Seis meses después.

Jung kook, recordó con cariño su primera boda. Había sido muy sencilla pues los padres de Ji Eun, no lo aceptaban por considerarlo inadecuado para su hija. Él estuvo a punto de cometer el mismo error con su hijo al querer separarlo del hombre que amaba.

Ahora, esperaba muy nervioso en el altar junto a Tae Hung, que ya estaba totalmente restablecido de la última operación que requirió después de que Yeon los atacará. Esa horrible experiencia lo hicieron reevaluar sus prioridades. Se concentró en ser feliz y hacer feliz a su familia, Por eso le pidió a Tae que lo acompañara como padrino. El rubio había demostrado con creces que amaba a su hijo y que arriesgaría incluso su vida por él, tal como el mismo hizo por Ji Min y Hoseok.

Los primeros acordes de la marcha nupcial sonaron.

Se abrieron las puertas dejando ver al hermoso novio con un traje Gucci idéntico al de Jung kook, junto a él, Hoseok caminaba muy orgulloso, sintiéndose en un sueño, pensando que así sería  cuando se casará con Tae Hyung, su alma gemela.

Al llegar junto a su papá le entrego a Ji Min, sonriéndoles a ambos les dio un beso.

Los novios se tomaron de las manos y mirándose a los ojos, pronunciaron sus votos matrimoniales.

-Yo Jeon Jung Kook te tomo a ti Park Ji Min como mi esposo. Prometo amarte, honrarte porque eres mi otra mitad, tú me salvaste cuando estaba perdido y sin rumbo. Te amo.

-Yo Park Ji Min te tomo a ti Jeon Jung kook como mi esposo. Prometo amarte, honrarte porque sin ti no soy nada. Contigo conocí la felicidad máxima. Tú y Hobi llegaron como un hermoso regalo para complementar mi vida.

Sellaron su compromiso con unos hermosos anillos de oro blanco de 18 quilates de Chanel.

 Mientras Jung Kook y Ji Min pronunciaban sus votos Tae Hyung y Hobi, se miraban con amor y hacían en silencio su propia promesa de amarse por siempre. Aunque Hobi, se puso nervioso con las picaras miradas que Tae le mandaba, tanto que sentía acalorarse y tuvo que aflojarse la corbata.

Jin le murmuro a su esposo.-Nam, creo que estos chicos en cualquier momento me ponen a tejer, míralos.

-¿Te molestaría?

-Realmente no,  pero no te atrevas a decirles. No les des ideas.

Namjoon se quedó viendo a Jin recordando lo hermoso que se veía cuando cargo a Tae Tae por primera vez. 

-¿Qué?

-Te verías hermoso de abuelo.

 -Nammmmmmm, yo siempre me veo hermoso...

La recepción se llevó a cabo en el Grand Ballroom del Hotel Paradise City en Incheon, el diseño fue inspirado en la escena de boda de la saga Twilight.

Yoon Gi estaba muy contento que su cuñado hubiera encontrado el amor. Sin querer había escuchado una conversación, donde Ji Min confesaba aJin que se había enamorado de él, se sentía mal porque al visitar a los gemelos pensó que había sido claro de sus intenciones por Mina. Pero su cuñado callo por amor a su gemela. Le agradecía con el alma su felicidad que ahora era mayor al esperar su segundo hijo

Mina, estaba muy conmovida al ver a  su gemelo casándose con el guapo piloto. Su hermanito merecía todo el amor, así como el había encontrado a Yoon Gi.

-Te amo tanto Mina,  ahora que seamos cuatro nuestra felicidad será inmensa. Gracias por tanto amor.

Mina se quedó callada.

-¿Te pasa algo?

-Te tengo una sorpresa, no esperamos solo un niño.

-Lo sabía, estás muy rara desde ayer. Ya dímelo, ¿Son gemelos?

Mina sonrió no pudo guardar el secreto por más tiempo – Esperamos triates.

-Son triates, se puso a gritar de felicidad.

Los novios bailaban ajenos al mundo, inmersos en su amor, mientras Mina y a Yoon Gi recibían las felicitaciones por los bebés. 

Hobi estaba feliz de haber atrapado el ramo, era un buen augurio en su relación.

-Operación S.O.S cumplida agente Tae. 

-Misión cumplida amor. Gracias por amarme, por ser el sol que me ilumina- Le decía, mientras con mucha suavidad daba besos a su cabello.

-Te amo Tae Tae. Gracias, por ser mi cómplice, mi mejor amigo, mi primer novio, mi héroe, mi salvador.

Tae Hyung se hinco ante la sorpresa de la gente.

-Sé que todavía somos muy jóvenes, pero quiero tu promesa que cuando nos graduemos te casaras conmigo. Le mostró un anillo con un sol y una luna entrelazados. -¿Qué dices tomaras la misión de esperarme hasta que nos graduemos?

-Sí.

Así en medio de aplausos sellaron su promesa de matrimonio y comenzaron su propia historia de amor.

Muchas gracias por leer mis ocurrencias. Gracias por los votos y pues misión cumplida, terminé esta historia.