Al inicio de la película estábamos súper emocionados tratando de no separar la mirada de la enorme pantalla.

—Te dije que sería una buena película, y no querías hacerme caso —Dijo Nayeon sin apartar la vista de la pantalla.

—Está vez tuviste razón —Exclamé viéndola por un segundo.

—Siempre tengo la razón —Respondió con una sonrisa de oreja a oreja.

—Puede que sea cierto, aunque lo dudo —Comenté mirándola detenidamente.

En ese momento ella volteó a verme con aquella sonrisa de conejo tan característica. Ambos conectamos miradas por un buen tiempo, uno bastante largo. Ella no podía dejar de mirarme, ni yo a ella...

En lo que nosotros conectamos miradas, una escena amorosa se vio en la pantalla.

Nayeon comenzó a acercarse...

Yo solo quedé estático por el sentimiento de culpa que tenía.

—"Solo espero que no me vaya a besar, creo que está jugando conmigo" —Pensé algo relajado.

—"Cálmate ____, no creo que la hayas enamorado en menos de dos días" —Exclamé siendo coherente.

Creí estar seguro de mis palabras, creí que me estaba haciendo una broma.

Pero no fue así...

Ella unió sus labios con los míos en un tierno beso...

No me lo podía creer, estaba besando a mi archienemiga...

Estaba besando a la persona que me molestaba diariamente en la escuela, la que decía que era un "Cuatro ojos", un "Nerd", la que rompió la mayoría de mis lentes, y la que me insultó tantas veces...

A esa chica estaba besando...

La música de la película hacía ese momento muy tierno a la vez que especial.

—"¿Qué estoy haciendo?" —Dije nuevamente en mis pensamientos.

Nayeon no parecía querer terminar el beso, hasta que me separé por falta de aire...

Estábamos sumamente sonrojados...

—____... —Dijo Nayeon cabizbaja.

—¿Qué pasa? —Dije en un murmullo.

—Creo que... —Exclamó ella con una sonrisa.

—¿Tu... qué? —Tartamudeé con nerviosismo.

—Creo que he cometido un grave error —Comentó volviendo a acercarse.

—¿Qué error? —Cuestioné seriamente.

—Cometí el error de hacerte tanto daño todo este tiempo, y nunca vi lo lindo que eres —Expresó—. Me... me gustaría ser parte de tu vida —Exclamó tapándose la cara, aquella acción la caracterizaba demasiado por si no se han dado cuenta.

—Pero, no creo que sea posible —Exclamé pensando en Dahyun.

—Losé, tienes a Dahyun ahora —Dijo apunto de sollozar.

—¿Cómo lo sabes? —Quedé sorprendido.

—Aquel día que entraste al salón con ella supe que eran pareja —Dijo cortante.

—Pues... Ella estuvo conmigo todos los días en los que me insultabas o molestabas —Exclamé con lágrimas en mis ojos—. Tú me gustabas mucho —Exclamé dejándola estupefacta.

—¿Enserio te gusté? —Exclamó con lágrimas bastante notorias.

—Sí, me gustaste mucho, Im Nayeon —Dije rompiendo en un callado llanto.

—Perdóname ____, de verdad lo siento tanto, perdóname —Exclamó arrodillándose enfrente de mí.

—C... Cada regalo que te daba, cada carta que te entregaba, los lindos poemas que te dediqué, jamás lo supiste valorar —Reclamé tras haber retomado un poco la compostura.

—Lo lamento, ____ —Me abrazó—. Perdóname de verdad, te lo suplico —Dijo tiernamente.

—Yo... te perdono —Exclamé.

Al terminar la película, salimos de la sala llorando, como siempre...

—¿Por qué lo abandonó? —Dije sollozando a mares.

—Ella tenía que irse de París, ¿Por qué no se fueron juntos? —Exclamó Nayeon aun tomándome de la mano.

—¿Por qué estás películas son tan tristes? —Exclamé limpiando las lágrimas que salían de sus ojos.

Al salir del cinema, el Señor Im nos estaba esperando cómodamente en el enorme estacionamiento del lugar.

—¿Cómo les fue? —Exclamó su padre al vernos.

—Pues, solo diré que lloramos como nunca antes —Dijo Nayeon siendo honesta.

—Eso es verdad —Dije sin más.

—Pues bueno... vamos a casa —Dijo el señor Im abriendo la puerta trasera.

—Sí, estoy cansada —Exclamó Nayeon subiendo al auto.

—Todos necesitamos descansar —Recalqué subiendo de igual manera.

El señor Im se ofreció a llevarme a mi casa, por lo que sin dudarlo le di mi dirección.

Llegamos en cuestión de minutos, el señor Im manejaba súper bien, empiezo a creer que el señor Im fue un corredor de carreras callejero en su adolescencia.

—Bueno, aquí es donde nos separamos —Exclamé abriendo la puerta del auto.

—Mi casa es tu casa, ve a visitarnos cuando quieras —Exclamó el señor Im.

—Nos vemos luego, ____ —Nayeon se despidió de mi con un beso en la mejilla.

—Nos vemos luego, cuídense —Exclamé saliendo del auto para entrar en mi casa.