El final del año escolar se acercaba rápidamente, trayendo consigo un torbellino de emociones para Felix y Hyunjin. Mientras el aire se volvía más frío y las hojas caían de los árboles, ambos chicos se encontraban en un punto crucial de sus vidas, donde las decisiones que tomaran ahora definirían su futuro.

Con el último trimestre en pleno apogeo, los exámenes finales se convirtieron en el foco principal de la vida escolar. Hyunjin, en su último año, sentía una creciente presión para terminar con buenos resultados y asegurar su lugar en una buena universidad. Felix, aunque tenía un año más, también sentía la carga de mantener su rendimiento académico mientras apoyaba a Hyunjin en sus propios desafíos.

-No puedo creer que ya casi sea el final -dijo Hyunjin una tarde, mientras estudiaban juntos en la biblioteca.

-Sí, parece que fue ayer cuando comenzamos el año escolar -respondió Felix, repasando notas de matemáticas.

Hyunjin lo miró con una mezcla de nerviosismo y emoción.

-¿Has pensado en lo que quieres hacer después de la escuela? ¿Dónde quieres ir?

Felix levantó la vista de sus notas, mordiéndose el labio mientras consideraba la pregunta.

-He estado pensando en ello, pero aún no estoy seguro. Quiero estudiar algo relacionado con el arte o la música, pero no sé dónde. Lo que sí sé es que quiero estar donde tú estés.

Hyunjin sonrió, sintiendo un calor en el pecho ante la sinceridad de Felix.

-Yo también quiero eso. He estado considerando varias universidades, pero hay una en particular que me interesa, y está en una ciudad no muy lejos de aquí. Creo que podría ser perfecta para ambos.

Felix se inclinó hacia él, curioso.

-¿Cuál es?

Hyunjin sacó su teléfono y mostró a Felix la página web de una universidad en particular. Era conocida por su fuerte enfoque en las artes y las humanidades, con un campus que combinaba lo moderno con lo tradicional.

-¿Qué piensas? -preguntó Hyunjin.

Felix revisó la información en la pantalla, sintiendo una creciente emoción.

-Parece perfecta. Y si tú vas allí, yo también lo haré. Podríamos encontrar un lugar para vivir juntos, tal vez un pequeño departamento cerca del campus.

Hyunjin asintió, con una sonrisa que no podía ocultar.

-Eso sería increíble, Felix. Poder estar juntos mientras perseguimos nuestros sueños... No podría pedir nada mejor.

Esa noche, después de regresar a casa, Felix decidió hablar con su madre sobre los planes que estaban empezando a formar. Lia estaba en la cocina, preparando la cena, cuando Felix se le acercó.

-Mamá, ¿tienes un momento para hablar? -preguntó, apoyándose en el marco de la puerta.

Lia levantó la vista y sonrió, dejando de lado lo que estaba haciendo.

-Claro, cariño. ¿Qué pasa?

Felix se sentó en la mesa, jugueteando nerviosamente con sus dedos.

-Hyunjin y yo hemos estado hablando sobre lo que queremos hacer después de que él termine la escuela. Hemos encontrado una universidad que nos interesa a ambos, y está en una ciudad cercana. Estábamos pensando en intentar ir juntos y... tal vez vivir juntos también.

Lia lo miró en silencio durante unos momentos, y Felix sintió su estómago retorcerse. Pero finalmente, Lia sonrió y se sentó junto a él.

-Felix, estoy muy orgullosa de ti. Has crecido tanto este año, y me encanta ver que estás tomando decisiones sobre tu futuro. Si crees que esa universidad es lo mejor para ti, te apoyaré en todo lo que pueda. Y en cuanto a vivir con Hyunjin... -Lia hizo una pausa, buscando las palabras correctas-. No voy a mentir, es un gran paso, y me preocupa, pero confío en ti. Si es lo que realmente quieres, entonces estoy de acuerdo.

Felix sintió una oleada de alivio y gratitud, tomando la mano de su madre.

-Gracias, mamá. Sé que no será fácil, pero quiero que sepas que no tomamos esta decisión a la ligera.

Lia asintió, apretando su mano.

-Lo sé, cariño. Solo prométeme que seguirás siendo responsable y que te cuidarás, ¿de acuerdo?

-Lo prometo.

Mientras tanto, Hyunjin también estaba teniendo una conversación similar con su madre, Yeji. Estaban sentados en el sofá de la sala de estar, y Hyunjin había estado preparándose mentalmente para esta conversación durante toda la semana.

-Mamá, quiero hablar contigo sobre mis planes para después de la escuela -comenzó, mirándola con seriedad.

Yeji lo miró con interés, dejando a un lado el libro que estaba leyendo.

-Por supuesto, cariño. ¿Ya has decidido qué quieres hacer?

Hyunjin asintió, tomando un profundo respiro.

-Sí, he encontrado una universidad que creo que es perfecta para mí. Y también lo es para Felix. Hemos estado hablando de intentar ir juntos, y si todo sale bien, queremos vivir juntos cerca del campus.

Yeji escuchó en silencio, asimilando la información. Finalmente, suspiró y sonrió levemente.

-Hyunjin, sabes que siempre he querido lo mejor para ti. Y si crees que esta es la mejor opción, te apoyaré. Sin embargo, también sabes que la vida independiente no es fácil. Vivir con alguien, especialmente con alguien a quien amas, puede ser tanto increíble como desafiante.

Hyunjin asintió, sabiendo que su madre tenía razón.

-Lo sé, mamá. Pero siento que estamos listos para este paso. Nos hemos apoyado mutuamente en tantas cosas, y creo que vivir juntos nos ayudará a crecer aún más.

Yeji lo miró con orgullo y preocupación, pero finalmente, asintió.

-Está bien, Hyunjin. Si este es el camino que quieres seguir, estoy contigo. Solo asegúrate de cuidar de ti mismo y de Felix. Quiero que ambos sean felices, y si esto es lo que los hará felices, entonces adelante.

Hyunjin se sintió aliviado y agradecido, inclinándose para abrazar a su madre.

-Gracias, mamá. Prometo que haremos lo mejor posible.

Con el apoyo de sus madres, Felix y Hyunjin comenzaron a tomar pasos concretos hacia su futuro. Comenzaron a investigar más sobre la universidad, revisaron los requisitos de admisión y empezaron a planificar cómo sería su vida juntos en un nuevo entorno.

Cada día, mientras el final del año escolar se acercaba, sentían una mezcla de nerviosismo y emoción. Estaban ansiosos por empezar este nuevo capítulo, pero también sabían que habría desafíos por delante.

Finalmente, llegó el día de la entrevista de admisión para la universidad. Felix y Hyunjin, vestidos con sus mejores ropas, se encontraron en la estación de tren para viajar juntos a la ciudad donde estaba ubicada la universidad.

-¿Nervioso? -preguntó Felix, mientras el tren se ponía en marcha.

-Un poco -admitió Hyunjin-. Pero también emocionado. Hemos trabajado mucho para esto, y creo que estamos listos.

Felix sonrió, sintiendo una ola de cariño por Hyunjin.

-Estamos listos. Pase lo que pase, lo enfrentaremos juntos.

La entrevista fue intensa, pero ambos se sintieron seguros y confiados mientras hablaban sobre sus metas, sus pasiones y por qué querían estudiar en esa universidad en particular. Al final, salieron de la sala de entrevistas sintiendo que habían dado lo mejor de sí.

-Creo que nos fue bien -dijo Hyunjin, tomando la mano de Felix mientras caminaban hacia la estación de tren para regresar a casa.

-Sí, yo también lo creo. Ahora solo queda esperar.

Los días siguientes estuvieron llenos de anticipación mientras esperaban la respuesta de la universidad. Cada vez que uno de ellos recibía una notificación en su teléfono, sus corazones se aceleraban con la esperanza de que fuera la noticia que estaban esperando.

Finalmente, una tarde mientras estaban estudiando en la casa de Hyunjin, ambos recibieron una notificación al mismo tiempo. Sus manos temblaban mientras abrían los correos electrónicos.

-Felix... -dijo Hyunjin, con una sonrisa que se extendía por su rostro-. ¡Lo logramos! ¡Nos aceptaron!

Felix dejó escapar un grito de alegría, lanzándose a los brazos de Hyunjin.

-¡Lo hicimos! -exclamó, sintiendo una ola de emoción abrumadora.

Hyunjin lo abrazó con fuerza, sintiendo que en ese momento, todo el esfuerzo y las preocupaciones habían valido la pena. Estaban un paso más cerca de su futuro juntos, y la realidad de sus sueños comenzaba a materializarse.

Esa noche, ambos chicos compartieron la noticia con sus madres, quienes los felicitaron con abrazos y palabras de orgullo. Había una sensación de celebración en el aire, pero también de reflexión, ya que todos sabían que pronto comenzarían una nueva etapa en sus vidas.

-Estoy tan orgullosa de ti, Felix -dijo Lia, abrazando a su hijo con fuerza-. Has crecido tanto en estos últimos meses. Y estoy encantada de ver cómo sigues persiguiendo tus sueños junto a Hyunjin.

Hyunjin se sonrojó ligeramente ante el elogio de Lia, pero no pudo evitar sonreír.

-Gracias, señora Lia. No podría haber hecho esto sin el apoyo de Felix y de todos ustedes.

Lia sonrió y se dirigió a Yeji, quien estaba en la cocina preparando una cena especial para celebrar.

-Yeji, me alegra tanto que nuestros hijos hayan logrado esto. Ellos se han esforzado mucho, y es hermoso ver que todo su trabajo ha dado fruto.

Yeji se acercó a Lia y le dio una palmadita en el hombro, compartiendo el sentimiento de orgullo.

-Sí, es increíble. Estoy feliz por ellos. Me alegra que hayan encontrado una universidad que les entusiasme y les brinde tantas oportunidades.

Los cuatro se sentaron alrededor de la mesa, disfrutando de una cena llena de risas y conversaciones animadas. Era un momento de celebración, pero también de reflexión sobre los desafíos que habían superado y los que aún quedaban por enfrentar.

Después de la celebración, la realidad de los próximos pasos empezó a asentarse. Felix y Hyunjin se sumergieron en la planificación de su mudanza y la preparación para la vida universitaria. Había muchos detalles que considerar, desde encontrar un lugar para vivir hasta gestionar los aspectos financieros de su nueva vida.

Ambos pasaron muchas tardes visitando apartamentos en la ciudad universitaria, tratando de encontrar el lugar perfecto que pudiera ser su hogar. Querían algo que fuera cómodo, asequible y lo suficientemente cerca del campus para facilitar el transporte diario.

-Creo que este es el lugar -dijo Hyunjin, mientras miraba un pequeño apartamento con una vista encantadora-. Es acogedor, y la ubicación es ideal.

Felix asintió, sintiendo que este lugar podía ser su nuevo hogar.

-Sí, me gusta. Creo que podemos hacerlo funcionar aquí.

Finalmente, después de mucho buscar, encontraron un apartamento que cumplía con todos sus requisitos. Era pequeño pero encantador, con suficiente espacio para los dos y una terraza que se convertía en el lugar perfecto para relajarse después de un largo día.

Con el fin del año escolar a la vista, Felix y Hyunjin enfrentaron la última semana de clases. Era un momento agridulce; estaban emocionados por el futuro, pero también tristes por despedirse de sus compañeros y de la vida que habían conocido durante los últimos años.

La última semana estuvo llena de despedidas, exámenes finales y momentos especiales con sus amigos. Seungmin, Jisung y el resto del grupo organizaron una pequeña fiesta de despedida para ellos, llena de risas y recuerdos compartidos.

-No puedo creer que ya se vayan -dijo Jisung, mientras levantaba un vaso en un brindis-. Pero estoy emocionado por ustedes. Sé que harán cosas increíbles en la universidad.

Felix levantó su vaso también, con una sonrisa nostálgica.

-Gracias a todos. Ha sido un viaje increíble, y siempre recordaré estos momentos con cariño. No importa dónde estemos, espero que sigamos en contacto y que nuestras vidas sigan cruzándose.

F

inalmente llegó el día de la mudanza. Felix y Hyunjin se despidieron de sus familias y se dirigieron a su nuevo apartamento. Aunque estaba lleno de cajas y muebles aún desordenados, el espacio comenzó a sentirse como un hogar a medida que lo iban organizando.

-Estamos haciendo esto -dijo Hyunjin, mientras colocaba una lámpara en la mesa de la sala-. No puedo creer que ya estemos aquí.

Felix se acercó y le dio un abrazo.

-Sí, estamos construyendo nuestra nueva vida. Me siento tan feliz de hacerlo contigo.

Pasaron la primera noche en el apartamento, rodeados de cajas y muebles, pero con una sensación de logro y emoción por lo que vendría. Mientras estaban recostados en el sofá, mirando la puesta de sol desde la terraza, se dieron cuenta de que el futuro estaba lleno de posibilidades.

La primera semana en la universidad fue un torbellino de nuevas experiencias. Felix y Hyunjin comenzaron a asistir a sus clases, conocieron a nuevos compañeros y se adaptaron a la vida universitaria. Era un cambio significativo de la rutina escolar a la que estaban acostumbrados, pero estaban decididos a hacerlo funcionar.

La universidad estaba llena de oportunidades y desafíos, y aunque a veces se sentían abrumados, sabían que estaban en el camino correcto. Su relación continuó fortaleciéndose a medida que enfrentaban juntos las nuevas experiencias, y su apoyo mutuo se convirtió en una fuente constante de fortaleza.

Mientras se asentaban en su nueva vida, Felix y Hyunjin miraban hacia el futuro con esperanza y determinación. Habían tomado grandes pasos hacia sus sueños y estaban construyendo una vida juntos que reflejaba sus valores y aspiraciones.

Cada día traía nuevas lecciones y oportunidades, y aunque sabían que enfrentarían desafíos, estaban preparados para enfrentarlos juntos. Su amor y compromiso mutuo les daban la confianza para seguir adelante y enfrentar lo que viniera.

Y así, con el sol brillando en el horizonte de su nuevo capítulo, Felix y Hyunjin se embarcaban en esta nueva etapa de sus vidas, listos para construir su futuro y enfrentar el mundo juntos, sabiendo que mientras estuvieran juntos, todo era posible.

Read you soon...
-Mimi 🦋