🔞VMIN🔞

Jimin parecía un total adolescente hormonal cuando el coche donde iba se plantó frente al apartamento de Taehyung. Se bajó con precaución y quitó sus gafas de sol, aunque fuera de noche, también su cubrebocas.

Si alguien le preguntaba, él solo iba a decir que iba a despedir algo. Si con eso la relación de él y Jungkook funcionaba, porque de ser por otra causa... Jimin no dejaría que eso fuera una despedida. Habían estado años sin hacer esto, por medio de peleas, sentimientos y demás, pero ahora que todo iba a acabar y había surgido tan de repente, el rubio se encontró preguntándose: ¿y por qué no?

Taehyung le abrió enseguida, con una gran sonrisa, algo sonrojado y una camiseta que dejaba a la vista sus clavículas y cuello, mostrando ese porte fino y elegante que el más alto siempre llevaba.

Para los ojos de todos, Taehyung era un chico inocente que había dado su primer beso de rebote en un programa con otro compañero de su grupo. Para Jimin y los demás, era un chico inteligente, que sabía de la vida y disfrutaba de ella. En todos los sentidos habidos y por haber.

Por eso, casi arrastró a Jimin dentro de su apartamento y le hizo soltar todo lo que llevaba encima rápidamente. Yeontan le ladró en forma de saludo y el rubio le sonrió, agachándose para quedar frente al animal y acariciarlo. Taehyung, que iba detrás, se vio con la estampa frente a sus ojos y antes de frenar sus propios pies o detenerse abruptamente, chocó con Jimin.

Él no se inmutó, pero Taehyung quedó en medio de una crisis existencial. Es decir, acababan de tener una extraña conversación por teléfono, de la cual aún seguía sonrojado y algo tímido, pero ahora, Jimin se encontraba ahí frente a él, agachado para sostenerse del suelo y dejando todo a la imaginación del pobre chico tras él. Carraspeó, casi atorándose y colocó su mano en su espalda baja para hacerle subir, cosa que Jimin hizo sin problemas.

Flexibilidad. Se apuntó mentalmente el de pelo negro.

Jimin sonrió de lado, intencionadamente y sin que Taehyung le observara, tomando su mano para caminar por la casa sin rumbo.

— ¿Y bien? ¿Tomarás tú la iniciativa o tendré que hacerlo yo? —Taehyung gruñó, acercándose a él con aires grandes, Jimin ensanchó su sonrisa—. Cobarde.

— ¿Cobarde?

Lo siguiente que supo fue que su mejor amigo le tenía acorralado, con ambos brazos sobre su cabeza y mirándole con una mirada tan penetrante que le haría flaquear sus piernas en cualquier momento. Taehyung estaba fuera de sí, parecía un caballo de pura sangre, alguien que se estaba dejando llevar por sus instintos.

— ¿Taehyung? —Preguntó cauteloso bajo esa mirada.

— Voy a besarte de una maldita vez a ver si así dejas de joder. —Masculló—. Te voy a besar tan bien que ese idiota de Jeon no sabrá cómo hacer para que dejes de pensar en mí.

Jimin sonrió aún más, estaba tentándolo.

— ¿Estás enamorado de mí? —Llevó sus manos a su pecho y las situó ahí mismo.

— No, nunca. —Habló tranquilo y serio, sin quitar esa mirada. Jimin pudo respirar tranquilo, lo que menos quería era sentimientos de por medio.

— Pues adelante, tanto que dices de hacer y no haces.

— Una cosa. —Murmuró, apegándose más al contrario—. Jungkook, ni nadie del grupo, debe saber sobre esto.

— Nunca lo supieron. —Se encogió de hombros—. Nunca supieron todas las demás despedidas.

Eso fue lo que necesitaba, Taehyung acortó la distancia entre ambos a los pocos segundos y Jimin se enganchó de su cuello al mismo tiempo que éste abría su boca con su lengua para arrasarla. Fue pegado casi bruscamente a la pared y las grandes manos de Kim tomaron su cintura para un buen agarre, moviendo sus labios ferozmente sobre los ajenos, en un intento por destensar su ira y todo lo que arremolinaba su pecho en esos momentos. Jimin juró sentirse en el mismo cielo cuando descubrió el leve sabor a caramelo que los labios del más alto traían, tanto que incluso jadeó, sacándolo del trance unos segundos.

Esto que estaba haciendo estaba mal, pero ya no le importaba. Jungkook había dejado que Yugyeom dejara chupetones por su cuello y él... dejaría que Taehyung hiciese lo mismo.

No podía enfadarse. No eran nada oficial aunque lo sentían, pero por unos minutos podrían deshacer sus sentimientos y centrarse en otra persona, como la que le besaba con pasión y sujetaba su cadera en un agarre demandante ahora mismo.

A la mierda, Jeon Jungkook. Hoy sería de Kim Taehyung.

Llevó sus manos a los hombros del de pelo negro y dio un pequeño salto para columpiarse y atrapar la cintura del contrario con sus piernas, enrollándolas ahí y sin dejar de besarle. En ese instante, Taehyung parpadeó y se separó levemente aturdido, viendo en la situación en la que se encontraban.

— Jimin... —Titubeó.

— Despedida. —Murmuró el rubio, algo aturdido y tomando su rostro para que le mirara a los ojos.

— Despedida. —Asintió convencido.

Tomó sus muslos y lo levantó, separándolo de la pared para elevarlo y besarle al igual que segundos atrás, mientras sus pies se movían por sí solos en busca de su propia habitación. Escuchaba de fondo el ruido de la televisión y Yeontan ladrarle a ésta, pero no le importó.

Ahora no le importaba nada. Estaba tan perdido en Park Jimin.

Rápidamente, ambos llegaron a la habitación y Jimin fue lanzado con cuidado a la cama, colocándose sobre ella e instando a Taehyung a quedar sobre él, cosa que le retractó un poco.

— Creo que estamos llevando esto demasiado lejos... —Murmuró con poca voz.

— ¿Qué te detiene?

— Jungkook... entre otras cosas.

— Olvídate de eso, olvídate de todo por hoy. —Tiró suavemente de su mano y le acercó a él—. Ven, ven conmigo.

Le miró, relamiendo sus labios algo pensativo, pero, ¿qué más daba? Si se ganaba un puñetazo de Jungkook en el rostro, había valido totalmente la pena.

Jimin le devolvió la mirada, actuando por instinto al ver que el de pelo negro se retractaría, giró su cuerpo y quedó frente al colchón, dándole la espalda como minutos antes en la sala, salvo porque ahora su espalda se encorvaba ligeramente y sus rodillas y manos estaban pegadas a la cama.

Taehyung respiró sofocado y llevó sus manos a la espalda baja del chico, acariciando lentamente y subiendo sus manos para acariciar cualquier porción de piel disponible. Jimin sonrió desde su sitio antes de quitarse la camiseta.

— ¿Te sigue excitando que te hable en inglés? —Preguntó de manera sugestiva, llevando sus manos hacia atrás para hacerle quitar su camiseta al contrario. Taehyung tragó saliva sonoramente.

— Como no tienes idea. —Fue lo último que dijo antes de quitar por completo su camiseta y ayudar al rubio con sus pantalones.

Taehyung no era tan... musculoso, como Jungkook, pero tenía buen cuerpo y sabía usarlo a su antojo. Eso diría antes, pues desde que en la empresa habían construido un gimnasio y éste se pasaba las tardes aburridas en él, sus brazos se veían más tonificados incluso que los del mismo Jungkook, y su vientre iba adquiriendo poco a poco esa textura sólida y dura, con algunos incipientes abdominales amenazando con salir.

Bajó con rapidez sus pantalones y ropa interior, haciéndole sentir a Jimin lo duro que se encontraba tras él. Éste jadeó en respuesta y se pegó más a él, ofreciéndole una maldición en voz baja y sacando del mismo modo sus pantalones y bóxers. La mirada de Taehyung se perdió en su desnudez por unos segundos, tal vez minutos, pero no le importó, no sentía vergüenza. Fue ese su incentivo para comenzar a prepararlo, añadiendo primeramente un dedo y luego los siguientes.

No lo pensó demasiado cuando lo tuvo listo, apoyando su glande y haciendo un poco de presión, adentrándose en él de una embestida dura y certera, soltando un jadeo y echando su cabeza hacia atrás.

— Tan estrecho... m-mojado y perfecto... —Murmuró completamente perdido en el placer de esa embestida, volviéndole a embestir y sujetando fuerte su cadera ante el ritmo intenso y desesperado que acababa de comenzar solo por escucharle rogar—. ¿Así, uhm? Talk to me, am I cowardly? (Háblame, ¿soy cobarde?)

— Yes, y-yeah... —Gimió agudamente en un alarido de placer, arqueando más su espalda por las embestidas y dejando salir alguna que otra lágrima de placer, derrumbándose completamente en la cama, a su total disposición.

Taehyung siguió bombeando tras él, gruñendo en el proceso y dejando marcas allá que tocaba, sujetando su estrecha cintura, dejando la marca de sus largos dedos en ella. Acarició su espalda para destensarle un poco, flexionando sus propios músculos y sin dejar de embestirle, ahora tomando un ritmo lento pero profundo.

— A-Agh~ —Gimió roncamente, echando su cabeza hacia atrás.

Cuando sus manos llegaron a los hombros de Jimin, los tomó para mantenerlos rectos, y su mano se enterró en su cabello para agarrarlo y tirar de su cabeza hacia atrás, como ajuste para continuar embistiéndole a ese ritmo que llevaba. Cada cierto tiempo, dejó alguna que otra nalgada con su otra mano, adorando la sensación de sumisión de Jimin por su parte.

— T-Tan bien te sientes... me aprietas deliciosamente... caliente y dulce... —Cerró sus ojos para tratar de contenerse un poco más, mordiendo su labio inferior y subiendo poco a poco la intensidad de sus embestidas, sin dejar de ser profundas y certeras al escuchar sus alaridos de placer—. I'll cum i-inside you, do you want it? (Voy a venirme dentro de ti, ¿quieres eso?)

Jimin enterró sus manos entre las sábanas, sintiéndose perdido ante sus palabras y sus toques, asintiendo rápidamente y de manera desesperada.

— Y-Yes... p-please... —Gimió.

— Adoro tu cuerpo y te adoro a ti. —Hablando entrecortado al subir la intensidad de sus movimientos, provocando un ritmo totalmente necesitado en sus embestidas. Mordió su labio inferior, amasando su trasero con su mano libre y abriendo un poco más sus piernas para una mejor vista y penetración.

Las embestidas se volvieron poco a poco torpes pero precisas, haciéndole tambalear un poco por el placer y el estar rozando la cima, tan cerca de ella que cuando escuchó a Jimin rogar o sollozar por que se venga dentro de él, fue lo único que necesitó para dejarse ir.

— M-Maldita s-sea... —Gruñó ronco ante la estrechez que le recibía, mientras sigue corriéndose dentro y no deja de empujar— F-Fuck...

— Ahgm~ —Gimió ahogadamente el rubio—. T-Taehyung~

Con simplemente sentir su esencia dentro de él y como seguía dando embestidas aumentando el ritmo, Jimin terminó corriéndose gimiendo en alto y sintiendo su cuerpo entero temblar. Relajó un poco sus manos, las cuales estaban apretando las sábanas, sintiendo algo de dolor al hacerlo y tratando de recuperar la respiración, apoyando su frente en la cama.

Taehyung, por otro lado, salió cuidadosamente de él y observó su esencia salir ante la acción, separándose de su cuerpo para encontrar algunas toallas húmedas y limpiarle con eso, además de donde Jimin había descargado.

Lo que acababan de hacer, no podría ser comparado al cielo, aunque se sintiese como eso.