había sido ese año con toda la tristeza y las pesadillas, no, definitivamente tenía que golpearlo más. Impacte mis pequeños puños contra su solido abdomen varias veces, él no hizo nada por esquivarlos, pero sé que esos golpes me dolieron más a mí que a él. Finalmente me calme un poco.

Ni siquiera fui consciente de que Raven se había ido y que recién regresaba con una taza de té en las manos, mismo que me ofreció.

─Te ayudara a calmarte.

Después desvió la mirada a Jediel.

─Vete a hacer las compras para la cena, cuando regreses estará más tranquila, deja que le explique. Te odiara un poco menos al rato, lo prometo. Tomate tu tiempo y compra cosas ricas para que pueda prepararles algo delicioso. No olvides la cosas dulces y picantes.

─ ¿Tú cocinas?

─Sí, me encanta, me la paso viendo programas de cocina y tutoriales en YouTube y haciendo guisos. Tuve muchas carencias de comida, así que ahora que puedo tener comida a diario realmente disfruto preparándola. Jediel siempre me compra ricos ingredientes. Llevo un año sin pasar hambre y eso es hermoso.

Aunque él resplandecía al contarme eso, yo sentí mucha tristeza imaginándolo hambriento y necesitado.

─Jediel porfa trae también algo para beber, ya se está acabando el té de lavanda que me gusta y trae algún vino para esta noche.

Mi hermano asintió y salió de la casa, no sin antes decirme nuevamente un "lo siento"

Al irse Raven, actualmente, Azor me conto como había estado la situación. Me pidió tiempo y comprensión, paciencia para escuchar todo, escuchar la historia desde antes de la mentira de Jediel, desde antes de su propia mentira hacia mí, me pidió perdón en repetidas ocasiones durante su relato. Empezó por contarme su historia. Sabia un poco a grandes rasgos por cosas que mi hermano me había referido, como el que él era un chico de alquiler y que estaba contratado para dañarme, yo sabía por los sucesos de aquella noche que su vida había sido difícil. Pero no era lo mismo escucharlo de su boca, me hablo de como termino siendo lo que era, del abuso que sufrió desde pequeño y de cómo la noche que conoció a mi hermano fue especial para él. Había decidido nunca más volver con ellos sin importar las consecuencias. No tener ya ninguna comida al día a menos que consiguiera cliente, no tener un techo, temor a ser encontrado y castigado, pero a la larga con todo y eso había experimentado un atisbo de libertad al ya no tener que rendirles cuentas o estar bajo su yugo.

Me dijo que había extrañado a mi hermano, que había deseado verlo de nuevo en muchas ocasiones. Excepto claro el día que lo vio, porque eso altero sus planes y su mente y todo termino como conocía. Entonces me dijo las razones de mi hermano para mentir y apartarlo. Intento justificarlo, pero yo me sentía enfadada y timada. Siempre he querido y confiado en Jediel, pero esta vez se pasó. Maldito desgraciado, ¿quién se cree que es? Ahora mismo me siento como Yuan Ru, con la diferencia de que yo no soy una tonta como ella, pero es lo mismo, mi pinché hermano mayor al puro estilo de Yuan Zong, me comió el mandado. Y pensar que me burle de ella cuando leí la novela, bendito Karma que me pasara eso.

Suspiro frustrada, aunque no es exactamente lo mismo, si soy honesta, él lo vio primero, él se enamoró primero y yo no puedo decir que estuviera realmente enamorada, más bien estaba ilusionada con la idea de tener un romance, y no es el que mi hermano se haya quedado con él lo que me irrita, si no la forma en que lo hizo, que me mintiera, que yo le haya llorado maldita sea. Ya sé cómo sintió Thor cuando vio de nuevo a Loki y le dice "llore por ti"

─ ¿Quieres a Jediel? ─

─Eso creo, no tengo con que comparar, pero creo, creo que lo amo.

─ ¿y por mí que sientes?

─Difícil de decir, te quiero supongo, eres un ángel, yo por un momento desee ser un chico normal y merecerte, tener un romance contigo, pero creo que fue más una fantasía. Te quiero, pero es un querer distinto al que siento por él.

─ ¿Te gustan más sus besos?

─Es diferente, a ti solo te bese dos o tres beses, fue lindo y muy dulce, a él ...bueno más bien él me ha besado muchas veces y es distinto, picante e intenso. Es avasallante, pero también es bastante tierno.

─ ¿Si te pidiera que me eligieras a mí, que lo dejases qué harías?

─No lo odies, perdónalo por favor, él te adora, de verdad te adora. Sabe que hizo las cosas mal, pero fue tonto e impulsivo.

─Vaya, sí estas enamorado de él.

─Lo siento, ¿te molestaría ser mi cuñada?

─Para eso tendrían que casarse y no ser solo ... ¿que son novios o amantes?

El tímidamente sonrió y metió su mano en el bolsillo de su pantalón para sacar una argolla, me la enseño.

─Dijo que se llama anillo de compromiso, que era una promesa y que en el futuro nos casaríamos si yo quería, dijo que esperara, no pronto porque quiere tiempo para que le perdones y tú seas la madrina. No entiendo muy bien que significa. Yo no estoy seguro de ser lo suficiente bueno para él. Tomé el anillo, pero no dije sí, aunque quiero decir sí, tengo dudas, tú y tu familia saben lo que soy, no creo que me quieran para él.

─No, yo te quería para mí. Y sabemos lo que hacías, eso no es quién eres, eres un buen chico y me alegro que ahora seas feliz. Haz feliz al imbécil de mi hermano, no te merece, pero está loco por ti. Lo vi en su mirada y el que me hiciera eso a mí, a su adorada niña, lo prueba. Se que me ama, pero veo que te ama más. Eres así como su alma gemela.

Seguía molesta con mi hermano, pero lo entendía y me alegraba que raven, no, que azor estuviera bien y feliz. Él se lo merecía, me alegraba que si hubiera vivido para conocer y disfrutar del amor. Cuando Jediel volvió lo trate con enojo, pero sin odio. Sé que él se dio cuenta. Me abrazo y me dijo "perdón y gracias."

─Quiero que se casen en diciembre. El próximo año. Y quiero organizar la boda.

Lo sé perdí, pero gane un lindo cuñado y sé que un día tendré mi propio amor. Por si las dudas ya adopté un gato.