Increíble pero cierto, tras dos semanas siendo tratado con el objetivo de que el joven se recuperase físicamente al menos en un 90%, ya se encontraba muy estable.

-Su circulación ha mejorado con creces, me sorprende y a la vez me alegra muchísimo; La placa de hielo en su piel ha desaparecido y su temperatura corporal se ha ajustado con ese deshielo; Su respiración está perfecta, los alveólos hacen el intercambio de gases al 100%... Casi ya no necesita los aerosoles, pero creo que es mejor si se los dejamos unos días antes de que realmente pueda respirar por su propia cuenta-Databa Desmond, Katrina sólo oía los argumentos de su colega de fondo mientras deambulaba camino a la enfermería.

Allí, James no estaba sólo, si no que Anna le suministraba cantidades más pequeñas de oxígeno y le retiraba el suero que le alimentaba para que, cuando Katrina llegase, el chico comiera de forma ''física'' por primera vez desde que le sacaron de la cámara.

-Bien... Pues esta será la penúltima dosis de oxígeno que tengas, en unos días vas a poder respirar tú solito. ¿Estás contento?-Decía la rubia al ver al de ojos azules con una cálida sonrisa en su rostro, hacía tanto que no se mostraba realmente feliz...

-Demasiado... No sé qué decir, estoy muy orgulloso de mí. Muchísimas gracias por esto, de verdad-Comentaba, en ese instante era el hombre más feliz del universo.

-No hemos sido sólo nosotros, James, también has sido tú-Entró Jones, dejó la bandeja de comida posada en sus propias rodillas por unos segundos-De no ser por tu fuerza de voluntad, esto no habría salido adelante. Has demostrado que querías recuperarte desde el principio y eso también contribuye a tu mejora tan significativa. Estamos super orgullosos de ti, y yo la que más, porque desde que estuve cuidándote me has enseñado que puedes hacerlo, que no te vas a dejar llevar por esto, que tú eres muy fuerte por dentro, aunque estés muy debilitado en realidad...-El chico sonrió dulcemente ante los comentarios de la muchacha que lo trasladó de su planeta hasta la nebulosa de Orión.

-Muchísimas gracias, en serio... Tanto por lo que hicisteis por mí como lo que yo pensé desde que desperté-Dijo, la morena le acercó su bandeja para que por fin retuviese alimento, su alegría era visible desde kilómetros-Mmmmm... Está delicioso. Qué bien se siente comer "de verdad"-Opinó al probar el primer trozo de su comida, las dos chicas se miraron y sonrieron entre sí.

-Mira, queremos enseñarte un poco mejor dónde estás-Dijo Anna encendiendo con un mando un televisor en frente de la camilla, él prestó atención-Esta es la nebulosa de Orión en la que estamos. Nosotros nos encontramos en su lado derecho, por así decir, situados en la parte baja. La profesión que tenemos aquí es identificar formas de vida en otros planetas, ese es el núcleo principal de lo que hacemos aquí; En Andrómeda, por ejemplo, estudian la física en el espacio y otros planetas, de paso te cuento que Katrina estuvo trabajando allí-La nombrada sonrió con mucho humor, Hetfield siguió contemplando la pantalla con la boca masticando su almuerzo-No te preocupes por las condiciones climáticas de aquí, estamos a la temperatura correcta a pesar de que afuera hace muuuucho frío. Déjalo todo en nuestras manos...-La otra mujer sonrió otra vez y James se dispuso a beber de su agua-¿Qué te parece? Es interesante, ¿no?-Cuestionó, dejó en su bandeja el vaso y se limpió un poco los morros, más tarde le entregó la bandejita a Katrina y, finalmente, respondió.

-Es una pasada. Me acuerdo que de niño siempre soñé con viajar al espacio y parece que ahora ese niño que fui me lo agradece mucho-Aw, qué cosi, ese James es bastante sonriente.

-Y eso que llevas ya muchísimo tiempo congelado-Quiso animarle Katrina, para ella se veía algo chistoso.

-Bueno... Tampoco me lo recuerdes mucho. ¡Qué frío hacía, por Dios!-Todos rieron, volvió a beber un poco de su agua antes de poder hablar de nuevo-Ay... Hace mucho tiempo que no me siento tan... Vivo, sí, tan vivo. Me siento como si hubiese nacido de nuevo, es genial...-Todos sonrieron, pero él el que más, no era necesario decir el porqué.

-Creo que va siendo hora de que te comuniquemos cómo es la vida aquí... Mira, lo primero que tienes que saber es que aquí dormimos muy poco. Aunque como tú no estás acostumbrado a esto, vas a seguir teniendo las horas de sueño correspondientes a un hábito saludable a la hora de descansar. Lo segundo que tenemos que decirte es que vas a inyectarte cada día una sustancia que te es necesaria visto que tu organismo al parecer tiene una insuficiencia de ésta misma. Y tercero que... Bueno, aquí hacemos muchas misiones en el exterior de la nave y quiero que te quedes tranquilo si piensas que salimos todos o cosas así, siempre habrá alguien para supervisarte. Creo que esta "introducción" a la convivencia de este sitio no es tan... "pesada" por ahora. ¿Crees que te adaptarás bien una vez salgas de aquí?-Le explicó Anna, en un principio estuvo callado y sin decir ni pío, luego se decidió a opinar al respeto.

-Se ve tarea fácil. Veremos si realmente luego es un reto "un poco imposible"-Que era gracioso este muchacho, qué cosas...

-Bien, pues que así sea. Ahora, vamos a seguir con más mierda médicas... Déjame palparte el pecho para averiguar tus funciones cardíacas y no escupas, absorbas mocos o estornudes-Esa Katrina también era muy cómica, ahí todos tenían un buen sentido del humor.

-No lo haré-Dijo apartando con una sonrisilla los brazos de su pecho y poniéndolos a sus costados, dejando que la chica determinase el dato médico.

Se veía bastante sencillo el aprender a convivir bien en aquel lugar... ¿Cómo le irá a Hetfield para ingeniárselas por allí?