Soledad
Era una tarde soleada cuando el marido llegó a su casa para poder cenar junto a su esposo, pero en el momento en que llegó, lo único que le recibió fue el silencio sepulcral entre las paredes de la casa. Su mente casi colapsa porque el pequeño doncel simplemente había desaparecido.
La casa de los Park era una de las más bonitas en el vecindario con un jardín delantero sumamente llamativo que fue ganador de varios premios al igual que la misma casa. Un hogar simplemente perfecto dónde reinaba el amor entre Park Chanyeol y Park Baekhyun, un matrimonio con más de cincos años de duración que siempre había sido la envidia de sus amigos, conocidos y familiares.
Ahora se suponía que el doncel debía estarlo esperando con la cena como era costumbre, pero simplemente no había nadie; Chanyeol se apresuró en cada habitación de la casa de tres pisos, rebuscó por todo el terreno, pero simplemente no había nadie.
Tomo su celular para llamar al doncel, sintiéndose tonto por no haber hecho eso en primer lugar, un poco calmado seleccionó el número de su esposo, pero simplemente sonaba y sonaba sin una respuesta lo que volvió a incrementar los nervios en su piel. Cuando comenzó a caminar alrededor, se dió cuenta que el celular de Baekhyun estaba sonando junto a la estufa.
Había un manto helado de desesperación en su cuerpo ya que había decidido esperar un poco pensando que quizá su esposo simplemente haya ido a algún lugar cercano, que volvería pronto. Se sentó en el sofá mordiendo la uña de su pulgar, pero luego decidió no esperar más así que decidió ir hacia su auto para comenzar a buscarlo por los alrededores.
Sus piernas temblaban y su mente estaba comenzando a tener escenarios bastantes malos, sacude su cabeza intentando quitar aquellas imágenes desagradables y decide enfocarse en su entorno mirando si Baekhyun estaba cerca caminando. Se aparca junto a un parque para ver si lo veía por ahí.
Su corazón latía con rapidez y su pie no paraba de golpear el tapiz del suelo del auto mientras que su estómago se removía de manera desagradable, necesitaba encontrar a su esposo o en cualquier momento entraría en una ataque de pánico.
Después de algunas horas volvió a su casa pensando que quizá Baekhyun se encuentra ahí esperándolo; sonríe de manera nerviosa pensando que quizás estaba exagerando en su manera de reaccionar. Ahora mismo el pequeño doncel debía estar sentado en la mesa esperando a que él llegara, se decía eso una y otra vez para poder tranquilizarse.
Al llegar, se quedó un rato en el asiento y mira su mano con aquel aro dorado en su dedo anular que representaba su matrimonio con el amor de su vida, su pastelito, como solía llamarlo de cariño.
Sale del auto para cerrar con llave y luego camina lentamente a la puerta de entrada a la casa que estaba en la cochera; pasa su saliva con fuerza por el nerviosismo de no saber que encontrar. Antes de ir al comedor recoge bastante aire por su nariz y exhala lentamente para luego ver qué la mesa estaba vacía. El sentimiento de miedo se encontraba nuevamente albergando su cuerpo.
Quizá estaba en la sala o en la cocina, se dice de nuevo así que va hacia allá encontrandose con lo mismo; estaba vacío. Comenzó a ponerse ansioso y una sensación de picor inundó sus piernas, luego se dió cuenta que estaba corriendo por las escaleras, los pasillos y abriendo puertas como un loco. Sin notarlo ya habían lágrimas bajando por sus mejillas.
—Baekhyun, —empieza a llamar, —Baekkie amor, si estás jugando a las escondidas ya ganaste, por favor sal, —dice agitado mientras camina desesperado por la casa. —¡Baekhyun! ¡Baekhyun! ¡Baekhyun! —grita varias veces sintiéndose perdido.
Cuando dió la media noche decidió llamar a la policía, pero está le dijo que no podían hacer nada hasta pasadas las veinticuatro horas de desaparecido por lo que la chica que atendía se ganó varios insultos por parte de Chanyeol. No podía creer que aquellos tipos fueran tan incompetentes, ellos esperaban encontrar un cadáver si tenían que esperar tanto para empezar a buscar.
Al principio pensó que quizá fue un secuestro ya que ellos tenían bastante dinero, pero luego supuso que si así fuera entonces ya lo habrían llamado para pedir una recompensa, pero no. El teléfono no había sonado en ningún momento y su celular tampoco.
En ese momento recuerda algo que no había venido a su mente hasta ahora, Baekhyun le había dicho que su madre lo había invitado a comer ese día para celebrar que su hermana se iba a casar; comienza a reírse porque él estaba ahí haciéndose una película y seguramente su esposo estaba con sus padres, aunque le parecía raro que haya dejado su celular ahí.
Con ese pensamiento fue a dormir ya que era común en Baekhyun que cuando iba a visitar a alguien de su familia se quedará a dormir con ellos aunque solía avisarle, quizá solo se le había pasado y no quería interrumpirlo. Seguramente en la mañana ya estaría de vuelta entre sus brazos.
A la mañana siguiente Chanyeol despertó por la luz fuerte del sol quemando su cara, se había olvidado de poner la cortina en la ventana. Sacude su cabeza y se sienta estirando sus brazos; al voltear el cuello se dió cuenta que el lado de la cama que comúnmente era de Baekhyun ahora se encontraba vacío por lo que Chanyeol empuño su mano en la manta.
Cogió su celular viendo la hora y se dió cuenta que ya era casi medio día así que llamo a su secretaria para decirle que tampoco iría el resto del día; no estaba de ánimos para ir a trabajar.
Fue a la planta baja para ir a ver si el doncel estaba por ahí, pero nada. Decide llamar a su suegra para preguntar porque Baekhyun aún no había venido a casa; cuando marca el número esperando a que la señora coja el celular, va hacia la nevera para buscar algo que comer y se encuentra con que había un pastel que parecía fresco, luego revisa el resto de la cocina viendo que habían ollas con comida en el horno y una bandeja llena de cupcakes.
—Hola, Chanyeol, —saluda la mujer sacándolo de su revisión.
—Hola, señora Byun, la llamaba para preguntarle qué a qué hora viene Baekhyun, —dice mientras saca las ollas para servirse un poco de comida.
—¿Baekhyun? ¿A qué te refieres? ¿Él no está en casa? —pregunta ella extrañada.
Chanyeol en ese momento se tenso y se quedó en silencio por unos segundos siendo llamado de nuevo por su suegra, —¿No iban ayer a celebrar que mi cuñada va a casarse? —pregunta con algo de miedo por la respuesta.
—Oh sí, pero Baekhyun dijo que tenía algo importante que decirte así que decidimos cambiar la fecha al fin de semana, —fue lo que respondió e inquieto más a Chanyeol. —¿No está en casa?
Él no sabía que responder a eso, solo sabía que Baekhyun no había ido a dónde su madre y tampoco estaba en su casa. Su cuerpo comenzó a temblar dejando caer su celular al suelo el cual se apagó por el golpe dejando con la palabra en la boca a la señora Byun.
Chanyeol intentaba tranquilizarse diciéndose que quizá había ido a dormir a la casa de algún amigo, pero los únicos amigos cercanos donde podría quedarse a dormir era el matrimonio Kim y Oh, los dos se hallaban afuera del país así que no era probable que esté ahí.
Cuando dió la tarde y aún no había ni la sombra de Baekhyun, Chanyeol entró en una crisis de desesperación que lo hizo romper todo lo que había a su paso; tiro la mesa, rompió todo lo que estaba cerca de la cocina y empezó a correr por la casa clamando el nombre de Baekhyun sin recibir nada más que el silencio absoluto.
—¡Maldita sea! ¡¿Dónde estás?! —cae de rodillas y luego impacta su puño contra la pared.
Las imágenes horrendas de escenarios de terror que había estado tratando de evitar ahora eran más claras y gráficas, que tenía ganas de gritar desesperado. No sé le ocurría dónde podría estar su esposo, es decir, Baekhyun era alguien que sí, salía de vez en cuando sin decirle en algunas ocasiones, pero desde que se habían casado nunca había dormido en otra parte sin él. Además, su suegra dijo que tenía algo que decirle ¿Qué era? ¿Quizá se enamoro de alguien más y ahora se fue con él? Sacude su cabeza. Baekhyun nunca haría algo tan bajo como abandonarle, le pediría el divorcio primero si ese fuera el caso.
Volvió a salir en su auto para recorrer otra vez las calles, pero está vez mirando con más atención los callejones y las veredas por dónde pasaba la gente. Nada le daba un indicio de que Baekhyun estuviera cerca; sinceramente no valía la pena preguntarle a sus vecinos porque la mayoría eran personas bastante apartadas que solían salir en sus autos ignorando al resto.
Al pasar las horas volvió a oscurecer rápidamente a percepción de Chanyeol y tuvo que volver; en esta ocasión fue hacia el patio dándose cuenta de algo raro, había un pañuelo color crema en el suelo, era raro porque ni él ni Baekhyun tenían algo así; lo sabía porque cada vez que su esposo compraba ropa le encantaba mostrársela por más mínima que sea y eso no lo había visto jamás; decidió no cogerla.
Fue directamente al teléfono para volver a llamar a la policía y está vez le dijeron que iban a enviar una patrulla para que revisara lo que había sucedido. Chanyeol espero sentado en su sillón mientras veía con angustia el cuadro grande empotrado en las pared frente a él con la foto de ellos dos en su boda.
Cuando la policía vino, él fue rápidamente a abrir y lo saludaron para luego entrar en la casa; uno de ellos se quedó hablando con él mientras el otro revisaba la casa. Chanyeol contestaba impaciente cada pregunta que sentía que no los llevaba a ninguna parte, pero suponía que eso era parte de la búsqueda de su esposo; tenía esperanza en que su pequeño fuera encontrado pronto por ellos.
Se había equivocado, habían pasado varias semanas y no había ni una mísera pista del paradero de su esposo, nada; incluso le regañaron por haber tocado la casa ya que había alterado la escena de un posible crimen. Hasta llegaron a sospechar de él lo que le enfureció bastante, tuvo que mudarse con sus padres mientras ellos investigaban lo que parecía poco creíble.
Tuvo que contarle tanto a su familia como a la de Baekhyun lo que había sucedido y se ganó un golpe por parte del señor Byun ya que alegaba que seguramente fue por su culpa, que como marido tenía la obligación de haberlo protegido y no lo hizo. Todos empezaron a discutir y la hermana de Baekhyun fue quien tuvo que detener todo ya que no era momento para ese tipo de cosas.
Después pudo volver a su casa aunque supuso que no fue una buena idea ya que todo lo que recordaba a él, por supuesto que lo hacía, era el hogar de ambos. Se sentía como una mierda, quizá si hubiera llegado más temprano su esposo seguiría ahí. ¿Quién podría haberle hecho algo malo a su pequeño y frágil doncel? Si él era un amor de persona que no le hacía daño a nadie.
Sin darse cuenta, en el segundo mes de búsqueda había empezado a beber tratando de olvidar lo que sucedió, ya se había cansado de llorar cada noche abrazando la ropa de su amado y despertar solo para encontrarse con un espacio vacío recordando que no sabía dónde estaba él.
Había descuidado su trabajo ya que no podía concentrarse y había comenzado a hacer las cosas mal por lo que su hermano menor estaba haciéndose cargo de la empresa ahora. Su madre le decía que había que tener paciencia, que pronto lo encontrarían, pero sabía que ella no estaba segura de su afirmación al ver su cara de tristeza.
Esa noche se cumplían tres meses desde la desaparición de Park Baekhyun, ahora ya estaba incluso en los diarios, pero seguía sin haber pistas de su paradero. Estaba en el balcón mirando el patio, la piscina en la que a Baekhyun le encantaba nadar por horas hasta que sus dedos se arrugaban en forma de pasas, sonríe al recordar cómo al doncel le gustaba pasar sus dedos por su rostro para que sintiera la textura.
Con las manos temblorosas agarro una caja de cigarrillos para encender uno y prenderlo poniéndolo dentro de sus labios; hace mucho no había degustado el sabor de la nicotina, cierra los ojos sintiendo como de estos caían las usuales gotas saladas.
—Channie~ no hagas eso, —puede escuchar la dulce voz de Baekhyun y se gira sorprendido.
En el momento en que se da la vuelta puede ver a Baekhyun parado con un camisón largo y su cabello despeinado, el cigarrillo se cae de sus labios, pero cuando cierra los ojos por un segundo, al abrirlos puede darse cuenta que ya no estaba.
—Baekkie, ¡Baekhyun! —llama mientras entra a la habitación, pero no encuentra nada. —Pastelito, —mira para todas partes, entra al baño, a los armarios y sale, pero no hay nada.
Al día siguiente sucedió algo parecido ya que cuando estaba bañándose pudo sentir claramente unas manos suaves abrazar su pecho desde atrás y al girarse solo se topo con la pared. Pensaba que quizá las malas noches le estaban pasando factura y era por eso que veía y sentía cosas que no estaban ahí.
En una de las tantas noches dónde se embriagaba hasta la médula, se había quedado dormido en el sofá y fue entonces que la melodía dulce de un piano lo trajo a la realidad, el piano de la casa estaba sonando claramente así que tropezandose fue directamente al tercer piso donde estaba aquel objeto. Era el último cuarto junto a un mirador que daba al jardín, a veces cuando Baekhyun no podía dormir iba a tocar hasta que se relajaba y luego volvía a la cama. Sin embargo, cuando vio la imagen de él tocando no podía creerlo; de inmediato fue a abrazarlo, pero la imagen desapareció haciéndose humo y la música paro.
—Channie ¿Por qué no me protegiste? —dice con dolor en su voz mientras llora estando de rodillas con toda la piel golpeada, —¡Todo esto es tu culpa! ¡Te odio!
Chanyeol despierta de golpe agitado y con la piel perlada de sudor, traga saliva y mira al frente dándose cuenta que había tenido una horrible pesadilla, aún el miedo se encontraba recorriendo su cuerpo así que intento respirar profundamente, pero solo pudo terminar gimiendo del dolor por no tener a su esposo a su lado.
Cuando le contó a su madre lo que le estaba pasando, esta solo le dijo que posiblemente era por la tristeza, que sería buena que consultara a un profesional para que le ayudará con ello. Chanyeol no la escucho, él no quería hacer nada, pensaba que aunque no fuese real, aquellas alucinaciones eran lo más cercano a Baekhyun que tenía y no iba a deshacerse de ello.
—¿Por qué no contratas a un investigador? —fue lo que le pregunto Sehun cuando le contó. —La policía es inútil, podrías probar con uno que conozco.
—¿Tú conoces a ese tipo de personas? —frunce el ceño extrañado.
—Sí, algunas personas de mi familia han sido secuestradas por dinero así que mi abuelo contrato a un investigador que resultó ser muy efectivo, —dice él tranquilamente.
—¿Podrías pedirle que haga esto? Si no encuentro a Baekhyun haré alguna locura en cualquier momento, —explica desesperado mientras le da una calada a su cigarrillo.
—¿Estás fumando? Claro, puedo hacerlo.
—Sí, ¿Por qué?
—Baekhyun lo odiaba ¿No?
—Pero él no está aquí, —susurra afligido. —¿Necesitas algo para aquel tipo? Claro, aparte del dinero, —dice lo obvio.
—Él irá a tu casa, quizá pueda encontrar algo allá, —le dice.
—Espero, la policía no encontró nada, —suspira y mira por unos segundos su cigarrillo antes de tirarlo al suelo para aplastarlo con la suela de su zapato.
—La policía es inútil y floja, —espeta de mal humor. —Él estará allá pronto, no te preocupes. Sea como sea, él encontrará a Baekhyun.
Después de un rato cortaron la comunicación y Chanyeol deslizó su espalda por la pared solo para mirar alrededor, se da cuenta que su casa se sentía demasiado grande para él solo; era mejor cuando Baekhyun alegraba el lugar con sus cantos improvisados y sus bailes dónde movía su cadera de maneras graciosas.
Aún recuerda cuando se conocieron en la playa, él omega había estado perdido ya que por distraído se había separado accidentalmente de su grupo de amigos; a Chanyeol le pareció tierno así que se acercó y empezaron a hablar hasta que terminaron tomando unas copas en uno de los bares cerca del mar. Baekhyun lo invito a bailar y supo que había quedado hechizado cuando vio esas caderas moviéndose cerca de él, su sonrisa coqueta, sus ojos brillantes que lo miraban con diversión y aquellas manos suaves que lo tocaban con gentileza.
Sonreía como tonto con lágrimas en los ojos rememorando cuando le pidió ser su novio y el otro había empezado a gritar emocionado hasta que se lanzó a sus brazos dándole un beso lleno de cariño. Llora con más fuerza al recordar cuando Baekhyun se desmayó en la ocasión en que le pidió matrimonio en la misma playa en la que se conocieron.
—Baekhyun ¿Dónde estás? ¿Por qué no vuelves? —mira hacia arriba sintiendo como sus mejillas se empapaban, —te necesito, —susurra con el dolor impregnado en su voz. —regresa, —su voz se apaga mientras baja la cabeza y recoge sus rodillas a su pecho con sus brazos.
—Te amo, Channie, siempre te amare, —escucha un suave susurro mientras empieza a dormirse.
Al día siguiente escucho el sonido del timbre entre sueños y con cada timbrazo el iba volviendo al mundo real hasta que se despertó completamente dándose cuenta que alguien llamaba a la puerta. Sacude su cabeza y se levanta adolorido por haber dormido sentado, luego se dirige a abrir.
—Buenos días, señor Park, soy Andy, me manda el señor Oh, —se presenta cuando ve al hombre despeinado y demacrado delante de él.
—Ah sí, pase, —se hace a un lado mientras frota uno de sus ojos quitándose el sueño.
Después se sentaron y él le ofreció algo de tomar y acepto así que fue a preparar dos tazas de café, cuando estuvieron listas volvió para sentarse. Se sentía bastante nervioso ya que frente a él estaba la única esperanza de poder encontrar a su pequeño.
—¿Hace cuánto desapareció? —empieza a preguntar.
—Un poco más de cinco meses, —baja la mirada pensando que ya era tanto tiempo sin su doncel.
—¿La policía tiene alguna pista que le haya hecho saber? —se cruza de piernas y toma un poco de su bebida.
—Nada, —se encoge de hombros, —absolutamente nada, no entiendo cómo son tan incompetentes.
—Eso es extraño, usualmente siempre hay algo, aunque sea pequeño, —entrecierra los ojos. —¿Puedo revisar la casa?
—Claro, aunque no creo que encuentre nada, ya ha pasado mucho tiempo, —suspira.
—Siempre hay algo, aunque ¿Hubo algo extraño cuando usted noto que él no estaba? —pregunta mientras anota algo en una libreta.
—Bueno, creo que son cosas sin importancia-
—Todo es importante, —dice mirándolo a los ojos.
—Bueno, ese día se suponía que él iba a celebrar con su madre y sus hermanas que una de ellas se iba a casar, pero cuando llame a la señora, ella dijo que mi esposo tenía algo que decirme ese día y por eso canceló la celebración, —dice frunciendo el ceño intentando pensar en que sería.
—¿Tiene alguna idea de lo que quería decirle? —pregunta mientras golpea la parte de atrás de su bolígrafo contra su labio.
—No, no se me ocurre nada, —se encoge de hombros. —He intentado pensar en que, pero no sé, —muerde su labio inferior con nerviosismo.
—¿Algo más que haya llamado su atención? —sigue indagando.
—Sí, había un pastel fresco en el refrigerador, comida recién hecha con una bandeja de cupcakes en el horno; de hecho siguen ahí. No he tenido ganas de limpiar, —dice con tristeza. —Además su celular estaba junto a la cocina y otra cosa, —el otro hombre levanta su mirada luego de escribir, —había un pañuelo color crema en el jardín trasero, creo que sigue ahí ya que no lo quise coger pensando que la policía querría verlo, pero al parecer no era algo importante según ellos.
—¿Podría ser de su esposo?
—No, él no usaba pañuelos y siempre me mostraba todo lo que él compraba, nunca ví aquella prenda antes, —se encoge de hombros.
—¿Puedo verla? —increpa ganándose un asentimiento.
Ambos fueron al patio y ahí estaba el pañuelo tirado, Andy saco una bolsa y se coloco un par de guantes para luego poner la tela dentro, después también comenzó a tomar huellas de cosas como la bandeja de bocadillos, el celular y otros objetos que no habían sido tocados; le resultó bastante complicado porque habían muchas huellas de distintas personas.
El hombre busco por toda la casa cosas que le dieran alguna respuesta, aunque no fue descuidado, él investigo de manera cautelosa y encontró algo interesante.
—¿Usted sabía de esto? —pregunta mientras ve un paquete de fotos y cartas escritas con pedazos de letras recortadas.
—No… —sacude su cabeza al ver que eran algo así como cartas de amor.
"Serás mío, no podrás hacer nada por evitarlo" fue una de ellas y le seguían más parecidas, "no juegues conmigo, me perteneces"
—¿Sabe si alguien estaba interesado en su esposo? —dice mientras sigue viendo lo que había dentro de la caja.
—Bueno, él es alguien muy atractivo y tiene una personalidad llamativa, —se encoge de hombros. —Podría ser cualquiera.
—Pero alguien que usted sepa, no sé algún conocido que haya estado adulando mucho a su esposo o una persona a la que frecuente como algún instructor o amigo, —ve algunas fotos donde estaba el doncel saliendo de algunos lugares y con diferente ropa en cada una. —Un exnovio quizá.
—Bueno, tiene exnovios, pero no son de acá. Antes de conocernos, él vivía en otro país, —explica mirando como al parecer alguien había estado acosando al omega desde hace bastante tiempo. —No tenía instructores de nada ya que no le gustaba salir de casa solo o que alguien entre acá, era algo bastante reservado en ese tipo de cosas.
—¿No sabe si algún amigo pueda saber algo? A veces los donceles y las mujeres se sienten más cómodos hablando de algunos temas entre ellos que con sus maridos, sin ofender, —dice rápidamente al ver el seño fruncido del señor Park.
—Bueno, no creo que Baekhyun me haya ocultado alguna vez algo, pero no voy a ponerme necio ahora, —suspira dejando caer sus hombros, —él tiene un amigo muy cercano con el que se conoce desde la infancia, pero él no vive aquí.
—Podría llamarlo, —sugiere.
Chanyeol asiente y se levanta para coger uno de los teléfonos de la casa, el que estaba más cerca en ese momento, después regresa mientras lo marca intentando acordarse de todos los números. Luego de un momento empieza a sonar.
—¿Aló? ¿Baekhyun? —pregunta con las voz algo somnolienta.
—No, soy Chanyeol, —responde. —Quiero hablar de algo contigo, Minseok, —dice algo nervioso.
—Por supuesto, ¿Qué pasó? —pregunta más despierto ya que no estaba acostumbrado a hablar con él.
—Tú sabes si Baekhyun tenía algo importante que decirme o si le pasaba algo que le molestara, —pregunta mientras mordisquea su mejilla interna.
—Eh, no claro que no, —dice aunque se nota el nerviosismo en su voz. —Lo que sea que tenga, te lo dirá él.
—Minseok, Baekhyun desapareció hace más de cinco meses y no sabemos nada de él, —finalmente dice sabiendo que Minseok no iba a delatar algo sobre su amigo.
—¿Qué? —dice luego de unos segundos de silencio, —¿Estás bromeando, verdad? —jadea impresionado, —¿Qué pasó?
—Un día simplemente se esfumó, la policía no ha podido dar con él y necesito saber todo lo que pueda, —traga saliva sintiendo de nuevo aquel miedo gélido en su piel.
—No sé que podría ayudar, —se escucha su voz entrecortada, —lo único que él me dijo fue que… —se limpia la nariz, —estaba esperando un bebé, que te lo iba a decir en una cena, aunque no me dijo el día, —se puede escuchar como había roto en llanto.
—¿Un bebé? —susurra y el teléfono casi se cae de sus manos, pero Andy pudo cogerlo a tiempo.
—También me dijo que… que había un tipo que lo había estado molestando desde hace unos meses, pero no me quiso decir quién era, —vuelve a limpiar su nariz, —que tenía un poco de miedo, pero que podía solucionarlo así que no quería decirle a nadie para no preocuparlos.
—¿No te dió alguna pista? —susurra aun procesando que iba a tener un pequeño mini Baekhyun.
—Solo me dijo que le mandaba regalos desagradables, pero que los quemaba cuando tú te ibas a trabajar, —comienza a toser, —dijo que si no podía controlarlo entonces te diría.
Luego Chanyeol le agradeció porque Minseok no sabía nada más que eso, le dijo que cualquier cosa que supiera lo mantuviera informado y Chanyeol le dijo que sí, ahora puso el teléfono junto a él, su mirada estaba perdida.
—Mi pequeño está en cinta, —susurra de nuevo pensando en las cosas terribles que podría estar pasando y no pudo evitar romper en llanto, —y no puedo hacer nada para encontrarlo.
—Bueno, ya sabemos que parece ser un secuestro por obsesión, —dice él mientras mira al hombre grande a su lado derrumbarse. —Tengo lo necesario, iré a seguir investigando para dar con su paradero. —Se levanta para dar un palmada en el hombro del señor Park, —tranquilo, lo encontraré, —luego de eso se va.
Chanyeol se quedó ahí destrozado pensando en que no había podido cuidar a su esposo ni a su bebé. Entonces era eso lo que Baekhyun quiso decirle, era por eso eso el pastel y la comida; grita rompiendo su garganta sintiendo unas incontrolables ganas de morir en ese momento, él no quería seguir estando sin su esposo.
Intento respirar pensando que quizá aquel tipo si logré encontrar a Baekhyun por lo que intento quitar esos pensamientos de su cabeza hasta que se quedó dormido sobre la alfombra soñando en Baekhyun caminando por el jardín luciendo una hermosa barriga de embarazo y mirandolo con aquellos ojos coquetos que tanto amaba.
Pasaron los días y el investigador el iba diciendo lo que iba encontrando poco a poco, que en realidad no era un caso tan complicado y el hecho de que vivieran en un pueblo no tan grande ayudaba bastante, también que habían unas cuantas personas que sabían lo de Baekhyun y el hombre que lo acosaba.
Pasaron un poco más de dos semanas y ahora Andy tenía bastante información sobre la desaparición de Park Baekhyun, de hecho le asombraba mucho saber que la policía no había podido encontrar nada por lo que también se puso a investigar sobre eso. Tenía bastantes amigos dentro de la policía nacional y agentes gubernamentales por lo que tampoco fue demasiado difícil, aunque le tomo dos semanas más.
—Realmente esto es increíble, —se ríe al ver unos papeles en sus manos mientras conversa con alguien.
—Por eso es que el caso de Park Baekhyun no avanzó en lo más mínimo, —responde esa persona.
—¿Sabes dónde podría estar? —pregunta mientras lee.
—Tiene algunas propiedades dónde no podría estar, son demasiado públicas, —contesta, —no es la primera vez que sucede… Aunque hay una propiedad de su abuelo en una vía a otra ciudad, al parecer la usaban para cazar hasta que se prohibió y luego quedó abandonada, —explica mientras teclea.
—Llamaré a Leo, mándame las coordenadas, —dice despidiéndose.
Corta la llamada y busca el contacto de su amigo para llamarlo, espero unos segundos a qué contestará y cuando finalmente lo hizo, envío un archivo al correo de él.
—Hola, necesito una orden tuya, —dice inmediatamente. —Al parecer hay una red bastante corrupta aquí y un pequeño doncel cayó ahí al igual que muchos otros, —suspira. —Sin embargo hay unos pocos policías que aún siguen limpios, pero con ayuda podrán hacer algo.
—Vaya, siempre me sorprende como haces tú trabajo, ¿Seguro que no quieres ir a la escuela de policías? —dice jocoso.
—No, no me gusta trabajar para una organización, —mira sus uñas, —lee el archivo que te envié, ahí está todo.
Luego de eso corto la llamada y procedió a llamar a otras personas para poder completar su trabajo, solía sorprenderse que usualmente la corrupción era más abundante cuando se trataba de pueblos pequeños que en ciudades.
En cuanto se supo la dirección exacta del lugar donde probablemente estaría Baekhyun, Chanyeol insistió mucho en ir. Sin embargo no se le permitió por lo que tuvo que quedarse en su casa esperando lo que vendría después.
La familia de Baekhyun y la de Chanyeol fueron a la casa del segundo en cuanto la policía les dijo que habían encontrado a Baekhyun; luego Andy los llamo para que vayan donde estaban así que se apresuraron.
El padre de Chanyeol tuvo que manejar la van familiar porque ninguna otra persona se sentía con los nervios de hacerlo, estaban mordiendo sus uñas ya que no sabían lo que les esperaría allá.
—No te preocupes, seguramente está bien, él es fuerte, —susurro el hermano mayor de Baekhyun hacia su madre ya que esta estaba al borde del colapso.
Chanyeol sentía como su pecho dolía por el latido martilleante de su corazón y como sus dedos hormigueaban por la ansiedad que le generaba no saber cómo estaba su esposo. Andy solo le había dicho que lo habían encontrado, pero nada más.
Estaban rumbo al hospital, pero en el hospital también había una morgue por lo que no le aseguraba de que estuviera bien… Aunque su mente le gritaba que dejara de morderse las uñas.
—Llegamos, —dice el señor Park apagando el motor cuando se estaciona.
Todos se quedaron un rato en silencio con miedo, pero de inmediato uno de ellos tuvo valor para abrir la puerta y salir, luego todos le siguieron para entrar al hospital el cual tenía varios policías alrededor.
Andy estaba ahí junto a Baekhyun esperando al hombre que lo contrato.
—Siento tanto lo que te paso, —susurra mirando la cara azulada del doncel, —hubiera querido venir antes para hacer algo mejor por tí, —suspira mirando con tristeza al pequeño.
El cuerpo junto a él estaba lleno de golpes, sus labios eran pálidos, tenían cortes por las costuras que había tenido para que no gritara y se encontraba con heridas profundas por toda su piel, también tenía múltiples lesiones de abuso sexual con distintos objetos, por último los huesos de sus brazos y piernas estaban rotos.
—¿Baekhyun? —susurra una voz gruesa entrando a la habitación. —Mi Baekhyun, —unas lágrimas traviesas se deslizan al ver a su esposo. —Baekhyun, —se acerca lentamente y cae de rodillas tomando la mano fría del doncel. —Perdóname, —aprieta su pequeña mano mientras la moja con sus lágrimas.
—¿Qué sucedió? —pregunta la señora Park cuando un policía entra a la habitación. —¿Saben quién le hizo eso?
—Sí, al parecer esto fue obra del hijo del alcalde, —responde el policía, —quiso estar con el señor Park Baekhyun, pero como él no quiso entonces comenzó a obsesionarse, al ser quien es, era la primera vez que se le negaba algo, —suspira mirando al doncel, —era por eso que los altos mandos nos negaron a seguir con la investigación hasta que vinieron agentes del gobierno a tomar el caso.
Chanyeol miro a Andy quien solo sonrió encogiéndose de hombros, sabía que el hombre tenía que ver con eso. Realmente agradecía a Sehun por haberle mandado a aquel hombre que le ayudo a recuperar a su esposo.
—¿Qué pasará ahora? —pregunta la hermana mayor de Baekhyun.
—Todos los implicados serán juzgados en la capital y ustedes deberán presentar una demanda directa contra él, —dice finalmente, —habrá policías por el lugar para asegurarnos de que el alcalde no haga algo contra ustedes.
El hombre se despidió y salió del cuarto dejando a la familia viendo al pequeño conectado a tubos, cables, yesos y sondas.
Habían máquinas conectadas al cuerpo de un moribundo doncel con el vientre abultado y con el cuerpo lleno de laceraciones, quemaduras y arañazos. Había sido el saco de boxeo del hijo del alcalde quien sin aceptar el rechazó del doncel, decidió que sería suyo sin importar nada, al enterarse que Baekhyun estaba en cinta fue cuando tomo la decisión de llevárselo.
Pasaron los días en los que Chanyeol se quedaba día y noche en el sofá junto a la camilla siendo acompañado por algún familiar ya que no dejaban quedarse a más de dos personas. Supo que todos los involucrados estaban en juicio e incluso los familiares de donceles y mujeres desaparecidos por aquella familia salieron para también ser parte; no habían podido decir nada antes ya estaban amenazados por ellos.
Baekhyun mejoraba poco a poco ya que lo habían encontrado inconsciente con deshidratación e inanición, al parecer su captor lo había dejado amarrado y encadenado por semanas cuando se aburrió de él, para que muriera.
Chanyeol miraba con dolor como su pequeño seguía con sus ojos cerrados, se imaginaba como su esposo había estado llamando por él para que lo sacará de las garras de aquel monstruo, pero no había podido hacer nada por él. Cuando sentía que le iba a dar otro ataque de ansiedad simplemente de dedicaba a acariciar la barriga abultada del doncel hasta que se calmaba.
Pasaron dos meses y Baekhyun aún no daba señales de despertar aunque los médicos decían que estaba bien, que los resultados habían mostrado que el doncel se encontraba mejorando, además el bebé crecía con normalidad por todos los cuidados que estaba recibiendo, al parecer era un pequeño doncel.
Chanyeol pensaba que no iba a dejar pasar lo que había sucedido; recientemente su hermano pudo hacer un par de negocios de mucho dinero que ayudaron a que la empresa haya crecido bastante. Esa era la señal para mandar un saludo a la prisión dónde sabía que iban a enviar al hijo del alcalde y al policía que hizo posible la nula investigación por encontrar a su esposo.
Cómo Baekhyun no despertó en el momento del parto, tuvieron que hacerle una cesárea, les dijeron que era un poco peligroso debido a que el doncel seguía sin recuperarse completamente. Debido a todo eso ahora las familias Park y Byun se hallaban nerviosos afuera, en la sala de espera. Chanyeol caminaba de un lado a otro esperando a que alguien venga a decirles algo sobre ellos.
Después de largas horas de espera, un médico salió buscando por familiares de Park Baekhyun así que el grupo de personas se levantó y Chanyeol fue directamente hacia él.
—Su esposo pudo lograrlo, está bien y el bebé se encuentra en revisión para descartar alguna anomalía, luego le pondrán las vacunas, —sonríe él, —mañana podrán ver de nuevo al señor Baekhyun.
Chanyeol suspiro aliviado y su madre lo abrazo. Ese día fueron a casa a dormir ya que no podrían quedarse junto al doncel así que en el mañana temprano volverían, sobre todo Chanyeol que moría por volver a ver su pequeño esposo y a su bebé.
Cuando cerró los ojos acostado en su cama, pudo sonreír ya que sabía que pronto estaría junto a su pequeño besandolo, abrazandolo y llenandolo de mimos como antes; cerró sus ojos con la esperanza de que Baekhyun pueda despertar pronto y así volver a ser una familia, una más grande ahora que tenían a su bebé.
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El día en que Baekhyun abrió sus ojos fue el día más feliz en la vida de Chanyeol ya que significaba que pronto podrían estar juntos nuevamente, aunque el pequeño despertó demasiado alterado así que tuvieron que sedarlo.
De ahí comenzó a despertar de vez en cuando y cada vez era un poco más calmado que antes, el médico les dijo que quizá en su mente aún seguía en aquel lugar y por eso era que se alteraba tanto; los tubos habían disminuido ya que la condición del doncel había mejorado bastante.
Ya había pasado un mes desde que el pequeño doncel había nacido y ahora Chanyeol estaba con su bebé viendo cómo Baekhyun dormía profundamente aunque por ratos emitía pequeños gemidos asustados para luego quedarse relajado nuevamente cuando Chanyeol empezaba a hablar cerca de él. Al menos ya no tenía aquel tubo grueso en su boca, solo uno fino en su nariz.
—¿Recuerdas cuando manchaste tu traje en el día de nuestra boda? —susurra mientras acuna a su bebé, —como tu hermana te conocía, ella tenía otro igual guardado. —Empieza a reírse. —O cuando quemaste la cena en nuestro primer día viviendo juntos y tuvimos que pedir una pizza, al principio de nuestro matrimonio termine en el hospital por intoxicación, —suspira, —ahora que lo pienso, yo era el único enfermo. Se me hace que tú comías otra comida a escondidas, —sonríe acariciando la frente de su esposo.
Después de un rato vino la madre de Baekhyun para quedarse ya que Chanyeol tenía que ir a la casa para dormir y cuidar a su bebé, tenía una cuna junto a la cama donde lo podía mantener vigilado.
Al día siguiente fue de nuevo y su bebé se quedó al cuidado de su hermana ya que había estado insistiendole por jugar con su pequeño sobrino. Chanyeol dejo un beso en su frente para luego ir al hospital.
Después de quedarse un rato sentando mirando a Baekhyun vio como este abrió sus ojos nuevamente así que se quedó quieto esperando la reacción del doncel, en este momento Baekhyun no se alteró, solo se quedó mirando al frente y luego lo miro a él e inmediatamente comenzó a llorar.
—Baekkie, —camina hacia él para verlo a los ojos, —no llores, pequeño, estoy aquí, contigo, —limpia sus mejillas con sus dedos.
—C-Chan-Chanyeol, —susurra con su voz rasposa, —¿De ver-verdad eres t… tú? —empieza a dejar de llorar.
—Sí, pastelito, soy yo, —besa su nariz. —Tu marido, Chanyeol, —toma una de sus manos ya recuperadas.
—¿Y-Ya no estoy a-allá? ¿No es —tose, —un sueño? —sus ojos opacos se volvían brillantes, —Channie.
—No estás soñando, soy yo, —pasa su pulgar por los labios de Baekhyun. —Llamaré al médico, ya vuelvo.
—N-No, —se desespera al ver cómo su marido se aleja, —por favor, n-no, él vendrá, —comienza a toser de nuevo.
—Baekhyun, nadie te hará daño, —se acuclilla para besar los nudillos de sus manos, —aquel hombre está muy lejos y jamás volverá a tocarte, —mira a los ojos asustados de su esposo, —prometo que volveré rápido ¿Sí?
—N-No, por favor, no me dejes solo, —suplica con sus ojos llenos de lágrimas.
Chanyeol no sabía que hacer en ese momento ya que tenía que llamar al médico para que venga a revisar al doncel, pero tampoco quería dejarlo solo porque sabía que iba a alterarse mucho y no quería que se hiciera daño o algo así. Se quedó a su lado y le pasó un poco de agua para mojar su garganta.
—¿Ya no me hará daño, verdad? —pregunta luego de un rato aún viendo la puerta.
—Por supuesto que no, yo estoy aquí contigo, —acaricia su cabello.
—Te llame muchas veces, —una gota salada cae por la esquina de su ojo, —él se burlaba de mí y luego me… me, —su voz se rompe para empezar a llorar.
—Ya, no tienes que decirlo si no quieres, —limpia sus lágrimas, —solo quiero que sepas que tú no eres culpable de nada y que haya pasado lo que haya pasado, yo te amo con cada parte de mi ser, —toca los labios de Baekhyun con los suyos.
—¿Aunque él me haya tocado? —pregunta de manera entrecortada.
—Tú siempre serás mi más grande tesoro, —vuelve a besarlo. —¿Quieres ver a nuestro pequeño? —pregunta cuando se separa.
—¿Nuestro bebé sigue vivo? —pregunta con sus ojos amplios. —En un momento dejo de moverse y pensé que había muerto…
—No, amor, tú y él son muy fuertes así que aquí están junto a mí, —aprieta la mejilla del doncel. —¿Te sentirás seguro si voy a dónde el médico? —pregunta aún siendo sujeto por su esposo.
—Sí, está bien, —dice ya mucho más calmado. —Quiero ver a nuestro pequeño, te juro que intente que él estuviera bien, siempre lo protegía cuando él me golpeaba, —su mirada decae a su abdomen cubierto con su bata.
—Jamás tendrás que pasar por algo así de nuevo, —besa su frente antes de levantarse para salir de ahí.
Cuando el médico vino junto a unas enfermeras, revisaron al doncel para luego mandar a hacerle más exámenes; Chanyeol por su parte fue a ver a su bebé. En el transcurso de camino al hospital nuevamente recibió una llamada así que se aparco para atender.
—Vaya que le hiciste una buena al tipo ese, —escucha la voz de Kai.
—Por supuesto, y no será la primera vez, —aprieta su mandíbula. —Él sufrirá lo que sufrió Baekhyun con intereses, —mira fijamente a su bebé en la parte de atrás en los brazos de su hermana.
—Me han dicho que se intentó suicidar, —se carcajea, —no aguanta nada.
—Ese cabrón no morirá hasta que yo lo decida y aún es pronto, —pasa su lengua por su labio inferior, —te tengo que dejar, voy a ir a dónde Baekhyun.
Se despidieron y Chanyeol continuo su camino al hospital; debido a que Kai era dueño de varias cárceles entonces podía saber lo que sucedía y como favor especial a su amigo, se encargaba de que los culpables del estado de Baekhyun estuvieran muy "cómodos" en sus nuevas vidas. Al menos Chanyeol se ahorro ese dinero para poder pagar por completo la clínica.
En cuanto llegaron, Baekhyun ya estaba de nuevo en su habitación; el doncel abrazo a su pequeño apenas estuvo cerca de él. Sus brazos ya habían sanado al igual que sus piernas. Comenzó a llorar mientras le decía cuánto lo amaba; su corazón latía con fuerza viendo que su bebé había podido sobrevivir y estaba ahí con él, su único compañero en aquella horrible agonía por la que tuvo que pasar.
—Mi chiquito, —llena de besos la carita del bebé. —Perdóname por haberte hecho pasar por todo eso, —besa con fuerza su cachete.
—¿Te sientes mejor? —pregunta Chanyeol cuando Baekhyun se calma.
—Por supuesto, tengo a mi niño conmigo, —sonríe y luego mira como su bebé intenta acercarse a su pecho. —¿Puedo darle de lactar? —pregunta al doctor.
—Sí, la mayoría de sus medicamentos ya han terminado por lo que estará bien, además él lo necesita, —recomienda alegre y luego le pide a Chanyeol que lo acompañe afuera.
Baekhyun acomodo a su pequeño quien lo veía con sus ojos redondos y grandes, luego se bajó la bata hasta que uno de sus pechos estuvo al aire libre, fue ahí cuando su hijo lo tomo en su pequeña boca comenzando a alimentarse. El doncel siente un burbujeo en su estómago al tener aquella conexión especial de alimentar a su pequeño, su primer bebé con el amor de su vida, Chanyeol. En ese momento recordó las palabras de aquel ser que lo capturó.
"Te sacaré a ese maldito bastardo para preñarte después, serás solo mío"
Baekhyun sacude su cabeza y cuando su respiración se agita, siente el tirón de la boca de su hijo en su pezón haciéndole volver a la realidad donde estaba seguro. Ya no había el peligro de que aquel tipo entrará a seguirlo torturando, ahora estaba con su familia.
—Come mucho para que estés muy sano y fuerte, —susurra a su bebé mientras sonríe.
Al día siguiente su familia y la de su marido estuvieron ahí para él. Ellos estaban esperándolo y feliz de que volviera lo que lleno de felicidad el corazón asustado de Baekhyun; lloro por mucho tiempo acompañado por ellos quienes lo abrazaron con cariño diciendo cuánto lo habían extrañado.
Paso un corto tiempo para que Baekhyun volviera a casa aunque aún debía seguir con algunos medicamentos que no iban a interferir con la lactancia de su bebé lo que alegro bastante al doncel.
—¿Aún me amas, verdad? —susurra cada noche Baekhyun, —¿No despertaré allá? —era otra pregunta frecuente.
—No mi amor, no despertarás allá, estás en casa y sí, te amo mucho mucho mucho, —luego comienza a llenar de besos el rostro de Baekhyun quien empezaba a reír hasta que terminaba agitado.
—Prometo que te contaré todo lo que me suceda por más mínimo que sea, —susurra mientras es abrazado por su marido.
—Me alegro, no quiero que te quedes con todo tú solo, soy tu compañero de vida y quiero protegerte siempre, —se separa para besar los labios de su esposo.
Tomo bastante tiempo para que el doncel pudiera estar estable ya que muchas veces tenía ataques de pánico y a veces solía tener pesadillas con las que despertaba gritando así que Chanyeol lo acunaba en su pecho con palabras dulces hasta que volvía a dormir.
Cuando se quedaba solo con su bebé porque Chanyeol tuvo que volver a la empresa, tenía mucho miedo así que se encerraba con llave y luego permanecía con su hijo en su habitación hasta que Chanyeol volvía. Su psiquiatra había sido una gran ayuda para ya no poner un armario frente a la puerta de su cuarto, aunque aún se le dificultaba cuando escuchaba algún ruido.
Un día mientras ambos estaban acostados tomados de la mano mirando al techo, Baekhyun trago saliva queriendo sacar un poco de lo que tenía adentro y lo aquejaba.
—Sabes... aquel día yo pensé en poner algo de fresas al pastel y por eso fui a la huerta que tenemos en el patio, —comienza a decir sorprendiendo a su marido ya que no se esperaba que le dijera eso, —había alguien ahí, al principio pensé que eras tú, pero luego lo ví, aquel asqueroso que había estado molestandome todo ese tiempo, —una lágrima cae por su sien, —quise correr, pero de inmediato me doblegó contra el suelo poniéndome un trapo en la boca, sin embargo arañe su cara con fuerza así que me soltó, pude correr aunque rápidamente sentí que me pinchaba el costado, luego de eso me desmaye, —aprieta la mano de Chanyeol y siente un nudo en su garganta, —creí que jamás volvería a verte, pensé que moriría allá.
Chanyeol en ese momento recordó el pañuelo, entonces fue eso con lo que intento dormir a Baekhyun para llevárselo; según Andy aquel pedazo de tela fue una pieza bastante importante para poder dar con el culpable.
—Ya mi pastel, —abraza al doncel quien ahora se encontraba llorando con fuerza, —no tendrás que pasar por algo así de nuevo, te lo prometo, —besa sus labios siendo inmediatamente correspondido.
Aún con todo lo que hacían para ayudar a Baekhyun, este no hacía más que recordar aquellos episodios traumáticos y Chanyeol se desesperaba muchas veces no sabiendo que más hacer para ayudar a su esposo, se sentía frustrado y afligido en ocasiones.
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Chanyeol ve con tristeza como Baekhyun miraba a todas partes con terror en una esquina cuando su pequeño cumplió su primer año e invitaron a algunas personas de la familia.
—Amor, solo son nuestra familia y amigos, —le dice acercándose a él.
—Alguien puede estar entre la gente, —se abraza a sí mismo, —me llevará lejos, —comienza a agitarse así que de inmediato es abrazado por Chanyeol.
—Estás seguro, no hay nada que te haga daño aquí, —susurra sobre su oído, —yo te mantendré seguro aquí conmigo, —sigue hablando, —te amo.
Poco a poco se fue calmando hasta que pudo volver a la fiesta con su niño a quien ayudó a apagar la vela; era por momentos que el doncel se encerraba en su temor hasta que él venía para calmarlo con sus toques y palabras.
Cuando recién quisieron retomar su vida sexual fue algo bastante malo ya que Baekhyun había empezado a gritar y golpear a Chanyeol para que se alejara, luego se daba cuenta de lo que sucedía e iba hacia su marido para disculparse, pero él entendía lo que pasaba por lo que lo consolaba entre sus brazos dándole tiempo hasta que estuviera listo. Aún era difícil y tenían que hacerlo con la luz prendida y los ojos abiertos ya que cuando los cerraba era cuando las imágenes de sus recuerdos en aquella cabaña aparecían de nuevo.
—¿No te da asco? —pregunta nervioso Baekhyun cuando se queda completamente desnudo frente a su marido.
—¿Por qué? —dice confundido para luego empezar a besar cada centímetro de la piel de su doncel. —Eres perfecto, un pastelito que me voy a devorar, —saca su lengua para empezar a golpetear la punta de su pezón.
—Tengo muchas cicatrices, —susurra y levanta un brazo el cual estaba lleno de rayas, quemaduras y perforaciones.
—Todo eso solo prueba lo valiente que fuiste al poder soportar eso y estar aquí conmigo, jamás me daría asco algo de ti, —toma su brazo para empezar a besar con cariño bajo la mirada llorosa del doncel.
Después de un rato Baekhyun comienza a relajarse ya que Chanyeol había tomado uno de sus botones de leche para empezar a amamantarse sintiendo placer en ese acto, sin embargo luego su mente se transportó.
—Gime como la perra que eres, te haré gritar tanto que incluso tu bastardo va a huir de ti, —dice mientras se empuja dentro de su cuerpo lastimado.
—¡No! ¡Suéltame! ¡Déjame! —con sus rodillas lo golpea apartando el cuerpo encima.
—Amor, soy yo, —puede escuchar un voz gruesa, —soy Chanyeol, —dice lentamente y luego siente su caricia en el rostro así que empezó a temblar, —abre tus ojos, estás conmigo, solo los dos, —susurra besando sus párpados.
—¿Cha-Channie? —lentamente vuelve a la realidad y ve al amor de su vida frente a él. —Lo... Lo siento, no quise golpearte, —dice acongojado al ver la marca roja en el abdomen de su marido.
—Tranquilo, no pasa nada, —acaricia su mejilla empapada, —yo soy quien te hace el amor, soy yo el único que entrara en tu cuerpo, nadie más a menos que tú lo permitas ¿Sí? —dice mirando directamente a sus ojos y Baekhyun asiente. —Si deseas podemos hacerlo otro día.
—N-No, yo quiero hacerlo, quiero hacerlo, —repite más seguro, —solo... —sus mejilla se sonrojan, —hablame en todo momento, quiero escuchar tu voz mientras me tomas, —levanta su mano para acariciar el rostro de su amado.
—Lo prometo, —asiente y baja para atrapar los labios de Baekhyun en un beso necesitado.
Chanyeol se metió entre los muslos carnosos de su esposo y luego agarra su cintura mientras desciende sus labios para lamer la piel de su cuello que tenía marcas alrededor.
—Te he extrañado tanto, —susurra cuando mete uno de sus dedos en el ano del doncel ya que aún se encontraba un poco tenso, —tus labios, tu piel, tu risa y tu cuerpo, —mete otro ganándose un pequeño gemido, —eres la joya más preciosa del universo entero, —acompaña otro dedo sintiendo como Baekhyun se relajaba más y más hasta que empezó a soltar lubricante que empapó su mano, —anhelaba sentir el aroma de tu cabello por las mañanas.
—¿Y cuándo me daba pereza bañarme? —dice soltando una suave risa, aunque luego gime al sentir los dedos grandes entrar y salir de su canal.
—También, —se ríe igualmente y luego mordisquea el pezón frente a él, —aunque recuerdo que solía llevarte en mi hombro para limpiarte, —abre su boca cogiendo por completo su pecho.
Las manos de Baekhyun van a la espalda ancha de su marido y con sus dedos recorre la piel suave sabiendo con quién estaba, era él, la persona que más amaba en el mundo. No el monstruo que lo separó de su vida.
—¿Extrañas cuando solía quemar la comida o cuando hacia mis experimentos raros y terminabas en la clínica? —bromea mientras siente como el pene de Chanyeol comienza a hacerse paso dentro de su cuerpo, su entrada lo había añorado.
—Tuve que pagarte una escuela de cocina, —dice mirándolo a los ojos, —también recuerdo que eras bueno haciendo dulces y mamá sé quejo contigo porque me pusiste muy gordo, —pone ambas manos a cada lado de la cabeza del doncel sin dejar de mirar sus ojos.
—Yo me puse a llorar cuando vino a reclamarme y tú le dejaste de hablar hasta que se disculpo, —deja salir pequeños gemidos en cada empuje suave y certero del alto.
—Me hacías daño con tanta azúcar, pero jamás permitiría que alguien te haga llorar sin recibir un castigo aunque fuera mi familia, —Baekhyun asiente y luego siente los labios de su hombre sobre los suyos.
—Te amo, —dice en el momento en que su cuerpo se tensa luego de muchos empujes dentro de su cuerpo, —Channie, —susurra mientras entierra sus uñas en la espalda sudorosa de su marido y se viene con fuerza tanto por su pene como su ano dejando empapado a Chanyeol quien luego también llena de semen su interior.
Ambos estaban jadeantes y sudorosos, intentando recuperar algo de oxígeno en sus pulmones; Baekhyun abrazo con fuerza a Chanyeol cuando esté salió de su cuerpo para acostarse a un lado. Cómo era casi costumbre, tuvo que abrazarlo con fuerza ya que había empezado a llorar, todo hasta que ambos se quedaron profundamente dormidos.
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—Mami, —llama el niño de dos años y medio, pero no recibía respuesta, —mami, —vuelve a llamar, pero cuando se quiere acercar, se tropieza e intenta sujetarse de algo dejando caer las cucharas cerca de él.
Baekhyun se tensa al escuchar el metal y la imagen de aquel hombre afilando sus cuchillos antes de enterrarlos en su piel vinieron a su mente y de inmediato se volteo dispuesto a correr de ahí, pero con lo único que se topa es con su pequeño llorando en el suelo, fue ahí que volvió a ver todo como era.
—Sunhyeol, —dice asustado y luego toma en brazos a su hijo empezando a revisar su cuerpo, —no debes entrar a la cocina, —susurra.
—Mami, galleta, —señala un frasco de vidrio con galletas de chocolate.
—Entiendo, —toma una para romperla en pedazos y empezar a alimentar a su pequeño, —me pregunto si algún día volveré a dejar de tener tanto miedo, —dice lleno de tristeza porque cualquier cosa le atemorizaba, no podía mantenerse tranquilo demasiado tiempo.
Chanyeol se encargaba de volver temprano todos los días y había una cámara de seguridad en cada parte de la casa, incluso su familia se pasaba de vez en cuando por la casa para comprobar que Baekhyun estuviera bien. Todos habían quedado rotos de una u otra manera por aquel nefasto sujeto que aún seguía vivo, pero con ganas de morir cada día y él conocía porque estaba siendo torturado ya que se le hacía saber a cada momento.
Hay heridas que no se curan jamás, pero con paciencia, terapia y amor podían ser superadas en algún porcentaje para poder tener una vida relativamente normal así que Chanyeol se encargaba de estar para su esposo en todo momento.
—¿Y si nos vamos de viaje? —pregunta Baekhyun mientras toca su pancita crecida. —Quizás pueda salir un poco de todo esto, —suspira.
—Por supuesto, —besa sus labios, —nos hará bien irnos un tiempo, —aprieta ligeramente la mejilla gordita de su esposo. —Te amo, mi pastelito.
—Y yo a tí, —abraza con fuerza al alto quien le corresponde, —gracias por salvarme, —empieza a llorar, —gracias por tu paciencia y por estar conmigo aún después de todo eso.
—Yo jamás te dejaría, tú eres mi vida, —aprieta entre su brazos a Baekhyun. —No soy nada sin tí y nuestros pequeños, —dice mientras acaricia la pancita de su esposo.
Baekhyun pensaba que en algún momento podría olvidar aquellos meses tan terribles en los que estuvo a punto de morir, pero hasta entonces estaría dando todo de si para poder curar las heridas de su alma y su familia era indispensable en aquel viaje para sanarse.
***
Hola, por si acaso alguien haya leído todo, me gustaría saber que les pareció la historia.
Esta historia iba a tener un final triste dónde solo encuentran el cadáver en descomposición de Baekhyun, pero me dió tristeza y mejor no, luego iba a poner que Chanyeol solo había imaginado el rescate y en realidad ya habían enterrado a Baekhyun. Sin embargo no me gustan los finales tristes. (ᗒᗩᗕ) Lo sé, soy débil.
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