14.-Koi no Yokan
Advertencias:
•Mención de SeroTodo
•Universo sin quirks
Título:
•》Primer amor
Si le hubieran dicho a Hanta que tendría que ver a su amigo malhumorado enamorado inmediatamente se habría burlado y dicho que primero los cerdos volarían o habría un cataclismo.
No es que no creyera que Bakugou Katsuki no fuera capaz de sentir atracción hacia alguien más, eso no era.
¿Tenía un carácter de mierda? Podría decirse; ¿Él era más gritos e insultos que otra cosa? Sí; ¿Su forma de afecto se trataba más de golpes o regaños? Afirmativo, o eso pensaba; y Hanta podría seguir y seguir poniendo en mesa todos las características que le venían a la mente de Katsuki. Pero eso no quitaría el hecho de que era un ser humano y que en algún momento le llegaría el dichoso flechazo de Cupido, aunque sea momentáneamente.
El detalle entraba en el momento en que pasara y con quién. Por eso jamás pasó por su cabeza que él fuera el desencadenante.
No pensó que al estar vagando entre las fotos de la galería de su celular se topara con una foto donde estaba su novio y su mejor amigo, que si ni mal recuerda se llamaba Midoriya algo, él lo viera.
La mirada poco discreta de Katsuki que en ese momento se encontraba a su lado, que antes era aburrida y tal vez fastidiada ahora se iluminaba solo por ver a ese chico de rizos verdes y sonrisa de ángel. Parecía como si todos los problemas o molestias por las que estaba pasando desaparecieran solo con esa mirada esmeralda.
Pero tampoco fue como si esperara otra reacción distinta de él. No era la primera vez que sucedía.
Sero puede clasificarse como el tipo de persona que olvidarías que está presente si no hablara, de esos que podrías poner en una multitud y nos buscaria llamar la atención; él no resalta, es más simple y por eso mismo es un gran observador con las cosas y personas que lo rodean. Un dote del que puede decir que está orgulloso.
Y es entonces, mirando ese brillo, cuando está seguro que lo que siente Katsuki no es ni nada menos que amor. Aunque quizás exagere y no sea eso y solo esté imaginando cosas después de ver tantos doramas con Mina.
Pero sea lo que sea, Hanta está más que dispuesto a ayudar a Katsuki, darle ese pequeño empujoncito que necesita. Aunque sea con alguien con quien nunca haya hablado antes.
Solo cuando Bakugou se marcha para regresar a su casa y todos los demás se quedan, es que realmente inicia la razón por la que se reunieron ese día.
Mina enseguida toma el lugar ahora vacio en el sillón.
—¿Y entonces? —pregunta con una sonrisa en su rostro, de esas que al mirarlas solo sabes que nada bueno puede salir de ellas—. ¿Cuál es el plan?
—Ni idea pero nuestro Katsu parece andar en las nubes solo con fotos —responde Denki distraidamente, con su atención puesta en la bolsa de papas que estaba comiendo mientras buscaba las sobras que quedaban—. Así que, ¿cómo será cuando se vean?
—Lo mejor sería dejar que las cosas se den solas —comenta Jirou regresando de la cocina con algunos bocadillos y Momo acompañandola tararea en acuerdo—. Si nos metemos puede que provoquemos algo que no termine bien para ellos.
—También puede ser —dice Kirishima frunciendo el ceño, luciendo pensativo—, debemos recordar que tampoco lo conocemos, así que no tenemos idea de cómo es él.
Nadie lo contradijo, era cierto, era un desconocido para ellos. Ni siquiera Hanta lo conocía pero no parecía un mal chico, no por el montón de cosas que Shouto le hablaba de él más que de sus otros amigos.
—Que se vean y que pase lo que tenga que pasar —comentó a la ligera y escuchó los reclamos de Mina sobre que eso era muy simple mientras entraba en el chat de su novio para decirle si presentaban a Izuku y Katsuki.
Sonrió al ver la respuesta inmediata.
"Estoy dentro"
___________
—Ahora sí, creo que lo he visto todo.
Denki se sienta en la mesa con ellos, con su mirada puesta en una mesa alejada donde se encuentran Katsuki e Izuku enfrascados en una conversación absortos del mundo exterior. Eso los incluye a ellos, el Bakusquad y el Dekusquad.
—"Ire con Kacchan al parque", "Hoy no puedo le prometí a Kacchan que estudiariamos juntos", Kacchan esto, Kacchan lo otro —farfulla con fastidio Shouto y Sero no sabe si reir o estar más sorprendido por las expresiones que se reflejaban en el rostro del bicolor. Luego puede ver cómo la caja de jugo que sostiene en una de sus manos es presionada y solo puede sentir pena por la cajita—. ¿Y yo qué? Soy su mejor amigo y llegué antes que él, ¡tengo mis derechos por haber estado más tiempo!
Realmente es divertido y a la vez tan sorprendente ver a Todoroki demostrando otras emociones que no fueran la cara de poker que solía mostrar ante todos.
—Si hubiera sabido que me dejaría de lado por un idiota, mejor ni novio le consigo —esta vez no retiene la carcajada. Dios, Hanta podría decir que siente envidia de Izuku porque Shouto estaba celoso de que ahora tanto él como Katsuki estuvieran juntos todo el tiempo.
—¡Eso! —exclama Uraraka cruzándose de brazos e inflando sus mejillas en un puchero—. No, no, ni yo soy así.
Shouto ladea su cabeza confundido.
—Pero si tú también nos ignoras —dijo y ella lo miró indignada, diciendole que lo que hacía era totalmente distinto.
Iida comienza a hablar sobre las relaciones y el cuidado que deben tener estas, así como también da algunas recomendaciones que parecen más reglas que otra cosa. Ninguno se sintió mal por ignorarlo.
—Yo seré el padrino de sus gatos —dice Hitoshi, cambiando de tema—. Pido título con antelación.
—¿Y por qué crees que tendrían gatos? Los perros son mejores —se dispone a responder Denki.
—Un conejo y un perro —interrumpe Shouto antes de beber de su jugo, ahora con su cara de siempre—. A Midoriya le encantan y no se decidiría por cuál. Le gustan los gatos, pero no tanto; una vez tuvo uno pero el gato se escapaba a cada rato y él terminaba yendo a buscarlo siempre y cuando regresaba venía todo rasguñado porque parece que el Señor Garras lo odiaba.
—Uh, sí que le duele el abandono —escucha susurrar a Mina hacia Ochako, quien se limita a asentir con pesar.
—¿Y qué pasó con Señor Garras?
Shouto se encogió de hombros por la pregunta de Kirishima.
—Ni idea.
Hanta se promete que cuando tenga la oportunidad le agradecerá a Bakugou y a Izuku. Ver a su novio siendo más expresivo y hablando más que pocas frases le alegra, más cuando lo ve rodeado de personas agradables y todo esto porque a ambos grupos les pareció una buena idea presentar a sus idiotas amigos.
Valió la pena, puede decirlo. Katsuki ha estado feliz, demasiado, y él lo sabe. Todos sus amigos lo saben y les alegra eso. Lo notan en su mirada, en sus gestos, en su boca que se curva hacia arriba disimuladamente cada que ve a Izuku llegar o cada que sin querer lo meten en la conversación.
Y Hanta, Hanta solo pide que estos momentos no terminen. Porque aquí, gracias a ellos, a Katsuki, Denki, Kirishima, Mina, Jirou, Momo y claro está, Todoroki Shouto; él ha tenido los mejores momentos por ellos y no dudaría en ayudar y apoyarlos en sus propios momentos.
_________
Katsuki sonríe al escuchar a Izuku reír por algo mientras su mano sostiene un lápiz que se mueve con suavidad por la hoja de su cuaderno de dibujo.
—Oh, ¿ahora qué dibujas? —le pregunta Izuku después de sorber un poco de su licuado—. ¿Puedo ver?
—Todavía no está terminado, le falta algunos detalles.
Izuku ladea su cabeza, de tal manera que lo hace ver tierno. Bueno, más de lo que ya es por cuenta propia.
—¿Y luego lo podré ver?
—Sí, justo después.
Katsuki le da una última mirada a Izuku antes de volver a su dibujo donde se pueden ver los trazos de un personaje que solo él conoce: Deku.
Deku está sonriendo, como en la mayoría de sus dibujos pero esta vez sostiene a una niña de cabello largo. Deja el cabello de ella sin colorear con su lápiz para que se vea blanco mientras sombrea el cabello de Deku y su ropa.
No recuerda bien cuándo comenzó a dibujarlo, hace años quizá. De lo que sí está seguro es que comenzó a hacerlo más a menudo luego de conocer a Izuku.
En ese momento para Katsuki el mundo dejó de girar, el tiempo se detuvo y se callaron las voces de las personas como si hubieran desaparecido por completo. Entre la multitud de personas que había en ese lugar, a él solo le interesó una. Sus piernas se movieron incluso antes de ordenarle y sus pasos lo llevaron directo a un chico peliverde que parecía no querer estar ahí.
En el instante en que estuvieron de frente y comenzaron a hablar sus gestos se sintieron familiares, no parecía para nada alguien desconocido.
Katsuki lo conoció en una fiesta por casualidad y por idiota no le pidió su número pero fue incapaz de olvidar esa mirada que lo hacía agradecer por haber estado en ese lugar el momento y día exacto para conocerlo.
Para su buena suerte, resultó ser amigo del novio de Hanta.
Y él sonríe al terminar, porque sus dibujos no son solo producto de su imaginación, son fragmentos de los sueños que a veces tiene.
Donde siempre hay unos ojos verdes mirándolo tal y como los de Midoriya Izuku. Vibrantes, curiosos y expresivos; unas joyas hermosas que hacen resonar su pecho cuando las ve.
Nota:
Quería escribir un poco más variado y meter a más personajes, no es lo que esperaba al inicio pero me gusta ^^
Aunque no creo que esté de acuerdo al tema de este día ‐llora en no saber qué hacer‐
Dejo estos temas por aquí y comenzaré con los demás. No puedo decir con exactitud que estarán pronto porque los que vienen son del mismo universo y van seguidos, por lo que creo que sería mejor que se leyeran de corrido y sin tener que esperar tanto.
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro