«Extra III»
_____________________
T/Obidei y KakuHidan.
Extra III. Sinceridad.
_____________________
Entre risas bajas el albino y él azabache ingresaron en la cueva entre pequeños empujones, pero al tan solo colocar un pie en la sala la luz se encendió de forma repentina, encontrándose con los demás miembros de la organización sentados en el sofá, salvó el rubio y el moreno, quienes bajaban por las escaleras atrás del dios del dolor, quien se mostraba serio en su lugar y los otros dos adormilados, —Como todos en aquella sala cabe destacar.— cuando Pain termino de bajar, le hizo señas a quienes le seguían para que también se sentasen y así mirar a los recién llegados.
—Basta de todo esto ya.— Suelta sin más, caminando hacia ellos y colocandose frente al azabache.— Expliquen aquí y ahora que demonios sucede entre ambos.
Ante ello Itachi dejo de bostezar mostrándose interesado, Sasori sonrió pícaro y presto completa atención al asunto, Kisame sonreía como el marionetista, Zetsu negaba ante la actitud de su pareja, Konan silbaba distraída mientras fingía inocencia, Kakuzu empezó a contar su dinero después de darle una rápida mirada al albino y Deidara tan solo bostezaba deseando volver a su cama junto al azabache, con estos tres últimos la historia era distinta, puesto que ya sabían sobre aquel ridículo plan, excepto la mujer puesto que está aún no estaba enterada del resultado, por lo que miraba interesada en las reacciones de las víctimas. Obito y Hidan se miraron entre sí fingiendo confusión, mientras que en sus interiores reprimían las fuertes ganas de reír.
Si, aquel lazo realmente nunca se había roto.
Hidan paso al lado del pelinaranja, dirigiéndose hasta la mesa de té y sentandose sobre está, el azabache por su parte recostó su espalda de la pared y cruzo sus brazos. Ante el desinterés de estos, a Pain le empezó a resaltar una pequeña vena de enojo en su frente. Kisame, Sasori y Konan reprimieron una carcajada, Itachi solo se cruzó de brazos serio, Zetsu empujaba a su pareja levemente, Kakuzu no prestaba atención y Deidara empezaba a quedarse dormido.
—¿A qué te refieres, Pain?
Inquirio el azabache sonriendo de lado, haciéndose el desentendido. El dios del dolor bufa y se acerca enojado hacia el Uchiha mayor, mientras le señalaba con su dedo índice y mirándole con un brillo amenazador en sus orbes, Obito amplió su sonrisa ladina.
—¡No te hagas el idiota!— Le regaña.— Desde hace unas semanas tú y Hidan han estado más unidos de lo que antes fueron, inclusive iniciaste una pelea con Kakuzu por ello.
Mientras el pelinaranja le explica con detalle aquello que deseaba que el azabache sincerada y aceptará en voz alta, el más alto solo empezó a sentir un fuerte aburrimiento en su interior.
—Pudiste lanzarme un Shinra Tensei, pero preferiste sostener mi cintura.— Le enfrenta acercando sus rostros un poco y un mínimo brillo de burla aparecía en sus orbes.— ¿Por qué tú no me explicas el porqué?
Ríe al alejarse mientras miraba como el dios del dolor se sonrojaba por el enojo, realmente odiaba que el azabache no le tuviera ni el más mínimo respeto, puesto que el Uchiha mayor solía hacerle ese tipo de bromas a pesar de saber sobre su relación con la fémina. Pain bufa y se cruza de brazos.
—¿Para que la cueva nos colapse encima, pedazo de idiota?— Reclama.
Obito se carcajea, moviendo su mano de un lado al otro restándole importancia al asunto. A muchos en la cueva aún les sorprendía el gran cambio en la actitud del azabache, desde el cambio tan radical de Tobi a Obito, el cual era una actitud sería y reservada la mayoría del tiempo, pero desde que Hidan y el azabache se habían vuelto cercanos... La actitud del mayor se volvió más "Normal" ahora hacia bromas y sonreía de vez en cuando.
—Ya calmate.— Suelta entre risas.— Hidan y yo somos mejores amigos.
El pelinaranja se quedó sin habla al recibir aquella información sin anestesia alguna, quedando anonadado al igual que los demás miembros que no estaban al tanto de ello, joder no podían culparlos, durante semanas empezaron a creerse el que entre ambos había una relación y con el paso de los días solo lo aceptaban cada vez más, pero que les soltasen así como así el hecho de que estuvieran tan equivocados... Nadie lo esperaba.
O al menos quienes no lo sabían.
Itachi se levantó del sillón de un tirón, despertando a quienes dormitaban en sus lugares y asustando a los que estaban disfrutando del espectáculo de ambos "líderes", este se acercó hasta su tío y sujeto el cuello de su camisa, sacudiéndole con fuerza. Obito le miraba confundido ante su actitud, casi desconociendo a su tranquilo y pacífico sobrino, definitivamente el que Kisame fuese una vieja chismosa le empezaba a afectar al menor.
—¿¡Era eso lo que dijiste que "no podías" explicar?!— Le agitó con más fuerza, sacando tan solo un "poco" la furia que contenía en su interior.— ¡Me estuve matando la cabeza pensando que tenías pareja y no me habías dicho!— Grita exasperado.— ¡Y me sales con esto! ¿¡Es en serio?!
Obito algo mareado sujeta con fuerza las manos del menor y las aparta de su ropa, para luego mirar de forma sería al menor, regañandole en silencio por su actitud.
—Ser pareja del Sushi con patas te afecta.— Niega decepcionado.— Kisame es una vieja chismosa.
—¡Papá!
—Vale, vale.— Suspira.— Déjenme les explico de una vez como sucedió todo esto, pero cálmate maldita sea.
Le dice resignado pero apenas al terminar su oración, frente suyo justo en el sofá siente como un aura aterradora le amenazaba en silencio y cuando alzo su mirada hacia donde provenía vio a la mujer de la organización, asesinandole con la mirada.
—¡Lenguaje!— Le regaña, Obito suspira.
El azabache revuelve su cabello con frustración y obliga a su sobrino a sentarse nuevamente en su lugar, para posteriormente el volver a recostar la espalda contra la pared, carraspeando un poco hace que todos le observen con atención. Después de que le mirasen con interés el azabache empezó a relatar con detalle lo que sucedió aquella tarde en la que ese plan empezó, el como el albino y él confesaron lo que sentían hacia sus enamorados en aquella posada, el como al Jashinista se le ocurrió el plan, como lo fueron desarrollando y cuando Konan les ofreció ayuda.
El azabache omitió uno que otro detalle del día de la posada, por ejemplo el como él y el albino se largaron a llorar juntos, consolandose mutuamente, pero de resto a lo demás, fue completamente sincero. Todos le prestaban atención, inclusive el avaro y el piroartista quienes deseaban saber los detalles. Luego fue el turno de Hidan de confesar el como ambos sintieron miedo al creer que el plan había fallado, dejando escapar el pequeño detalle del beso entre sus enamorados en la sala, —Cosa que ninguno a parte de ellos cuatro sabía.— sus reacciones, la forma tan estúpida en la que se alejo y cuando el Uchiha mayor estuvo a punto de abandonar la cueva.
Ambos fueron completamente sinceros en todo lo que respectaba al plan e incluso sobre sus confesiones, el como el ridículo plan a fin de cuentas había resultado y por fin eran parejas de quienes tanto añoraron. Hidan aprovecho el momento para poder disculparse con la pelimorada por alejarse así como así, quien solo le abrazo y nego con una pequeña sonrisa. Al terminar de sincerarse, Itachi se tomó la cien frustrado.
—Dejame ver si entendí.— Le dice un exaltado Itachi.— ¿¡Me estás diciendo que fue un jodido plan todo este tiempo?!
Obito asiente, manteniéndose serio a pesar de que Itachi pareciese estar a punto del colapso, mientras los demás miembros les miraban fijamente. Pain les miraba serio mientras negaba, Sasori comía desde el sillón con una sonrisa en su rostro disfrutando del drama, Kisame intentaba en vano calmar al Uchiha menor y sujetando su hombro, Kakuzu no les prestaba atención puesto que con una mano sostenía la de Hidan mientras que con la otra contaba unos billetes, el albino reía fuertemente estando recostado en el moreno, Zetsu negaba estando un poco ofendido de no estar al tanto y Konan, bueno ella...
Daba unos cuantos saltos de alegría.
—¡Lo sabía! ¡Sabía que iba a funcionar!— Chillaba emocionada respecto al hecho de que aquel ridículo plan funcionase.
—No puedo creer que estuvieras al tanto.
Exclamó Kisame a su lado mientras abanicaba con su mano a su pareja, la fémina le ignoro aún emocionada. A lo lejos el pelinaranja nego ante la actitud de su novia, cruzándose de brazos y soltando así un leve suspiro aliviado de no haberle preguntado aquel día que escondía.
«Sabia que tramaba algo.» Se dijo en su mente el dios del dolor.
—Pensar que casi pusieron la cueva patas arriba con sus tonterías.— Nego en un suspiro el bicolor.— Y me ofende que no me hayas contado nada, obito.
—Concuerdo con el áloe vera.
Zetsu fulminó con la mirada al Uchiha menor, quien le ignoro por completo regresando a su actitud sería de siempre y olvidando el hecho de que hace unos momentos estaba haciendo un berrinche. Obito observó a todos desde su lugar, preguntándose en que momento todos se volvieron tan cercanos e incluso se formaron parejas; Konan y Pain, Zetsu y Sasori, Kisame e Itachi, Hidan y Kakuzu... Inclusive por un largo tiempo creyó que el ser pareja de Deidara, jamás pasaría pero tan solo se sego a si mismo con sus miedos pasados y se encerró en su propia burbuja alejándose de todos, negandose a observar aquellos lazos que se crearon en esa organización.
Todos lucian tan felices, sonrientes y cómodos en aquel lugar, ese que en el pasado tan solo había traído amarguras a sus corazones con aquel plan que seguían con los ojos cerrados y negandose a tener alguna emoción hacia sus compañeros. Afortunadamente todo cambio aquel día en que decidió dejar el plan Ojo de luna en el pasado y abrirse paso al perdón, obteniendo más de lo que jamás imagino... Una familia, una muy problemática, pero eso era lo que los hacia especiales.
Una sonrisa aparece en el rostro del Uchiha.
Su mirada choca con la de Hidan, quien al verle sonreír con sinceridad le correspondió aquel pequeño gesto. Inesperadamente un brazo pasa por su cuello y le abraza, Obito mira a la fémina la cuál era la dueña del brazo y sin decirle nada le abraza por la cintura también.
—Sinceridad ante todo, ¿Eh?— Ella ríe.— Eso te a caracterizado desde hace mucho.— Obito asiente sin dejar de mirar a los demás, aún sonriendo.— ¿Sabes? Sin desearlo y sin darnos cuenta... Encontramos un lugar al cual llamar hogar.
Ante sus palabras los orbes del azabache se cristalizan y Konan le hace una seña a los demás haciéndoles acercarse a a ellos e inesperadamente les une al abrazo, convirtiéndolo en uno grupal y algunos miembros dejaban escapar unas pequeñas risas. Entre ello, el azabache toma la mano del rubio y la sostiene con fuerza, para después ser el menor quien entrelazase sus dedos y chocasen sus miradas entre risas.
Si, todo estaría bien mientras estuvieran todos juntos y aquella sinceridad, jamás desapareciese.
♡
Fin.
_____________________________
¡Hola!
Este es el extra final y con esto, la historia Operación celos concluye por completo, muchas gracias por siempre apoyar esta locura♥
¿Que les pareció?
¿Les gusto esta extraña idea? Espero que si.
¿Cual fue tu parte favorita?
Supongo que se preguntarán dos cosas, número uno ¿Dónde está el final alternativo ObiHidan? Y dos ¿Cuál es la sorpresa de la que hable. Bueno, me complace por fin mostrarles lo que llevo planeando desde que el capítulo cinco de esta historia, ¡Les presento "Operación Amarte"! Un final alternativo dónde obito y Hidan serán pareja, pero esto no será un one-shot ni nada parecido, está es una historia completamente basada en ellos y realmente espero puedan apoyarla uwu (Será publicada dentro de unos minutos y avisaré por aquí)
Escrito:09/11/21
Publicado: 09/11/21
2011 Palabras.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro