Su interior ardía, realmente le picaba su entrada y creía que si seguía de esa manera se iba a hinchar, pero no podía detenerse. 

El dolor mezclado con la sensación de placer que recorría todo su cuerpo, era algo que no podía cambiar por nada del mundo.

Sus jadeos sonaban lastimeros en el ambiente, mezclándose con los gruñidos freneticos del mayor. 

Su interior temblaba con fuerza mientras pequeños gritos salían de sus labios, con su respiración irregular, sabia lo que estaba por venir y aunque quisiera, no podía soportarlo. No podía aguantarse más.

Na-kyum lloriqueo repetidas veces, intentando emitir alguna palabra, pero solo salían balbuceos incoherentes. Seguidos con añarazos en la espalda del mayor, de su señor.

Las embestidas se sienten cada vez más profundas en su interior, el cosquilleo en su entrada se intensificaba con cada segundo, succionando con más fuerza la grande polla de Seungho.

Un grito ahogado sale de lo profundo de su garganta, mientras cierra sus ojos con fuerza, apretando los dedos de sus manos y pies. Y soltando un lloriqueo aún más intenso, producto del placer.

—- Joder Na-kyum, cuanto aprietas —- gruño Seungho, frunciendo su ceño, sintiendo como su miembro estaba siendo succionado por las paredes internas del menor, de su querido novio.

Seungho tampoco pudo resistirse más, implantando toda su semilla en el más pequeño, llenándolo de su calidez, de su esencia. Manteniéndolo satisfecho.

¿Cuántas veces habían realizado ese mismo acto? Su cuerpo estaba empezando a sentirse cansado, pero su mente le indica que debe seguir.

El rostro de Na-kyum, completamente agotado, aún podía mirarlo con lujuria, sabía que ya no podía correrse más, pero ese no sería un motivo para detenerse.

Las manos de Seungho tocaron las caderas del menor, elevando hasta que pudiera quedarse sentado en su regazo. Con su mirada fija en los ojos de su pareja y sus manos jugueteando con los gluteos de este, amazando con dedicación, volvió a besar sus labios.

Uniendo sus movimientos en un vaivén suave, buscando recuperar energía y continuó, jugando con su lengua, danzando incansablemente, solo esperando la necesidad de separarse por falta de oxigeno.

Seungho lo miró buscando una aprobación para realizar la intromisión. Nunca haría algo que su pareja no quisiera. Aunque quizás provocarlo si.

Na-kyum asintió levemente al notar su mirada. Sonrió mientras restregaba sus caderas levemente.

—- Montame —- gruño el pelinegro, abriendo un poco las paredes internar del menor y señalando su propio miembro. Quería que su amor se mueva encima suyo.

El menor, elevó un poco las caderas, alineando su entrada con la polla del mayor. Dispuesto a bajar lentamente, hasta "comer" todo el miembro de este, retenerlo en su centro.

Al poder tenerlo todo en su interior, soltó un fuerte gemido mientras cerraba sus ojos. Deleitandose por el palpitar del mayor dentro suyo. Incluso creía que podía sentir las venas del miembro de este y como iba agrandandose.

Cuando pudo acostumbrarse a la grandeza de su señor, mientras aún soltaba ligeros jadeos, decidió volver a elevar y bajar sus caderas. Repitiendo el movimiento una y otra vez.

Acomodandose para que pudiera sentir dicho pedazo de carne tocar sus puntos más exactos, delicioso y de mucho placer.

Sus subidas y descensos iban aumentando de velocidad, incluido con los gemidos desesperados. El cansancio iba llegando a su cuerpo; sin embargo, no quería detenerse ni un segundo. Aunque sus piernas dolieran y sintieran sus pies adormecerse, aún tenía energía suficiente para seguir.

—- Ayúdame —- susurro Na-kyum, tocando su vientre —- Llega más adentro, mi señor —- dando una orden clara, una orden que pronto sería atendida.

El pelinegro sonrió ante tal petición, sosteniendo un poco debajo de las costillas del menor. Indicando que llegaría ahí de lejos.

Luego, volvió una de sus manos a la cadera del menor, y la otra, a su glúteo. Guiando el movimiento en una velocidad requerida, nuevamente, arriba y abajo. Acompañado de ligeros gruñidos deseosos, realmente le gustaba ver arriba a su amado.

Seguía manteniendo esa sonrisa de idiota enamorado en su cara, además de parecerle divertido su pensamiento y la situación.

Tener que estar abajo de su amado, parecía que sus roles hubieran cambiado. Ahora él era un plebeyo a merced de Na-kyum y su amado podría ser su amo, su noble lord.

—- ¿Quiere más velocidad "mi señor"? —- se burló Seungho. Era tan placentero poder ver cada expresión avergonzada del menor.

Observar como sus mejillas adquirían un tono aún más rojizo, sus ganas de reclamar se convertían en balbuceos incoherentes. Y su mirada se desviaba a cualquier otro punto en la habitación, como si quisiera esconderse en algún otro lugar.

Sus embestidas se hacían más feroces pues deseaba terminar con esa ronda, tenía que admitir que él mismo se estaba agotando. No recordaba cuantas veces había visto a su Na-kyum correrse cansado, y mucho menos cuantas veces habia eyaculado.

Incluso hubo una ocasión en la que el menor simplemente apretó sus paredes internas, pero de su miembro ningún fluido salió. Eso si era sexy, que pudiera tener un climax por atrás.

—- Oh, más lento por favor —- suplico Na-kyum, no quería llegar a su liberación tan pronto, sabía que el pelinegro aún tenía mucho por darle. Su cuerpo nuevamente empezaba a temblar y su miembro se llenaba de liquido preseminal, advirtiendo una futura eyaculación.

Seungho ignoro su petición, no iba a dejarlo ir cuando estaba tan cerca. Así que, simplemente tocó el miembro del menor, tapando el pequeño "agujerito" de donde salian todos los fluidos. 

—- Seungho, suelta —- ordenó Na-kyum tocando el hombro del mayor, su mirada cambió radicalmente. ¡No podía impedirle correrse! 

—- Aguanta un poco, ya estoy cerca —- respondió el ojiambar, lamiendo el lóbulo de la oreja de su novio.

Na-kyum se retorció un poco, la presión que están sintiendo en su miembro le estaba haciendo "sufrir", desesperado, movió más rápido sus caderas. Sabía que si provocaba más al mayor, podía ser libertad y tener ese climax que tanto deseaba.

Seungho frunció el ceño ante dicho nuevo movimiento, soltando un breve gemido, producto de la sorpresa y la sensibilidad.

No pudo soportar más, así que soltó el agarre que tenía en el miembro del contrario y al mismo tiempo, ambos terminaron por llegar a su liberación.

Uno, con su esencia más caliente y espesa dentro del interior del menor. Y el otro, esparciendo un liquido transparente, casi agua, en el abdomen del mayor.

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Continuará...

¿Cómo que llevo un mes sin actualizar? Diosmio jaja, el tiempo pasa volando 😥

Comentarles que publique un especial navideño, con gogogo y ternura. El primer cap es Taeju x Euihyun, el segundo: Jaekyung x Dan. El tercero: Seungho x Na-kyum <3