— ¿Estás nervioso? —Jimin giró al escuchar la voz del menor tras él.

— ¿Por qué iba a estarlo? Siempre preguntan lo mismo.

— Uhum.

No era cierto. Siempre estaba nervioso. En cada entrevista, en cada evento a los que tenía programado iba a ir nervioso con miedo a fastidiarla. Estaba rozando el límite y eso siempre le iba a agobiar. Jungkook se acercó a él y masajeó sus hombros intentando destensarle, Jimin agradeció mentalmente y cerró sus ojos por unos momentos.

Segundos más tarde, Jeon le abrazó y apoyó el mentón en su hombro para permanecer cerca de su oído.

— Lo vas a hacer bien. Lo vamos a hacer bien. —Le aseguró—. No vamos a fallar, ni en esta ni en otra, ¿entendiste?

— ¿Sabes? A veces eres muy demandante conmigo y debes tenerme un mínimo de respeto luego de todo lo que estoy haciendo por una de tus estupideces. —Jungkook rió aún sujetando su cintura.

— ¿Quieres que cuando lleguemos a casa de tus padres te de un merecido masaje por todas las preocupaciones que te hago pasar? —Preguntó inocentemente—. Seokjin hyung dice que mis masajes son buenos.

— Me vendría bien un buen masaje. —Admitió. La mano del menor subió hasta su nuca para hacer presión y masajear—. Tengo la columna vertebral fastidiada por dormir poco estos días.

— No me dejas dormir contigo, de otro modo te hubiera protegido de los malos sueños. —Habló divertido—. Cuando lleguemos a Busán te haré el mejor masaje de todos, pondré música de fondo, no, mejor te cantaré yo, y dormirás como un bebé toda la noche.

— ¿Te quedarás en la habitación de Jihyun?

— No, cariño. —Negó—. Si vamos a ser pareja, vamos a ser realistas.

Jimin rodó los ojos.

— Pues te quedas el sofá si no quieres su cama. —Se encogió de hombros.

— ¿Qué te cuesta dormir dos noches conmigo?

Mucho.

Demasiado.

Evitemos las confusiones por ahora.

— Tres en realidad. —Corrigió—. ¿Por qué insistes tanto?

— Estoy acostumbrado a que cuando nos quedamos a dormir en la casa conjunta nunca duermo solo. Hoseok, Taehyung o incluso Seokjin duermen conmigo. —Suspiró—. Pero tú no me dejas nunca.

— Porque eres un oso gigante y me puedes aplastar. —Dijo con diversión—. Tienes esa manía de pillar lo primero que veas y atraparlo entre tus brazos. No quiero ser tu presa, Jeon.

— Hagamos algo. —Lo giró, listo para decir su propuesta—. Si Jihyun no pasa el fin de semana con tus padres y, por consiguiente, con nosotros, duermo en su habitación. De lo contrario, me tendrás que hacer un hueco en la tuya.

Park lo pensó durante unos segundos y rezó mentalmente para que su hermano no viniera a visitarle ese fin de semana.

— Trato hecho.

— No se vale arrepentirse después. —Amenazó. Jimin asintió—. Y me tendrás que hacer el desayuno también.

— Eso ya lo iremos viendo, Jungkook.

El nombrado iba a reprochar algo cuando una chica de seguridad los llamó y condujo hasta la central de la cadena de radio. Ambos agradecieron con una reverencia y se sentaron para comenzar con la entrevista.

— Jimin y Jungkook. Jungkook y Jimin. —Comenzó el señor de voz neutra—. Son los nombres tendencia desde hace días en las redes sociales. Díganme, ¿cómo se encuentran?

— Felices. —Hablaron al unísono.

— Que compenetración, chicos. —Rió—. Estoy seguro de que os han hecho todo tipos de preguntas ridículas y aburridas, pero esto no será igual. Esta radio es una radio joven y llena de vida. ¿Están listos para leer las preguntas de los fanáticos?

— Si.

— Empiezo a tener miedo. —Confesó Jungkook haciendo reír a los demás entrevistadores.

— Primera pregunta. —Alzó las cejas a la vez que buscaba en Twitter alguna propuesta—. La tenemos. Jungkook y Jimin, ahora son pareja pero... ¿han tenido algo más secreto con otra persona y que nadie más sepa?

Los dos se miraron entre sí.

— Si. —Habló Jimin—. Por mi parte sí. No se le puede llamar relación seria a ninguna pareja por las circunstancias de trabajo, pero sí ha habido algo.

— También. —Confesó el menor—. Creo que menos que Jimin, lo mío se basa en el tiempo como estudiante.

— ¿Así que algunos líos de adolescentes juveniles y estudiantiles? —Preguntó divertido. Jungkook rió.

— Exactamente.

— Dando paso a la segunda pregunta que nos encontramos es... ¿han estado con más personas del mismo sexo?

— No. —Ese fue Jungkook.

Jimin intercaló la mirada entre sus dedos y Jungkook.

— Si. —Confesó en un susurro—. No estar, pero si probar.

— ¿Podemos saber qué tal la experiencia?

— Horrible hasta que llegó Jungkook. —Rió—. No hagan experimentos con sus amigos si no están seguros de que les gusta, aunque por mi suerte el mío no rompió la amistad, no jueguen con eso.

Jeon enarcó una ceja.

— ¿Con quién experimentaste? —Las mejillas del mayor se tornaron rosadas por instantes.

— Con Taehyung.

— ¿Eso es cierto? —Intervino el entrevistador—. V también está en BTS, ¿verdad? ¿Quién diría que había más de una relación en el grupo?

— No, no, no es una relación ni lo fue. —Admitió rápidamente—. Simplemente, no sé, nos besamos unas cuantas veces y ya. ¿Qué más daba?

El pelinegro se echó hacia atrás en su asiento.

— ¿Cuándo?

— Tal vez 2015. —Se encogió de hombros—. Era Run o I Need U, no recuerdo. Por los alrededores.

— Pasemos a la tercera pregunta. —Habló el señor—. Ambos estáis en una relación, pero... ¿cómo os identificáis?

— ¿Bisexual? —La respuesta de Jungkook fue más una pregunta que una afirmación.

— No queremos ponernos etiquetas. —Habló Jimin—. Estamos saliendo, si, pero al principio todo era nuevo para nosotros. Nos pilló desprevenidos cuando nos empezó a gustar el otro, a nosotros nos gustaban y gustan las mujeres.

— ¿Entonces son bisexuales ambos?

— No sería un buen término. No nos gustan las etiquetas. —Repitió—. No somos prendas de ropa.

— Yo soy Jiminsexual y Jimin es Jungkooksexual. —Aclaró—. No hace falta saber más.

— Magnífica respuesta. —Rió—. Ahora la pregunta que todos han estado esperando. Hay mucho lío y debate en Twitter por ella y se define en roles. ¿Cuál rol conlleva cada uno en la relación?

— Yo soy el que manda en la relación.

— Amor, no mientas. —Intervino Jimin mirándole de soslayo—. Y no creo que se refiera a eso, siento que es algo más privado.

— Oh. —Añadió entendiendo lo que el mayor quiso decir.

— Pueden responder o no. —Aclaró el señor.

— No hay nada que ocultar. Supongo que ARMY se ha hecho tantas historias y preguntas que para acabar con el debate vamos a terminar de confesar esto. —Habló Park.

Antes de que pudiera continuar, Jungkook tomó su mano y se acercó al micrófono a la vez que miraba a la pequeña pantalla del teléfono retransmitiendo a ambos en directo.

— Si con esa pregunta se refieren a los roles en la cama, es la misma respuesta para ambos. —Dijo. Jimin entrecerró sus ojos sin esperar lo que dijo a continuación—. Somos versátiles.

— Deja de dar datos íntimos, por favor. —Murmuró.

Los entrevistadores se quedaron sorprendidos por la sinceridad del chico y no tardaron en cambiar de tema.

— Creo que ellos se han ganado un merecido batido de Starbucks por haber respondido a las preguntas más sofocantes de sus fans, ¿no lo creen? Es hora de despedirnos. —Jimin y Jungkook asintieron en silencio—. Regalen a la cámara un último momento juntos.

El mayor frunció sus labios y tomó del mentón a Jungkook para depositar un rápido beso en su mejilla, encendiendo las mejillas de ambos. El entrevistador rió y siguió hablando con los fanáticos mientras ellos salían de la sala.

Una vez fuera, respiraron tranquilos.

— Regla número dos: no besos. —Habló Jungkook—. Regla número tres: Jungkook manda en la relación.

— Las reglas están para romperlas, Jeon.