REVERA
Después del incidente en la constructora, Barley esperaba que les restringieran la zona, o que a los guardias ya no les permitieran ayudar a los reos en la construcción pero en los días siguientes no hubo ningún cambio, fue como si no hubiese pasado nada, algunos prisioneros hablaban al respecto en el comedor, pero lo hablaban con total naturalidad, como si fuera algo cotidiano, algunos de ellos decían cosas como.
-no pertenecían a ninguna pandilla-
-en los tres años que he estado aquí- dijo un minotauro de unos cuarenta años- me ha tocado ver bastantes intentos de fugas, de hecho ya hace tiempo que no veía muchos, y ahora que lo pienso creo que todos ellos no pertenecían a ninguna pandilla-
-¿Cómo lo sabes?-
-cuando llegue, mi primer compañero de celda se escapó hace un año y medio-
-no te dijo nada antes de escaparse, o de intentar escaparse-
-bueno se ponía muy nervioso, en esos días tal vez se preparaba para escaparse, junto con otros, que no pertenecían a ninguna pandilla-
-¿los tres murieron?-pregunto Barley
-no a los otros dos los enviaron al salón de castigo y ahora que lo pienso, no regresaron, quizás los liberaron-
-sé qué extraño y suerte que no te enviaron a ti al salón de castigo- dijo un único sátiro que Barley había visto en todo el bloque.
-ah no, a los que evitan que otros reos se fuguen, no los envían al salón de castigo- respondió el que había estado ya tres años de prisionero.- solo si intentas fugarte o hacer algún numerito-añadió antes de terminar de beber su agua-lo curioso que a los que están en las pandillas- volteó a ver a los elfos de esa pandilla REVERA que estaban merodeando entre el perímetro del comedor como si estuvieran buscando a alguien y luego volteó de nuevo a los que estaban en la mesa, como si no los hubiese visto- no se los llevan-
Eso impresionó mucho a Barley, en serio a los que estaban en esas pandillas no los castigaban, a simple vista sonaba bien pero quizás el castigo que les daban era alargar su sentencia, aunque Barley si sintió curiosidad por saber más al respecto.
-¿lo dices en serio?-
-bueno si los castigan, un día o dos, pero regresan, bueno yo no he escuchado de nadie que sea miembro de las pandillas que haya sido castigado que no haya regresado-
-¿por cierto dónde queda el aula de castigo?-pregunto Barley que ya se había dado vueltas por todo el bloque pero nunca había visto ninguna habitación que pareciera ser una habitación de castigo.
-en la torre severa- respondió el minotauro-terminando de comer- es esa torre que está cerca del área que estamos construyendo, ahí están los francotiradores, pero ni me preguntes, creo que ni los guardias han visto nada, cuando llevan a alguien los guardias los dejan en una caseta de entrada y se van, así que ellos no saben que hay dentro y creo que ahí también llevan los cadáveres-
Al escuchar eso Barley sintió un fuerte escalofrío al imaginarse el que si moría ahí su familia no vería el cadáver, o que el lugar de castigos sea también una morgue, lo que podría significar que podrían asesinar a alguien mediante tortura.
-¿sabes mucho al respecto?- preguntó el sátiro.
-hablo con ellos, no todos son unos hijos de perra-
-y a los que no regresan, los habrán...- tu sabes eme, a, te, a de, o-
Esa parte fue la más fuerte, Barley imaginaba que si hacía algo malo, o cometía un error podrían llevarlo a que lo maten para hacer quien sabe que con su cuerpo.
-¿Por qué solo regresan a los de las pandillas a sus celdas?-
-eso es obvio tienen contactos tanto dentro como fuera, al punto en que si algo así pasara, los guardias recibirían represalias contra sus familias- dijo el Sátiro
-como el guardia ese, el de la reja de llegada, el año pasado mataron a su sobrino cuando estaba en la escuela, pobre tenia quince años, y como víctima colateral murieron dos alumnos más-
-por cierto Barley- intervino otro de los reos, un cíclope que estaba al lado de Barley que no había hablado hasta el momento- no estarás planteando unirte a los REVERA.-
-No claro que no, si lo estuviera no estaría hablando con ustedes- les respondió pensando en que era un grupo racista de puros elfos- digo son racistas, ya que en sus filas tiene puros elfos y no le hablan a nadie-
-quien dice-
-sí que te distancias bastante chico, si les pusieras atención algunos de los miembros si les hablan a tipos de otras razas, es más si te fijas bien, puedes ver que algunos de sus miembros les hablan a otros, además no siempre están unidos y esos quince no son todo el grupo son más-
Barley choco las yemas de sus dedos pulgares mientras decía- bueno tengo mis razones, si las supieran seguro que esos me matan-
-pues espero que no sea así porqué... te están viendo, y no es broma, te han estado observando casi toda la hora del desayuno-
Barley al inicio no parecía creerle, así que no dijo nada.
-¿Cómo dijiste que te llamabas?-preguntó el veterano
-Barley Lightfoot-
-bien Barley, no lo tomes a mal pero en serio de verdad te están viendo-
El joven levantó la mirada y vio la cara del centauro viendo hacia detrás de él, como en señal de advertencia, Barley se volteó hacia atrás para ver que efectivamente lo estaban viendo.
Barley se volteó muy sigilosamente de nuevo a ver a sus compañeros, que lo unieran a esos grupos era justo lo que quería evitar, tenía muchos motivos para no querer unirse.
-rayos ahora qué hago-
-simple úneteles, a sí estarías protegido-
-no comparto sus ideas, esos tatuajes que dicen revolución yo no tengo nada contra ningún partido político, solo era parte de un grupo activista que defendía ruinas, no estoy aquí por asesinato, estoy aquí por posesión de fuegos artificiales-
-por favor, el líder de su grupo, el líder, líder de su grupo en el penal es o era activista también, por los derechos de discapacitados-
-y está en prisión por...
-posesión de armas, y drogas-
-si tú tienes un tatuaje, en el brazo hombre ya úneteles-
-si pero es un aro céltico, no un símbolo de ningún grupo u organización criminal, además no quiero unirme, me dieron tres años y quiero que sean tres no más, y no pienso cometer más crímenes y...-Barley estaba a punto de decir que era gay, pero incluso sin estar cerca de ese grupo podría ser peligroso revelar eso en prisión.
-tendrás que idear una forma se decírselos sin que se ofendan, por qué no creo que acepten de buenas a primeras una negativa.
-¡tiempo a trabajar cabrones!- les grito el guardia ya que se había acabado el tiempo de desayuno.
Durante el resto del día Barley pasó intentando alejarse de los elfos de REVERA, no quería ni acercarse por accidente a ellos, aunque termino acercándose a un Cíclope miembro de la GUECIU que le grito.
-¡apártate orejas alargadas!-
Barley retrocedió unos pasos antes de continuar trabajando, pero ese no fue el único encuentro, hubo otro, también por error, ese fue con un ogro para desgracia Barley ya lo había visto se trataba del mismo ogro que había entrado junto con él y aunque Barley no lo había visto desde entonces el mismo podía reconocerlo.
-¡aléjate mariquita!-le respondió a Barley.
Mientras que Barley retrocedía vio que aquel tipo tenía un tatuaje en su hombro en señal de que ya estaba dentro de una pandilla, aunque en esa ocasión no solo eran letras era un código de barras con letras y números debajo, por lo que había escuchado Barley era una banda llamada Frente de Ogros Batalladores, seguramente la pandilla más agresiva de la prisión y la segunda más grande, la más grande era una llamada Triple amenaza Elfica, estaba claro que era una bando formada por elfos, tanto altos elfos, oscuros, de hongo, bosque, de nieve o algo así, ya que sus siglas estaban escritas en el idioma antiguo, casi igualada en número por una banda de Orcos llamada Clan Garra Negra*.
Barley tuvo que esperar casi al final, esperando a que todos salieran, así aunque se bañara con agua fría estaría mejor que acercarse a esa banda o a cualquier otra, cuando entro Barley, estaban otros tres prisioneros ya estaban en la regadera, cuando Barley abrió la suya, salió el agua fría, que los puso a temblar en seguida.
-¡puta madre!-gritó el sátiro
-eso tienes por ser tan lento, bañarte después que los demás-le dijo el otro prisionero, un sátiro que tuvo que estirarse para abrir la regadera.
-disculpa mis manos no son tan ágiles como las tuyas
Barley cerró las regaderas comenzó a enjabonarse lo más rápido que pudo, luego volvió a abrirla para quitarse el jabón, sintió el agua fría de nuevo, lo que Barley no se dio cuenta era que entró otro elfo azul, en completo silenció les hizo señas a los otros tres prisioneros para que se salieran, como ya sabían lo que pasaría así que no dijeron nada.
Por la puerta entraron los elfos de la REVERA, de forma sigilosa, Barley ya estando por acabar de bañarse cerro la llave de las regaderas cuando entre dos los agarraron de las axilas y los llevaron del otro lado del baño.
-vigila-dijo uno que usaba lentes
-ya soborne al guardia-respondió el más bajito del grupo.
Colocaron a Barley contra la pared levantándolo ligeramente del suelo, después apretaron sus manos contra la pared con fuerza, y al ser más que él le imposibilitaba usar su magia, aunque dudaba que algún hechizo fuera servirle.
-bien, bien, bien aquí tenemos al valiente, salvaste a ese idiota pero lo condenaste a otra cosa, podría estar muerto ahora-
Uno de los elfos comenzó a reírse de forma desquiciada
Barley no dijo nada, no quería decir nada que los terminara provocando y era justo lo que quería evitar, era evidente que no le sirvió de nada o quizás lo adelantó.
-bien tomémosle medidas para ver que tan bien le queda el logo en la espalda-
Barley intentó zafarse pero más manos de apoyaron en la parte inferior de su espalda y en su nica pegando su rostro contra pared mientras que sentía como la punta de un bolígrafo pasaba de izquierda a derecha de su espalda escribiendo unas letras, aunque Barley no podía ver esas letras si se imaginaba que letras eran.
-nada que no haya tatuado antes- dijo el que usaba lentes
-¿la pregunta es se va a comprometer?-preguntó el más grandote
-no...no me uno a ustedes-les dijo Barley que aún tenía su cara estrellada en la pared mientras que intentaba poner más resistencia
-lo vez se los dije, si estuviera interesado ya hubiera ido a buscarnos-
-cierra el puto hocico-le ordenó el de lentes- si alguien tiene las agallas para actuar de esa forma como lo hizo amerita ser miembro nuestro-
-háganme caso no me interesa-
-¿Qué dijo?, ¿que no quiere ser de los nuestros?, ¿pueden créelo?-
-no-recitaron todos al unísono
-bien no vamos a obligar a nadie a unírsenos, pero creo que ya sabes lo que te pasará si no te unes a un bando, pero para asegurarnos, te trajimos un pequeño incentivo para que lo consideres-
-déjame hacerlo a mí-
-no trajiste tu pastilla y sin ella no te servirá-
-déjame a mí como estaba previsto, ya me hizo efecto la pastilla y soy el que tiene el pito más grande-
-te gusta no es verdad-
-no te confundas no soy gay, solo lo hago por sentir el poder sobre otros-
Barley cerró los ojos sabía lo que vendría, y pese a que ya sabía lo que se sentía, no pudo prepararse para eso, unas manos le separaron los glúteos para ayudar a que el pene de aquel hombre entrara por la fuerza en Barley.
El elfo hubiera preferido no gritar para darle satisfacción a esos tipos de que tenían control o domino sobre él, pero el dolor fue tanto que no pudo evitar dar un ligero gemido.
-¿escucharon?-
-está intentando resistirse-
-y apenas comienza-le dijo
El grandote siguió sacando y metiendo su miembro dentro de Barley, el elfo no podía moverse, lo tenían bien asegurado contra la pared, parecía que el meter magia no le servía de mucho en esas circunstancias.
-aaagh-gimió de nuevo pero sin querer puso más sentimiento.
-¿escucharon?-
-creo le está gustando-
-es homosexual, tiene calor de mujer- dijo el que estaba violando a Barley.
-¿sabes mucho al respecto?-
-he violado a muchos, tanto dentro como fuera de este lugar, sé cuándo son gays y cuando no, incluso una vez viole a una lesbiana-
En eso se abrieron ligeramente la puerta del otro lado del cuarto de las regaderas claro que no lograron escuchar ya que estaban distraídos, ahí otro prisionero, estaba por entrar pero ahí se dio cuenta de lo que estaba pasando y decidió retroceder cerrando la puerta provocando un ligero rechineo, que algunos escucharon.
-escucharon-
-por aquí no ha entrado nadie-dijo el más bajito
-se nos olvidó la otra puta puerta-
Uno de ellos fue a la otra puerta para asomarse, volteó de un lado a otro pero no pudo ver a nadie, estaba seguro de que alguien había visto, después de asegurarse volvió a meterse.
-no vi a nadie-
-un minuto más ya casi termino- siguió apretando más rápido- ya casi, ya-
Barley sentía como el pene de ese hombre expulsaba su semen dentro de él y como lo retiro de golpe, lo que le provocó un gran alivio.
-este imbécil es marica, solo nos servirá para ser nuestro esclavo sexual-
-bien vámonos, tienes veinticuatro horas para considerarlo, aunque puede que solo seas nuestro juguete, si no bueno te unes solo no te pongas en nuestro camino bien, o podríamos hacerte otra visita, todos vámonos- ordenó y un segundo después dejaron de presionar a Barley contra la pared sin dejarlo caer al piso, pero no lo dejaron levantarse.
*Referencia a los clanes Roca Negra y Garra Blanca de Warcraft
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