Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 11

HETTUI

No se ha callado ni un segundo, solo lo necesario para respirar.

¿Cómo puede hablar tanto esta niña? 

Llevamos caminando bastante tiempo, ya hemos salido del bosque y ahora nos encontramos en un campo abierto con un río al lado. Desde el primer momento en que prendimos la marcha hacia el Reino Asesino Cazador con la intención de dirigirnos por allí para llegar al Reino Guerrero, la chica que está caminando a mi lado ha estado hostigándome a preguntas.

—¿Por qué no me respondes? ¿Te estoy molestando? Si te molestado puedes echarme, ¿lo sabías? No me va a importar ni menos me va a herir. ¿Quieres echarme de una vez? Me estoy cansando de tanto hablar.

Al fin, creía que nunca iba a pasar.

La chica de pelo lila se acerca al río a beber agua para después volver a situarse a mi lado, dispuesta a abrir la boca de nuevo.

—¿Sabes —le interrumpo antes de que comience a hablar— que existe un tipo de veneno que no es letal pero puede dejar mudo a la gente? No me cuesta nada prepararlo.

Ante lo que he dicho, se calla definitivamente dejando que el ambiente silencioso vuelva a mis finos oídos.

Pensando en todo lo sucedido, al llegar al sector-A, debo de hablar con el rey. Si el Reino Asesino Silencioso ha mandado a Ares, el príncipe legítimo de la reina, a trabajar bajo el mando de Ryon; lo más probable es que ya se hayan unido al enemigo. Con eso, sería el segundo reino que nos traiciona.

—Conde Hettui...

Frunzo el ceño y aprieto los puños al oír la forma en que me ha llamado. No me trae buenos recuerdos.

—No me llames así.

—¿Por qué? Te llamas Hettui y eres conde, ¿qué está mal? En el Reino Mágico Celestial siempre se les llaman primero por el título y después el nombre —explica ella.

—En el Guerrero no, se les diferencia por el sector que dominan o, en el caso de que no tienen, allí sí se utiliza el nombre.

—Bueno, pues yo te llamaré conde Hettui, suena bonito y todo. —Abro la boca para discutir pero la pelo lila se me adelanta—. No quiero que me envenenes, pero me gustaría hacerte una propuest...

—Lo rechazo —contesto antes de que termine.

La miro de reojo y veo que se está conteniendo las ganas de decir algo. Se le nota en la cara.

—Pobre de la futura chica que se tendrá que casar contigo; no le darás ni el derecho de hablar —suelta cruzando los brazos.

—Preocúpate mejor por tu matrimonio. Si te haces muy mayor nadie te querrá para tener descendencia.

En este mundo es así. Las mujeres están para tener hijos, por eso se les casan muy pronto mientras que, a los hombres nunca les dicen nada por su edad siempre y cuando pueda seguir fecundando.

—Mi matrimonio no lo decido yo... —murmura ella en voz baja para sí misma, pero alcanzo a oírla—. Bueno, ¿podrías escuchar por lo menos mi propuesta? —pregunta en voz alta.

—Habla.

A saber con qué me saldrá esta vez. Está haciendo todo lo posible para que me harte de ella y así dejarla libre, cosa que no va a suceder, obviamente. La necesito para la mazmorra y ella no se va a ir de mi lado hasta que me lleve hasta allí.

—Te propongo matrimonio. —Un silencio se hace presente.

Ambos dejamos de caminar para mirarnos mutuamente a los ojos. Rompo el contacto visual para observarla de arriba a abajo. Es guapa, sí, pero la niña no está muy bien que digamos. La sola idea de imaginármela como mi esposa hace que me entre un horror. Es cierto que, cuando la he visto entrar en la cueva, me pareció una persona totalmente distinta; ni la podía reconocer. Pero toda esa buena imagen se rompió en pedazos como cristales cuando me he dado cuenta de que era ella.

<<¿Esta cosa...?, ¿mi esposa...?>>

—Lo rechazo.

Ella pestañea un par de veces con una sonrisa en la cara para después llevar su mano al pecho y soltar un gran bocado de aire. Está muy aliviada teniendo en cuenta que la acabo de rechazar.

—Vale, prueba pasada, ahora vamos con la verdadera propuesta. —La miro arqueando una ceja sin comprender—. Quería saber si tenías malas intenciones hacia mí antes de tomar cualquier decisión, la precaución ante todo —explica ella—. Bueno, ¿quieres contactar con Dam?

Veo cómo sonríe victoriosamente al saber que ahora tiene toda mi atención. ¿A dónde pretende llegar con eso? Dudo mucho de que tenga alguna manera de contactar con él, pero si lo dice será por algo. Como se atreva a mentirme o algo, la callo de por vida.

La chica, al ver que no respondo pero sigo manteniendo mi atención en ella, sigue hablando:

—Puedo contactar con él a cambio de que me entrenes. No te costará mucho, soy muy lista en realidad.

Que la entrene... Estará de broma, ¿no? Eso de tener una carta del guía no le servirá mucho hacerse fuerte ni menos defenderse.

—No te veo lo lista.

—Mi inteligencia se basa más en la cantidad de información que llevo en la cabeza y mi capacidad de enlazar y analizar cosas —explica poniendo los ojos en blanco—. ¿No querías llegar a la Mazmorra de Caos? No sé cuáles serán tus intenciones, pero, créeme, no encontrarás a otra persona que sepa más cosas que yo sobre la leyenda.

Me quedo unos segundos pensando en lo que ha dicho. No sé si habrá contado la verdad, pero dudo mucho que ella sepa esas cosas; además, la persona que más información que tiene de la leyenda de Orden y Caos, es Ryon y es imposible que él comparta sus datos.

—¿Cómo puedes contactar con Dam? —pregunto y ella muestra una amplia sonrisa.

—¿Aceptas?

—Demuestra que sabes cosas sobre la leyenda.

La pelo lila se mantiene callada durante unos segundos, dudando si hablar o no. Me mira con desconfianza achinando los ojos y, finalmente decide abrir boca:

—No sé si eres de fiar como para contártelo todo... Primero dime qué propósito tienes.

Contarle el propósito. Me está sacando información esta niña.

En verdad, no tengo problema en contarle más o menos por encima; son cosas que ya saben todo el mundo. Ryon quiere despertar a los dos dioses para dominar el mundo y algunos reinos se han unido a él mientras que el Reino Guerrero trata de detenerle buscando aliados que se atrevan a enfrentarse al séquito del nombrado.

—Se trata de Ryon, el rey del Reino Guerrero me dio la orden de intentar buscar alguna manera de detenerle.

Conforme voy explicando, la cara de confusión de la chica es más obvia.

—Primero, ¿quién es Ryon?

¿No está enterada? Imposible salvo que haya estado viviendo debajo de una roca todos estos once años en los que Ryon está haciendo lo suyo. Ella parece notar que algo no va bien ya que trata de cambiar el rumbo de la conversación.

—Me han mantenido alejada de muchas de las cosas que pasan por el mundo, pero no tiene importancia. ¿Qué quieres saber de la leyenda? No prometo poder contarte todo.

Por lo visto, no quiere adentrarse al tema, tampoco voy a malgastar el tiempo en intentar sacarle esa información de por qué no sabe algo que, literalmente, todo son conscientes; no son datos que me interesen demasiado.

—¿Cómo puedes contactar con Dam? —pregunto.

Ante la situación, lo más conveniente es saber si él está bien o no. Ella dice poder hacerlo, pero sigo dudando de ello. Bajo mi atenta mirada, mete la mano en el bolsito cuadrado de su cinturón sacando una carta de allí y me la muestra. No es la del guía, ésta tiene dibujado un casco gris con alas blancas en sus costados.

O sea, no es solo una carta sino que, en ese bolsito que lleva, está lleno de ellas.

—Es la carta mensajero, supongo que podrás deducir para qué sirve, ¿no? No prometo que pueda conseguir invocarla, nunca antes lo había intentado pero bueno, me he leído ya el manual de las cartas celestiales y sé cuál es la función y requisitos de todos los que tengo —explica moviendo la carta en sus manos. Con lo del manual se referirá, supongo, al libro de las instrucciones que viene con cada arma.

—Carta celestial, envía mis palabras; El Mensajero.

Nada.

Eso ha sido lo que ha pasado; la carta no ha reaccionado. La observo esperando una respuesta de su parte pero ella se niega a mirarme. Trata de invocar una y otra vez repitiendo el conjuro pero solamente obtiene el mismo resultado que la primera vez.

Ya un tanto harto de la escena, agarro su mano para hacer que pare y me mire de una buena vez. Nuestros ojos se enfrentan durante unos segundos y ella finalmente suspira para tranquilizarse, deshaciendo el agarre.

—Conecta con la carta, fuerza el vínculo antes de hacer que salga —explico haciendo que sus ojos morados se vuelvan a fijar en mí—. Te voy a entrenar, haz lo que te digo.

No sé cómo funciona la magia celestial, pero el vínculo con el arma es imprescindible. El hecho de que haya podido utilizar la del guía, supongo que será porque lo manejó más veces o quizás sea que la carta sintió la necesidad que tenía ella en ese momento.

Con los ojos cerrados, ella inspira con profundidad; menos mal, por lo menos parece saber cómo conectar con su arma. Es un proceso en donde hay que despejar la mente y encontrar la vida que hay detrás de ese vínculo. 

La carta de su mano comienza a brillar y ella aprovecha la oportunidad en volver a pronunciar el conjuro. Se hace presente un círculo mágico y de allí sale una figura que lleva el casco de alas que aparece dibujado. Dirige sus ojos no visibles hacia la pelo lila, seguido de una reverencia esperando la orden.

—¿Tienes algo de Dam? —pregunta extendiendo su mano para que se lo dé—. Algo que te haya entregado o dado no hace tanto; menos de cinco días si es posible. Es uno de los requisitos, hay que tener algo del destinatario para que El Mensajero le pueda encontrar.

—No llevo nada suyo.

Infla un moflete mientras retira la mano para posarlo en la cadera, sus dedos rozan con un peine que lleva enganchado en el cinturón y veo su cara brillar de alegría. Saca ese objeto y se lo entrega al espíritu que lo acepta y asiente preparando una hoja para comenzar a escribir.

¿Dam llevaba un peine encima?

—Escribe, por favor: "Hola, Dam. Soy Kristal, la chica que huyó después de que le compraras el peine ese tan bonito. Te escribo porque estoy con el conde y nos dirigimos hacia el Reino Guerrero. Espero que estés bien y contestes la carta; nos vemos allí. Por ciento, estoy bien, el conde no me ha matado y prometió no hacerlo, pero corre el pequeño riesgo de que me quede muda."

El espíritu deja de escribir para dar concluida la carta, hace una última reverencia y, sin añadir nada más, desaparece dejando un pequeño rastro de humo. La pelo lila se gira hacia mí y me sonríe levantando ambos pulgares a la altura de la cabeza cerca de su cara.

—Eso último sobraba —hablo volviendo a emprender el camino dejándola un tanto atrás, pero segundos después me alcanza para andar a mi lado.

—Bueno, ¿qué me vas a enseñar?

No sabría muy bien qué responder. La magia celestial y la del guerrero no es la misma y están lejos de ser similares; supongo que solamente le debo de guiar a aprender lo básico para manejar bien el poder y también un poco de defensa personal por si acaso.

A todo ésto, su poder es bastante peculiar. Si la entreno y se vuelve contra mí, va a ser un problema.

—Primero, hasta que no concluya el entrenamiento, tendrás que obedecer todas mis órdenes; seré tu superior, ¿entendido? —aclaro a lo que ella se lo piensa hasta finalmente asentir.

—Pero —añade ella alargando la primera sílaba—, no me puedes obligar a contar nada de mí misma; si no lo digo será por algo y espero que lo respetes. Además, da igual cómo diga que soy una aldeana normal, no me crees, lo digo para que no te montes cuentos en la cabeza, no quiero ser tu enemiga ni tampoco tengo nada en contra de ti.

Es cierto que no me creo eso de que es una aldeana normal, pero puede que esté diciendo la verdad aunque no es muy convincente. Claro está que no podrá ser alguien de poder político como nobleza o alguna nobleza alta; medio mundo se habrían enterado de que tiene cartas como arma vinculada.

—Acepto.

—Bien, ¿cuál es su primera orden? —cuestiona sonriente.

—Que te calles.

Caminamos durante unos minutos más hasta que la chica que está a mi lado se para de repente. Detengo mis pasos para mirarla, encontrándome con una manta de humo que poco a poco se va disipando dejando visible la figura del espíritu mensajero.

—Dam ha respondido la carta —me informa con una hoja de papel en la mano, dispuesta a leer en voz alta—. Dice: "Illa, soy tu hermano. Armin ya me ha contado las cosas más o menos por encima y estamos ahora con uno de los chicos que te habían secuestrado. Vamos a dirigirnos los tres al Reino Guerrero y allí nos reuniremos, pero tenemos que ir primero a la Aldea de Plantas para avisar a mi familia. Ah sí, como se atreva a dejarte muda el conde ese, se la va tener que ver conmigo. ¡Y conmigo! Eso lo ha dicho Armin."

Después de leer, alza la vista hacia mí esperando una respuesta de mi parte.

—No mentías con eso de que tienes amigos.

El espíritu desaparece al igual que la carta dejándome solo con la chica de pelo lila que me mira con sus ojos morados y los brazos puestos en jarra.

—Tengo amigos por todo el mundo, solo que aún no he tenido la oportunidad de conocerlos.

Esa ha sido su respuesta. Dicho ésto, se sitúa a mi lado para mirarme con una sonrisa y, junto a mí, comenzar a caminar de nuevo hacia nuestro destino.

/////////////////////////////////////

PALABRAS: 2366

¡Hola, hola!

Viernes de nuevo uwu. He tardado un poco en actualizar hoy, me surgió problemas con Wattpad :')

Bueno, el conde no ha puesto resistencia a la hora de contar la razón por la que buscaban la mazmorra, ¿sorprendente?

Kristal ha revelado que tiene más cartas y le ha pedido al conde de que la entrene. ¿A qué llevará eso?

Por otra parte, Dam, Armin y Kaisaac están juntos para dirigirse también al Reino Guerrero y así reunirse con el conde y Kristal. ¿Qué ocurrirá una vez que se encuentren?

¿El conde y Kristal tendrán problemas a la hora de llegar?

Eso ha sido todo del capítulo 11, espero que os haya gustado ♥. Por cierto, tengo pensado en participar en el concurso de PremiosGemasPerdidas 7u7r. No puedo añadir la etiqueta en el título porque estoy participando en otro, por lo que lo pondré en los # y una nominación por aquí ♥.

¡PREGUNTA!

—¿Habéis visto el anime de "Yakusoku no neverland"? ¿Concordamos que el opening es un temazo?

Yo lo amé, me lo terminé en una sola noche uwu.

Eso fue todo por hoy.

¡Se os quiere!

¡Saluditos!

P.D. Sigo sin poder recibir bien las notificaciones :'(

Dyiiana~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro