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«Capítulo 6»

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T/Obidei y KakuHidan.
6. Operación Celos.
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Obito miraba enojado a Hidan, ambos estaban en el baño de la sala con una toalla alrededor de sus cinturas, el albino no había seguido el plan y eso enojaba al Uchiha. El Uchiha como en las últimas horas pedía paciencia para poder sobrellevar aquella locura. Hidan estaba sentado sobre el inodoro cruzado de brazos mientras hacia un puchero, en frente de él se encontraba Obito aun con su expresión molesta también cruzado de brazos, ya llevaban diez minutos discutiendo en voz baja dentro del baño.

—¡Eso no era parte del trato!— Obito seguía gritándole y regañándole en voz baja.— ¡Me siento estafado!

El albino por su lado no le estaba prestando atención mientras se levantaba de donde estaba sentado, empezando a retirase la toalla para después acercarse a la tina y hundirse en esta, el Uchiha solo se centraba en regañarlo sin importarle en absoluto que este ya estuviese completamente desnudó. Hidan bufa exasperado.

—Sabes que la sutileza no es mi fuerte, Tobi.— Hidan rueda sus ojos y Obito retuvo sus ganas de estrangularlo, ambos empezaron a discutir de nuevo en voz baja, cada uno defendiendo su punto.

El Uchiha aclamaba que lo que hizo el albino fue una locura, por su lado Hidan solo aclaraba que no era su jodida culpa, el Uchiha inhaló y exhalo varias veces para poder desaparecer su enojo. Ya resignado se coloco una mano en el rostro suspirando en rendición, el albino había hundido su rostro hasta la nariz bajo el agua mirando de reojo al azabache.

—¿Al menos funciono tu tontería?— Le pregunto el azabache aun con la mano en el rostro.

El albino lo pensó por unos minutos, los cuales le empezaban a ser eternos al Uchiha, el Jashinista saco su rostro del agua y trago en seco mientras sonreía de forma nerviosa, empezando a rascarse la parte de atrás de su cabeza intentando disimular su vergüenza.

—No lo se.— Ríe nervioso, al Uchiha le empieza a sobresalir una vena demostrando su claro enojo.

—¿¡Como que no lo sabes!?— Le reclamo lo mas bajo que pudo intentando retener su enojo.

Hidan se puso recto del susto, para después mirarlo con enojo y señalarlo con su dedo índice así empezando a discutir con el azabache.

De nuevo.

Tan ensimismados estaban en su pequeña discusión que no notaron cuando la puerta del baño se abrió al mismo tiempo que pasaba una persona por esta mientras cerraba la puerta detrás de si. La persona los miro de forma seria mientras se cruzaba de brazos en su lugar y se recostaba de la puerta.

—Muy bien Obito, ¿Qué fue eso?— Ante la voz el Uchiha se tenso en su lugar, sosteniendo su toalla.

Obito trago en seco y de forma lenta volteo su rostro mirando al intruso en la habitación, el cuerpo del azabache empezó a temblar de forma ligera ante la mirada confundida del albino.

Hidan miro a la persona enfrente de ellos y su cuerpo se paralizo, miro al Uchiha de nuevo y este se encontraba pálido en su lugar, trago en seco, volviendo su mirada al intruso quien los miraba con loa brazos cruzados, una sola pregunta había en la mente de ambos.

¿¡Qué hacia Konan ahí!?

La pelimorada seguía mirando al Uchiha de forma seria y con un ligero toque de reproche en sus ojos, el azabache deseaba con todo su corazón que la tierra lo tragase en ese instante.

—¿Y bien?— Le pregunto una vez más.—Tienen mucho que explicar.

Hidan y Obito se miraron, tragaron en seco y se resignaron.

...

Ambos ya estaban vestidos y se encontraban en la habitación de la pelimorada, arrodillados en el piso frente a la cama de esta, la única mujer estaba sentada en frente de ellos, mirándolos enfadada.

Muy enfadada.

El Uchiha solo podía tragar en seco y desviar su mirada en diferentes direcciones, el albino solo se mantenía con una expresión aburrida. Konan respiro hondo y los miro intentando tranquilizar su creciente ira.

—Dejame ver si entendí.— Pauso.— Tú — Señalo al albino.— estas siendo una mala influencia para Tobi.

El Jashinista la miro indignado, el Uchiha retuvo una carcajada. El albino intento ponerse de pie para enfrentar a la mujer sin éxito, porque esta misma lo había golpeado con un periódico que tenia, ocasionando que este se sentara de nuevo.

Si, como a un perro.

—¡No soy tu jodida mascota!

Konan lo golpea de nuevo.

—¿Guau?— Susurro intentando imitar a un cachorro.

La pelimorada lo miro con la expresión en blanco, Obito se encontraba carcajeándose en el piso y el albino lo rodeo un aura depresiva. La mujer se coloco una mano en la frente mientras suspiraba resignada, los miro de reojo y negó.


¿Como habían llegado a aquella situación?

Simple, mientras ambos terminaban de bañarse le empezaron a relatar con lujo de detalle a la mujer todo su "Maravilloso plan", claramente siendo descrito de esa forma por el albino, después de que estos ya se hubiesen cambiado la pelimorada de forma simple los arrastro hacia la habitación de ella, para poder regañarlos a gusto.

Después de casi dos horas de sermones esta se había calmado, intentando analizar la situación con mas calma, ¿Qué era calma para la pelimorada?

Golpearlos cual cachorros que se portaron mal.

—Bien, ¿Por qué soy una mala influencia para él?— El albino rueda los ojos frustrado.

El azabache ya estaba calmando un poco mas su risa, la pelimorada suspiro.

—Porque él jamas haría una tontería así.— Lo señala enojada.— ¿Que clase de pacto satánico hiciste para que aceptara?

—Ninguno.— La expresión del Jashinista se encontraba en blanco.

—...— La mujer guardo silencio y miro al azabache, quien en ese instante estaba bostezando.— ¿Con que te amenazo Tobi?

El azabache parpadeo ante la reciente pregunta, abrió y cerro la boca intentando formular alguna respuesta coherente, fallando en el intento. Después se acerco a Konan, tomo su hombro y negó.

—Me dijo que si no lo hacia quemaría todos los cereales que tu me compras.— Dramatizó.

El albino casi se atraganto con su propia saliva y un sentimiento de indignación invadio su pecho.

—¡Falso!— Le señala.

—¡Es mami Konan! ¿¡Que quieres que haga!? — La señala desesperado.

—¡No lo se! ¡No traicionarme quizás!

Konan los golpea a ambos en la cabeza con las palmas de sus manos al mismo tiempo, el azabache se sujeto la parte afectada e hizo un puchero, Hidan por su parte...

Le saco el dedo del medio.

Los tres empezaron a discutir, discusión que duro veinte minutos. Hidan intentaba convencer a la pelimorada de ayudarlos y esta solo negaba, la discusión se había centrado en ambos mientras que Obito se acercaba de forma lenta a la puerta, el albino defendía su plan con diferentes argumentos siendo todos negados y ridiculizados por la mujer, quien decía sin parar que aquello no tenia sentido en absoluto.

Ella sabia que ambos solo terminarían haciendo una estupidez y por culpa del albino Obito se vería envuelto en ello, Hidan no entendía el porque la mujer defendía de tal forma al azabache, pero el Uchiha si sabia el porque.

Konan era la única persona con la que se había sincerado, ella sabia absolutamente todo de él, ya sea desde su pasado, De Rin, de sus pecados, sobre sus arrepentimientos, no había cosa que la pelimorada no supiese del azabache.

Se había convertido en su mejor amiga.

La persona en la que mas confiaba, cuando sentía que el mundo se le iba abajo ella aparecía y le tendía una mano, incluso sabia sobre lo que sentía por el Kamiruzu y ella aceptaba que el azabache no quisiese hacer nada al respecto para demostrar lo que sentía. 

Y eso le frustraba en exceso.

Ella quería, no, ella deseaba con todo su corazón ver al Uchiha feliz, que este se pudiese liberarse de todo el dolor y oscuridad que carcomía su corazón, pero tampoco podía obligarlo a sincerarse con el rubio. Al instante el plan del albino no le pareció tan descabellado, solo estaban haciendo las cosas mal y un poco de ayuda haría que este funcionase.

La mujer sonríe de lado.

Ella toma su zapatilla izquierda y lanza hacia la puerta cerrándola al instante, ante la mirada incrédula y asustada del azabache, quien estaba apunto de escapar de la habitación, el albino la miro en silencio.

—De acuerdo.— Suspiro.— Los ayudare en esto.

Hidan celebro, el Uchiha por su parte se sintió asombrado por aquella declaración y sintió un poco de miedo, con el albino ya le era mas que suficiente y justo ahora debía sobrellevar los extraños planes de la pelimorada.

Genial.

¿Que seguía? ¿Fingir salir de putas con ambos? Negó, no creía que ambos serian capaces de hacer aquello... ¿Verdad?

—¿De verdad?— Dijeron ambos hombres, el albino con emoción y el azabache con incredulidad.

Konan amplia su sonrisa.

—¿Al menos tienen un nombre para este plan?— Los dos comparten mirada y niegan, Konan suspira en rendición.— ¡Ya se! — Exclama emocionada al ocurrirsele un nombre "Perfecto" para aquello.— ¡Operación celos!

Un pequeño silencio invadió la habitación, todos comparten miradas, Hidan empieza a saltar y a chillar en la cama emocionado, Konan se une a él y Obito sonríe de lado mientras cierra sus ojos.

Debía admitir que era un gran nombre.

Continuara.
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¡Hola!

¿Que les pareció?

¿Les gusto esta extraña idea? Espero que si.

Ya se que estuve muy inactiva estos días (Semana) pero tengo una muy buena razón, estaba haciendo tarea xd

El capitulo ya lo tenia listo ayer, pero mi familia me andaba interrumpiendo cada cinco segundos mientras lo escribía y siendo sincera, no me había gustado como quedo, así que lo Reescribí. Y aun así siento que este es un poco aburrido, perdón por eso:(

Pido perdón por tan aburrido capitulo en serio xd

Dato curioso: Esta historia iba a durar cinco capítulos xd

¿Cual fue tu parte favorita?

Escrito:01/05/21
Publicado: 02/05/21

1659 palabras.

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