Capítulo 101: Inquieto.
Frank se quedó sentado al lado de la camilla escuchando a Christian llorando, no sabía que hacerle o decirle para que se calmara. Pero, ¿Que podía decirle? Golpes en la cabeza, rasguños, moretones, sangre y residuos de semen. Ese tipo de personas le daban realmente asco. Pero como era normal nunca usaban protección y le hacían el trabajo más fácil para conseguir a el responsable.
Rodeó la camilla y la mirada aterrorizada de Christian lo entristeció.
—Tranquilo, aquí estás a salvó. Necesito que me digas algo para encontrar al responsable.
—No... no lo sé... no lo conozco.
—Quédate tranquilo. Aquí estás bien.
Christian escuchó la puerta cerrarse, las lágrimas salían de sus ojos sin que pudiera frenarlas. Ese sentimiento de asco se apoderaba de su mente por completo. Odiaba tener que recordarlo todo así de claro, así de preciso. Odiaba todo lo que había pasado. Se sentía asqueroso, todo su cuerpo se sentía repugnante. No quería sentir nada.
La puerta volvió a abrirse, alguien se sentó en la camilla, en cuanto esa fría mano lo toco entró en pánico. Comenzó a removerse en la camilla gritando queriendo deshacerse del agarre, estaba asustado, no quería que lo tocará, no quería, le daba asco.
—¡¡No déjame!! ¡¡Suéltame!!
—Christian soy yo, cálmate.
—¡¡Déjame!! ¡¡Déjame!!
—Christian cálmate.
La puerta se abrió y alguien entró tomando su hombro, alejándolo de Christian con brusquedad.
...
Jim se quedó casi tres horas sentado en la mesa de la cocina pensando en cualquier cosa. Lucas interrumpió sus pensamientos al entrar en la cocina.
—Lucas...— este lo miró. Jim respiró profundo.— Siéntate.— Lucas con fastidio dejo el vaso encima de la mesa y se sentó.
—¿Que quieres? ¿Quieres regañarme otra vez?— Jim cerró los ojos evitando pelear.
—No quiero discutir contigo. Solo necesito que te quedes tranquilo.— al escuchar eso inevitablemente Lucas se puso en tensión. Esas palabras siempre significaban algo malo.— Hoy en la mañana, pasó algo y realmente no se que opción tengo.
Le pasó el teléfono. Lucas agarró el teléfono mirando los mensajes, se horrorizó al leerlos y miró a su padre.
—Esto es una broma, ¿Verdad?
—Necesitamos opciones. Yo lo único profesional que puedo hacer sería internarlo para que no emperore, pero supongo que tú tienes una mejor idea. Tú con unas palabras podrías mantenerlo tranquilo.
—Tanta estupidez por mantenerme lejos, ¿Para que quieras que lo arregle yo?— esa respuesta lo fastidió.
—Lucas entiéndeme. Christian y tu es mejor que esten separados. Pero él está bajo nuestra responsabilidad, yo solo puedo hacer lo que debo, trate de razonar con la administración, y me dieron la orden de internarlo. Pero se que eso no te gusta así que... Arregla lo que hiciste.— dijo levantándose de la mesa, se detuvo en el marco de la puerta y miró a Lucas.— Tienes una semana, si no hay mejora tendré que internarlo.
...
Lucas se ducho y se vistió para ir al hospital, duró bastante tiempo en el baño mientras va se afeitaba, se había descuidado demasiado en ese mes. Salió de la casa y fue directamente al hospital. Le indicaron hacia donde tenía que ir. Al irse acercando comenzó a escuchar los gritos de Christian, acelero el paso dejando atrás al que lo guiaba. Entró en la habitación, apartando a la persona que lo sostenía.
—¡¡Christian!!— le gritó a la vez que lo zarandeo. Este lo miró aturdido sin entender nada.
—¿Lucas...?— preguntó incrédulo. Lo miró, al reconocerlo completamente se desesperó.— ¡Lucas!
—¡¡Cállate!!- le gritó. Christian cerró la boca inmediatamente, Lucas secó las lágrimas de su rostro, lo abrazó, Christian se aferró a su brazo.— Ya tranquilo, ya estoy aquí. Lo siento. Si yo hubiera estado contigo nada de estoy hubiera pasado.
Félix se quedó en una esquina de la habitación mirando a ese personaje desconocido. Con solo gritarle lo calmaba. Eres estúpido que de esa manera lo hiciera. No importaba las vueltas que le diera, no lo creía posible. Veía como Christian simplemente se entregaba a esa persona.
Después de una hora Christian estaba profundamente dormido, Lucas acariciaba su cabello mientras veía el registro médico, Christian sabía cómo falsificar su firma. En la habitación entró Frank, lo miró seriamente notablemente arrepentido.
—Falsificar la firma de un tutor legal es un delito federal, ¿Sabías?
—Fue algo que no pensamos en el momento.
—Si yo quisiera llevar esto a mayores tendría cinco testigos de que en esta fecha no salí de mi casa. Pero ahora solo me quiero concentrar en Christian y dejaré pasar esto.
—No volverá a suceder.
—Eso espero. Si Christian hubiera tenido una crisis, ¿Que hubieran hecho ustedes? Si Christian los hubiera matado, yo no hubiera tenido que responder por nada. Ustedes mismos se perjudican.
Frank se quedó en blanco al escucharlo hablar. Si era cierto lo que le había dicho Royer, la seriedad con la que le hablaba no se compraba con la voz con la que le había hablado a Christian.
—Busca algo para darle de comer. Puedo suponer que no ha comido bien en días.
Frank asintió levemente y salió de la habitación. Bajo hasta la cafetería y compró unos jugos y sandwiches.
...
—Come esto.— dijo quitándole la envoltura al sandwich.— Toma.— se lo dió y Christian comenzó a comerlo enseguida. Le destapó el jugo de manzana y se lo dió.— No habías comido mucho estos días, ¿Verdad?— Christian no le contestó. Lucas sacó su bolso un frasco de pastillas.— Mi padre dijo que la administración te había recetado estás pastillas.
—¿Para que?— dijo dándole un mordisco al sandwich.
—Son unas nuevas pastillas para tu ansiedad. Creo que volverán a iniciar el tratamiento para la controlar la depresión. Debo que esperar las órdenes de la administración...— se detuvo en cuanto Christian tocó su mejilla, no pudo evitar soltar un quejido.
—Jim te golpeó, ¿Verdad?
—No te preocupes por eso. Yo estoy bien, solo fue un golpe. Anda terminar de comer. Iremos a casa.— Christian asintió. Félix salió de la habitación dando un portazo.
No eran celos, no podían ser celos. Ni siquiera le gustaba Christian...
Se frenó en seco cuando ese pensamiento se cruzó en su mente. ¿Christian... Le gustaba? ¿Eran celos lo que sentía? ¿Por qué le molestaba verlo con ese? Siguió caminando hasta entrar en un baño. Se encerró en un cubículo y no logró contenerse, y simplemente dejo que las lágrimas salieran. "Iremos a casa", eso significaba.... ¿Que Christian se iría con ese tipo? Lucas... Cómo odiaba ese nombre.
- Maldito Lucas...
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Hola wenas :D como tan? Ya volví uwu
Wattpad me borró este capítulo tres veces en un día ;-; aún tenía la copia en las notas pero que fastidio tener que pasarlo otra vez :')
Wattpad porque eres así.
Weno ya :3
Disfruten el capítulo.
Cuidense princesitas y princesitos.
Bye ❤️
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