Cuando Felix y Hyunjin llegaron a la escuela, el bullicio habitual de los estudiantes llenaba los pasillos. Las risas, los saludos y el sonido de los casilleros abriéndose creaban un ambiente familiar, pero para ellos, había un nuevo matiz en el aire. Sabían que el rumor sobre su relación podría comenzar a circular en cualquier momento, y no estaban seguros de cómo reaccionarían sus compañeros.

-Aquí vamos -murmuró Hyunjin, dándole a Felix una mirada de complicidad mientras caminaban hacia su salón.

-Sí, juntos -respondió Felix, apretando suavemente la mano de Hyunjin antes de soltarla cuando se acercaron a la puerta del aula.

Al entrar, sintieron las miradas de sus compañeros sobre ellos, pero nadie dijo nada al principio. Era como si el salón estuviera sumido en un extraño silencio, esperando algo. Felix se esforzó por mantener la calma, avanzando hacia su asiento como si todo fuera normal, pero podía sentir el peso de las miradas sobre su espalda.

Cuando finalmente se sentaron, la clase comenzó sin ningún incidente. Los profesores siguieron con sus lecciones, y Felix y Hyunjin lograron concentrarse en sus estudios, al menos en parte. Sin embargo, sabían que no podrían evitar la curiosidad y los rumores para siempre.

El verdadero desafío llegó durante la hora del almuerzo. Felix y Hyunjin solían sentarse con sus amigos en una de las mesas en la esquina del comedor, un lugar donde podían hablar tranquilamente sin ser molestados. Pero ese día, cuando entraron al comedor, notaron que las cosas no parecían tan normales.

Sus amigos, incluyendo a Seungmin y Jisung, ya estaban sentados, pero había una tensión en el aire que Felix no había sentido antes. Cuando se acercaron, Seungmin les hizo un gesto para que se sentaran, pero sus ojos reflejaban una mezcla de sorpresa y confusión.

-¿Qué pasa? -preguntó Hyunjin, tratando de sonar casual mientras tomaba asiento.

Jisung fue el primero en hablar, aunque claramente le costaba encontrar las palabras.

-Hay un rumor... -comenzó, mirando a Felix y luego a Hyunjin-. Un rumor de que ustedes dos están... juntos. Como, ya saben, no solo como amigos.

Felix sintió su corazón acelerarse, pero se forzó a mantener la calma.

-Sí, es cierto -dijo, mirando directamente a sus amigos-. Hyunjin y yo estamos juntos.

El silencio que siguió a su declaración fue casi insoportable. Jisung y Seungmin intercambiaron miradas, y luego Seungmin fue el primero en reaccionar, sonriendo ligeramente.

-Bueno, eso es... inesperado -dijo, tratando de aligerar la situación-. Pero si ustedes son felices, eso es lo que importa, ¿verdad, Jisung?

Jisung asintió rápidamente, aunque todavía parecía un poco aturdido.

-Sí, claro. Solo que... wow, esto es una sorpresa. Pero estoy feliz por ustedes.

Felix sintió una ola de alivio al ver que sus amigos no estaban rechazándolos, aunque aún quedaba un ligero malestar en el aire.

-Gracias, chicos -dijo Hyunjin, sonriendo-. Sabemos que es mucho para asimilar, pero apreciamos que lo acepten.

Seungmin asintió, tomando un sorbo de su bebida.

-Siempre hemos sido amigos, y eso no va a cambiar. Aunque puede que necesitemos un poco de tiempo para acostumbrarnos, ¿no?

Felix sonrió, agradecido por la honestidad de Seungmin.

-Entendemos. Nosotros también estamos adaptándonos a todo esto.

La conversación cambió rápidamente a temas más ligeros, y aunque el ambiente seguía siendo un poco tenso, Felix sintió que habían superado un gran obstáculo. Sus amigos estaban dispuestos a apoyarlos, y eso les daba la fuerza para enfrentar lo que viniera después.

A medida que avanzaba la semana, el rumor sobre Felix y Hyunjin se extendió rápidamente por la escuela. Las miradas curiosas y los murmullos en los pasillos se volvieron cada vez más frecuentes. Algunos estudiantes los observaban con incredulidad, mientras que otros parecían simplemente fascinados por la idea.

En una ocasión, mientras Felix caminaba solo hacia su casillero, escuchó a un par de chicos de su clase hablando en voz baja a pocos metros de él.

-¿Has oído? Dicen que Felix y Hyunjin están juntos... como pareja.

-¿En serio? Nunca lo habría imaginado. Pero... no sé, parecen felices juntos.

Felix sintió un extraño alivio al escuchar el tono despreocupado de los chicos. No parecía haber hostilidad en sus palabras, solo sorpresa. Sin embargo, no todos serían tan neutrales.

Más tarde, mientras caminaba hacia su próxima clase, un grupo de estudiantes más jóvenes lo interceptó en el pasillo.

-Oye, Felix -dijo uno de ellos con una sonrisa maliciosa-, ¿es cierto lo que dicen? ¿Estás saliendo con Hyunjin?

Felix mantuvo la compostura, decidido a no dejarse intimidar.

-Sí, es cierto -respondió firmemente, mirando al chico a los ojos.

El grupo estalló en risas burlonas, pero Felix no se inmutó. Sabía que algunas personas serían crueles o ignorantes, pero también sabía que no podía controlar cómo reaccionarían los demás. Todo lo que podía hacer era mantenerse firme y no dejar que los comentarios maliciosos lo afectaran.

A pesar de las dificultades en la escuela, Felix y Hyunjin encontraron consuelo en su tiempo juntos fuera de ella. Pasaban las tardes en la casa de Hyunjin o en el parque cercano, hablando sobre sus sueños, sus miedos y cómo querían enfrentar el futuro. Sabían que la escuela sería un desafío, pero mientras estuvieran juntos, podían superar cualquier cosa.

Una tarde, mientras estaban en el parque, Hyunjin tomó la mano de Felix y lo miró con seriedad.

-Felix, sé que no será fácil, pero quiero que sepas que no me arrepiento de nada. Estoy feliz de que estemos juntos, y no importa lo que digan los demás, no voy a renunciar a lo que tenemos.

Felix sintió una calidez en su corazón, y apretó la mano de Hyunjin.

-Yo tampoco, Hyunjin. Lo que tenemos es real, y lo protegeremos, pase lo que pase.

Se quedaron así, en silencio, disfrutando de la compañía del otro mientras el sol se ponía en el horizonte. Sabían que el camino no sería fácil, pero con el apoyo de sus madres, de sus amigos más cercanos, y sobre todo, con el amor que compartían, estaban listos para enfrentar cualquier desafío.

Con el tiempo, Felix y Hyunjin comenzaron a notar que, aunque aún había rumores y miradas curiosas, la intensidad inicial había disminuido. Sus compañeros de clase parecían acostumbrarse a la idea de que estaban juntos, y la vida escolar comenzó a recuperar una sensación de normalidad.

Pero más allá de eso, Felix se dio cuenta de algo importante: ser honesto sobre quién era y sobre sus sentimientos había fortalecido su relación no solo con Hyunjin, sino también con su madre, sus amigos y, en última instancia, consigo mismo. Había ganado confianza y una sensación de libertad que nunca antes había experimentado.

Hyunjin también notó un cambio en sí mismo. Sentía que al aceptar abiertamente su relación con Felix, había dado un paso importante hacia la madurez. Ahora, estaba más seguro de sus decisiones y menos preocupado por la opinión de los demás.

Con la llegada del último trimestre del año escolar, Felix y Hyunjin comenzaron a pensar en el futuro. Sabían que, aunque la escuela eventualmente terminaría, querían seguir juntos más allá de esos muros. Comenzaron a hablar sobre sus planes para la universidad, sobre los sueños que querían perseguir y cómo podían apoyarse mutuamente para lograrlos.

El último año de Hyunjin se acercaba a su fin, y pronto enfrentaría la decisión de qué hacer después de la escuela. Felix, por su parte, aún tenía otro año por delante, pero ambos sabían que cualquier decisión que tomaran, la tomarían juntos.

-Quiero seguir contigo, pase lo que pase -dijo Felix una tarde, mientras caminaban juntos por el parque.

Hyunjin sonrió, sintiendo una oleada de amor por Felix.

-Y yo contigo. Vamos a construir nuestro futuro juntos, Felix. Uno en el que podamos ser felices, sin importar lo que diga el mundo.

Felix asintió, sabiendo que esas palabras eran más que una promesa; eran un compromiso con el futuro que ambos querían construir.

Y así, con la determinación de enfrentar lo que viniera y el amor que los unía, Felix y Hyunjin siguieron adelante, sabiendo que, aunque el camino podía ser difícil, no lo recorrerían solos.

Read you soon...
-Mimi 🦋