Todos sus conocidos se encontraban ahí, los padres de Jaemin devastados, Donghyuck consolaba a Jaehyun, estaban totalmente destrozados sin creerse aún la situación.

Jeno llegaba con un ramo de las flores favoritas de Jaemin, lirios blancos. Jaehyun apenas al verlo intentó abalanzarse sobre él, pero los demás lo detuvieron.

"¡Cómo te atreves a venir aquí! ¡Todo esto es tú culpa!"

Jaehyun estaba furioso, realmente lo estaba, le dolía demasiado la pérdida de su pequeño hermano y estaba arrepentido, muy arrepentido de haber presentado a Jeno a su hermanito, tal vez si eso no hubiera pasado el estaría aquí.

Quería regresar el tiempo, quería evitar aquel día.

"Mira Jeno, el es mi hermano, Jaemin, Jaemin él es mi mejor amigo Jeno"

Desde el primer instante que se vieron sintieron una conexión inexplicable, llamaron la atención del uno al otro, se dedicaron una ligera sonrisa y estrecharon su mano, ignorando por un instante que Jaehyun se encontraba ahí.

"Es todo un gusto"

"El gusto es mío, Jaemin"

Ahí empezó todo.

"¡Por tu culpa esta muerto!"

Cada palabra que soltaba el que en un momento fue su amigo dolía, dolía demasiado, porqué tal vez tenía razón, por su culpa Jaemin ya no esta, ya no iba a ver su encantadora sonrisa, esa que amaba con todo su alma, no iba escuchar más sus risas ni las tonterías que solía decir.

"Jaehyun..."

"¡Largate! ¡No tienes derecho de estar aquí!"

Donghyuck se acercó a Jeno dedicandole una mirada de lástima.

"Es mejor que te vayas Jeno"

"Esta bien"

No quería alterar más a Jaehyun, así que se acercó hasta dónde se encontraba ahora enterrado Na Jaemin y dejó las flores para luego retirarse con un peso enorme de culpa.