"La vida es preciosa, pero la muerte lo es aun mas"

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《Annelisse》

Mis hermanos se deshicieron de los muros que me tenian prisionera dentro del santuario y me escoltaron afuera de Alfea y mas alla de la muralla, cerca del cementerio de las hadas, para que podamos hablar.

Observo a Dowling repetida veces, aun no puedo creer que volvio a la vida, hay muchas cosas que contarle que pasaron durante su ausencia.

Mis amigas se encuentras fascinadas con que estoy de vuelta, pero aun asi, mi mente no deja de reproducirme aquellos momentos que vivi siendo la prisionera de Rosalind Hale.

Aunque no digo nada, mis dos hermanos mayores notan mi semblante perdido y bastante distante de ellos, y eso es algo que debo empezar a cambiar. No quiero que se den cuenta de mi estado emocional.

-...Tampoco podiamos creerlo, y todo fue gracias a Flora -salgo de mis pensamientos cuando escucho que Terra sigue hablando, cuando parpadeo muchas veces esta abrazaba a su prima con orgullo.

-No entendia por que el compuesto no funcionaba en el cementerio, y entonces las plantas se marchitaron y lo entendi -explicaba Flora y levanto aquel pedazo de tierra y cesped para mostrarme- Este pequeñito absorbio toda la esencia de vida de Dowling. En el primer mundo se llaman Plantas de Resurrecion...

-Si es como una capsula de tiempo de la naturaleza -la interrumpio Terra al instante, a lo que yo volteo a verla de vuelta.

-Supongo que nos vendria bien algo mas de color, pero creo que es forma y forma -comento Stella junto a mi hermano Rhaegal que no dejaba de analizarme de arriba a abajo, pero yo evito su mirada a toda costa. No se que estara pensando.

-Lo alimentamos con un poco de la llama del fenix que proporciono Azriel, y la planta se abrio -añadio Aisha junto al nombrado, quien mi hermano le sonrio algo forzado, mirando a otro lado.

-¿Estabas ahi? -pregunte y Dowling volteo a verme, asintiendo con su cabeza de inmediato.

-Mi espiritu si -dijo tras asentir.

-Esto es muy raro, ¿verdad? -pregunto Musa hacia todos.

-Cuando supuse lo que Rosalind haria, canalice la mayor cantidad de magia que encontre y le pedi a la naturaleza que me preservara -ahora es Dowling quien nos explico todo su ingenioso plan, y nosotras pensando que ella no tenia un as bajo la manga. Ahora la directora suspira con algo de dificultad- No podia irme sin despedirme. La vida es preciosa...

-Y la muerte tambien... -musite por lo bajo, siendo escuchada solamente por Farah que me miro por unos segundos, pero no dijo nada.

-A lo que hay que mantenerle respeto -respondio tras callarse- No sobrevivi al ataque de Rosalind, y no podre ayudarlos frente a la batalla que se avecina -añadio, mirando las caras tristes de cada uno, en especial la mia- Pero aun hay tiempo para enseñarles una ultima leccion.

-Creo que deberia irme... ya que no soy un hada -murmuro Musa señalando la salida, este giro la mitad de su cuerpo con intenciones de irse pero Stella y Bloom la detuvieron, junto a la voz de Dowling.

-Todos son hadas, y todas merecen saberlo -fue lo que le dijo y Musa se quedo en su lugar, empezando a escuchar atentamente- Cuando era su directora, intente escudarlas de la cruda realidad del mundo. Estaba... convencida de que las emociones positivas era la piedra angular de la magia poderosa. Y Rosalind opinaba lo contrario -explico con un tono serio y hasta con tristeza, en lo ultimo me miro a mi- Que la fuerza solo podia nacer de la cruda realidad, ninguna tenia razon. Para alcanzar la verdadera magia, deben hacer las paces con todas sus emociones. La alegria osada de lo positivo y la angustia de lo negativo. Existe fuerza y belleza en ambas. Y estoy muy orgullosa de ustedes -confeso a lo ultimo, mirando a Rhaegal especialmente, y este la miro con sus ojos mojados, ellos tuvieron una relacion de madre e hijo. Tras la muerte de nuestra madre, Rhaegal se apeño a Farah y busco cariño mucho tiempo y tuvieron un fuerte vinculo, tan fuerte, que llevo a Farah a revivirlo con los brujos de sangre tras el accidente con los quemados hace dos años- Y de las personas en las que se convertiran -ahora lentamente me miro a mi- Ann, ¿damos un paseo?

[...]

Caminamos sobre el bosque otoñal del otro mundo, me dedico a mirar el suelo mientras piso las hojas secas tendidas sobre todo el suelo, es lo unico que me limito a escuchar mientras aun me someto en mis pensamientos. 

Farah analiza cada uno de mis movimientos, pero tambien decide respetar mi silencio, por lo que ambas caminamos a gusto de la otra y nos dedicamos a estar rodeada del otoño, sabiendo que pronto se avecina un frio y oscuro invierno. Caminar con Dowling me hace estar en Paz, siento que puedo hablarle sin que me juzgue.

-Aquella noche del accidente... nos atacaron y yo mande a mis hermanos dentro de un portal y yo... me prendi en llamas, sentia que mori... y cerre mis ojos -comence a hablar mientras pisaba las hojas secas con mas fuerza- Abri los ojos y estaba en casa... escuche a mi mama llamarme y...  la vi ahi, tan hermosa como la recordaba... -mi voz se quebro de tan solo recordar lo que paso esa noche- Fui corriendo a abrazarla, y vi a Daeron ahi mismo con una sonrisa, me decian que estaban contentos porque regrese a casa, y que ahora podriamos vivir juntos de vuelta -cuando mire a Dowling, esta me escuchaba atentamente y yo limpie mis ojos antes de empezar a llorar- Estaban todos esperandome, toda mi familia estaba de vuelta, y ahora ibamos a hacer una familia como antes... y entonces desperte, rodeada de cenizas y sin saber que habia pasado, no entendia, no sabia donde estaban mis hermanos o como acabe ahi. Y Rosalind me encontro, me dijo que me iba a llevar a Ignis, pero me llevo a su laboratorio y ahi empezo a experimentar conmigo.

Las dos nos detenemos en una pequeña montaña que da una hermosa vista a la escuela, y ahi tomamos asiento sobre una roca, yo sorbo mi nariz y me limpio los ojos por segunda vez, recordando el dolor de aquellos dias.

-Queria que explote mi poder, dejaba que las raspadoras me lastimen para ver si absorbian mi poder y no era asi, yo las mataba... me hizo experimentar con varias hadas que ella misma capturo, las mate a todas... -la mire a Farah- No era yo, lo juro... y esa noche pude escaparme cuando nadie me vigilaba y camine al cementerio por instinto, ahi vi que ella estaba a punto de matar a mis hermanos y no lo pense... la mate, senti que el fenix se apodero de mi y me deje llevar, ella se convirtio en llamas.

-Cargar con el peso de matar a alguien es algo que portaras toda tu vida -me dijo despues de unos minutos de silencio, yo la miro con los ojos llorosos- Pero el mundo es mejor sin Rosalind Hale, ella queria que seas su as contra la corona. Cuando Rosalind nos obligo a quemar Asterdel tuve el impulso de matarla, si hubiera tenido tu poder aquel dia no lo hubiera dudado.

-Yo quiero arrancarmelo, tengo miedo que el fenix tome todo el control y mate a quienes amo, o que no pueda controlarme, como hice con Rosalind -confese, abrazandome a mi misma con miedo. Un escalofrio recorrio toda mi columna- Cada vez que cierro los ojos vuelvo a ese laboratorio y las heridas vuelven a abrirse, y todavia siento cada dolor que ella me hizo pasar. Tengo miedo de perder el control una vez mas. Quisiera... borrar todo esto de mi cabeza, todavia la escucho en mi cabeza y sus palabras... quitarme el dolor...

-Las cicatrices es lo que nos hace mas fuerte, Annelisse -recalco la directora Dowling y yo suspire, mirando hacia la escuela y como el sol se esconde tras ella para el atardecer- Debes permanecer mas fuerte que nunca para lo que avecina, y proteger al mundo y futuro -cuando escuche eso ultimo, chasquee mi lengua.

-Eso es lo que siempre Rosalind me decia, al igual que mi madre, y mi padre, y todos los que confian en mi reinado de Ignis -le dije con mucha amargura, ya me canse de escuchar siempre lo mismo. Farah asiente varias veces con su cabeza.

-De acuerdo, entonces corrijo mis palabras -dijo y la mire con tristeza, ella se mantenia firme y una sonrisa de lado a lado, no entiendo como lo hace- Protege TU mundo, y a quienes amas -estiro su brazo izquierdo para mostrarme Alfea, yo acompañe esa mirada y observe mi escuela- Protege tu destino -ahora con ese mismo brazo lo dirigio al mio y tomo mi mano, donde porto mi anillo familiar- Y protege tu persona, Annelisse Eris Habren TrueBlood.

En ese momento, el sol ya se habia escondido hasta el amanecer de mañana, y en ese momento, las hojas comenzaron a bailar en el aire por el viento que se las llevaba, dejando que mi cabello acompañe esa brisa y lo haga bailar.

-Siempre estare orgullosa de ti -me dijo y se levanto de su lugar, a lo que yo levante mi mirada para verla mejor- Y solo te puedo decir, que confio en lo que haras, se que lo haras por el bien de quienes amas.

-¿Y como sabre que lo hare bien si no tu estas? -ahora yo me levante lentamente de la roca, estando cara a cara con mi ex directora que antes odiaba pero que al final (y tras su desaparicion) le tome mucho cariño. Dowling me indica a mis espaldas, a lo que ambas giramos y vemos a mis dos hermanos llegar junto a Stella y Bloom de la mano, mirando la escena.

-Ellos te lo diran -ahora voltee a ver a Farah una ultima vez. Esta es la despedida que tanto decia anteriormente, la mujer frente a mi abrio sus brazos con cuidado y yo no dude en ir hacia ellos.

Ambos nos envolvimos en un fuerte abrazo, yo empiezo a llorar en completo silencio, aferrandola mas a mi para no dejarla ir nunca mas, no quiero que se vaya, ella era la unica que pudo entenderme y a la que yo pude contarle todo. Cerre mis ojos con fuerza, sintiendo como mis ojos arden pero aun asi, me mantengo firme.

Poco a poco, voy sintiendo que mi fuerza se pierda, al igual que la persona que estaba abrazando empezo a irse junto al viento, y un gran brillo nos rodeo a todas. Al cabo de segundos, deje de sentir a la persona fisica que alguna vez conoci, sintiendo que solamente estaba abrazando al aire libre.

Abri mis ojos con cuidado a la par que bajaba mis brazos, viendo que enfrente mio ya no habia nadie mas, solo se encontraba un paisaje de la escuela Alfea, para hadas y especialistas.

Ella se habia ido. Ahora, para siempre.

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Capitulo Cortito, para lo que se aproxima

Realmente me gusto escribir este capitulo, habla mucho de la vida y la muerte de una persona y como hay que disfrutar cada pequeño momento de la vida, por mas que sea insignificante. Nunca se sabe si vas a volver a repetirlo, o no