hace 2 días...

Olivia practicaba con su habilidad, aún no tenía una forma clara, pero con la ayuda de Dexter ella fue capaz de entender su funcionamiento.

Su habilidad poseía dos partes.

La defensiva que le permitía absorber o desviar la energía tanto del aura como potencial, calórica o química que entrase en contacto con sus vendajes y la segunda era la ofensiva.

La energía de aura que acumulase podría usarla para construir constructos de objetos, pero...

—¿qué clase de objetos? —pregunta la joven.

—La verdad no tengo idea —responde el agente Dox —Los usuarios con habilidades de creación son muy raros y en su mayoría no saben usar correctamente su propio poder al punto que se vuelve totalmente inútil, Pero tu, puedes hacer constructos de un 95 a 99 porciento de exactitud aunque parece que lo único que eres capaz de construir es un revólver, un tenedor y un cuchillo de cocina, ¿te has sentido involucrada emocionalmente con alguno de esos objetos?

—No, antes solía salir a los campos de tiro con mi papá y mi hermano, pero nunca he usado un revólver además del que me dio AJ —exclama Olivia.

—¿Qué ocurrió con ese revólver? —pregunta el agente.

—No lo sé, se perdió, de hecho, ahora que lo pienso mi mamá una vez me castigó por extraviar un cuchillo de cocina, pero cuando le dije que lo dejé en la mesa no me creyó.

—En cualquier caso, con la enorme cantidad de aura que tienes dudo que tengas problemas algún día a menos que invoques muchas veces tu habilidad —Señala el agente.

—Realmente aun no entiendo cómo funciona eso del aura —espeta la joven.

—Míralo de esta forma, cuando respiras aire, tu cuerpo absorbe el oxígeno y deja salir el CO2, esto es como lo mismo, tu cuerpo absorbe el Aura en el aire y la libera como una habilidad. Es por eso que tenías esos ataques de tu Bug en el pasado, tu cuerpo era incapaz de dirigir el flujo de tu aura y esto provocaba que se activase de forma inintencional.

—Es decir que si consumo toda mi aura entonces ¿no volveré a ser un Bug? —pregunta con entusiasmo.

—Es un poco más complicado, pues si consumes toda tu aura... morirás —responde con un tono sombrío —Pero tú no sufrirás de eso nunca, pero si un día sientes que te encuentras superada, y la única forma de salir es peleando con tu aura, entonces lo que debes hacer, es quitarte la mordaza.

—Pero me dijiste que no me la quitara bajo ninguna circunstancia —exclama la joven.

—Eso es cierto, pero puede que llegue el día en que todo dependa de tu decisión —responde el agente.

—¿Mi decisión? —pregunta

—Entre morir como una chica normal o sobrevivir a pesar de las consecuencias.

En su mente Olivia deseaba fervientemente que nunca llegase el día en que tuviese que tomar esa decisión, pero lamentablemente ese día había llegado.

De regreso en el presente...

Paralelamente en las lejanías de la explosión, Dexter trataba de llegar al sitio para detener a la joven.

Él sabía que ni entre todos serían capaces de derrotar a un Grimm, él sabía que en el mejor de los desenlaces, Olivia moriría de una forma instantánea e indolora.

Y en el peor de los escenarios, todos serían destrozados frente a ella, impotente y dudando de su habilidad, al borde del límite de su aura y bajo la presión del aura de Piper, cometería el mayor error de todos...

Dexter no sabia en lo que se estaba metiendo mientras le daba ese estúpido consejo a la joven. "La madre de todas las calamidades" no puede salir al mundo.

En el yermo AJ despertó, al principio su vista estaba borrosa y lo único que pudo ver fue a Olivia parada frente a él con su mano en su nuca, fragmentos de Gleipnir tirados en el suelo y lágrimas llenando su rostro aterrorizado.

—¿Olivia... qué estás...?

—AJ... —exclama con un tono temeroso —mi madre seguramente estaba muy preocupada cuando desaparecí, sé que solo ha pasado una semana desde que nos conocemos, pero por favor, quiero que le digas todo lo que pasó, no dejes que me espere por siempre.

—Espera... no...

—Perdón... y adiós.... —exclama justo antes de remover la última mordaza de su cuerpo.

El Velo se abre ante ella, a diferencia de las veces anteriores ella no estaba asustada, puesto a que se le había descrito que es lo que ocurriría.

Una leve y tenue voz se escucha proveniente del cuerpo de Olivia.

Una pequeña boca emerge en la nuca de la joven, se trataba de Aset, estaba en un estado muy desgastado después de haber confrontado a Noir tras ir en contra de sus planes.

—Has cambiado, bolsa de carne —espeta con un tono somnoliento.

—Tú debes ser Aset, ¿no? —Aclama Olivia ante la situación.

—Hemos hablado muchas veces durante estos años, pero esta es la primera vez que tenemos esta conversación —señalo la entidad.

—¿En serio?, puedo saber ¿qué ocurrirá ahora? —pregunta la joven.

—No estoy segura, puedes quedarte aquí o puedes hundirte en la oscuridad —responde la entidad.

—¿Qué hay ahí dentro? —pregunta la joven.

—Una prisión. —responde la entidad —Una caja de juguetes donde la madre de todas las calamidades reúne las almas de quienes le fueron útiles o le parecieron interesantes.

—Una prisión, ¿Y, cuánto tiempo has estado ahí? —pregunta.

—Ahí dentro el tiempo es relativo, quizás un día o 4000 años, no he podido ver el sol desde hace mucho y mi mente a veces me abandona —expone Aset.

—¿Quién eres tú?, realmente —pregunta la joven a la moribunda entidad.

—Yo solo soy una tonta que deseo más de lo que podía manejar y termine arrastrando a mi única amiga a la oscuridad a causa de mi ambición —responde Aset.

—Tu amiga, hablas de Nora —espeta la joven

—Como lo...

—Mientras aprendía a darle forma a mi habilidad recordé algunas cosas, recordé tu historia, y también una promesa —expone la joven.

—Tu, si lo recuerdas entonces...

—Aset, para bien o para mal necesito avanzar —aclama la joven —solo eso necesito.

Al ver esta afirmación de su parte Aset se sorprendió, por años ha recibido la ocasional visita de Olivia a los dominios en el velo, pero esta no solo era la primera vez que no estaba asustada, sino que también mostraba interés en alguien que no fuera ella misma.

La bolsa de carne había madurado demasiado en estos cortos días.

Además, Aset estaba obligada a responder, pues le había hecho una promesa tras su última visita al velo, le prometió decirle "su" verdadero nombre.

—El verdadero nombre de la madre de todas las calamidades, saberlo te llevara al punto más oscuro de esta prisión, donde se encuentra aquello que ella más teme, si vas, incluso si lo encuentras...

—Solo necesito un instante, prefiero intentar y fallar que quedarme aquí y no hacer nada —espeta la joven —ya he vivido toda mi vida así.

—el verdadero nombre de la madre de todas las calamidades... es "Gullveig" —exclama la entidad antes de desaparecer.

Al escuchar ese nombre, imágenes empezaron a inundar la cabeza de Olivia, un palacio dorado, con un gran trono, rodeado por estatuas, un puñal bañado en sangre y una imagen de una mujer hablándole, de ojos verdes cabello largo y negro.

—Gracias por llegar conmigo hasta aquí, mi vieja amiga —espeta la mujer de apariencia real.

—Llegaría hasta el mismísimo inframundo por usted, mi emperatriz —exclama una mujer con la voz de Olivia.

Las imágenes continúan, mostrando vistazos de vórtices rojos absorbiendo a personas de varias partes del mundo antiguo, e inclusive a la emperatriz; al ver a los vórtices la imagen de un espiral rojo quedó tallada en sus retinas.

En el interior del velo, Olivia se retorcía de dolor, apretando sus ojos que sangraban con descontrol, mientras que el vórtice carmesí, la arrastraba a las profundidades del velo.

En el plano físico la mordaza cayo del cuerpo de Olivia, solo había pasado un segundo mientras un miasma negro empezaba a cubrirla, y una voz alterada y monstruosa emergió de ella.

—Por fin, es el fin de ese ensordecedor silencio —exclama la bestial voz.

La presión del aura en el cuerpo de la joven, aumentaba drásticamente, aplastando a la Grimm frente a ella.

Aprovechando la distracción Winnyfer tomo a Roxanne y a AJ del lugar, y empezó a alejarse a gran velocidad con las pocas reservas de aura que le quedaban.

conforme el cuerpo de Olivia se teñía de negro; repentinamente abrió los ojos, se habían vuelto completamente negros y en sus pupilas, brillaba una luz verde y pura.

Año 2067...

El bosque al interior de la zona muerta, un silencio majestuoso, ningún animal, ninguna persona, ni siquiera el sonido del viento, un silencio comparable al vacío del espacio; repentinamente el silencio es sofocado por el sonido de un celular.

Suena el primer tono, pero no hay respuesta, suena el segundo y el tercer tono, pero tampoco, justo antes de sonar el cuarto tono contestan la llamada.

—Hola, gracias a dios que contestaste, sé que estas molesta conmigo pero no es razón para que dejes la ciudad sin decirle a nadie, dejaste a muchas personas preocupadas aquí en casa, cuando tu jefe nos llamó...—exclama un hombre al otro lado del teléfono —Escucha ya está llegando diciembre, y a mí a Horace y a tus hermanos nos gustaría que pasases las fiestas con nosotros aquí en manhattan, descuida nosotros pagamos todo y si no quieres quedarte en la casa te podemos conseguir una habitación, pero por favor al menos dime que lo considerarás —añade el hombre sin respuesta alguna —Lo entiendo, no podemos obligarte a hacer algo que no quieres, haz sido así desde niña, solo quiero que sepas que todos te queremos, adiós Rose...

Repentinamente alguien cierra la llamada.

Una respiración pesada se escuchaba desde el suelo, la nieve estaba teñida de rojo, mientras la mujer bañada en su sangre y plomo apenas era capaz de mantener la conciencia, y frente a ella el encapuchado sostenía su teléfono.

—Tienes una linda familia, deberías llamarlos más seguido —exclama el encapuchado.

—Ese... es mi maldito asunto —responde Rose.

—¿Por qué buscas a Olivia Ortega? —pregunta el encapuchado.

—Tú no lo entenderías, pero principalmente por dinero, su cabeza incluso podrida y llena de gusanos vale una fortuna, desde que desapareció la gente ha estado inquieta, deseando con fervor que ese monstruo este muerto —responde

—No tienes que mentir, sé que puedes sentirla, sientes lo que vivió en estas tierras, su miedo, su alegría, sus batallas y sus penas —exclama la encapuchada —Sé que puedes verla en tus sueños.

Al escuchar esta afirmación, su expresión cambió a una sorprendida, ella nunca había hablado sobre ello con nadie.

En efecto ella soñaba una y otra vez con este lugar y en los eventos y personas que por aquí pasaron, "AJ Graham, Winnyfer Wagner, Roxanne Van Helsing, Dexter Dox, Piper White..." nombres y rostros de personas que nunca había visto en su vida, pero estaban tallados fuertemente en su ser.

—¿Cómo sabes eso? —pregunta con temor

—Porque yo también los he tenido —responde mientras lentamente retiraba su mascara—Son fragmentos de quién eres y fuiste alguna vez y que aún puede volver a ser; quieres ver a Olivia Ortega, yo puedo llevarte con ella.

La encapuchada expuso el hemisferio izquierdo de su rostro, exponiendo una apariencia igual a la de Rose e igual a la de Olivia.

Continuará...