Capítulo 16
El reloj marcaba las 3:30 pm cuando Taehyung decidió dejar de lado el boceto en el que llevaba todo el día trabajando. Estiró sus músculos escuchando traquear sus huesos después de estar tanto tiempo sentado en la misma posición. Había quedado en salir con Donghyuk ese día ya que se estrenaba una nueva obra en el teatro, era una de las tantas cosas que había descubierto que tenían en común. Tronó sus dedos y a paso perezoso salió de su estudio siendo recibido por el aroma a manzana y canela del omega que se encontraba sentado en el sofá leyendo uno de los tantos libros que tenía, casi desapareciendo en el enorme abrigo blanco que cubría su cuerpo al estar hecho bolita en su lugar junto a una bolita de pelos negros con manchas cafés que dormía plácidamente con las caricias en su cabecita.
Aquella imagen causó una punzada de dolor en su pecho, tan parecido y al mismo tiempo tan diferente. Sacudió la cabeza, no era momento de ponerse a recordar todo lo que ya no volvería.
Bufó. Se había olvidado por completo de Hoseok ¿y ahora qué iba a hacer con ese tipo molesto? No iba a tomar el riesgo dejarlo solo en casa, quién sabe qué podría pasar en su ausencia. Entonces se le ocurrió una idea, sacó su teléfono del bolsillo de sus pantalones y marcó el número de la persona que tenía en mente, pero sin conseguir una respuesta inmediata.
— Mierda, Jimin, responde —farfulló por lo bajo, ganando la atención del par que lo miraron apenas escucharon su voz, recibiendo una sonrisa por parte de uno y un ladrido por parte del otro. Pero los ignoró y la voz de su amigo por fin se escuchó al otro lado de la línea — Ji-
— ¿Qué carajos, Taehyung? Deja de ser tan insistente, esta cosa vibraba peor que maquina de coser justo cuando estaba atendiendo una mesa.
El tono molesto de Jimin lo hizo dudar si pedir ayuda o no, pero ya que, no había de otra, Yoongi de seguro estaba en la veterinaria, Jungkook haciendo castings, Seokjin en el tribunal o recolectando pruebas para algún juicio, y Namjoon trabajando en el hotel y procurando que todo esté en orden. El único que le quedaba "libre" era su amigo de mejillas rechonchitas.
— Alto, fiera. Amanecimos bravas hoy, eh —dijo burlón, escuchando un chasquido como respuesta.
— Hoy no ha sido mi día, perdón. Le diré a Jackson que debe contratar a más personas que en serio nos hacen falta. Mejor dime rápido qué sucede, tengo que regresar a trabajar.
Y como si la Diosa Luna y los ángeles por fin lo vieron a la cara, sonrió. Tenía la excusa perfecta en sus manos. Le dio una mirada manera acusatoria al par de chismosos que escuchaban atentos su conversación antes de darse vuelta y dirigirse a su habitación.
— Pues, no busques más, pequeño Chimchim. Tengo la solución perfecta a tu problema.
— Solo llame al... No, mentira. Dime, según tú, cuál es aquella solución perfecta a mi problema.
— Hoseok.
— ¿Uhmm? ¿Hoseok? ¿él que tiene que ver aquí?
— Ash, a veces eres muy lento. Lo que te trato de decir es que él puede ayudar hoy en tú trabajo —claro, no iba a decirle la verdadera razón por la cual le decía aquello —Solo tienes que cuidar de él toda la tarde y procurar que no dañe nada. Aprende rápido y te podría ayudar con las mesas.
Hubo silencio por un momento de la otra parte de la línea hasta que se escuchó un suspiro seguida la voz de Jimin.
—Está bien. Traelo.
Y como si le hubieran dado la mejor noticia de su vida dio un brinco y sonrió, dirigiéndose a largas zancadas hacia su habitación para darse una ducha y cambiarse de ropa mientras se despedía de su amigo.
Hoseok veía confundido al peliazul hasta que salió de su campo de visión. Suspiró y volvió a acariciar el esponjoso pelaje del perrito a su lado.
—¿Y ahora en que me metió tu padre, hijo mío?
.・✫・゜・。.
¿Jimin iba a matar a Taehyung? Jimin iba a matar a Taehyung.
¡Por la Diosa Luna! ¡Pero que hombre más irresponsable!
Reviso nuevamente la hora en la pantalla de su teléfono sintiendo como se hacia presente un tick en el ojo izquierdo. Eran las 8:30 p.m. y el irresponsable alfa no hacia acto de presencia siendo que su jornada de trabajo había acabado hacia ya unos 20 minutos y ahora ambos omegas se encontraban fuera del local bajo el pequeño techo de este, las gotas de lluvia caían fuerte contra el pavimento y golpeaba contra el vidrio de las ventanas gracias al viento. El aire frío se colaba por su ropa calando hasta los huesos haciéndolo estremecer. Debió haber revisado el clima antes de salir y llevar dinero, pero no, estuvo confiando en que Taehyung lo iría a recoger.
Nunca más iba a confiar en aquel alfa mentiroso "Hoseok aprende rápido" dijo, "No te va a dar problemas" dijo, y ahora quién se había llevado más regaños ese día que el resto de su vida, exacto, él. Sin duda, el Omega azabache era un desastre andante que causaba desgracias donde estuviera, pero no podía enojarse con él, después de todo se había reído mucho con su torpeza que hasta le recordaba todas las veces en que su pareja había armado desastres en casa que terminaban en risas.
Sonrió, sin duda, Namjoon había sido una de las mejores personas que pudo haber llegado a su vida.
Hoseok se estremeció por la ráfaga de viento helada que lo golpeó y Jimin en ese momento maldijo no haber revisado el clima antes de salir para llevar un paraguas.
—Creo que se le hizo tarde a Tae, deberíamos ir avanzando, después de todo mi casa no queda tan lejos —habló de forma amigable, abrazándose a sí mismo en busca de calor.
—Sí —aceptó tímido, comenzando a seguir al chico rubio.
Decir que estaba avergonzado era poco, ¡Diosa Luna! Había hecho de todo en aquella cafetería, menos ayudar. Podría empezar por el hecho de que armó todo un escándalo cuando una máquina comenzó a hacer ruidos extraños y a botar humo, casi le da con la escoba por el susto que le causó sí no fuera por el alfa dueño del lugar lo detuvo hubiera roto ese aparato raro al que Jimin denominó cafetera.
O cuando hizo caer toda una bandeja de pedidos cuando unos niños corretearon entre sus piernas haciéndolo perder el equilibrio y regar todos los postres encima de una familia de tres que había ido al lugar para festejar al cachorro de la familia por su cumpleaños, sí, el pequeño recibió un buen regalo de su parte, eh. Gracias al cielo al niño pareció no molestarle, es más se puso a reír a carcajadas diciendo algo a sus padres que no logró descifrar; pero supuso que no fue nada malo cuando los padres del cachorro asintieron y él niño corrió hasta él, halando de la manga de su camisa.
Y así fue como paso de ser ayudante de cocina y mesero a ser el caballito de un grupo de pequeños revoltosos en el área infantil de la cafetería, una tarde larga y agotadora para su espalda y orejitas que eran crueles víctimas de los niños que las apretujaban sin piedad, babeandolas y de vez en cuando dejando suave caricias.
Tenía que darse un buen baño apenas llegue a casa, quería sacarse el olor a baba de encima.
—Llegamos —avisó el rubio, tiritando mientras intentaba insertar la llave en la cerradura de la puerta hasta que al fin lo logró y se adentraron con rapidez al acogedor ambiente del lugar. Jimin se sacó sus zapatos húmedos junto a las medias dejándolas a un lado en el recibidor, colgando su chaqueta también empapada en una percha cercana —Esperame aquí, ya te traigo ropa seca —y con eso desapareció entre los pasillos corriendo por meterse a preparar una ducha de agua caliente.
Hoseok asintió y agradeció pues la lluvia los había empapado por completo, todo su cuerpo se encontraba congelado hasta los huesos y sus dientes chocaban entre sí, su colita se encontraba erizada por el frío y sus mejillas sonrojadas. Solo quería que Taehyung llegase rápido para refugiarse entre sus cálidos brazos.
Sí, eso haría apenas lo viera, de seguro también tendría frío y quién mejor que él para brindarle calor. Sonrió, esa idea le gustaba mucho.
—Aquí está, en el baño ahí una toalla que puedes usar —indicó Jimin apenas llegó, entregándole algunas prendas que le quedaban pequeñas a Namjoon.
—Gracias.
.・✫・゜・。.
—¡Hyung! Usted también debe tener frío, yo estoy bien —reclamó el pelirrojo, intentando devolver al alfa su chaqueta por décima vez, pero este seguía reacio a aceptarla.
—No, tú estás temblando de frío, apenas llegue tú taxi yo voy en mi auto y enciendo la calefacción, tú la necesitas más.
Donghyuk hizo un puchero y se dio por vencido, cruzando los brazos sobre su pecho y Taehyung sonrió victorioso. La salida con el Omega había sido tranquila, acogedora, como si fueran dos grandes amigos de hace mucho tiempo, Choi tenía cosas muy interesantes por contar y muchas cosas en común. Había sido relajante salir a distraerse, tanto así que ni uno de los dos había reparado en percatarse de la hora, era como si se hubieran encerrado en su propia burbuja.
Ahora ambos se encontraban a las afueras del teatro a la espera de que llegue el transporte que llevaría al menor hasta su hogar, ya que se había negado rotundamente a que el alfa lo haga, alegando que ya era tarde.
—La lluvia es hermosa, ¿no cree, hyung? —indagó con fascinación, no mentía cuando dijo que la lluvia era una de sus cosas favoritas.
—Sí —respondió Taehyung no muy seguro pues muy contrario al pelirrojo, él odiaba la lluvia, no había una razón en específico, solo no le gustaba.
.・✫・゜・。.
Hoseok salió del baño con el agua escurriendo aún por su cabello y orejitas húmedas con una toalla alrededor de los hombros para evitar volver a mojarse. Tomó asiento frente al sofá, observando con curiosidad todo el lugar que no había tenido oportunidad antes debido la tensión del momento.
Varias plantas pequeñas decoraban algunas partes de la sala dándole un toque minimalista, uno que otro peluche de felpa pequeño tirados en alguna parte de forma descuidada y unos recuadros ordenados en fila. Guiado por su curiosidad se dirigió allí, sorprendiendose al ver pinturas muy hermosas y realistas donde reconoció vagamente a los amigos de Taehyung en algunas de esas.
Taehyung parecía tan feliz ahí, tenía una hermosa y enorme sonrisa en el rostro, tan único e irreal, una que no había tenido oportunidad de ver hasta el momento... Posó sus dedos sobre la forma rectangular que se formaba en todo su esplendor en los labios del chico, en ese entonces, pelinegro. Delineó con delicadeza, perdiéndose entre sus pensamientos y no pudo evitar preguntarse ¿alguna vez volverás a sonreír así por mí?
Por el rabillo del ojo vislumbró a una chica bajita de cabello castaño corto y lacio, era bonita, con ojos expresivos y una linda sonrisa que demostraba su alegría al estar subida en la espalda de Taehyung, parecían felices estando los dos juntos...
¿Quién era ella?
—Oh...
Hoseok se volteó al escuchar la voz de Jimin a su espalda, asustado de haber roto algo o haber hecho algo mal sin haberse dado cuenta. Se iba a disculpar, pero la mirada del otro Omega se volvió melancólica y se acercó de manera suave hasta llegar a su lado, manteniendo sus ojos fijos en aquellos recuadros. No dijo nada, se mantuvo callado, observando a la chica con detenimiento.
—Es bonita ¿verdad? —preguntó en voz baja después de un rato en silencio. El azabache asintió en silencio —Era la pareja de Taehyung... Se iban a casar. Pensaban irse de Seúl a Daegu, la tierra natal de Tae, cuando tuvieran su primer cachorro, lastima que eso nunca sucedió —dijo, como si pudiera leer los pensamientos de Jung. No es que él sea un bochinchero contándole a todos la vida de sus amigos, pero el brillo en los ojos del chico al ver la foto de Taehyung hizo que su corazón se ablande, y sin siquiera pensarlo comenzó a relatar lo que había pasado aquel día, aquel día donde Taehyung dejó de ser aquel alfa alegre, vivaz y risueño que siempre era para encerrarse en una burbuja aislante —Estábamos en los bolos por el campeonato anual en el que siempre participabamos, todos los años sin falta competiamos por ganar... En ese entonces todos nos habíamos vuelto amigos y compañeros de equipo, Namjoon, Yoongi, Seokjin, Taehyung, Hania y Jungkook que recién se había unido a nuestro equipo el último año, aunque Tae y yo ya lo conocíamos desde antes —explicó, Hoseok se imaginó que habían sido los mismos hombres de la vez pasada —Ese día todos habíamos ido a ver jugar a nuestros rivales, menos ella porque tenía cosas importantes por hacer —sonrió con armargura, recordando lo "importante" que eran aquellos "asuntos"—Ese día la noche era fría y nos habíamos demorado más de lo usual en los bolos, salimos del lugar entre risas y bromas hacia Kook y Yooni hyung porque todos sabíamos que ambos estaban perdidamente enamorados del otro, pero ninguno de los dos se dignaba en confesarse al otro, solo se coqueteaban de una forma muy torpe... Cuando el teléfono de Taehyung comenzó a sonar, él contestó y toda la alegría del momento se esfumó, se puso pálido y comenzó a temblar. Lo intenté tranquilizar, pero me gruñó y empujó, sus feromonas de pánico me estaban aturdiendo, discutió con Jin hyung cuando este le reclamó su actuar, pero él solo nos dijo " Mi Omega está en peligro" antes de salir corriendo sin mirar atrás —suspiró, sintiendo una gran pena invadir su pecho —Al día siguiente salió en las noticias un accidente múltiple donde la única víctima de muerte fue ella... Desde ese día tuve que ver a Taehyung en una cama de hospital por semanas, incontables semanas en las que tuvo que alimentarse a través de sondas porque su cuerpo rechazaba todo tipo de alimento, semanas donde tuvo que pasar sedado la mayor parte del tiempo porque al despertar lo único que hacia era llorar, gritar y gruñir llamando a su Omega... Perdió mucho peso y apenas hablaba, tenía miedo, mucho miedo, es mi mejor amigo y me dolió verlo así, ya no sabía qué hacer para que se recupere. El doctor nos dijo que todo iba a estar bien en cuanto su lobo lo asimile, aunque también existía la probabilidad de que nunca lo haga y muera de tristeza arrebatando la vida de Taehyung en el proceso —su voz se quebró y tomó aire para continuar —Gracias a la diosa Luna él logró salvarse, pero nunca volvió a ser el mismo, siempre culpandose de su muerte... Su mirada antes llena de vida ahora está opaca, sus sonrisas se volvieron escasas y sus momentos de felicidad efímeros, no importa que tan alto ría aquella risa nunca se ve reflejada en sus ojos, al contrario, estos solo muestran vacío... Un vacío muy grande que hasta el día de hoy prevalece.
Y ahí Hoseok lo entendió... Un lazo roto, eran una pareja enlazada... Su ser se llenó de impotencia y apretó sus puños con rabia, su mirada volviéndose cristalina acompañado con las ganas de llorar. Él sabía de antemano lo que era sufrir por una marca, él había experimentado aquel dolor de una forma tan intensa y tortuosa, se sentía tan enojado al saber que Taehyung había pasado por lo mismo. Y las palabras salieron con seguridad de su boca: —Yo haré que su sonrisa regrese, yo le devolvere su felicidad.
Jimin lo miro sorprendido para después elevar la comisura de sus labios en una débil sonrisa.
—Estoy seguro que sí.
Ambos chicos se quedaron viendo durante unos par de segundos y el lobo de Park confío plenamente en Hoseok, era difícil de explicar, pero sentía que podía confiar plenamente en aquel peculiar Omega.
Siendo el sonido de la puerta el que llamó la atención del más bajo que en seguida corrió al ver a un lindo beta de piel canela y marcados hoyuelos.
—¡Namu! ¡Bienvenido a casa! —exclamó, importandole poco el hecho de que el otro estuviese empapado de pies a cabeza se colgó de su cuello y sin darle oportunidad a nada comenzó a llenar su rostro de besos y más besos. Aprovechando para secar lágrimas traicioneras de sus mejillas, inhalando el aroma distintivo inexistente del mayor.
Namjoon reía por las cosquillas que las muestras de cariño del Omega le proporcionaba, terminando por besar el puchero del más bajo mientras lo alejaba.
—También te extrañe, Mimi. Pero apartate que te voy a mojar —regaño suavemente con una sonrisa dulce.
—¡No quiero! —dijo de manera infantil, colgándose de manera sorpresiva cual koala al beta que jadeo por el repentino peso extra.
—Wah, espera que solo soy un beta y no tengo super fuerza de alfa —bromeó torpe, arreglandoselas para quitarse los zapatos aún con Jimin encima.
El menor gimoteo antes de bajarse y dejar repetidos piquitos sobre los labios del más alto y hubiera seguido así de mimoso el resto de la noche sí Namjoon no se hubiera percatado de la otra persona en el lugar.
—Oh, Hoseok ¿Cómo así por aquí?—preguntó, mirando a Jimin en busca de una respuesta.
—Ah, cierto. Taehyung tuvo que salir, no me dijo dónde, y digamos que me quedé de niñero con él —rio entre dientes, caminando hacia la habitación en busca de más ropa seca para el recién llegado —Anda a bañarte, ya te llevo tu pijama.
Namjoon abrió los ojos de par en par al escuchar aquella frase llena de maldad y dejó de hacer lo que estaba haciendo para ir corriendo tras el rubio.
—¡No, Jimin, esa no!
Hoseok sonrió enternecido por la situación de la pareja, tan solo deseaba hacer lo mismo con la persona que ama...
.・✫・゜・。.
Las luces de la sala estaban todas apagadas y solo la luz del televisor era lo que iluminaba el lugar, Hoseok estaba cabeceando en el sofá por no quedarse dormido, estaba seguro que Taehyung no se había olvidado de él e iría a verlo, solo que se le hizo tarde; sí, de seguro era eso.
Jimin chasqueo la lengua y frunció el ceño molesto, Taehyung era su amigo, pero se estaba ganando unos buenos golpes con su actitud. Aún no entendía cómo era que a ese tonto alfa le podía caer mal una cosita tan tierna como lo era Hoseok, aunque sus gritos y correteos no tanto.
Después de una lucha donde todas las pijamas de Namjoon desaparecieron "mágicamente" quedando solo una de cuerpo completo de un canguro rosado que le había regalado su pareja y que se tuvo que poner sí no quería estar desnudo o usar ropa incómoda para dormir, los tres se habían decidido ver películas.
Al principio fue gracioso ver al Omega azabache mirar como gatito curioso a las "personas chiquitas dentro de la caja negra", pero toda risa acabó cuando pusieron una película de terror y Hoseok casi le tira una de las plantitas de Namjoon al televisor, al parecer tenía una mala manía de lanzar las cosas cuando se asustaba. Algunas lágrimas de terror salieron de sus ojos, pero después todo mejoró cuando pusieron una de comedia al terminar de comer golosinas.
Una noche divertida, sin duda.
—¿Qué pasa, Mimi? —preguntó el beta en un susurró al escuchar al rubio refunfuñar insultos bajos.
—Taehyung a veces es un idiota —espeto con un puchero, cruzado de brazos y con las piernas sobre el regazo del mayor.
—¿Recién te das cuenta? —respondió burlón, enarcando una ceja.
—La miopía, amigo. La miopía...
Ambos soltaron risitas bajas y Jimin se acomodó mejor contra el pecho de su novio, jugando con las mangas de su pijama de dinosaurio verde mientras regresaba la vista a la pantalla, pero a su mente volvía aquella conversación de hace unas horas.
"—Le devolvere su felicidad. "
Relamio sus pomposos labios y pensó en sí decir o no lo que estaba pensando, quizás y Nam estuviera de acuerdo con él. Quizás era momento de volver a intentarlo, solo tenía que sacar el polvo de sus alas de Doctor Corazón.
—Nam —llamó en un bisbiseo, recibiendo como respuesta un sonido gutural —Deberíamos jugar a Cupido con Tae y Hobi... ¿No crees?
—Jimin —dijo en tono de advertencia al saber el rumbo de aquella conversación.
El menor bufó y soltó su agarre de forma brusca, abultando sus belfos de forma pronunciada.
—Hyung~ —insistió, comenzando a zarandear al pobre beta por los hombros.
—No, Jimin. La última vez que lo hicimos todo salió mal y-
—¡Lo sé! —lo interrumpió —Pero esta vez es diferente... Esta vez sí es con la persona correcta, créeme. Siento que Hobi es la persona correcta para hacer entrar en razón al cabezota de Tae —agregó, subiéndose al regazo del mayor y este colocando sus manos sobre las caderas del rubio.
—Creí que Donghyuk era el indicado —acotó, recordando como su pequeño novio no para de parlotear acerca de que Taehyung había conseguido "pareja".
—Sé lo que dije, no me lo repitas —protestó, ejerciendo un poco de presión con su dedo índice en la frente de Namjoon que hizo una mueca —A veces me suelo acelerar con mis conclusiones, pero esta vez estoy seguro que Hobi es quien le dará un giro de 180° a la vida de Tae, solo necesitan un pequeño empujoncito que nosotros le daremos —sonrió, tratando de sobornar al mayor con su ternura.
—¿Ah sí? ¿Y por qué razón estás tan seguro sobre eso, eh?
—Solo... Solo lo siento ¿bien? Es como ese pálpito qué tienen los omegas cuando saben que sus cachorros están en peligro, pero en cambio yo siento que esta es una nueva oportunidad que nos brinda el destino. Además, Hoseok dijo que era la pareja destinada de Tae... Eso es confunso aún —murmuró lo último, arrugando su nariz en una mueca de confusión —En fin, lo que la Diosa Luna traiga será bien recibido por mí —finalizó, satisfecho de su razón más que aceptable.
—¿Sabes que ese no es un argumento válido, verdad? —inquirió, haciendo que Jimin rodase los ojos.
—No seas tan desconfiado, Nam. Solo mira un poquito más allá del parloteo de la ciencia y déjate guiar por mi instinto —el.ayor quiso refutar, pero sabía que era una discusión imposible de ganar. Agradeciendo al cielo tener tanta paciencia, asintió.
—Está bien, voy a confiar en ti y en tu barbie instinto —accedió, recibiendo un ligero golpe en el pecho acompañado de una risita por el apodo —Pero prometeme algo —añadió, retomando la seriedad en su voz —Sí esto sale mal y Taehyung se entera y se enoja, dejaremos de meternos en su vida ¿bien? —Jimin farfullo por lo bajo un "no es justo" —¿Prometido?
—Prometido —accedió a regañadientes, entrelazando su dedo meñique con el del beta para sellar el trato.
—Ahora a ver la película, terinosauriorex —dijo, dejando una suave nalgada en el trasero del chico sobre su regazo.
Jimin rio, besando los dos hoyuelos que enmarcaban la sonrisa de Namjoon y entrelazando sus manos para acomodarse mejor en su lugar para terminar de ver el film mientras Hoseok yacía preso de los encantos de Morfeo y roncando levemente, inocente a lo que el Omega de mejillas rechonchas planeaba.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Un poco de Nammin para calentar sus corazones, síksí unu
En fin, perdón si este cap parece mucho relleno, pero trate de hacer lo mejor posible y no demorarme tanto en actualizar, pero han surgido ciertos problemas personales que se roban mi ya de por si poca inspiración (sin contar que dentro de poco regreso a clases y he avanzado muy poco con la historia //se estresa)
Por cierto, he visto que hay muchas más lecturas últimamente en la historia y eso me alegra mucho, así que ¡muchas gracias! A pesar de que la mayoría son fantasmistas Jjsksjks
Fantasmas, háganse presente que no muerdo, sé tengo cara de ratera, pero no lo soy (esto es literal ;-;)
Como sea, ¿ya tienen su mantequillita? ¿Emocionadxs por el regreso de los chicos? ¿Teorías?👀
Pd: AME DON'T, pinshe canción espectacular 🫂 ¿y ustedes?
Pd 2: perdón algún error ortográfico o incoherencias, corregire todo cuando termine la historia.
Espero les haya gustado ¡Gracias por leer! ^^
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro