"Ahora el Fenix y yo somos uno, nos hemos fusionado"

--⚜--

《Annelisse》

Llegamos al campus de practica de Alfea, donde estaba completamente vacio y oscuro, este es el lugar perfecto.

Siento cerca a los quemados, ellos entraron a la escuela, pero salieron cuando no sintieron nuestra presencia ahi mismo.

-Mi madre llegaran pronto. Son el ejercito que los detendra -dice Stella caminando junto a Rhaegal, apresurando el paso.

-No llegaran, Ste -le dijo suavemente mi hermano sin verla- Somos lo que los quemados quiere, siempre lo fuimos -añade mirandome, pero yo no a el.

-Rhaegal me enseño a detenerlos, pero tendre que usar mas magia de lo normal y... -hago una pausa para tragar saliva con preocupacion, mirando a los tres- No se si pueda controlarme.

-Tranquila, nos mantendre a salvo. Y a ti tambien -dijo mi hermano seguro de sus palabras, a lo que yo asiento, eso me da algo de tranquilidad- Intervendre si no llegas a tu maximo poder.

-No nos veras, pero aqui estaremos -aseguro Stella, tocando mi brazo levemente. Me siento a gusto con esta Stella de vuelta, siento que jamas nada paso entre nosotras.

En ese mismo momento, escuchamos rugidos a lo lejos, a la par que un quemado corriendo como un corredor profesional de lado a lado, desapareciendo en la misma oscuridad de donde salen.

-Llego la hora... -dijo Rhaegal tomando mi mano, y yo tomo mucho aire para estar tranquila, puedo hacerlo.

Rhae toma a Aisha y a Stella, alejandolas de mi mientras que yo me alejo de ellos tres, dirigiendome al centro del campus mientras que Stella los glamuriza junto a ella, para que no los vea.

Los quemados corren alrededor de mi, aun estando escondidos en los bosques, esperando el momento justo para atacarme.

Yo puedo...

[...]

《Narrador Omnisciente》

Annelisse se posiciono en el centro del campus, abriendo sus brazos para cerrar sus ojos, concentrandose en una sola cosa: El Fenix.

La joven se relajo por completo, dejo de resistirse con lo que tanto estaba luchando y queriendo mantener dentro de su jaula, ya no queria luchar contra el.

Ahora queria fusionarse con el.

Dejo que el Fenix despertara de su larga siesta, para que ambos se fusiones. Pero que sobre todo, el tome el control del cuerpo. Ahora las cosas habian cambiado, el debia salir.

Ella dejo de sentir su propio cuerpo, sentia que habia entrando en un sueño, cuando realmente de sus manos brotaron llamaradas de fuego que comenzaron a expandirse directo hacia sus brazos, comenzando a envolverlos en un calido y fuerte escudo de fuego.

Sus pies se despegaron del suelo, dirigjendose hacia arriba. Las brazos de Annelisse se cerraron contra su pecho, pero de pronto, los volvio a estirar hacia abajo, desatando un enorme fuego a su alrededor, como un circulo de fuego que se levantaban como paredes de proteccion. Barreras de fuego.

De todo su cuerpo comenzo a brotar fuego, como si alimentaran la barrera, pero no era asi. Ella abrio su boca para gritar con todas sus fuerzas, provocando que todos la escuchen y las llamas se aviven mas.

Sobre su pecho, se vio una gran luz dorada que era su corazon. Y entonces, abrio los ojos.

Los ojos de Annelisse eran de un color amarillo con tonos rojizos. Annelisse no dejo de gritar, formando un gran fenix con todas las llamas que su cuerpo largaba.

El fenix habia despertado. Ella, era el Fenix Original.

De su espalda brotaron unas hermosas alas de fuego, alas emplumadas, como el mismo fenix.

Y así como el Fénix se levantó de las cenizas, ella también se levanto con el. Regresando de las llamas, vestida con nada más que su fuerza, más hermosa que nunca.

Lentamente, los pies hicieron contacto con el suelo, y todo el fuego de ella desaparecio por completo. Pero de su piel, brotaban unas venas doradas que viajaban por todo su cuerpo, hasta en las mejillas de Annelisse. Su cabello flotaba en el aire, moviendose como si estuviera por debajo del agua.

Y esa fue la señal de ataque de los quemados.

Las criaturas se aparecieron frente a ella, rodeandola de lado a lado. Una docena de ellos, esperando a atacarla y matarla.

El primer quemado valiente fue corriendo hacia ella, pero rapidamente, Annelisse conjuro una lanza de fuego que lanzo contra el quemado, atravesando su corazon por completo.

Luego, otro quemado fue contra ella pero esta vez, el fenix lanzo una bola de fuego que lo acabo por completo, lo mismo hizo con uno que estaba a sus espaldas.

Annelisse conjuro un latigo de fuego precioso, estirarlo para tocar el pecho de un quemado y tambien acabandolo, luego agarrando a un quemado del brazo para arrojarlo contra otra direccion y lanzarle una bola de fuego.

Y asi, el fenix empezo a acabar con todos los quemados que intentaban acercar a el, con enormes bolas de fuego de un rojo bastante fosforecente, que lo agarraba por completo y terminaba por caer al suelo. O conjurando sus propias armas para acabarlo.

El fenix habia despertado, y tenia hambre.

Uno a uno, los quemados empezaron a caer contra el suelo, sin vida.

Pero lo extraño era, que cuando un quemado caia sin vida, su piel se abria como un huevo y salia un cuerpo humano del mismo, intacto, sin una perforacion por el fuego de Annelisse. Su "caparazon" era el que se destruia y era perforado, pero no lo de adentro.

Annelisse estiro su latigo de fuego hacia el ultimo quemado con vida, y tironeo con fuerza para traerlo hacia ella, clavando una espada de fuego justo en su corazon.

Habia acabado.

La joven quedo quieta sobre su lugar, buscando un nuevo contrincante, pero ya no habia ninguno mas de pie, porque el fenix habia ganado.

Rhaegal habia observado todo perfectamente, estaba sorprendido del poder de su hermana y todo lo que habia hecho. Ella finalmente hizo su transformacion, como el fenix que es.

[...]

《Annelisse》

El fuego se me fue de las manos, se habia apagado por completo. Pero todavia veo mis venas doradas y mi cabello flotando en el aire.

No puedo creerlo... siento la euforia recorrer cada rincon de mi cuerpo, viajando por mis venas y dandole velocidad a mi corazon. La adrenalina tambien esta en mi, como siento a toda la naturaleza: el ruido, como el agua se mueve, los animales. Todo... todo siento.

Agacho mi mirada, donde veo varios cuerpos donde estaban los quemados. Pero estos son cuerpos humanos, en perfecto estado. Algunos tienen esas armaduras con malla de hace siglos, otros ropa medieval. Y asi, distintas ropas.

¿Pero que...?

-¿Quienes son? -pregunte sin entender, hace un minuto eran completos quemados, pero ahora... eran personas sin vida.

Me giro cuando alguien viene corriendo hacia mi, tambien percatandose de lo que yo estaba viendo.

-Bien hecho, Ann -me dice la directora Dowling,y yo no entiendo nada de lo que acaba de pasar a mi alrededor.

Intento caminar hacia ella, pero cuando apoye mi pie perdi toda la estabilidad de mi cuerpo y prosigo a caerme contra Farah, quien fue que me sujeto rapido antes de que caiga al piso.

Me siento debil... y muy mareada...

-¿Que le pasa? -pregunto Aisha, corriendo hacia mi junto a Stella y Rhaegal.

-Esta bien, solo esta debil -dijo Farah sujetandome, pero rapido vino Rhaegal a hacerlo por ella- Hay que ayudarla a acostarla.

Rhaegal da un tiron y me sujeta entre sus fuertes brazos, mientras que yo apoyo mi cabeza en su hombro, sin energias y sintiendo que la cabeza me da vuelta.

-Te tengo, hermana... -me susurro el, mientras yo estoy a punto de caer desmayada en sus brazos- Y jamas te volvere a dejar sola...

Y con eso, deje de oir.

[...]

Abro mis ojos con cuidado, encontrandome de vuelta en mi habitacion de la suite Winx, rodeada de mis hermanos y mis amigos, encontrandose preocupados.

-Miren, desperto... -dijo Bloom por todos, siendo el centro de atencion.

-Hey, ¿como te sientes? -Azriel se sento junto a mi, tocando mi pelo mientras que Aisha me acomoda la almohada.

-Siento que di todo alla afuera... -digo honesta, ganandome la sonrisa y risa de Rhaegal, quien tambien se sento junto a mi.

-Se acabo, hermana... -asegura y lo veo sorprendida- Todo acabo.

Esas palabras si me dan paz, por fin algo bueno ocurre en mi vida.

-¿Que hay de Sam? -me dirigi a Musa y Terra, recuerdo lo mal que estaba debido a ese quemado que entro buscandome.

-Esta bien, gracias a Musa y a ti -responde Terra bastante tranquila y con una sonrisa dulce.

-Por favor, hubieran visto a Terra, pronto nos hara cirugia a todos -bromeo Musa en los pies de la cama, logrando que todos soltemos una risa- Para practicar. Aunque no sea necesario -y la miro.

Veo a Stella sonriendo, junto a Rhaegal que la mira tambien sonriente y un brillo en los ojos.

-Debo decirlo, lastima que no vi sus alas -confiesa Terra algo apenada, mirando a todos y cada uno- ¿Eran como las de Tinker Bell?

-Eran mucho mejores -aseguro Stella con sus cejas fruncidas.

-¿Mejores? Yo amo a Tinker Bell.

-¿Quien lo diria? -bromeo Stella ante el comentario de Terra con sarcasmo, sacandole una risa a Rhaegal.

Todo parece haber terminado para nosotros, el mal se ha ido.

Y el fenix desperto de su larga siesta.

[...]

《Narrador Omnisciente》

Cuando la guerra termino y todo volvio a su normalidad. Farah se encontraba aun en el campus de practica, viendo los cuerpos de personas sin vida sobre el mismo.

Eran los quemados, que habian vuelto a su forma humana.

Farah estaba tan concentrada y pensativa en eso mismo, que no se percato cuando Silva junto a los especialistas llegaron directo hacia ella, despues de un llamado.

-Ni rastro de Rosalind -advirtio Silva, llegando junto a la mujer- Pero, sin duda, volveremos a verla.

Silva bajo la mirada, viendo la docena de cuerpos con distintas vestimentas de distintos siglos, sin vida sobre sus pies.

-¿Que paso?

-El fenix desperto, Saul -respondo Farah, con un tono pensativo y tenso- Estuvo con Rhaegal y desperto la antigua magia de las hadas. La que todos creiamos que jamas se volveria a ver tras la caida del Fenix Original.

Ahora los dos se miraron.

-Le dijo a Annelisse que los habitantes de Bahia de Dragon eran Brujos de Sangre -siguio relantando.

Silva exhalo pesado, mirando hacia otro lado sin poder creerlo.

-Un detalle que Rosalind olvido de mencionarnos -reconocio el hada mayor, jugando con sus dedos.

-Brujos de sangre -repitio Silva, intentando reirse pero le era imposible hacerlo con la incomodidad que traia consigo- Entonces, ¿todo lo que hicimos para intentar detenerla...? -y se callo- ¿Todo lo que hice? -y en su mente se produjo la muerte de Andreas, a manos de el.

[...]

《Annelisse》

Al dia siguiente, me desperte siendo la primera de las chicas, y vine directo al campus de la academia, ya que habia una persona sentado sobre el cesped y con la mirada perdida, como si estuviera en un delirio mistico.

-Aqui estas -dije con una sonrisa, sentandome sobre la hierba junto a el, mirandolo. Pero Sky mira hacia delante.

-Oi un rumor -dice el, y yo lo veo atenta- Dicen que anoche te transformaste en un fenix.

Yo sonrio.

-¿Eso es un rumor bueno o un rumor malo? -le pregunto con curiosidad, y logro sacarle una risa a Sky, al que yo misma tambien me lo hago- La verdad, no me importa lo que piensen todos. Porque por primera vez, me senti yo misma... yo misma...

Ahora los dos nos quedamos en un silencio, pero un silencio agradable. Yo sonrio en grande, sin poder creerlo.

-Pertenezco a las llamas... -continuo- Pertenezco aqui...

-Lo se... -dice Sky casi susurrando y yo lo veo.

Los dos nos vemos, y mantenemos una sonrisa en nuestros labios.

Yo baje la mirada, notando lo que traia puesto.

-¿Traes la misma ropa que usaste anoche? -le pregunto al ver que trae aun su armadura y tiene su espada clavada sobre la hierba. Sky me ve y tambien ve su vestimenta- ¿Que paso? -pregunte preocupada, ¿no habra dormido en toda la noche?

-Estoy bien... -respondio y yo lo mire fijamente, no puede mentirme ami- Lo prometo.

¿Por que siento que "su promesa" me esta mintiendo y me oculta algo?

-Creo que alguien quiere hablar contigo...

Miro hacia delante, viendo a la directora Farah asomarse al parque, mirandome ami, sabiendo que quiere que hablemos a sola.

Yo miro a Sky, dandole un leve empujon y planteo un beso en su mejilla con cuidado, para que sepa que siempre estare aqui.

Me levanto del suelo y prosigo a seguir a Farah, para que hablemos.

[...]

-¿Como te encuentras? -pregunto Farah, ya encontrandonos en su oficina a solas.

-Cansada, pero sobrevivire... -digo honesta frente a ella, con mis piernas cruzadas y las manos sobre las misma, viendo la sonrisa de ella- Soy un fenix, despues de todo.

-Anoche canalizaste mucho poder -me recuerda y yo asiento, mientras suspiro- Es normal sentirte cansada...

-Me porte muy caprichosa -la interrumpo. Eso era algo que queria decirme hace varias semanas- Y no dejo de pensar en todo lo que hice. Usted... siempre fue increible conmigo -confieso, mostrandole una sonrisa- Me enseño tantas cosas, me rescato del peligro, evito la muerte de mi hermano y... me rodeo de personas increibles -la miro, levantandome de golpe- Y-y... he sido muy...

-Te perdono.

Me quedo callada de golpe, cuando Dowling me interrumpio para decirme esas dos sencillas palabras y yo parpadeo muchas veces.

No puedo creer todo lo que hice este año.

Le agradezco una sonrisa, pero empiezo a jugar con mis manos.

-Puedo... no se... -digo nerviosa, moviendo mis manos como si le hiciese señas- ¿Puedo abrazarla?

Dije por fin, dejando sorprendida a la directora, quien abrio sus ojos como platos y se me quedo mirando como si fuera una loca.

Farah se levanta de golpe, y yo voy directo a ella para abrazarla con fuerza, estando agradecida por todo lo que hizo. Primero Daeron, despues Rhaegal... y ahora yo.

Ella tambien me abraza con algo de nervios, pero termina abrazandome como se debe. Yo sonrio en grande sin que me vea, esto es algo genial.

Farah suelta una risa, por lo que me separo de ella para ver de que se trataba.

-Cuando me converti en directora, tome una decision -relata ella, y yo la escucho atentamente- Convertirme en ejemplo. -y se gira para servir te en su taza rapido- Proteger la fuerza, eso necesitan los estudiantes. Admitir los errores, abre las puertas a la incertidumbre -me entrega una taza de te, que agradezco con una inclinacion de cabeza- Pero no admitirlos, hacen que las personas te pregunten si te pueden abrazar.

Yo hago un gesto con mis labios.

-Debi haber sido mas sincera con tu familia e Ignis hace tiempo... -se disculpa con miedo, y yo miro mi taza de te.

-Eh... no se... -digo sin saber que decir, levantando mi mirada para verla- No puedo negar que fue dificil para Ignis todo esto... pero valio la pena descubrir que estaba pasando... solo espero que Daeron este bien.

Farah asiente ante mis palabras tambien.

-Hablando del principe Daeron... hay algo que encontramos... -confeso y yo subo mis cejas, atenta a lo que quiera decirme de la extraña muerte de mi hermano- Anoche... tras tu despertar...

-¿Que cosa?

Dowling toma aire, mirandome con pena.

-Su cuerpo... -me quede sin aire- El era un quemado... pero tu anoche, le devolviste su forma humana...