Daba vueltas por el patio de su casa, ¿Qué iba a hacer? Aún estaba muy confundido, luego de pensarlo un momento, decidió arriesgarse y contarle todo a su madre, pero cambio de parecer al encontrarla sentada llorando en la cocina, Taehyung se acercó a ella preocupado.

—Mamá, ¿Qué pasa? ¿estas bien?— preguntó acuclillandose a su lado, la mujer al oírlo trato de secar sus lágrimas.

—Oh, cariño, no te preocupes no es nada — respondió la mujer para no preocupar a su hijo, Tae frunció el ceño pues no parecía como si no le ocurriera nada.

—Mamá — dijo el pelinegro con voz seria, la mujer suspiró rendida, pues sabía que su hijo insistiría hasta que le dijera la verdad.

—Es tu abuelo — Tae la miró aún más preocupado al escuchar aquellas palabras.

—¿Le paso algo? ¿esta bien?— se apresuro a preguntar.

—Esta en el hospital, ha estado muy enfermo y mi madre me llamo hoy diciendo que cayo al hospital — el corazón de Tae dio un pequeño vuelco, el amaba a sus abuelos y no quería que nada malo les pasara, sintió unas enormes ganas de llorar pero se las aguanto, porque si rompía en llanto no seria de ayuda para su madre.

—¿Y que harás? — quiso saber.

—Estuve hablando con tu padre, mañana iremos a Daegu a verlo — Tae asintió — Dejaremos a tus hermanos con So Yeon, quiero que te quedes con Jimin — Tae fruncio ligeramente el ceño— Jimin sabe cocinar cariño, tú no, les dejare un poco de dinero. Tae, no quiero que estés solo.

—Bien, mañana se lo diré a Jimin — murmuró resignado el pelinegro, pues su madre tenía razón.

—Preparare la cena — dijo la mujer levantándose, Tae repitió la acción de su madre.

—¿Q-quieres que te ayude?— se ofreció, su madre lo miró por uno segundos antes de negar con la cabeza.

—No hace falta cariño, por ahora ve a hacer los deberes— le dijo la mujer acariciando la mejilla de menor.

Con un leve asentimiento y luego de besar la palma de la mano de su madre, se dirigió a su habitación. Al llegar a ésta se dejo caer en la cama, estaba muy preocupado por su abuelo y cualquier preocupación sobre lo de Jungkook se desvaneció de su mente, por lo menos por el resto de ese día.

[...]

Luego de despedirse de sus padres y de sus hermanos que eran llevados por su tía So Yeon, tomó el autobús a la escuela, en todo el trayecto se fue sentado con la frente pegada al frío vidrio. Había dejado su maleta lista para que cuando volviera a casa, tomarla he irse a la de Jimin, él prefería quedarse en el apartamento de Jimin que en la enorme casa Kim solos. Al llegar a la escuela, bajó del autobús y caminó cabizbajo, sintió un suave toque en su hombro derecho por lo que se volteo a ver de quien se trataba, Jimin lo miró preocupado al verlo comportarse tan extraño.

—Tae, ¿esta todo bien? — preguntó el pelinaranjo, Taehyung negó con la cabeza — ¿Qué ha pasado?

—Mi abuelo esta enfermo, lo llevaron al hospital, creo que es grave porque papá y mamá fueron a Daegu— soltó rápidamente, sus ojos picaban. Jimin lo quedo mirando por unos segundos, no dijo nada ya que al ver a Tae a punto de romper en llanto, lo hizo querer consolarlo, hizo que Tae se detuviera y lo abrazo.

Los chicos que pasaban por su lado los miraban extraño, pero eso no les importaba a ninguno de los dos. Tae se abrazo a Jimin y comenzó a llorar, escondió su rostro en el hueco entre su cuello y su hombro, Jimin acariciaba tanto su espalda como su cabello, podía escuchar el silencioso llanto de su amigo y eso le dolía, pues a él tampoco le gustaba ver a Tae llorar. Pasaron un rato en esa posición, hasta que el llanto de Taehyung ceso, se separo de Jimin mientras secaba sus mejillas con la manga de su blazer, al ver a Jimin a los ojos recordó que aún debía disculparse con él por su comportamiento, porque aunque le enojara el asunto, no podía culpar a Jimin por no querer decirle quienes lo estaban molestando, ¿verdad?

—Perdón — murmuró secando ahora sus ojos, Jimin negó con la cabeza.

—No te preocupes — dijo al creer que su amigo se refería a haber mojado su blazer con sus lagrimas.

—Perdón por haberme enojado contigo, soy un idiota a veces — Jimin sonrió, tomó a Tae por la nuca y lo acercó más a él haciendo que sus frentes quedaran juntas.

—No hay nada que perdonar, TaeTae, eres mi mejor amigo y te quiero tal y como eres— dijo el pelinaranjo con cariño, Tae sonrió levemente.

—Yo también te quiero ChimChim — ambos sonrieron, algunos de los que pasaban por el lugar los miraron con asco. Uno de ellos había estado mirando la escena desde el principio sin saber si acercarse o no, no se había dado cuenta que estaba con los puños cerrados hasta que les dolieron las manos por la fuerza que empleaba, al final decidió alejarse de ambos amigos.

Cuando ambos se separaron Jimin vio por el rabillo del ojo como una silueta bastante conocida caminaba de prisa por entremedio de algunos chicos, rió despacito pues sabía que era imposible que no los hubiese visto, tomó la mano de Tae y corrió arrastrando a su amigo, para así poder alcanzar al otro. Cuando por fin lo alcanzo cerca de los casilleros le hablo.

—Kookie, buenos dias — dijo con una sonrisa, el menor al escuchar su nombre se volteo, vio a sus amigos y sonrió de forma forzada.

—Buenos días Jimin Hyung — saludo el menor, luego miró al pelinegro que aún era sostenido por el más bajo — Buenos días Hyung.

Tae lo miró unos segundos sintiéndose extraño, de cierto modo había olvidado lo vivido la tarde anterior con el menor, ahora al recordarlo se sentía estúpido por haberlo olvidado y se dio un golpe mental, pues él le había prometido algo a Jungkook. Se sintió culpable por aún no poder cumplir su promesa, pero aún tenía muchas cosas en que pensar y otras cuantas que aclarar.

—Buenos días Jungkookie— murmuró el pelinegro. Jungkook por primera vez en su vida había experimentado el sentir celos, por lo menos esa era la primera vez que los celos eran tan fuertes como para que él mismo se diera cuenta de eso. Pero luego de sentirlos, se regaño así mismo, ya que sabía desde hace mucho como era la amistad entre Tae y Jimin, y cuanto se querían ambos amigos — Kookie, sobre lo de ayer...

Taehyung quería decirle que por favor lo esperara un poco más, pero no alcanzó a terminar la frase pues la campana sonó y Jungkook aprovecho para salir corriendo. Por un momento el menor temió que Tae le dijera que todo había sido un error y que no podían estar juntos, tal fue el miedo que recorrió su cuerpo que no dudo en salir corriendo cuando tuvo la oportunidad. El mayor miró confundido como Jungkook se perdía en los pasillos, frunció el ceño por un segundo y al escuchar la risa de Jimin se volteo a verlo.

—Salió corriendo — decía Jimin entre carcajadas, cuando por fin su risa se modero, pudo volver a hablar con normalidad — De seguro lo avergonzaste.

—¿Por que? yo solo quería decirle que... — Jimin puso una mano en alto haciéndolo callar.

—No, por favor no, no quiero saber como besa Jungkook— dijo el más bajo con una sonrisita, Tae al escucharlo se sonrojo.

—Eso no es lo que iba a decir — dijo nervioso el pelinegro, ambos amigos se fueron al salón tras ser regañados por uno de los maestros.

Tae paso algo distraído por lo que duró la primera clase, cuando salieron a receso, Jimin y Taehyung fueron hasta la cafetería. Jungkook ya estaba sentado en una de las mesas, miraba algo distraído por la ventana que estaba cerca, mientras bebía del vaso que tenía en las mano. Jimin fue hasta el menor y se sentó a su lado, mientras que Taehyung fue a pedir su chocolate caliente y un latte para Jimin. Cuando su orden estuvo lista, fue con ambos vasos hasta donde estaban sus amigos y se sentó en frente de Jungkook.

—Aqui tienes — le dijo entregándole el vaso de latte a Jimin, el pelinaranjo sonrió y le agradeció por la bebida — Ah, por cierto Jimin, ¿Te importa si me quedo contigo estos días? Mamá no quiere que me quede sólo, teme que muera de inanición — comentó razcando su cabeza.

—Claro, no hay problema — dijo Jimin, vio de reojo a Jungkook y sonrió al ver que el menor desviaba la mirada mientras tomaba de su vaso — Pero recuerda que solo tengo una cama, así que dormiremos juntos.

Jungkook al escucharlo se atraganto con el liquido y comenzó a toser. Jimin se hecho a reír por la reacción del menor, mientras Tae le daba una servilleta para que se limpiara. 

—Pero tu cama es muy dura — dijo Tae con un puchero en sus labios, no había captado el porque su amigo le había dicho eso, por lo que Jimin no dejo de reír por la inocencia del pelinegro.

—Eso da igual, pero recuerda que me gusta dormir desnudo — siguió bromeando, Jungkook lo miraba muy sorprendido, no podía creer todo lo que estaba escuchando.

—¿Dormirás sin ropa? pero si las noches ya están muy frías — respondió Taehyung y Jungkook se giro a verlo, ¿acaso antes habían dormido desnudos en la misma cama? sacudió su cabeza para alejar aquellos pensamientos —Parece que va a llover.

Murmuró el pelinegro mirando hacía afuera, sus dos amigos hicieron lo mismo que él, el cielo estaba algo gris, las nubes cubrían el sol y había mucho viento, el invierno dándoles la bienvenida. Al final de haber bromeado un buen rato, Jimin le termino diciendo a Jungkook que todo había sido una broma, pues no quería que el menor estuviese pensando cosas extrañas.

Al pasar las horas, el día iba pareciendo más noche que día, las nubes grises surcaban el cielo, el viento era sumamente frío. Taehyung iba caminando por los pasillos desiertos, todos estaban en clases menos él ya que había pedido permiso para ir al baño, veía por las ventanas que pequeñas gotas comenzaban a caer, hoy habría una gran tormenta, sólo esperaba poder llegar a casa antes de que esta se desatara. Se puso los audífonos que tenía puesto en el cuello, estos eran de color verde, eran de esos que cubrían toda la oreja, tomó su iPod y le dio play a la música. El baño quedaba bastante lejos de su salón, camino rápido a la ida y cuando salió del baño, aminoro el paso, no quería regresar tan luego al salón de clases.

Iba mirando distraídamente por el ventanal del pasillo, su vista se detuvo al frente del ventanal donde había otro ventanal gigante y otro pasillo. Se le hizo inevitable detenerse y seguir con la mirada al chico del otro lado, sonrió por un segundo, una maravillosa coincidencia. El fuerte sonido de un trueno se escucho, Tae pudo oírlo ya que no tenía la música tan alta, luego del trueno vino el relámpago, el pelinegro miró el cielo al ser brevemente iluminado por tal fenómeno, escucho otro trueno y fijo su vista en el chico que estaba del otro lado. El castaño al oír tan estruendoso sonido se tapo los oídos, el relámpago lo hizo cerrar los ojos con fuerza, cuando el segundo trueno se hizo escuchar, el chico se acuclillo en el suelo.

Taehyung al verlo, no dudo en ir corriendo por el pasillo hasta llegar al lugar donde conectaban ambos pasillos, se acerco al castaño y le hablo, pero el pareció no escucharlo.

—Jungkookie — le volvió a hablar, pero nada.

Lo vio temblar, se veía bastante asustado, Tae se acuclillo a su lado, le subió al máximo el volumen a la música, se saco los audífonos y luego de darle un ligero toque en la cabeza al menor, y que éste sacara sus manos de sus oídos, Tae le coloco los audífonos. Jungkook lo miró asombrado, pues nunca imagino encontrarse justamente con Taehyung. El pelinegro le sonrió y le entrego el iPod, luego ayudo a Jungkook a levantarse, bajo sus manos podía sentir como el menor temblaba, su rostro estaba bastante pálido también, él no sabía a que le temía ni porque, pero sentía la necesidad de protegerlo.

Acarició el cabello del menor sin dejar de sonreír, los temblores aún recorrían el cuerpo del menor, por lo que Tae lo abrazo. Jungkook se sentía más seguro en los brazos del mayor, sentir su cuerpo apegado al de él, sentir el aroma del mayor, su respiración, los latidos algo acelerados de su corazón, su calidez, todo eso lo reconfortaba.

Pasaron un buen rato abrazados, hasta que Tae ya no sentía el cuerpo del menor temblar, se separo de Jungkook lentamente y luego acuno su rostro entre sus grandes manos. El menor lo miraba atentamente ya que lo único que podía oír era la música que tenía en los oídos. Tae movió sus labios preguntando si estaba bien, al menor no le costo entender por lo que asintió con la cabeza. Taehyung sonrió y antes de soltarlo para volver a clases, beso la punta de la nariz del menor, Jungkook sintió mariposas en el estomago y sus mejillas arder, Tae lo soltó y se separo de él por completo, movió su mano despidiéndose y se volteo, comenzó a correr para volver a clases, solo esperaba que el maestro no lo regañara.

Al llegar a casa, saludó a Yoongi, cuando apenas entro en su habitación, se desató la tormenta, la lluvia sonaba tan fuerte, Jungkook decidió hacer los deberes mientras esperaba la cena. Pasó un rato concentrado haciendo todos los deberes que le habían mandado, cuando terminó se dejó caer sobre la cama.

Sonrió al recordar a Tae, pensaba que el mayor era tan lindo, giró la vista a la mesita de noche, ahí reposaba el iPod y los audífonos de Taehyung. A la salida de la escuela, el pelinegro le había dicho que se los llevara a casa.

—Kook— llamo Min, el castaño se levanto y fue al comedor.

Comieron en silencio, Min pensaba cosas sobre el trabajo y Jungkook, pues él seguía embelesado pensando en Taehyung. Al terminar de cenar, ambos recogieron los platos y lavaron los mismos, guardaron todo y cada quien se fue a su habitación.

Ya acostado, Jungkook se giro dándole la espalda a la pared, cerro los ojos y espero a que el sueño lo venciera, no costo mucho para que el sueño llegara. Jungkook dormía tan plácidamente, mientras que afuera la tormenta era cada vez peor, de nuevo se comenzaron a oír los truenos, uno tras otro, los relámpagos hacían que la habitación se viera algo escalofriante. Jungkook despertó asustado, los truenos retumbando en su cabeza, los relámpagos formando figuras en la habitación, se tapó completamente, pero eso no evitaba que no escuchara nada, estaba tan asustado.

Cada sonido, cada vez que la habitación se llenaba de luz, hacían que el castaño viajara a los tormentosos días, en que sus padres lo enserraban en el almacén luego de golpearlo. Cuando se desataba una tormenta y él estaba sólo en aquel lugar, las horribles figuras que se formaban en la estancia, el miedo que sentía al estar ahí. Estaba sudando frío, sus manos temblaban al igual que todo su cuerpo, volvió a dar un respingo cuando un trueno y un relámpago, actuaron al unisono, se levanto de prisa y corrió a la habitación de Min.

Abrió la puerta y con cuidado de no chocar camino hasta la cama del mayor, Yoongi dormía sin importarle la tormenta. Jungkook toco el brazo de Min para despertarlo, pero no hubo respuesta, otra trueno hizo que Kookie diera un grito y se agachara cubriendo su cabeza, las lágrimas caían por sus mejillas. Yoongi al escuchar aquel grito abrió los ojos, con la ayuda de un relámpago pudo ver al menor agachado a un lado de su cama.

—¿Jungkook?— dijo el de cabello negro, se incorporo en la cama y se acerco más a la orilla — Jungkook.

Dijo esta vez tocando la cabeza del castaño, el menor alzo la vista, sus ojos inundados en lágrimas y su cuerpo temblando, eso asusto a Min, le iba a preguntar que le pasaba, pero un trueno lo interrumpió, pudo ver claramente como Jungkook se tapaba más los oídos y escondía la cara entre la cama y sus rodillas.

—Hyung, ¿pu-puedo dormir.. Cont-contigo? — la voz del menor temblando al igual que su cuerpo.

—Ven aquí — le respondió Min, Jungkook se levanto y se acostó al lado del mayor, la habitación volvió a alumbrar por el relámpago, por lo que Jeon se abrazo a Yoongi — Tranquilo.

Le dijo él mientras acariciaba el cabello del castaño, Jungkook temblaba en los brazos de su mayor, le costaba quedarse dormido ya que los truenos no dejaban de sonar, pero se sentía protegido en los brazos de su hyung. Yoongi no se durmió hasta que Kookie lo hizo, estaba preocupado por el menor, pero decidió no preguntar nada, la verdad era que se podía imaginar lo que le pasaba.

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Las clases se habían cancelado por culpa de la gran tormenta que azotaba Seul. Estas dos últimas noches Jungkook había dormido junto a Yoongi, pues de otra forma no podía dormir. Al mayor no le importaba dormir con Jungkook, con tal de que el menor se sintiera seguro. La lluvia era apenas un rocío por la tarde del viernes, ya no habían truenos, ni relámpagos, Yoongi y Jungkook estaban sentados en el sofá del living, el mayor revisaba unos fax's, el castaño tenía la cabeza puesta en el regazo del mayor mientras jugaba con su celular. El celular de Min sonó por lo que tuvo que contestar.

—¿Diga?... ¿a que hora?... Bien, si, estaré ahí, adiós — fueron las palabras que dijo Min, Jungkook lo miraba alzando una ceja — Jungkook, tengo que salir.

—¿Que? ¿a donde?— preguntó éste sentándose.

—Una reunión, alguien importante vendrá a la empresa, me pidieron que este ahí, ¿no te importa quedarte solo? — dijo dudoso el mayor — No, ¿sabes que? Llamare y les diré que no puedo ir.— volvió a tomar su celular para hacer lo que acababa de decir.

—No, Hyung, no te preocupes por mi, estaré bien, la tormenta ya casi acaba así que no habrá problema — dijo el menor deteniendo la mano de Min.

—¿Estas seguro?— preguntó el pelinegro, Jungkook asintió — Bien, me iré a arreglar, tal vez llegue algo tarde, me llamas cualquier cosa.

—Bien.

Jungkook sonrió, se sentía tan bien el saber que alguien se preocupaba por él. Vio a Min perderse en la puerta, no se demoro mucho en aparecer nuevamente, esta vez vestido de traje, volvió a repetir que lo llamara si necesitaba algo antes de irse. El menor prendió la televisión para no aburrirse, aún era temprano para cenar.

Luego de ver dos películas, se levanto a hacer la cena, al parecer Yoongi tardaría más. Preparo la cena para ambos y guardó la parte de Yoongi en el refrigerador, después de comer, lavo los platos, los seco y los guardo. Fue de nuevo hasta el sofá y se acostó en el, en un momento cerro los ojos y sin darse cuenta se quedo dormido. La lluvia había vuelto a incrementar, la reunión del mayor se había alargado unas cuantas horas más. Min miro por la ventana, apretó la mandíbula al darse cuenta que la tormenta había vuelto y con ella los truenos, relámpagos y rayos. Como aún estaba en la reunión tomo con cuidado su celular para que los demás no se dieran cuenta, llamo un par de veces a Jungkook pero no obtuvo respuesta.

Jungkook dio un brinco al sentir el horrible sonido, se alarmó al ver que las luces estaban apagadas, con cuidado se acercó hasta la ventana y comprobó que varios edificios habían perdido la luz por culpa de un corte eléctrico. Un relámpago se abrió en la inmensidad del cielo, haciendo que Jungkook diera un paso atrás y cayera al suelo, ahora estaba completamente solo, como aquellas veces en el almacén. Esta asustado, los truenos y los relámpagos no cesaban, gateo hasta la habitación de Yoongi y se quedo arrodillado a un lado, con la cabeza apegada a sus rodillas y sus manos tapando sus oídos. Ya no había nadie que lo protegiera, ya no estaba su hyung, ni Taehyung.

Era tarde y estaba oscuro, miraba por la ventana como caía la lluvia, el sonido de ésta chocando con las ventanas eran fuertes, pero no más que los truenos, le gustaba ver como se iluminaba la noche por los relámpagos.

—Jimin, ¿no piensas dormir? — le preguntó Taehyung sentándose a su lado, el mencionado lo miró de reojo.

—Si, ya voy — se estiro ya que había estado en esa posición desde hace un rato, ninguno de los dos amigos se habían puesto aún el pijama, por lo que caminaron a la habitación para hacerlo, antes de que Jimin entrara por completo a su habitación su celular comenzó a sonar, lo saco de su pantalón y al ver la pantalla se le congelo la sangre — No puede ser.

—¿Que pasa?— preguntó Tae poniéndose a su lado, al igual que Jimin miró la pantalla del teléfono —¿Te esta llamando..?

—Si — lo interrumpió Jimin — ¿Que hago? — preguntó nervioso.

—Pues contesta — lo ínsito el de piel canela, Jimin asintió levemente, su mirada aún clavada en el nombre del contacto: Chico Daegu.

—¿Bueno?— dijo con miedo.

—Jimin — el pelinaranjo creyó haber oído mal, pues la voz del chico Daegu era parecida o más bien igual a la de Yoongi hyung — Escuchame bien, necesito que me hagas un favor...

—¿Yoongi? — preguntó, Tae lo miró confundido y se acercó a la oreja de Jimin para escuchar mejor.

—Si, Jimin, si quieres después hablamos sobre esto, ahora necesito que vayas a mi departamento, Jungkook esta solo ahora y no puedo ir con él, por favor...

—¿Que?— Jimin estaba desconcertado y confundido, Taehyung a su lado le arrebato el celular a su amigo.

—¿Como que esta solo? Él le teme a las tormentas Yoongi Hyung — dijo serio el pelinegro.

—Lo sé, por eso necesito que vayan a verlo, lo he estado llamando y no me contesta, yo no puedo ir, el camino a mi departamento desde donde yo estoy esta cortado, así que me costara llegar, también se fue la luz eléctrica en toda el área — la voz de Min sonaba preocupada, Tae mordió su labio con fuerza, pensar en como debía de estar Jungkook hacía que su corazón se acelerara por la preocupación.

—Bien, iremos ahora, ¿pero como entraremos a la casa? No creo que Jungkook nos vaya a abrir — contesto tratando de relajarse, Jimin solo podía mirar a su amigo, estaba atónito por lo que acababa de descubrir.

—Hay una llave sobre la puerta, solo debes estirar tu mano y tomarla, por favor, vayan rápido — decía, Yoongi estaba desesperando dentro del auto que no podía avanzar.

—Lo haremos — dijo antes de cortar y devolverle el celular a Jimin —Vamos.

—S-si — contesto el pelinaranjo.

Ambos amigos salieron del apartamento luego de abrigarse y ponerse unos impermeables. Tomaron un taxi que los llevo a una cuadra antes de llegar al edificio de Jungkook, el conductor no pudo seguir ya que como no había electricidad, los semáforos tampoco funcionaban, ya había habido un accidente que les bloqueaba el paso, por lo que luego de pagarle, se bajaron y corrieron hasta el departamento. Al entrar, subieron por las escaleras, iban alumbrando con las linternas de sus celulares, al llegar al piso de Jungkook estaban más que cansados, Tae se adelanto y frente a la puerta del departamento busco la llave, no le costo mucho encontrarla, abrió la puerta se saco el impermeable y los zapatos, entro en el lugar y comenzó a buscar al menor.

Jimin que venía un poco más atrás, saco las llaves de la puerta y entro con ellas en mano, cerro la puerta y al igual que su amigo se saco los zapatos y el impermeable, ya listo comenzó a buscar a Jungkook. En el camino, Taehyung le había contado que el menor le temía a las tormentas, le contó también como lo había encontrado en la escuela, por lo que estaba preocupado. Lo busco por el living, en su habitación, pero nada, se topo en el pasillo con Taehyung.

—¿Lo encontraste? — le preguntó Jimin a lo que Tae negó con la cabeza, el fuerte sonido del trueno se hizo presente junto al relámpago que ilumino la estancia, pudieron escuchar un pequeño grito, por lo que ambos fueron hasta la habitación de Yoongi.

—¿Jungkookie? — le preguntó Tae al bulto que yacia en el suelo, se acerco hasta él y toco su hombro.

Jungkook al sentir el toque, pensó que Yoongi había llegado, se incorporo y abrió los ojos, la oscuridad siendo interrumpida por un relámpago, el menor pudo ver claramente el rostro preocupado de Taehyung.

—¿Tae? — preguntó con un hilo de voz, el pelinegro sonrió, un trueno hizo reaccionar al menor, por lo que se abrazo del más alto.

—Tranquilo, estoy aquí — le dijo con voz calma.

Jimin miraba la escena alumbrando con su celular a la pareja, se sintió aliviado al ver que Jungkook estaba... Relativamente bien. Mientras Taehyung consolaba al menor, Jimin se inclinó al lado de ambos y acaricio el cabello de Jungkook, no hacía falta luz para darse cuenta que el menor lloraba y temblaba de miedo.

—Tae, llevalo a su habitación y quedate con él, esperare en el living a que llegue Yoongi Hyung — Tae asintió y se levantó, las piernas del menor temblaban por lo que al ponerse de pie, casi cae de nuevo, Tae lo alcanzo a afirmar, luego lo tomó en brazos y se lo llevo.

Jimin camino tras ellos, vio como su mejor amigo acostaba al menor en su cama y luego él se acostaba a su lado. Jungkook se abrazo a Taehyung y puso su cabeza sobre el pecho del mayor, Tae acariciaba el cabello del castaño y el brazo que rodeaba su cintura. El mayor podía sentir el temblor en el cuerpo de Jungkook, lo apretado del agarre, como si así pudiese evitar que el mayor se fuese, pero no había necesidad ya que Tae no pensaba dejarlo sólo.

El pelinaranjo les cerró la puerta luego de ver como Taehyung comenzaba a besar el rostro del menor, fue hasta el living y se sentó en el sofá, espero pacientemente a que el dueño de casa llegara. Luego de media hora por fin llego, Yoongi camino con cuidado para no caerse por el camino, una silueta dentro del living llamo su atención, por lo que se encamino al lugar, Jimin lo miraba serio, el mayor se sentó al lado de él.

—¿Jungkook esta bien? — fue lo primero que preguntó, Yoongi no podía ver bien al menor, pero sabía que estaba molesto.

—Si, esta con Tae en su habitación — dijo con voz neutra el pelinaranjo, Min asintió, si no hubiese estado tan preocupado por Jungkook nunca le hubiese hablado a Jimin para que fuera a verlo, pero como las cosas se habían complicado, no le quedo de otra, pues Jimin era uno de los pocos en quien confiaba, el otro era Jin, pero él estaba con Yoongi en la reunión.

—Jimin, yo... — no sabía que decirle, ¿debía disculparse? No tenía ni la menor idea, rascó su cabeza nervioso.

—Eras tú — murmuró Jimin, mordió su labio inferior con algo de fuerza, después de todo había estado hablando por mensajes con el hyung de Jungkook todo este tiempo y lo peor era que a él... Le había comenzado a gustar el chico tras la pantalla — ¿Porque no me lo dijiste?

—No quería que te sintieras incomodo — respondió el de piel pálida.

—¿Desde cuando lo supieste? Que era yo, ¿fue cuando vine a estudiar con Jungkook? — Yoongi suspiro rendido, bien, tenía que decirle todo al menor y esperaba que éste no se molestara con Jungkook.

—Antes, Jungkook te reconoció en el autobús — Jimin quedo con la boca abierta, eso quería decir que había sido el primer día que conoció a Kookie, ¿era por eso que Kookie se había acercado a él? Bueno, al final era verdad que no se había acercado por Tae.

—Jungkook — murmuró por lo bajo — ¿Entonces el día que vine  aquí por primera vez, fue el día en que te diste cuenta que no te conocía? — preguntó mientras trataba de atar cabos.

—Si, porque para un chico que decía estar enamorado de mi, no tuvieste la típica reacción, así que como te dije antes o eras demasiado bueno actuando, o en verdad no me conocías — Jimin mordió su labio, cada vez que un relámpago surcaba el cielo, alumbraba el lugar y ambos se podían ver, por eso esta era la quinta vez que Yoongi veía que el menor se maltrataba el labio con los dientes — No hagas eso, te lastimaras.

—¿Eh? — Yoongi estiro su mano y con su índice toco el labio inferior del menor.

—No te muerdas — murmuró Min, el corazón del menor latía a gran velocidad, encontraba injusto que aquel chico le hiciera sentir de esa forma sin darse cuenta.

—Y-ya — tartamudeo, Yoongi retiro su mano — Como sea, ahora me debes algo.

—¿Que cosa?— preguntó Min sin entender.

—Mi cita — murmuró Jimin, el mayor sonrió a pesar de que el pelinaranjo no lo veía.

—¿No tuvimos una ya? ¿No lo recuerdas? En el centro comercial — bendito relámpago, Min pudo ver claramente el rostro de Jimin al decirle eso, su mirada llena de sorpresa.

—Eso... Es por eso — murmuró, no tan bajo ya que Min lograba oírlo — Por eso fue que apareciste en el centro comercial, a la única persona que le conté donde estaría fue al chico Daegu, o sea, a ti Hyung — dijo Jimin al comprender por que había aparecido Yoongi aquel día.

—¿Que? ¿estas conmovido? ¿quieres lanzarte a mis brazos y besarme? Después de todo, si fui a verte — cabe decir que en estos momentos Min Yoongi estaba más que fascinado molestando al menor, sobre todo al ver el sonrojo en sus mejillas.

—Claro, es por eso que sabías que no había salido de casa — Yoongi asintió — Entonces, el mocoso que tenias que cuidar era Jungkook — volvió a asentir — Y... ¿saldras a una cita conmigo? — si, Jimin había ignorado lo antes dicho por el mayor, ya que eso lo había avergonzado.

—Si insistes — murmuró Min restándole importancia, Jimin se sentía feliz, pues por fin saldría con el chico que le había comenzado a gustar.

Hola, jajaja en este cap ya pasé las 5 mil palabras :'v cada vez se hacen más largos los caps jajajaja

PD: Este creo que es el primer banner de Jungkook, de él son solo 3, díganme, cuanto le dan a este del 1 al 10?...

★HarunaNanami★