Catorce días...

Catorce días habían pasado, pura presión, para la buena suerte que tenían, Christian había tenido unas fuertes complicaciones y les había tocado que contratar un doctor temporal, mientras todos salían del país.

Christian no había podido dormir bien esos días. Las constantes pesadillas lo atormentaban, el constante sonido de su teléfono informándole de un nuevo mensaje que le había llegado, casi todos resultaban ser de Lucas, Royer y Maddi. Era demasiada presión, estaba a punto de tirar la toalla, a punto de mandar todo hasta el fondo y dejar de vivir. Tenía razón, sin Lucas no era nadie, no servía para nada. constantes pensamientos estúpidos rodaban por su mente en busca de una solución. Preguntas sin respuesta. Callejón sin salida. Un pozo sin fondo de dudas. Cosas inexplicables. Todo era muy confuso. No le prestaba la debida atención a ese tipo de cosas de que si lo hacía podría terminar mal... Como aquella vez...

Sacudió su cabeza borrando a se reportó de su mente. Es escalofriante momento de su vida. Momento difícil. Volteo los ojos. ¿Qué momento de su vida había sido fácil? Todo era un remolino de sucesos que nunca tenían un final feliz. de alguna u otra manera terminaba en un hospital. Sobredosis, un accidente, un intento de homicidio. Cualquier cosa que le sucediera lo hacía terminar en un hospital durante días.

En ese momento recordó a Lucas. Miró su mano, el espacio vacío en su dedo en donde debería estar el anillo. era torturante darse cuenta de que él Lucas había conocido a alguien más. se maldijo internamente por el hecho de tener cáncer, si no lo tuviera, no hubiese tenido que estar en un hospital y Lucas nunca hubiese tenido tiempo de estar solo, y nunca lo hubiese conocido...

- Chris...- lo llamaron. Alzo la mirada y vio a Javi.- Ya nos vamos. ¿Tienes todo?- él simplemente asintió.- Vale, vamos.

...

Salieron del lugar y caminaron por todo el estacionamiento para encontrar el auto que usarían. Javi tomo el volante y Christian se subió en el puesto del acompañante.

El jefe se le acercó a la ventanilla a Javi y lo miro. El jefe le sonrió. La sangre comenzó a correr rápidamente por sus venas. Su corazón latía con fuerza. Pero su expresión se mantenía serena y relajada. Aunque por dentro estaba muerto de pánico.

Para su mala suerte, Christian era un experto detectando esas pequeñas e incontrolables maneras que tenía el cuerpo de expresar nerviosismo. Lo miro con el ceño levemente fruncido. ¿Porque está nervioso?

- Todo irá bien...- dijo manteniendo la sonrisa.- ¿Cierto Javi?- paso su dedo índice por el contorno de la ventana del auto. Javi fijo sus ojos en eso. En su dedo había un tatuaje. Una pequeña flor de lirio. Levantó la mirada, y fijo sus ojos en los de él, tenía esa sonrisa pícara, pero de sus ojos se podía ver el mismísimo infierno.- Irán por la ruta planeada, sin ninguna distracción, ni jugadas extrañas. ¿Entendido?

- Si, jefe.

- Bien.- dijo eso último, se dió la vuelta y se fue. Javi respiro profundo y encendió el auto, poniéndolo en marcha.

...

Casi todo el camino estuvo tranquilo y extrañamente silencioso. Javi mantenía una velocidad estable, y conducía por la ruta marcada sin ningún problema.

Javi soltó un pesado suspiro. Oprimió un botón y el cinturón de seguridad de Christian se contrajo de manera brusca dejándolo fuertemente pegado al asiento. Christian lo miro. Agarraba con fuerza el volante, y respiraba pesadamente.

- Javi, ¿Que haces?- preguntó desconcertado y nervioso al mismo tiempo.

- ¡Lo siento, pero debo hacerlo!- gritó con desesperación.- ¡Debo hacerlo! Perdóname Christian... ¡Pero debo hacerlo!

- ¿Hacer que?

- No importa.- susurró.- Mientras menos sepas estará bien.

Comenzó a acelerar, la calle estaba a su favor ya que era una larga autopista de unos cincuenta kilómetros, talvez más. Christian comenzaba a desesperarse. Javi trabó el acelerador y lo miró por unos segundos. Unos pocos segundos que lo hizo recordar toda su vida al lado de Christian.

- Lo siento.- dijo, abrió la puerta y salto del auto.

- ¡Javi!

Dió varias vueltas en la carretera hasta detenerse. Golpeado, dolorido, sentía que todo le dolía, se levantó, sacó un pequeño control y lo puso en dirrección al auto.

- Lo siento, Christian.- oprimió un botón que quitaba el piloto automático. Y cómo se lo esperaba, debido a la alta velocidad que llevaba, se descontroló completamente.

Christian forcejeaba para poder desabrochar el cinturón. Pero era automático.

- ¡Maldición! ¿¡Porque tuve que hacer esto tan bien!?- gritó. Miró al frente y vio más adelante el fin de la calle.- Demonios.- susurró.

Escucho un sello de seguridad y el piloto automático se desactivó. Un par de metros más y el auto se ladeó un poco, derrapando en la carretera, haciendo que comenzará a dar vueltas.

Javi con cada vuelta sentía un golpe en el estómago. Recuerdos que le pasaban por su mente torturandoló, comenzó a recordar el momento en el que se conocieron, la primera vez que hablaron, cuando se volvieron amigos. ¡Lo estaba traicionando, por su beneficio propio. En ese momento reaccionó, sus ojos se llenaron de lágrimas. ¡No puedo dejar que muera!

- ¡¡Christian!!- con todas la fuerzas que tenía, ignorando completamente el dolor que sentía en todo su cuerpo, corrió en dirección al auto. Oprimió un botón y volvió a trabar el volante, lo que hizo que el auto se detuviera de golpe. Pero no contaba con que por el detenimiento repentino del auto, este - por simple ironía - cayera por la ladera de la autopista.

- ¡¡Christian!!

Fueron tantos los nervios que apretó el control el su mano. Empeorando completamente las cosas.

Comenzó a dar vueltas cuesta abajo, sin parar, logró apenas escuchar otro sello de seguridad, y el cinturón se desactivó.

El auto se detuvo al chocar fuertemente contra un árbol en la parte de abajo de la colina. Christian estaba conciente, respiraba agitado, todo le dolía, movió involuntariamente la pierna y al hacerlo le causó un horrible dolor que lo hizo soltar un grito que desgarró su garganta. Bajo la mirada hacia su pierna, un gruesa rama de un árbol la atravesaba, vidrios de la ventana del auto se le habían terminado incrustando en la piel, cada parte de su cuerpo sangraba. Sintió una fuerte contracción en su estómago, tosió, y de su boca salió sangre. Acerco su mano a su estómago y sintió un gran pedazo de cristal clavado en su piel profundamente. Se le acababan las fuerzas, se sentía mareado, perdía sangre rápidamente.

///Flashback///

- ¿Por qué la gente entra en coma?- le preguntó a Royer.

- Pues... Naturalmente pasa por un sistema de seguridad del cuerpo. Cuando se ve muy maltratado, o por un golpe muy fuerte... Lo hace para preservar la vida.

///Fin del Flashback///

...

Comenzó a cabecear, su mareo aumento. Sintió un calor en su mejilla, miró a su lado y vio a Lucas. Este le acarició suavemente la mejilla, mientras lo miraba con ternura.

- Lucas...- susurró.

- Estás muy mal, Chris. ¿Por qué no te duermes? Duérmete, cierra los ojos y no vuelvas a despertar. Todo estará bien.- un calor invadió sus ojos.

Comenzaron a cerrarse, sus párpados se pusieron pesados.

- Duérmete, Chris. Todo estará mejor después.

Y con esas palabras, sus ojos se cerraron, y se durmió.

...

Javi corría por el bosque escapando de alguien que lo perseguía. Rápidamente se cambiaba de dirrección, escabulléndose por los árboles. Se detuvo detrás de un árbol, a recobrar el aliento. Vió una mancha blanca delante de su cara, tapando su nariz y su boca. Rápidamente el olor metálico entro en su sistema, su cuerpo sufrió un espasmo y se desmayo. El sujeto desconocido lo arrastró hasta un auto, y se lo llevó.

...

"Un accidente ha sido reportado en el sur de la cuidad. Un auto dió vueltas por toda la autopista central y cayó por la ladera."

Era lo que pasaban por cada canal de la televisión.

Una ambulancia llegó al lugar del accidente, lo sacaron del auto y se lo llevaron al hospital. Pero para su mala suerte no lo llevaron al Dustand, sino para el Hospital General de Lewisham, un par de calles más allá de ahí.

Lo ingresaron, y lo hospitalizaron como un paciente de urgencias. Lo mantuvieron en cuidados intensivos durante unas horas, hasta lograr estabilizarlo completamente. Después de limpiarlo, y buscar en sus cosas su identificación, se enteraron que era Christian. Legalmente aún era pareja de Lucas así que lo primero que hicieron en el hospital fue llamarlo.

...

- ¿Si?

- ¿Lucas Willsom?

- Si, soy yo.

- Lo estamos llamando del Hospital General de Lewisham. Porque hace unas horas ingresamos a Christian Evans...- al escuchar eso, su mundo se detuvo.

Dejo de prestarle atención a lo que pasaba a su alrededor. Solo alcanzó a escuchar que debía ir. Y a medias logró articular unas pocas palabras para que lo transfieran al Dustand.

Algunas horas después, Lucas estaba en la entrada de emergencia del hospital, esperando a que llegara Christian. Una ambulancia se estacionó al frente de él, y vio como bajaron a Christian de ella. Estaba conectado a una máquina extraña, y tenía un tubo que le entraba por la boca.

A Frank se le cortó la respiración cuando vio la máquina especializada para los casos de cuidados intensivos durante el período de estabilización de un paciente en coma. ¿Está en coma? No puede ser.

Morgan y Philip se quedaron en shock.

- No puede ser.- susurró Morgan. Lucas alcanzo a escuchar eso. Su corazón latía con fuerza.

- Tiene varias costillas partidas. Sufrió varios golpes en la cabeza. Un árbol atravesó su pierna, y tiene una herida fresca en la parte baja del estómago. Perdió mucha sangre. Y... Está en coma.

A Lucas se le detuvo el corazón al escuchar eso. Subieron a Christian a una de las habitaciones del piso dieciocho del hospital. Frank entró en el cuarto y vio a una mujer al lado de Lucas, sosteniendo su mano.

- ¿Y ella quien es?- preguntó Frank lleno de fastidio.

La mujer se volteo hacia él y se quitó las gafas oscuras que tenía. A Frank se le cortó la respiración cuando la vio. Ese cabello oscuro, ojos verdes, esas facciones demasiado iguales a las de...

- ... Lucas.- susurró.

- Mucho gusto. Soy Laura Vidán Willsom Monterrey, y soy la hermana de Lucas.

- ¿Hermana?

- Es mi hermana.- dijo Lucas con odio.- ¡¡No estoy saliendo con nadie!! ¡¡No me dejaron explicar nada!! ¡¡Todo esto es su culpa!!- Laura le puso una mano en el hombro. Él la miró. Respiro profundo y trató de calmarse.

...

Ambos salieron del cuarto, dejando a Lucas solo. Tomo la mano de Christian, estaba fría, inmóvil. Respiro profundo tratando de relajarse.

- Hola Chris...- se interrumpió. El monitor que marcaba los latidos de su corazón, comenzó a sonar más rápido.- Soy Lucas, tranquilo.- sus ojos se llenaron de lágrimas. Aunque trató de contenerse le fue sumamente imposible.- Lo siento. T-todo esto es m-mi culpa.- sin querer tartamudeo.- La chica que estaba viendo era Laura...- una lágrima salió lentamente del ojo derecho de Christian, y se deslizó por su mejilla. Lucas apenas la vio, la limpio.- N-no... Tranquilo, no llores, no llores. Todo estará bien...- lágrimas salían de los ojos del chico que estaba en la camilla.- Chris... Estás en coma. Pero saldrás de esto...- sacó el anillo que tenía guardado en el bolsillo, y se lo puso a Christian.- Yo estaré contigo hasta el final.- beso su mano.- Yo estaré contigo.

...

Javi despertó de golpe amarrado a una silla, comenzó a forcejear. ¿Dónde estaba? ¿Que pasaba? Miró a su alrededor y todo estaba oscuro, era una habitación grande. Sus manos estaban fuertemente amarradas al posa-brazos de la silla, y sus piernas igual de amarradas.

Escucho una puerta abrirse, la luz se encendió cegandoló por unos segundos. El jefe entro al cuarto y lo miró. Con él también entraron varias personas que pertenecían a Las Cobras.

- Javier Alexander Hidden.- dijo lentamente, puso una silla enfrente de él, mirándolo con una sonrisa.- Pensaste que te saldrías con la tuya.

- ¿D-de que hablas?

- Hace un par de horas... El jefe de La Flor de Lirio, me dijo que dejara de tratar de meter personas en su clan. No lo entendí al principio, hasta que comenzó a describir a la persona, y me dijo que le había encargado matar al de "ojitos azules".- Javi tragó un seco.- Y puedo suponer que fuiste tú.

- Jefe, enserio yo no quería...- sus palabras fueron detenidas por un fuerte golpe que llegó a su cara, en su mejilla derecha.

- ¡Cállate!- le ordenó.- ¡Eres un imbécil! ¿¡Como se te puede ocurrir la idea de matarlo!? ¡¡Gaste demasiado dinero en él para que muera!! ¿¡Tienes idea todo lo que invertí en Christian, para que lo mates!? ¡¡Christian es mi protegido!! ¡¡Gaste millones!! ¡¡Di dinero a sus patrocinadores!! ¡¡Invertí dinero en su proyecto!! ¡¡Lo hice famoso!! ¿¡Acaso sabes lo mucho que ha hecho Christian para mantener a este clan a flote!? ¿¡En que mierda pensabas!? ¿¡Querías salirte del clan!?

- No.- susurró con miedo.

- ¿¡Quieres salirte!? ¿¡Eso es lo que quieres!? ¿¡Quieres salirte ahora!? ¿¡Eso quieres!?- saco su pistola, la cargó y le apunto en la frente. Saco su teléfono y llamo a alguien.

...

Laura salió del cuarto, camino por lo pasillos del hospital durante un buen rato, esperando. Hasta que su teléfono comenzó a sonar.

- ¿Si?

- ¿Y Christian?

- Está en coma. No sabemos si hay posibilidad para que despierte.

...

El jefe cerró los ojos, molesto, colgó la llamada y guardó su teléfono. Guardó su arma y se acerco a Javi.

- Está en coma.- susurró.- ¿Sabes lo que eso significa?- le sonrió. Se dió la vuelta y camino hasta la puerta.- Esto es para que la próxima vez que vayas a traicionarme lo pienses dos veces. Tu vida dependerá de Christian, si el muere tú mueres.- abrió la puerta.- ¡Ponganlo a dormir!- ordenó y salió del cuarto.

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Re turbio 𖦹.𖦹

Interesantemente no me costo hacer este capitulo, je シ︎ violencia >:3

𝕍𝕠𝕥𝕖𝕟 𝕪 ℂ𝕠𝕞𝕖𝕟𝕥𝕖𝕟.

𝙱𝚢𝚎 ( ˘ ³˘)♥︎