Escena XIII: El delito de Artio y la ira de Cobrutno Rutkio

Lugar: El parque Paulo VI− Zona de Pablo IV en San Miguel

Fecha: 10 de marzo del 2020 (Tarde)

Personajes:

· Cobrutno Rutkio

· Vilena

· Artio Jutio

(Descripción del lugar: El parque Paulo VI es un espacio amplio que contenía las siguientes características. En el lado izquierdo del escenario, se puede observar mucho césped verde y un bote de basura gris. En el lado derecho del escenario, nos podemos percatar de mucho césped verde y un bote de basura negro.)

(Se abre el telón) (Ingresan Cobrutno Rutkio y Artio Jutio caminando mientras llevan sus pistolas en sus manos izquierdas y sus gases que contienen grafitis en sus manos derechas por el pasillo izquierdo hacia el escenario) (Cobrutno Rutkio y Artio Jutio comienzan a hablar)

Cobrutno Rutkio: (malvado) Artio, Ornedo no me da buena espina para formar parte de nuestra pandilla. Se me hizo extraño que haya conocido a Murlobo y después que haya pasado la prueba de ingreso tan bien. Quiso ofrecerse como un sustituto para mi liderazgo y eso no lo puedo permitir.

Artio Jutio: (perverso) Sigues siendo el líder, Cobrutno. Quizás el nuevo miembro cree que puede reemplazarte, pero debes mostrarle lo controlador que puedes ser con él. Aprovecha cuando Ornedo falle, porque será tu oportunidad para hacerlo sufrir.

Cobrutno Rutkio: (malvado) Tienes razón, Cobrutno. Pienso que podría ejercer mi carácter dominante sobre Ornedo. De cualquier modo, él sabe que soy un peligro para su bienestar. Asimismo, tú serás un buen secuaz para hacerle daño a Ornedo. Ese chico solo sirve para que me obedezca.

Artio Jutio: (disgustado) Cobrutno, admiro tu buen control sobre tus posibles enemigos. Definitivamente, eres una figura dominante para cualquiera que desee enfrentarte a ti. Solo no olvides que desconocemos la procedencia de Ornedo y nos podría delatar inesperadamente.

Cobrutno Rutkio: (malvado) Artio, podemos a ese criminal novato como un asistente para cargar nuestra mercancía. Es un bueno para nada que solo merece tener un puesto insignificante en nuestra pandilla. Va a sentir mi ira cuando domine completamente su vida a mi propia voluntad.

(Risa malvada de Cobrutno) (Artio sigue hablando con Cobrutno)

Artio Jutio: (disgustado) Cobrutno, ¿Sabes si Ornedo posee alguna computadora malograda o descompuesta? Tengo un plan para hackear sus datos provenientes de su computadora. Además, su familia no lo ha reportado y eso significa que nadie se interesa por él. Debemos aprovechar esa debilidad para usarla a nuestro favor.

Cobrutno Rutkio: (malvado) Artio, ¿Por qué siempre tienes que mencionar algún aspecto sobre las computadoras? Cuando te recluté para unirte al grupo, no conocía absolutamente nada de ti excepto tu inteligencia para amenazar a los demás.

Artio Jutio: (disgustado) Antes de volverme como un criminal al igual que tú, solía ofrecer servicios para las computadoras o Pcs.Trabajaba como un asesor que ayudaba a las personas sobre obtener la solución de sus aparatos informáticos. Me pagaban una miseria, pero ese trabajo era mi pasión.

Cobrutno Rutkio: (malvado) ¿Y entonces cuál fue la razón por la que decidiste convertirte en un delincuente? Creo que te hubieras quedado siendo un empleado de la informática en vez de robar o asaltar junto a mi lado. Asimismo, recuerda que la vida de un criminal tiene muchas consecuencias.

Artio Jutio: (disgustado) Renuncié a seguir trabajando como un asesor, porque yo quería obtener más dinero con el fin de realizar una carrera de ingeniería de sistemas. Jamás pude inscribirme a la universidad, porque no tengo el dinero suficiente para seguir esa carrera.

Cobrutno Rutkio: (malvado) ¿Entonces si consigues ese dinero te podrías marchar de la pandilla cuánto antes? Creo que podrías ser un buen apoyo para sobornar a cualquier victima que posea un aparato tecnológico en sus manos.

Artio Jutio: (disgustado) Cobrutno, tal vez piense en ayudarte a lidiar con Ornedo. Existe una gran posibilidad de que ese miembro nuevo y principiante de nuestro grupo se atreva a traicionarnos sin decirnos nada.

Cobrutno Rutkio: (malvado) Artio, mejor podemos concentrarnos primero en conseguir a nuestra víctima para quitarle todas sus pertenencias. Debe ser una persona que aparente tener demasiados lujos como una señora millonaria.

(Música criminal) (Ingresa Vilena con una mascarilla en la boca caminando mientras lleva una cartera marrón en su brazo izquierdo hacia el escenario por el pasillo derecho)

(La cartera contiene dos collares plateados, un celular blanco, un documento de identidad y una billetera negra que almacena quinientos soles)

(Artio Jutio y Cobrutno Rutkio observan a Vilena mientras ellos siguen conversando entre ellos)

Artio Jutio: (disgustado) Cobrutno, esa mujer tiene una cartera muy lujosa para ella. No hemos podido robar a nadie hoy, porque nadie estaba tan solitario o perdido como esa chica. Debemos aprovechar su situación para quitarle todo lo que tiene de valor.

Cobrutno Rutkio: (malvado) Artio, prepara tu pistola, porque ella se convertirá en nuestra víctima el día de hoy. Ordeno que le apuntes tu arma al cuello mientras que yo le golpeo el brazo izquierdo con mucha fuerza hasta que nos quiera dar su cartera.

(Artio Jutio y Cobrutno Rutkio se acercan a Vilena) (Artio Jutio le apunta su pistola hacia el cuello de Vilena) 

(Cobrutno agarra el brazo izquierdo de Vilena y lo empieza a golpear con mucha agresividad) (Vilena se empieza a alterar)

Vilena: (alterada) ¡No me dan ni una pisca de miedo así que déjenme caminar en paz! ¡Me avergüenzan que existe gente como ustedes que no trabajan para aportar a la sociedad y solo se dedican a asaltar como los hombres sinvergüenzas que son!

Cobrutno Rutkio: (malvado) Señorita, usted puede acabar muerta si no colabora con nosotros. Si usted no permite que agarremos su cartera, entonces tendrá que aguantarse todos los golpes que recibirá en su brazo. Mi compañero la asesinará si decide llamar a la policía repentinamente.

Artio Jutio: (rudo) Usted parece que no entiende lo peligroso que podemos ser ante usted. Si comienza a rendirse, le aseguro que no saldrá lastimada de ninguna forma que pueda perjudicar su salud, pero entréguenos su cartera de una vez por todas.

Vilena: (alterada) ¿Enserio creen que me dan miedo? Yo tengo que trabajar en un centro de informática lo pronto posible, porque si no me van a despedir. Además, mi jefe me prometió que iba a subir el salario si llegaba temprano, pero no lo conseguiré por su culpa.

Cobrutno Rutkio: (malvado) En realidad, no me interesa su vida personal o su reputación laboral así que le pediré por última vez que nos permita coger su cartera o usted estará muerta por la pistola de mi compañero. No lo diré una segunda vez, señora.

(Artio se pone reflexivo por las palabras que dijo Vilena) (Artio deja de apuntar con su pistola a Vilena) (Artio coge su pistola y la tira al suelo por el lado izquierdo del escenario)  

Artio Jutio: (nostálgico) ¿Hace cuánto que trabaja en el centro que mencionó? Es un asunto que me da curiosidad. Yo fui un asesor informático, pero renuncié a ello por la falta de dinero. ¿Usted se encuentra totalmente satisfecha con su trabajo o no?

Vilena: (alterada) Mi nombre es Vilena y debería estar avergonzado por la vida de mierda que tiene. Solo le basta alejar a las oportunidades laborales de usted, porque ninguna empresa de San Miguel contratará a un maldito criminal como usted.

(Cobrutno golpea el cuello de Vilena) (Vilena se aleja de Artio y Cobrutno) (Cobrutno coge la cartera y la empieza a abrir) (Cobrutno agarra la billetera) (Artio le quita la cartera)

Artio Jutio: (reflexivo) Por esta vez, la dejaremos libre, porque yo he pasado por su situación y soy capaz de empatizarme con usted. Nunca dije que estaba orgulloso de ser un ladrón, pero no puedo dejar de robar hasta que consiga el dinero para ir a la universidad.

Vilena: (alterada) Espero no encontrarme contigo en mi trabajo, porque me aseguraré que todos se enteren de la horrenda persona que eres tú. Nadie merece conocer a alguien tan indecente, callejero y vulgar como usted.

(Vilena le quita la cartera a Artio) (Vilena se retira caminando con su cartera que la lleva en su brazo derecho por el pasillo derecho)

Artio Jutio: (reflexivo) Cobrutno, lo siento por dejar que se marchara, pero por lo menos pudiste quitarle su billetera. No podía arruinarle la vida a una persona que había pasado por lo mismo que yo. 

Cobrutno Rutkio: (malvado) Eres un imbécil, Artio. ¡Cómo puedes ser tan idiota para dejar escapar a una posible sospechosa que nos delate a la policía! ¡Eres un estúpido o simplemente te haces el tonto para hacerme enojar!

(Grito de ira por parte de Cobrutno) (Cobrutno le tira una cachetada a Artio)

(Artio Jutio y Cobrutno Rutkio se retiran caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XIII)