》EN LA ANTESALA…

Patricia sonrió al recordar cómo convenció al Indoraptor de cómo firmar el formulario. Después de que el Escuadrón Raptor se separó para recoger el envío de humanos en su mundo, Patricia atrapó a Shadow convirtiéndose en un humano tomando un diario púrpura con tapa negra de su cartera. En la forma humana de Shadow, tiene el pelo largo y negro recogido en una cola de caballo, ojos rojos y vestía una camisa negra larga y elegante junto con pantalones rojo oscuro.

Hola Diario,
Hoy pasé un tiempo en forma humana. Hace que los humanos estén menos nerviosos, aunque creo que me gusta cuando los humanos están nerviosos porque sus manos huelen mejor.
No como si los tomara por concursantes.

—Buena caligrafía, —Shadow se estremeció ante el comentario de sorpresa de Patricia, —Me disculpo por entrometerme, aunque tendría que pedirte que firmes un formulario. Aparentemente, la letra S no cuenta como un nombre según el encargado de este torneo.  —Patricia explicó con una sonrisa en su rostro mientras sacaba un bolígrafo.  —Sígueme a la recepción. Cuanto antes firmes, antes comenzará el torneo.  —los ojos rojos de Shadow miraron a Patricia, luego a la mano que sostenía el bolígrafo.  —Justo por aquí.

La anfitriona se dirigió al quinto piso para reunirse con los otros miembros del personal. Su cabello negro rizado a la vista mientras sus ojos castaños oscuros brillaban de alegría antes de ver al resto de su equipo vestido para la ocasión. Johnathan Smith estuvo más listo que nunca junto a Eleanor Baker. Adrian se vistió con un traje negro, mientras sus dedos regordetes ajustaban la corbata. Las hermanas Luna, Mia y Lizzy con sus propios vestidos y accesorios deslumbrantes, aunque Glen mantuvo la camisa informal a rayas y los pantalones deportivos, su gorra blanca protegía sus ojos de la iluminación.  —¡Esto es! Todos vayan a sus lugares. El torneo está por comenzar.  —anunció la anfitriona.
—Ya era hora.  —Adrian dijo que Brandon simplemente negó con la cabeza antes de unirse a Marie y Erica para la vigilancia y la edición.
—¿Qué están esperando todos? ¡Vamos!  —Nat aplaudió mientras los demás se apresuraban a tomar sus posiciones.

Sora había tirado el envoltorio del sándwich y el batido que bebió a la papelera y entró en el baño de mujeres. No pasó mucho tiempo hasta que Eimy entró también, evitaron entrar por la puerta dañada del establo.
—Bueno, esto es aburrido.  —Zack dijo mientras se levantaba para ir al baño, Thomas iba detrás de él.  —Amigo, ¿me estás siguiendo?
—No eres el único que necesita usar el baño.

Estela subió al segundo piso para buscar a Micah entre los espectadores. Tuvo que caminar por las filas de asientos hasta encontrarla sentada junto al Baci Llus. 
—Micah, ahí estás.
—Estela, conoce a Baci Llus. Baci Llus, conoce a Estela.  —Micah hizo un gesto a su amiga izariana hacia el alto inmigrante baciliano. 
—Encantado de conocerlo.  —Estela extendió su brazo para estrechar su mano semisólida.  —Asimismo.

—Micah, encontré esto pegado junto a uno de los puestos con chicle.  —Estela le mostró el lápiz labial.
—Estoy al tanto de tu percance en el baño de damas.  —Micah respondió antes de sorber una pajita llena de refresco.
—¡No lo digas así!  —Estela se sonrojó mientras chillaba.
—No te preocupes por eso. Sucede. A veces tengo un poco de gases cuando como demasiados burritos.  —comentó Baci Llus, tanto Estela como Micah lo miraron durante varios segundos en un incómodo silencio antes de cambiar de tema.
—¿Por qué estás aquí, Estela? ¿No deberías estar preparándote para el partido?  —Micah le preguntó.  —Ese es el problema, todavía no estoy listo para pelear.  —admitió Estela.
—Me hiciste venir hasta aquí para nada.  Micah inexpresivamente.  —Estela estaba irritada por su indiferencia.
—Voy a pelear en la arena, para tu información. Iba a darte este lápiz labial pero me lo quedo.  —Estela levantó la voz mientras fruncía el ceño.
—Sabes que no me interesa el maquillaje y, además, ¿comprobaste la fuente de energía de tu arma?  —preguntó Micah mientras miraba debajo de la arena vacía. Estela descargó su arma galáctica, es de cuarzo. Con toda honestidad, no estaba segura de si esto se consideraba cuerpo a cuerpo o no, no estaba usando magia ni ninguna habilidad sobrenatural, pero si era un cristal con poder mágico. Estela podría ser descalificada si la fuente de energía deriva de alguna propiedad mágica. 
—Es de cuarzo.  —Estela comprobó.
—Entonces no tienes nada de qué preocuparte. ¿Ya pensaste cómo vas a acabar con el dinosaurio con el que te has hecho amigo?  —Micah le preguntó.
—Como si fuera a decírtelo.  —el tono de Estela goteaba con desprecio.
—Haces bien, nunca le digas a tus enemigos lo que estás planeando.  —ella respondió en un tono alegre. Estela resopló y se alejó pisoteando.
—Manera de animarla, Mic.  —Baci Llus respondió con sarcasmo.
—Es la única forma de hacer que se concentre en el partido, lo necesitará. Además, todavía estoy enojado con ella por hacerme calcular mal en la nave espacial.  —Micah tomó otro sorbo de su refresco, tampoco va a decir que quiere que Estela destroce al Indoraptor miembro por miembro.

En el baño de hombres, Tomás agarró la toalla de papel para secarse las manos y la arrojó a la basura. Cuando salió del baño, Sora lo vio.  —¡Tomás!  —volvió la cabeza para mirar el Arivex.

—¡Sora!  —Tomás la llamó antes de que ella caminara hacia él y sonriera.
—Finalmente te encontré. ¿Dónde están los demás?  —preguntó Sora.
—Stacey y María están en el segundo piso, mientras que Zack... —Tomás hizo una pausa justo cuando Zack salía del baño de hombres.
—¡Sora!  —Zack corrió hacia ella.
—Hola, Zack.  —Saludó cuando el adolescente se puso nervioso por la emoción.
—Dime que te vas a quedar para el torneo, por favor. ¡Tomás está siendo un verdadero aguafiestas!  —Zack le rogó.
—No me voy a quedar-- Zack se quejó cuando ella dijo eso, --estaré peleando en el partido.  —Sora agregó.
—¡Sí, sí, sí! No puedo esperar a que comience la pelea.  —Zack vitoreó, emocionándose.
—Sobre eso... No sé dónde está la arena, mucho menos sé con quién voy a pelear.  —admitió Sora.
—Sora, ¿estás seguro de que quieres pelear?  —Tomás le preguntó.
—Definitivamente, solo quería verlos primero antes de irme.  —Sora aclaró.
—¡Oh, sí! Te estoy apoyando.  —Zack pasó su brazo alrededor del cuello de Sora, lo que era más un gesto fraternal mientras subían al segundo piso con Tomás tres pasos detrás de ellos.

—¿No debería empezar el espectáculo ahora?  —preguntó Baci Llus.
—Honestamente, estoy tan despistado como tú. Ha pasado casi una hora desde que llegamos aquí y no veo señales de que el torneo comience pronto.  —Micah respondió antes de que se le escapara un bostezo.
—¿Ya estás aburrido?  —le preguntó, con el codo apoyado en el reposabrazos.
—Es hora de que me duerma, he estado despierto desde las 5 de la mañana. Por lo general, los amebianos como yo nos quedamos despiertos entre 6 y 9 horas, pero con los viajes espaciales y las simulaciones de entrenamiento de Estela tengo que permanecer despierto hasta 12 horas o más, lo cual no es saludable.  —Micah explicó mientras dejaba escapar un sonido somnoliento.
—Y pensé que Mitis solo estaba siendo vaga y que estaba usando ese ciclo de sueño suyo como excusa.
—La mayoría de nosotros somos adictos al trabajo por naturaleza. Nos gusta ser productivos.  —Micah bostezó—.  Despiértame cuando sea el turno de pelear de Estela.  —Micah se acomodó en una posición sentada cómoda para que ella durmiera.
—Bien entonces.  —dijo Baci Llus antes de que Micah se quitara las gafas y cerrara los ojos. Baci se levantó de su asiento para tirar la bolsa de papel y el vaso de refresco a la basura. Cuando regresó a su asiento, Micah ya estaba profundamente dormida con la boca ligeramente abierta, roncando.

Stacey y María se sentaron en sus asientos, Stacey estaba en su teléfono, desplazándose en una aplicación de compras para matar el tiempo mientras María conectaba sus auriculares, escuchando su lista de reproducción. 
—Hola chicas.  —la cabeza de Stacey se inclinó hacia su izquierda cuando escuchó la voz de Sora.
—Hola Sora.  —Stacey respondió mientras la cabeza de María se sacudía como un muñeco de un lado a otro, escuchando la música cuando Stacey le dio un codazo al guardián de la Dimensión azul. 
—¿Qué?  —preguntó María, pausando su lista de reproducción.  Cuando levantó la vista, vio el Arivex. 
—Hola Sora.  —María saludó mientras sonreía dulcemente.
—Disculpe.  —Zack se deslizó hasta su asiento.
—Estaré peleando en el torneo, deséenme suerte.  —dijo la Arivex.
—Buena suerte.  —dijo Stacey.
—Gracias.  —Sora dijo mientras salía. Tomás luego se sentó en su asiento.

Estela caminó enojada, con las fosas nasales dilatadas y sus ojos rojos brillando peligrosamente. Un vínculo disonante que conduce a la consternación y los impulsos internos. A todo lo que termina con un burn out. Estela pasó junto a Carina, la usurpadora se bajó los lentes de sol para que se vieran sus ojos de gata. La agente izariana entró y pasó por cazarrecompensas infiltrados, luchadores, deidades y un grupo promedio de personas.  Pero no te preocupes. Esto es simplemente una advertencia.  El cabello magenta de Estela se movió de lado a lado antes de que aminorara la velocidad y caminara a un ritmo normal, cuando por el rabillo del ojo, un elfo con ojos azul cobalto se alejaba buscando la arena.

Esperemos que no te quemes como una estrella.

Estela entró en la sala de espera para reunirse con los demás concursantes. Patricia estaba cerca mientras vigilaba a los invitados.

Chris estaba a punto de encontrar a Tony cuando una adolescente chocó con él. Una morena de ojos azules con un cristal morado colgando de su cuello.
—¡Ay!  —Sora retrocedió cuando miró al apuesto venusino.
—¿Estás bien?  —Chris la miró, sus ojos azul cielo taladrando su alma. Sora parpadeó una o dos veces antes de registrar su pregunta.
—Si, estoy bien.  —Sora puso los mechones de su cabello castaño detrás de la oreja mirando hacia un lado—.  Estoy tratando de encontrar la arena antes de que comience el partido. No quiero llegar tarde.
—En realidad soy uno de los competidores, aunque todavía no he conocido a los otros combatientes.  —Chris admitió.
—Yo tampoco. Supongo que somos los únicos.  —Sora dijo.
—El nombre es Chris.  —se presentó al Arivex con una sonrisa con hoyuelos.
—Mi nombre es Sora Hasaki. Encantado de conocerte.  —Sora extendió su brazo y Chris correspondió al apretón de manos como un caballero.

Ryo todavía estaba deambulando por los pasillos cuando se encontró con un anciano que llevaba un sombrero de paja de samurái y una larga barba blanca. 
—Parece que estás perdido, joven.  —Yin dijo mientras se acariciaba la barba.
—Tengo que encontrar la arena, de lo contrario mi esfuerzo sería en vano.  —Ryo respondió.
—Puedo llevarte allí si quieres.  —sugirió el maestro Yamitzu.
—Sí, guía el camino, anciano.  —Ryo aceptó, Yin se llevó las manos a la espalda y caminó por el pasillo, giró a la derecha y pasó junto a un joven Arivex y un apuesto venusino.

—Realmente debería irme.  —Sora dijo mientras Chris miraba su reloj.  10:47

10:48

—Todavía tenemos tiempo para buscar la arena.  —el rubio venusino se desenrolló la manga.

Una recepcionista rubia de ojos verdes, con el cabello recogido en una cola de caballo, lucía una chaqueta de tres colores, una camisa blanca con botones y medias desnudas, se había acercado a los competidores.  —¿Se van tan pronto?
—Sí, el partido comenzará en cualquier momento y no quiero llegar tarde. Somos uno de los combatientes y debemos prepararnos para el partido.  —Chris aclaró antes de señalar a Sora.
—No hay problema. Por aquí.  —Patricia dejó escapar una sonrisa que se usa para dar la bienvenida a los invitados antes de que los dos combatientes la siguieran hasta detenerse donde estaban reunidos el resto de los competidores.

Estela entró en la habitación mientras miraba a los nuevos competidores a quienes no había visto antes. Vio a Shadow hablando con un concursante asiático mientras trataban de matar el tiempo mientras la miraba tirar los dados. Estella miró a la muñeca. Un brazalete EMC.  ¿Es ella una criminal? Estela pensó para sí misma mientras miraba el modelo desde lejos, a juzgar por su forma y tamaño parecía haber sido fabricado a mediados de la década de 2030 basado en su diseño simple equipado con nanotecnología. Sombra lanzó un dado. El dado mostraba: 4. Entonces Shadow recogió el diminuto dado con su afilada hoz como garra y lo recogió antes de entregárselo a Haeji. Entonces Haeji lanzó el dado, el dado mostró 3.
—¡Así que deberíamos lanzar una moneda al aire, quien obtenga cruz obtendrá dulces!  —Hwa Hae Ji sugirió antes de que el Indoraptor asintiera con la cabeza.
—¡Seguro!  —Shadow lanzó una moneda. La moneda mostraba: Cruz.
—¡Oh, supongo que obtuviste el primero!  —la ladrona de Daoitu sacó el caramelo de su bolsillo, sabor a uva.
—Hagámoslo de nuevo.  —Shadow abrió el envoltorio del caramelo con un giro de su garra mientras Stella pasaba junto a ellos.
—Mi turno.  —Haeji lanzó una moneda. La moneda mostraba: Cruz.  —SÍ.
—¡Usted lo consigue!  —Shadow la felicitó antes de tragarse el dulce de un bocado.
Haeji abrió el caramelo con sabor a caramelo y se lo comió.  —¡Eso era bueno!

Estela había visto a Faim sentado junto a una adolescente rubia.  —Hola, Faim.
—Oye, Stella, ¿estás lista para un uno a uno?  —el artista marcial rubio se levantó de su asiento calentando para un combate.
—Claro, eso es si peleamos entre nosotros. ¿Vamos a pelear usando armas o son solo puñetazos a la antigua?  —preguntó Estela.
—Normalmente peleo desarmado, aunque leí en el folleto que puedes usar armas siempre que no haya magia involucrada".  Faim respondió.
—¿Entonces también estás en la división cuerpo a cuerpo? ¡Eso es genial! Me vendría bien un compañero de entrenamiento para calentar.  —Estela dio un par de pasos hacia atrás antes de tomar una posición de pelea.
—Me lees la mente.  —Faim tomó una posición de pelea antes de que Yin entrara y se interpusiera antes de que los dos pudieran tener la oportunidad de practicar con otro competidor. Un elfo alto con cabello azabache, piel clara y ojos azul cobalto miró a los otros combatientes antes de dirigir su mirada al maestro Yamitzu.
—Gracias, anciano.  —Ryo expresó su gratitud con una reverencia.
—No pienses en eso, joven.  —respondió el Maestro Yin, sin saber que el elfo era mucho mayor de lo que parecía.

—Y aquí es donde estarás esperando hasta que comience el partido.  —Patricia dijo mientras señalaba la habitación mientras Chris y Sora entraban.  —Disfruta tu estancia.  —Patricia agregó antes de salir de la habitación.