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|33| El Comienzo de Todo

"Los que quedaron estan de rehenes en la escuela, tenemos que hacer algo"

----⚜----

《Annelisse》

Llegamos al bosque lo mas rapido que pudimos, recibimos una desesperante llamada de Riven tras nuestra despedida con Farah, segun sus palabras, los brujos de sangre ya no se encuentran donde estaban escondidos, sino que estaban ahora en la escuela, tomando de rehenes a quienes yacian ahi mismo.

Para nuestra desgracia, Aisha, Flora, Terra y Musa se encontraban ahi mismo, pero tampoco pudimos tener un contacto de ellas. Llegamos tan rapido a un punto ciego de los especialistas, donde varios ya estaban organizando una redada para rodear la escuela.

Tenemos que contactarnos con nuestro padre, el tiene que detener la caceria de inmediato, no fueron los brujos de sangre quienes mataron a Rosalind o quienes nos atacaron aquel dia en el bosque. Todo fue un plan de Rosalind.

-¿Que tenemos? -pregunto Rhaegal cuando llegamos a la campaña de los especialistas quienes ya se preparaban para la redada.

-Los brujos de sangre se encuentran en la escuela, tomaron a las hadas y especialistas que yacian ahi dentro -contesto Riven con los brazos cruzados y una expresion amargada.

-¿Heridos? -pregunte yo preocupada.

-No lo se, Ann. Pero los pocos que quedan ahora estan encerrados en el santuario -me contesto mi ex amigo con derechos, mirandome rapidamente.

-Debe estar usando las raspadoras para atacar, Sebastian sabe como controlarlas -afirmo Bloom junto a mi hermano mayor, quien le dio la razon con la mirada. No tenemos mucho tiempo, tenemos que actuar de inmediato.

-Tenemos que contactar con papa, Ignis va a atacar de inmediato y podra ayudarnos con la redada -accedio Azriel despues de mirar a su novia, tal vez eso nos de tiempo a entrar al santuario y sacar a todos los que quedan ahi mismo.

-Ignis no tiene el antidoto contra los brujos, y la unica persona que sabia hacerlo esta en el santuario de la escuela -intervino rapidamente Dane refiriendose a Flora, parandose junto a Riven, con un tono de amargura. Ignis no lo tiene, no aun.

-En Ignis hay hadas de la tierra y de la mente, pueden ayudarnos -ahora yo acote con un tono seco, mirando a Dane con la misma expresion fria de antes. Su cabeza aun esta con Beatrix y el estupido de Andreas, ahora tiene que empezar a confiar en nosotros. En ese momento, Silva llego a nosotros para seguir informandonos de la situacion- Tenemos que esperar a los Ignianos.

-No sabemos en cuanto tiempo van a venir -mire a mi hermano Rhaegal, que tenia una expresion de preocupacion. En ese momento, todos los especialistas empezaron a hablar a la vez para acotar sus ideas; algunos a favor de Ignis, mientras que el resto solamente queria ir a Alfea. Silva toco mi brazo y con su cabeza me hizo señas para alejarnos, algo que hice en sumo silencio y comenzamos a caminar lejos del campo de especialistas.

-¿Segura que quieres hacer esto? Se vale decir que no -Silva rompio el hielo entre ambos, yo me cruzo de brazos y miro hacia adelante, pensando una respuesta.

-No es un querer hacerlo, es tener que hacerlo -le dije sin mirarlo, subi un poco mis hombros y tome mucho aire por mi nariz, sintiendo el olor al bosque de otoño- Desde el principio fui la unica que podia detenerlo, Silva. -ahora me puse delante suyo, mirando los ojos celestes de mi protector- El quiere la llama del fenix, si se la doy, ya no estara matando hadas.

-Ahi esta el problema, el tendria la llama del fenix -afirmo el pelinegro y accedi, de todas maneras, pierdo mis poderes y no se si mi vida tambien- Y si logro todo esto sin ella, imagina que haria con ese poder. Tu padre te diria que solamente tu tienes que tenerlo, Annelisse. Y todo Ignis tambien.

-Lo se... -dije mirando a un lado, el tiene razon con eso ultimo- Tengo que pelear.

-TENEMOS que pelear -me corrigio Silva con suma afirmacion en su primera palabra, yo volvi a verlo con una mueca en mis labios. En ese momento, mire a especialistas tras Silva y como bajaban cargamentos de las camionetas, y me di cuenta que faltaba un especiliasta en concreto.

-¿Donde esta Sky? -le pregunte volviendo a ver a Silva- ¿Con quien tiene que llegar? -Riven ya estaba aqui, no conozco otro amigo de Sky que no sea el.

-Desde mucho antes de tu reencuentro, Sky se peleo con tus hermanos por Andreas y su juicio en Ignis, asi que fue confinado de su libertad desde entonces -me informo Silva y yo abri mis ojos como platos, no puedo creer lo que escuche.

-¡¿Que?! ¿Sigue en la escuela? -exclame queriendo irme, pero mi acompañante fue mas rapido y me tomo de los hombros para que no me vaya.

-Y antes que hagas algo estupido... -me dijo cuando me detuvo, alargando sus palabras y volvi a verlo- Sky es muy inteligente, se las arreglara para volver con nosotros. -eso no me tranquiliza ni un poco.

[...]

-No podemos dejar que vayas sola tu enfrentes a Sebastian tu sola, es peligroso -me detuvo Bloom una vez que le conte mi plan tras la charla con Silva. Miro a mi cuñada de forma regañadora.

-El plan es de Silva, no mio -la corregi ladeando mi cabeza- Yo esperare en el cementerio hasta que todos hayan salido de la escuela.

-Van a necesitar atencion medica -añadio Stella frente a mi.

-Riven y Dane los asistiran mientras que mis hermanos guiaran el otro grupo hacia la escuela -y yo la interrumpi, recordando todo lo que hablamos con Silva.

-Te olvidas de la parte mas importante: tener que hacerte invisible para que puedas entrar -mire a mi cuñada numero dos, pestañando varias veces.

-¿Y arriesgar a que te quedes sin tu magia? Mi hermano me mataria -le dije rodando los ojos, con mucha amargura.

-Tambien puedes quedarte sin la tuya -me contradijo.

-Me voy a transformar, sere mas veloz, mas fuerte y no me importa quien se ponga en mi camino, yo ire a buscar a Sebastian para acabar de una vez por todas con esto. -finalice mi plan con una falsa sonrisa- Y ustedes rescataran a nuestras amigas y todos seremos felices.

-Dowling ya nos dijo como transformarnos, tenemos que usar todas nuestras emociones: positivas y negativas tambien -intento convencerme la otra pelirroja en el grupo, pero solo se llevo mi mirada de enojo.

-¿Y ya se transformaron? ¿Alguna lo logro? -pregunte con sarcasmo, apoyando las dos manos sobre la mesa de madera que tenia enfrente- No hay tiempo, y tengo que hacerlo sola, porque con esto -levante mi mano derecha para invocar una llama del fenix sobre toda mi palma, mirando a mis dos amigas- Es lo unico que puedo usar contra el. Las adoro, enserio, pero esto... -estaba hablando cuando apague la llama y me calle cuando senti mi vista borrosa, y como la cabeza empezo a darme vueltas, me aferro a la mesa para no caerme al suelo y escucho la voz de mis cuñadas intentando ayudarme.

Mi cuerpo choco con la superficie fria del suelo, mientras en la mente se me aparecen imagenes de una torre oscura alrededor de la nada misma, de una tierra completamente negra y un oscuro clima sombrio. Tambien veo a Sebastian frente a una especie de portal de colores negros y dorados y como el intenta pasarlo. La ultima imagen que veo, es estar dentro de esa torre oscura y una enorme criatura de mas de tres metros con brazos y piernas delgadas, sin ojos donde estan sus cuentas y una enorme boca de dientes afilados, la criatura parece ver mi presencia y empieza a acercarse a mi a pasos apresurados.

En ese momento, parpadeo saliendo de mi cabeza  y viendo a mis dos hermanos con sus respectivas novias y Silva de pie a un lado.

-¿Que paso? -pregunto Silva.

-N-no se... necesito agua... -dije mientras me levantaba con ayuda de mis hermanos, intentando recordar lo que vi hace segundos nada mas. Todo era tan real, parecia una premonicion.

Al cabo de unos minutos, mi hermano me recosto sobre la habitacion que tenia la cabaña, yo me disponia a dibujar sobre un libro que encontre tirado aquel portal y aquella criatura que jamas habia visto ni escuchado, en ningun libro de Ignis se hablaba de ella. Podia escuchar como mis hermanos y sus novias hablaban con las demas chicas por telefono, solo escuche que Flora y Terra crearon algo para atraer las raspadoras y como Musa con ayuda de Aisha van a salvarlas, por lo menos las raspadoras ya no seran un problema.

Veo mi telefono que empieza a vibrar y de inmediato atiendo la llamada.

-¿Sky? -pregunte asustada al ver su numero en la pantalla- ¿Donde estas?

-Estoy bien... pero estare mejor cuando te vea -me respondio del otro lado de la linea, su tono es demasiado seco y muy recto, pense que se pondria mas contento al escucharme luego de semanas- ¿Como estas?

-Es dificil asimilar que pasaron tantas cosas en mi ausencia... -solte una pequeña risa para intentar no hacer tan incomoda la llamada- Estoy bien... las chicas acabaron con las raspadoras.

-Que bueno.

-Si... pero ahora se quedaron atoradas -dije con una mueca- Dios, Sky... pasaron tantas cosas y siento que debi estar para todos ustedes... ahora los Ignianos ya estan en camino, mis hermanos mandaron una señal de ayuda, solo es cuestion de tiempo para que todo esto se acabe y podamos vernos. Solo asi se acabara todo.

-Claro que no... -me interrumpio y yo frunci mis cejas, mas confundida- Sebastian va a obtener lo que quiere y tu vas a ayudarle... -yo tense mi mandibula y me quede sin palabras.

-¿Sky? -pregunte confundida y escuche un sonido raro detras de la otra linea, como si cambiaran de telefono o se lo pasaran a otra persona- ¿Por que lo dices...?

-Sal de donde estes -la voz de mi novio cambio a la del brujo de sangre que esta causando todo esto. Sky esta bajo el poder de Sebastian, ay dios...- Ahora, en silencio.

-Si lo tocas... 

-Hazlo si no quieres que experimente con el -me interrumpio, yo mire por unos huecos a mis hermanos y sus novias hablar acerca de que habia que hacer, estos hablan de lo que acaba de pasarme y que debian ir cuanto antes a la escuela (sin esperar a mi padre). Yo sali por una puerta trasera de la casa en pleno silencio sin que lo noten, presenciando a Grey a unos metros mio, esperándome con una expresión seria- Si le dices a alguien, Sky morira. Si algo le pasa a Grey, Sky morira -mire al nombrado, este no parece muy contento con su parte del plan- Si intentas enfrentarme...

-Sky morira, quedo claro -lo interrumpi- Ya quedo claro.

Un silencio invadio la linea, Sebastian ya sintio mi enojo y aun asi, le gusta jugar con el.

-Suelta el telefono, nos vemos pronto -y corto la llamada, yo solte el telefono y deje que caiga entre las hojas secas, mirando a Grey para luego acercarme a el y comenzar a caminar juntos en completo silencio.

Caminamos en silencio todo el camino hacia la escuela, me dedicaba a escuchar el crujir de las hojas debajo de mis botas, solo espero que mis hermanos pronto se den cuenta de mi ausencia y decidan atacar la escuela cuanto antes. Observo que Grey esta muy nervioso, aunque quiere mantener esa postura de villano malvado, no le sale en lo absoluto.

Entramos por el botanico de la escuela, donde fuimos recibidos por varios especialistas vestidos con ropa tactica y ojos rojos, estos solamente se hicieron a un lado y dejaron que Grey me guie por el pasillo de la escuela. Varios especialistas estan vestidos con estas ropas del ejercito mientras vigilan cada sector de la escuela. Todos, bajo el poder de Sebastian.

-No te queda bien el papel de villano -le dije a mi acompañante.

-No se a que te refieres con el "papel de villano" -respondio el contrario sin verme, solamente siguiendo su rumbo- Y pudiste darle la llama del fenix hace dias. Es lo correcto.

-Ayudas a robarle la magia a las hadas, a lastimarlas y asesinarlas -respondi con un tono firme pero franco, subiendo mis hombros un poco.

-Las hadas son las responsables de la muerte de los brujos de Bahia de Dragon, Annelisse -Grey paro de golpe frente a mi y yo cai me caigo arriba suyo, su tono es frio y su semblante es igual- Mi familia era de ahi, solo entiende que no todos nacimos en cunas de oro y realeza como tu. -y siguio caminando, dejandome ami parada. Pero decidi seguirlo sin decir nada mas para no prenderlo fuego.

-¡Damas y caballeros, la Reina de Ignis! Annelisse TrueBlood -la exclamante voz de Sebastian invadio todo el pasillo y parte del salon principal de la escuela. Nosotros dos lo vemos en silencio, mientras este abre sus brazos como para que vaya a abrazarlo con una enorme sonrisa sarcastica en los labios- Puedes esperar del otro lado -le dijo esta vez a Grey, quien solo agacho la mirada y paso por alado mio para irse tambien, dejandonos a nosotros solos.

-¿Donde esta? -empece a caminar a pasos apresurados hacia Sebastian, quien se paseo por todo el salon principal, cerca de los ventanales que dan vista al campo de los especialistas. El con sus cejas, solamente me guio a uno de los balcones y ahi yo gire en esa direccion.

Me quede sin aire al ver a mi novio ahi mismo colgado por lianas de plantas espinosas, amarrado de manos, pies y cuerpo a ellas. Veo lo desmayado que esta y la sangre que tiene en parte de su rostro y manos. 

-Es muy exagerado, lo se. Pero se entiende el punto -mis labios tiemblan y doy un paso para acercarme a el mas asustada, no siento su pulso- Oye, ten cuidado -con su magia, dos enredaderas suben hasta el cuello de Sky y empiezan a enredarse en el mismo con fuerza, empezando a estrangularlo.

-¡Para! -grite causando ecos en todo el salon, las lagrimas se acumulan en mis ojos y apreto mi mandibula con miedo. Las lianas se aflojaron del cuello del rubio y luego se fueron de aquella zona- Mis hermanos te van a matar si yo no lo hago.

-Ay, Annelisse... deja ese papel de heroe -bufoneo el contrario, rodando sus ojos- Todos sabemos que sacrificarias a Sky para salvar a uno de tus hermanos, y tambien sacrificarias a todos por Rhaegal y Azriel. -yo no respondo.

Como no respondi, Sebastian prosigue a sacar el brazo que tenia detras de su espalda, mostrandome que en su mano portaba un fragmento de cristal para canalizar magia, es la primera vez que veo uno aqui mismo en la escuela.

-Me imagino que sabes para que es -siguio hablando, estirando aquel fragmento de cristal frente a mi rostro- Canalizas la llama del fenix en ella, y yo la canalizare para mi. Cuando la tenga, Sky sera libre -indico con su menton y luego empezo a hacerme señas con sus cejas, para que empiece con mi trabajo. Yo estire mi mano derecha hacia el fragmento, empezando a descargar la magia por las venas de mi brazo y luego directo a esa roca brillante. Siento como canalizo toda la magia para luego llevarla dentro del fragmento de cristal como si se tratara de una caja de envio.

[...]

Sebastian y yo seguiamos canalizando mi magia, cuando en un momento el me pide que pare y se aleja unos pasos, donde un soldado habia llegado a darle unas noticias. A todo eso, yo mire a Sky preocupada y viendo que aun se encontraba desmayado sobre las lianas.

Nos iremos pronto, cariño...

-Tus hermanos y tus amigos se estan esforzando mucho para rescatarlos -volvi a mirar a Sebastian cuando su soldado hipnotizado se fue, yo lo mire sin indiferencia, ¿era inevitable, no?

-Dicen que los TrueBlood jamas dejan morir a los suyos, ¿no? -le respondi con sarcasmo en mis palabras, ese era el dicho de mi familia a la hora del peligro y cuando teniamos que ir a salvar a los nuestros. 

-Claro que no, pero me pregunto que diran cuando se enteren que su futura reina se entrego para sacarse esto de encima -y me mostro el fragmento de cristal en sus manos, en referencia a la llama del fenix- Un poder que toda tu sangre protegio para que nadie te lo saque.

-¿Tengo otra opcion? ¿Dejarias ir a Sky asi y...?

-No te avergüences, Annelisse -me interrumpio, comenzando a caminar alrededor mio, mientras yo solo miro hacia adelante- Eres una adolescente, deberias ser una... adolescente. Divertirte con tus amigas y tu novio, en vez de pasar todos tus dias en el castillo de tu familia estudiando cada ley de Ignis y todo lo que debe saber un buen gobernante. Se lo que se siente perderse de todo eso por lidiar por cosas mas grande que tu.

-Oh, ¿asi que sabes lo que es gobernar una corona? -exclame con sarcasmo, pero solo recibi una mirada fria de Sebastian.

-...Todo lo que quieres es una vida normal, la que tu madre queria para ti -siguio hablando, pasando de mi comentario para no ahorcarme con esas estupidas flores que estan por toda la escuela.

-¿Ahora atreves a hablar de la difunta Reina Sophie Anne? -le pregunte con dolor en mis palabras y frunciendo mis cejas- ¿Te atreves a hablar de mi madre y como sabias lo que le paso?

-La Reina Sophie Anne no es tu madre, Ann... jamas lo fue -dijo y yo solte una risa falsa, no se que quiere causar con esa mentira- Todos los TrueBlood son castaños, ¿y de la nada sales tu pelirroja? -me miro, con ironia- Tu verdadera madre tenia la llama del fenix, al igual que tu.

-Eso paso hace mas de mil años. -le conteste con obviedad, es obvio que me lei todos los libros acerca del fenix original y su leyenda de hace mil años.

-Eso es lo que dicen los libros y las leyendas, pero la realidad es que estuvo en EXTASIS, durante mil años -me corrigio, moviendo su mano libre para explicarme mejor, a lo que yo movi mi cabeza un poco- Porque estuviste en extasis, durante mil años, cuando eras bebe.

Yo lo miro confundida, sin entender lo que me quiso decir. Eso no puede ser cierto, recuerdo cada recuerdo de niña en Ignis. A mis padres, mi abuelo y a mis tres hermanos mayores, ellos me criaron. Ignis es mi vida.

-Eso no es verdad, no puedo tener mil años... recuerdo cada recuerdo de Ignis, recuerdo mi infancia y a... -empece a hablarle con nervios, de mi boca no podia salir algo bien porque estaba nerviosa. Sebastian asiente con su cabeza lentamente.

-Naciste en medio de la batalla Blackwood...  tu mama, y la llama del fenix fueron las heroinas de la batalla -comenzo a hablar, volviendo a caminar por todo el salon con pasos tranquilos, su mirada jamas se despegaba de mi- Hasta que perdio el control, y miles murieron. Vivio con la culpa, por pasarte la carga a ti... ¡no podia imaginar que tuvieras que recorrer el mismo camino que ella! -exclamo- Por eso el dia que naciste, te puso en estado de extasis y se mando a si misma en el Reino de la Oscuridad...

-Entonces... mis padres...

-Murieron hace tiempo -Sebastian concluyo mi frase, yo lo miro con tristeza y un gran nudo en mi garganta que me asfixia. No puedo creer, siento que toda mi vida fue una mentira y nadie es quien dice ser.

-Y todo Ignis... mis hermanos, mi abuelo...

-La Reina Sophie Anne te encontro en el bosque hace dieciocho años, escondida y encerrada bajo un hechizo en una cueva que hace mil años habia permanecido a las ruinas de un castillo, para que estuvieras dormida aun. Tu madre te habia encerrado en aquel hechizo para que te mantuvieras dormida y nadie te encuentre -continuo, poniendose delante mio- Con ayuda de los brujos de Ignis, ellos te sacaron del estado de extasis y ahi "naciste" -e hizo comilla con sus dedos- Por segunda vez. Ahi te adoptaron y te dieron un nombre, te llamaron, la hija del Rey Rhysand y la Reina Sophie Anne. La futura Reina de Ignis. Eras solo una bebe de meses cuando los brujos te pusieron un brazalete para canalizar tu poderosa magia, es por eso que Sophie Anne te protegio por tantos años.

-No, no, no...

-Sophie Anne murio protegiendote, cuando Rosalind se entero de ti te queria a toda costa, Andreas la secuestro y queria informacion pero se cego tanto que la mato por accidente, y luego mato a Daeron cuando fue a rescatarla -Sebastian me tomo de los brazos para que lo vea directamente, mis lagrimas empezaron a deslizarce por mis mejillas- Rhaegal y Azriel tienen la mision de sacrificarse tambien para mantenerte vida, todos lo sabian... todo Ignis te protegia desde que te encontraron...

-¡Basta! -lo empuje, empezando a llorar en silencio y cai de rodillas frente a el, tapandome las orejas para no escuchar mas lo que me dice el.

-Dejala -de la nada, veo a Beatrix aparecerse detras de Sebastian, este se gira a verla.

-Pense que ya tenias tu parte de trato -le dijo el castaño despues de verla de arriba a abajo, no entiendo de que estaban hablando.

-Si... pero resulta que me gusta ser la heroina tambien -y dicho eso, estiro su brazo izquierdo lanzando una gran bola de energia electrica hacia Sky, rompiendo las lianas que lo amarraban y todo su cuerpo desmayado cayo al suelo, sin poder moverse. Con su otra mano, agarro el fragmento de cristal de las manos de Sebastian y lo dejo caer al suelo, partiendose en mil pedazos y perdiendo toda mi magia canalizada alli adentro.

-¡Sky! -grite con dolor, empezando a gatear hacia el y agarrar su cabeza para ponerla entre mis piernas, moviendolo para que intente despertarse y asi poder largarnos de aqui.

-No tienes ni puta idea de lo que acabas de hacer... 

-Si, acabo de salvar al mundo, y admito que... -Beatrix no pudo terminar de contestarle a Sebastian porque este ultimo invoco tambien una gran bola de energia electrica y la lanzo hacia ella, causando que ella salga volando hacia una de las columnas alado mio golpeandose la cabeza y cayendo al suelo tambien de cabeza, quedandose intacta mientras un charco de sangre invadia toda su cabeza.

-¡Beatrix! -grite tambien asustada, esta habia muerto a causa mia. Fue entonces que todas mis energias positivas se mezclaron con mis energias negativas, dejando que todas las llamas se extiendan por mis venas y salgan de mi espalda en forma de alas peligrosas, yo mire sin expresion a Sebastian que aun seguia de pie.

-¿Que vas a hacer? ¿Matarme? ¿Y luego quemaras la escuela? -pregunto con sarcasmo, mientras me veia levantarme y caminar hacia el, abriendo mis manos para convocar dos llamas en cada palma- Esto no era lo que tu madre queria.

-No me importa... -dije sin pensarlo- Mi madre era la Reina Sophie Anne, mis hermanos Daeron, Rhaegal y Azriel TrueBlood... Mi padre el Rey Rhysand Trueblood...

-No sabes de lo que estas hablando, Annelisse... -yo asenti lentamente con mi cabeza.

-Si... si, lo se... -y estire mis dos brazos hacia el, lanzando rafagas de fuego que este mismo esquiva con ayuda del poder del agua. En ese momento, las veo aparecer a Bloom, Stella, Aisha y Terra de no se donde, tambien transformadas. Observo la expresion de dolor de Stella luego de haber presenciado la muerte de su mejor amiga Beatrix.

Sebastian intento atacarme, pero entonces Aisha con unas hermosas alas hecha de agua lanzó dos poderes de agua para apagar el fuego, apoyada de Terra que enredo a Sebastian con dos enredaderas, inmovilizando sus pies hasta sus muñecas, continuando con Stella que invoco un gran rayo de luz que lo cegó por completo y transformó la mitad de su cuerpo en piedra. Para finalizar, Bloom y yo invocamos una gran llama y la lanzamos directo a el, causando que se termine de convertir en piedra y luego partiéndose en mil pedazos, cayendo sus restos sobre el suelo de porcelana.

Se terminó... todo se terminó...

Mis alas se desvanecen junto a las demás alas de mis compañeras, dios mío, todas sus alas eran tan hermosas y tan brillosas.

-¡Ann! -gire a mis espaldas viendo a Rhaegal y Azriel llegar junto a varios hombres de Ignis, estos se shockean al vernos sanas y salvas, sin rastos de Sebastian.

-¿Que paso? -pregunto Azriel TrueBlood entrando al gran salón, mientras que otros Ignianos ayudan a Sky y se lo llevan para darle asistencia médica.

-Sebastian murió, todo se terminó... -dije con un tono seco y tomo mucho aire, suspirando luego- Ya se fue...

-Ignis ya rodeo toda la escuela, los especialistas ya no están bajo el poder de la hipnosis, Musa ya recupero sus poderes -anuncio Rhaegal y las chicas se ponen contenta de eso ultimo. Veo que Rhaegal abraza a Stella como dando a entender que ya el mal se ha ido.

¿Oh no?

En ese momento, mis pies comienzan a fallar y una visión llega de vuelta a mi mente, veo aquella rara criatura muy alta de extremidades muy largas caminar sobre el cementerio de las hadas y como salía de aquel portal que se encontraba abajo en el santuario. El portal aún se encontraba abierto, solamente se cierra estando en el Reino de la Oscuridad.

-¿Ann? ¿QUE OCURRE? -Rhaegal me agarro antes que caiga al suelo, sosteniéndome cuando recobre la visión actual y donde estaba, seguía en la escuela con ellos.

-No es nada... solo me siento algo mareada por usar la llama del fenix -dije separándo su cuerpo del mio con algo de rapidez, abrazándome a mi misma- ¿Se termino?

-Los brujos de sangre ya se fueron, padre cancelara la caceria cuando se entere de esto -me respondio Azriel y una punzada toco mi corazón en ese momento, aun recuerdo todas las palabras de Sebastian antes del caos. Ahí mismo, Stella empieza a llorar cuando dos Ignianos recogen el cuerpo sin vida de Beatrix y se la llevan, Rhaegal va de inmediato a calmarla mientras le dice que ahora ella estará mejor.

Aun recuerdo que Andreas y Maxwell van a tener la pena de muerte nomas se ponga el sol y se anuncie de todo esto.

[...]

Más tarde y tras todo el caos que pasamos hoy, nos encontramos en nuestra suite en una especie de pijamada en los sillones rodeadas de mantas y muchos snacks dulces.

Rhaegal y Stella se encuentran acostados en un sillón tapados con frazadas mientras el la abraza por detrás. Bloom y Azriel se encuentran en el sillón enfrente de ellos, ella está acostada encima del pecho de él mientras el está sentado acariciando su pelo, también arropados con una frazada mientras Azriel y Rhaegal se arrojan pedazos de malvaviscos. Terra y Flora se encuentran en otro sillón acostada una encima de la otra y Musa junto a Aisha en dos sillones individuales, dejandome a mi parada a un lado.

-¿Alguien más vio nuestras hadas? Eran muy hermosas, las mías en especial -Terra estaba desde hace dos horas hablando de sus alas mientras todos reíamos.

-Si, terra... todos las vimos -exclamo con burla Stella mientras su novia la abrazaba más fuerte.

-No puedo creerlo,canalizar la felicidad y el odio para eso y...

-¿Y hacer que te salgan las alas? -pregunto Aisha también burlona hacia Terra- Si, nadie lo cree.

-Ustedes se merecen muchos snacks tras eso -dice Musa arrojándo distintas bolsas de dulces a cada uno, mientras que los muchachos se seguían arrojando cosas dulces.

-Az... -exclamo Bloom hacia su novio, pero este le dio un beso corto y prosiguió a arrojar otra palomita hacia Rhaegal.

-Ann, siéntate, vamos -pidió Flora al verme de pie y todos giraron a verme.

-No, yo... estoy demasiado cansada -dije empezando a caminar de reversa- Creo que me iré a acostar, ha sido un gran día agitado.

-¿Estas segura? Aquí hay espacio -insistió Terra palmeando a su lado, pero yo negué con la cabeza varias veces.

-Descuiden, iré a descansar -les dije antes que todos me desearan las buenas noches y yo me encierre en mi habitación que compartía con Stella, apagando todas las luces y sentándome frente a mi escritorio, mientras escuchaba a mis compañeras reír.

Mi cabeza no deja de recordar lo que paso con Sebastian.

Extasis... estado de extasis, durante mil años y un hechizo para mantenerme encerrada durante años para que no me despierte.

Fue el mismo hechizo que Farah uso en Rosalind para encerrarla en el santuario hace dieciocho años, quien sabe si fue antes o después de enterarse de mi existencia. Pero eso es algo que Farah se llevo a la tumba con tal vez miles de secretos.

Agarro mi diario y una pluma, empezando a escribir en una hoja vacía, empezando a expresar todos mis sentimientos y todo lo que ocurrió hoy.

Ignis no me dará respuestas, los directivos de Alfea tampoco me darán respuestas. Solo hay alguien que me puede dar respuestas.









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