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Nueve

El segundo timbre de la escuela sonó avisando que el día estaba cerca de comenzar. Esto preocupo a Jungkook, pues su compañero de trabajo aún no había llegado, ni siquiera había señales de que lo fuera a hacer pronto.

Sinceramente, estaba preocupado.

Desde que llegó había estado esperando a Taehyung en el salón de clase, sabía que él llegaba unos minutos después—no es como que, si antes los hubiera contado, claro que no—. Cuando esos minutos de diferencia de todos los días pasaron, empezó a sentir preocupación. Salió y decidió esperar junto a la entrada de la escuela, pero el tiempo seguía pasando y no había rastros de ese tonto alfa.

¿Habría pasado algo? ¿Se enfermaría? Jungkook sabía que era rara la ocasión en la que su compañero de clase faltaba a clases, pues recuerda vagamente haber escuchado alguna vez desde la propia boca del alfa mientras conversaba con sus amigos. Que a su madre no le gustaba que faltara a la escuela, así que había ocasiones que casi lo llevaba arrastrando, aunque estuviera enfermo. Oh, en verdad esperaba que la mamá de Taehyung no se compadeciera de él dándole oportunidad de no asistir ese día, si no, sería el fin para ambos.

Sintió que los nervios golpearon su cuerpo al escuchar el tercer timbre, siendo este el indicador para que todos los estudiantes entraran a sus respectivos salones de clase y vio como el gran patio se iba quedando solo poco a poco. Trago saliva, pensando si era buena idea quedarse un rato más o irse a su aula como los demás, no le gustaba llegar tarde. Al final, decidió quedarse.

No servía de nada llegar con las manos vacías, la maestra preguntaría por el huevo en cuanto lo viera entrar por esa puerta y obvio no lo tenía. El maestro que estaba a cargo de cuidar la entrada de la escuela ese día lo miraba extraño, se le hacía raro que no fuera a su aula. No se atrevió a decirle nada al principio, pero al pasar los minutos decidió hacerlo al notar que aún no tenía intenciones de entrar a clase.

"Jungkook, ¿te sientes bien?"

Brinco un poco del susto, había estado tan concentrado en sus pensamientos mientras esperaba que cierto alfa de ojos grandes entrara por la puerta, pues si entraban más chicos, pero no el que estaba buscando, así que la voz del profesor si llego a asustarlo al pensar que no hablaría. Proceso lo que se le había preguntado y asintió.

"Estoy bien, no se preocupe" Pudo ver en la cara del mayor que no estaba convencido del todo con su respuesta, no le sorprendió que volviera a preguntar.

"¿Seguro? No has entrado a tu salón, no es normal viniendo de ti"

Bueno, en eso tenía toda la razón. El profesor lo conocía bien, pues años anteriores este había sido su profesor y sabia lo importante que era para el omega la puntualidad. Sus padres lo criaron así, responsable. Además, no era una sorpresa saber que destacaba en los estudios. Todos los profesores de la escuela conocían al chico, realmente fascinados con su empeño que llevaba todos estos años.

Sí, Jungkook sabía muy bien que es algo que haría, ni siquiera sabía por qué seguía esperando si era obvio que no llegaría. Solamente estaba preocupado, — por el huevo claro está, no por Taehyung, quien se preocuparía por ese alfa apestoso, dah — y no tenía ganas de llegar al salón sin su proyecto.

Tal vez debería hacerse el enfermo, así llamarían a su mamá e iría por él sin dudarlo y podía tener un día más para conseguir un maldito huevo para revisar. Podría decirle a su madre que llevara al nuevo Segismundo a la escuela y dejárselo a la maestra. Sacudió la cabeza tratando de borrar esas tontas ideas y suspiró, dándose por vencido al ver que el profesor estaba por cerrar. Iría al aula, ya se le ocurriría algo para decirle a su maestra.

"En verdad estoy bien, gracias por preocuparse. Iré a mi salón ahora" Sacudió su mano para despedirse.

"¡Profesor Jimin, no cierre aún!"

No podía confundir esa voz, por lo que rápidamente volteo hacia la calle, viendo a lo lejos a su compañero correr lo más rápido que podía, tratando de llegar antes de que fuera demasiado tarde para entrar a la escuela. Agradeció al maestro por esperarlo.

"Se te pegaron las sábanas, Kim" El joven adulto dijo divertido, pues podía notar algunos cabellos del pequeño alfa parados apuntando a cualquier dirección. "Te he dicho que no es bueno dormir tan tarde jugando en la computadora"

"En mi defensa, no fue en la computadora, fue con el Nintendo switch, no podía irme a dormir sin terminar el mundo en Mario Odyssey"

"Si viniste"

Taehyung no se había dado de la presencia del omega con olor a uva hasta que habló, sacándole un pequeño susto al no esperar verlo ahí.

"¿Jungkook? ¿Qué haces aquí? La hora de entrada pasó hace unos ocho minutos" Ni siquiera dejo que contestara sus preguntas. "Claro que vine, tenía que traer Segismundo número dos"

Levantó una de sus manos, mostrando que en esta sostenía la pequeña caja que Jungkook había hecho días antes simulando una cuna con un huevo nuevo. Pudo respirar tranquilamente de nuevo.

"Era el último huevo que había en la cocina y creo que dejé a mi hermano sin desayunar, pero no importa, que se sirva cereal" Se puso a pensar por unos segundos. "No, olvídalo, yo me comí lo último que quedaba anoche. Ya se las arreglará"

Jimin aguantó soltar una carcajada ante las palabras del menor, conocía bien al pequeño alfa y sabía de la actitud despreocupada que este cargaba. No por nada había tenido tantas dificultades cuando fue profesor de ese remolino hace unos tres años. La clase de estos dos fue la primera que tuvo desde que se graduó de la universidad, Taehyung casi lo hace llorar varias veces por sus travesuras. Pero fuera de eso, era realmente un chico bueno. Solía disculparse con él cuando hacía alguna travesura diciendo que no volvería a portarse mal, pero esa promesa solo le duraba algunas horas en lo que se le olvidaba. Era un niño se preocupaba por las demás personas, aunque no lo pareciera.

Pudo verlo en ese momento, cuando hizo todo lo posible para llegar y no dejar a su compañero sin trabajo. Nunca se imaginó a estos dos trabajando juntos, pues eran polos opuestos. Aun así, no dijo nada cuando vio los ojos del Omega menor brillar al ver al Alfa llegar.

Ni cuando al parecer cierto omega no sé había dado cuenta que había soltado sus aún débiles feromonas con olor a uva por el aire con la finalidad de "atraer" a cierto alfa. Era una reacción instintiva, sabía que tanto como ellos como sus lobos estaban en la etapa de desarrollo, mostrándose poco a poco. Carraspeó para llamar la atención de ambos menores, aunque la escena fuera tierna, él era un profesor y tenía que hacer su trabajo.

"Es tarde, deberían ir a su salón si no quieren recibir un regaño de su profesora ¿verdad?"

"¡Es verdad!" Jungkook miro tímidamente al Omega mayor frente a él" "Uhm, profesor Jimin..."

"No diré lo de su tardanza, ¿sí?" Les guiño el ojo. "Váyanse ahora"

Pudo ver cómo ambos asentían con la cabeza para después rápidamente tomaban camino a su salón, que quedaba hasta el otro extremo de la escuela. Cuando desaparecieron de su vista volvió a sonreír y negó con la cabeza. Ahora sí podía cerrar.

Capitulo dedicado a:
lduhn2here

"Ten, para que dejes de estar chingando, tkm <3"

Queda un capítulo y un epílogo para el final <3

—luvckyun

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