. jungkook . mercury .

Tal sensibilidad lo llevó a sobreponer lo que sentía sobre la razón... y la razón le gritaba que no lo hiciera aunque se sintiera totalmente azul, casi semejante a mercurio. Lleno de agua congelada que le helaba los pulmones... y de tristeza.

La música empezaba a tornarse molesta para Jungkook cuando ya llevaba dos botellas enteras de soju él solo que había encontrado en la cocina. La sensación del alcohol en su garganta no era nada agradable y le quemaba hasta las cuerdas vocales pero eso era incluso más soportable que tener que engañarse así mismo y a los demás.

¿Que no quería a Babe? ¡Si el corazón le latía como loco cada que la veía!

— ¿En dónde queda el baño? —Le preguntó una chica que de cara le era familiar pero en ese momento no tenías neuronas para procesar de quién se trataba.

— Eh... —Se tambaleó un poco y se llevó la mano a la cabeza debido al mareo que empezaba a sentir —Eh, allá —Señaló hacia la primera puerta que vio y siguió de largo hasta uno de los muebles de la casa.

Sanha lo miró con el ceño fruncido para luego ir hasta la puerta que Jungkook le había dicho pero que resultó no ser un baño. Al final tuvo que preguntarle al mismo Jimin dónde podía encontrar uno antes de que se vejiga explotara. Cuando hubo terminado con su labor estaba casi dispuesta a irse a su casa ya que no la estaba pasando para nada bien en aquella fiesta, tan sólo se le rompía más y más el corazón cuando veía a Taehyung sonreírle a Babe.

— Como desearía no verlos... —Dijo para sí misma sin que nadie escuchara a causa de la música pero antes de quitar por completamente la vista de la feliz pareja y darse media vuelta alguien llamó su atención de reojo. 

Jungkook cayéndose de lado en el mueble donde estaba balbuceando alguna tontería. 

— Gracias por indicarme mal el baño —Le recriminó al chico una vez que se acercó a él con actitud de pocos amigos —Tuve que preguntarle a Jimin y luego de terminar de contar un estúpido chiste fue que me respondió.

— ¡Ah! Jimin hyung —Jungkook se empezó a reír solo mientras miraba a Sanha con los ojos entrecerrados —Sus chistes son buenos, no como... no como... Jin —Hipó —Pero no le digas nada, nada —Extendió la "a" de esa última palabra y cayó hacia el frente casi golpeándose la frente con sus propias rodillas.

— ¡Cuidado! —La chica lo sostuvo para que no terminara de caer —Cielos, Jeon —Dijo soltando un suspiro mientras lo recostaba del respaldar —¿Eres siquiera consciente de lo borracho que estás?

Pero Jungkook no le respondía, su cuerpo sólo se iba de lado a lado y en sus labios se dibujaba una sonrisa risueña.

— Babe noona... —Soltó suavemente y Sanha se obligó a acercar su oído a su boca para escuchar lo que decía —Babe noona te quiero tanto... 

Ahí fue donde la chica se heló y miró confundida al borracho chico que sólo quería estar en el lugar de Taehyung.

— ¿Qué acabas de decir, Jeon? —Preguntó Sanha sacudiéndolo un poco —¿Estás enamorado de Babe? —Y ahora Sanha miraba en dirección a la castaña que estaba abrazada a Taehyung.

— Eso... —Jungkook asintió lentamente —Estoy enamorado de mi noona —Dijo con dificultad pero Sanha entendió cada palabra.

¿Otro bangtan flechado por la castaña? ¿Qué significaba todo aquello?

Sanha estaba a punto de hacer preguntas y más preguntas con la intención de descubrir más sobre lo que estaba pasando entre Taehyung, Babe y Jungkook, sin embargo, no le hizo ni falta abrir la boca pues fue el mismo Jungkook el que dentro de sus olas de mareos y neuronas quemadas a causa del alcohol escupió una frase que provocó que a Sanha se le formara una sonrisa en los labios.

— Si tan sólo me hubieses elegido a mí... ¿no lo hice bien? —Dijo haciendo puchero —¿Por qué... por— Hipó de nuevo —¿Por qué de los siete... mi hyung?

— ¿De los siete? —Sanha empezaba a armar una historia en su cabeza que incluía a los siete chicos y a Babe pero había muchas partes de ellas que ignoraba. Por ejemplo la parte en la que tenían...

— ¡Sexo! —Dijo Jungkook de repente haciendo que Sanha saltara un poco en el mueble —¿Por qué a la noona le gusta más el sexo que... —Su cabeza cayó hacia un lado —El amor...? ¡Yo no quería sólo tener sexo... —Hipó dos veces seguidas —...Como ellos, yo... la quiero de verdad.

— ¿Que estás diciendo, Jeon?

— ¿No lo sabes, chica rara? —Dijo sonriendo con los ojos cerrados —Mi noona... Y nosotros siete.

Sanha se llevó una mano a la boca sorprendida.

— Pero no me eligió —Dijo con profunda tristeza el chico.

La misma que lo había llevado a beber y decir algo de lo que luego se arrepentiría para siempre.

— No me eligió a mí, sino a él —Dijo mirando en dirección a la feliz pareja mientras sus ojos se empañaban —Y yo los quiero... y me duele.

A Jungkook le dolía en el alma pero a Sanha se le abrió una oportunidad de oro y seguramente una puerta al infierno cuando usara la inocencia, el dolor y la tristeza de un chico para destruir a quien siempre la consideró su mejor amiga.

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se preguntarán por qué este capítulo se llama distinto, ¡pues serán especiales! de cosas que han pasado pero que no están escritas como tal en la historia y que ustedes necesitan saber para armar el resto del rompecabezas. 

se llamarán como los planetas porque me encanta el concepto (además de que la historia se llama orbitae)... cada uno de ellos tendrá un planeta de acuerdo al capítulo especial que representen, espero les guste este concepto.

¿les suena kookie a mercurio? porque me lo imaginé tan roto en esa escena que no me quedó opción que dárselo. 

por hoy no lxs consiento más porque debo descansar pero... ¡espero disfruten la historia!