El día siguiente, la inquietud de Felix no se disipó. La conversación con Jeongin seguía resonando en su mente, y la preocupación de que el secreto que compartía con Hyunjin pudiera salir a la luz lo mantenía en un estado constante de alerta. La sensación de estar al borde de una crisis era palpable, y cada pequeño gesto o comentario de sus compañeros de clase parecía cargado de significado.

Durante el almuerzo, Felix se encontró con Hyunjin en la cafetería de la escuela. La mesa estaba llena de estudiantes charlando animadamente, pero ambos se sentaron en una esquina tranquila, donde podían hablar sin ser escuchados. Felix no pudo evitar sentir que el aire a su alrededor estaba cargado de tensión.

-Tengo que contarte algo -comenzó Felix, tratando de sonar lo más tranquilo posible-. Ayer hablé con Jeongin en el parque.

Hyunjin levantó la vista de su bandeja de comida, notando de inmediato el tono grave en la voz de Felix.

-¿Jeongin? -preguntó, su expresión se tornó seria-. ¿Qué pasó?

Felix tomó una respiración profunda antes de continuar.

-Jeongin me dijo que había notado algunas cosas sobre nosotros, sobre cómo nos miramos y cómo nos comportamos. Me advirtió que tuviera cuidado.

Hyunjin frunció el ceño, claramente preocupado.

-¿Crees que ya sabe algo? ¿Que sospecha de nosotros?

Felix asintió, su mirada cargada de preocupación.

-No estoy seguro. Pero si Jeongin se ha dado cuenta, ¿cuántas otras personas podrían haberlo notado? ¿Y qué pasa si empiezan a hacer preguntas?

Hyunjin se quedó en silencio, procesando la información. Sabía que la situación era delicada, pero escuchar que Jeongin estaba tan cerca de descubrir la verdad solo aumentaba la presión.

-Tenemos que hacer algo -dijo finalmente Hyunjin-. No podemos simplemente esperar a que alguien más descubra lo que está pasando. Necesitamos un plan.

Felix asintió, sintiendo que la desesperación comenzaba a apoderarse de él. Necesitaban actuar, pero la pregunta era: ¿qué hacer?

-¿Qué propones? -preguntó Felix, buscando una solución.

Hyunjin pensó por un momento antes de hablar.

-Podemos intentar hablar con Jeongin, aclarar las cosas antes de que se conviertan en un problema mayor. Si podemos asegurarnos de que no se convierta en un rumor, podríamos ganar tiempo para averiguar qué hacer a continuación.

Felix se quedó pensativo. Hablar con Jeongin podría ser una solución, pero también era arriesgado. Si Jeongin no aceptaba la explicación o si interpretaba mal sus intenciones, las cosas podrían empeorar.

-Está bien -dijo finalmente Felix-. Hablemos con él. Pero debemos tener cuidado de no levantar sospechas.

Esa tarde, después de clases, Felix y Hyunjin se encontraron con Jeongin en el pasillo. Jeongin estaba esperando cerca de la salida de la escuela, y cuando los vio, su expresión mostró una mezcla de sorpresa y curiosidad.

-Hola, chicos -dijo Jeongin-. ¿Algo que necesiten?

Felix y Hyunjin intercambiaron una mirada antes de que Felix hablara.

-Jeongin, queríamos hablar contigo sobre la conversación que tuvimos en el parque -comenzó Felix, tratando de sonar calmado-. Te agradecemos que nos hayas dado un aviso, pero queríamos aclarar algunas cosas.

Jeongin frunció el ceño, notando la seriedad en la voz de Felix.

-Claro, ¿de qué quieren hablar?

Felix se aclaró la garganta, buscando las palabras adecuadas.

-Sobre cómo nos comportamos -dijo Felix-. Es posible que hayas malinterpretado algunas cosas. Hyunjin y yo somos amigos cercanos, y a veces nos mostramos de manera afectuosa, pero eso no significa que haya algo más entre nosotros.

Jeongin lo miró fijamente, su expresión mezclada de interés y escepticismo.

-¿Así que no hay nada entre ustedes? -preguntó, la pregunta colgando en el aire.

Hyunjin intervino para ayudar a aclarar la situación.

-Exactamente. Solo somos amigos. A veces, cuando estamos juntos, puede parecer que hay algo más, pero en realidad, solo estamos pasando tiempo juntos como amigos.

Jeongin asintió lentamente, aunque su mirada todavía parecía analizar la situación.

-Entiendo. Solo estaba preocupado porque pareces muy diferente últimamente, Felix. No quería que te metieras en problemas por algo que podría ser un malentendido.

Felix sintió un alivio parcial al escuchar las palabras de Jeongin, aunque la tensión aún no se desvanecía completamente.

-Gracias por decirnos -dijo Felix-. Apreciamos tu comprensión. Si hay algo que te preocupa, siempre puedes hablar con nosotros.

Jeongin sonrió, pareciendo más relajado.

-Lo tendré en cuenta. Bueno, nos vemos luego, chicos.

Con eso, Jeongin se despidió y se alejó, dejando a Felix y Hyunjin en el pasillo, sintiendo un alivio temporal. Sin embargo, ambos sabían que esta no era una solución definitiva. Habían conseguido que Jeongin no hiciera preguntas por ahora, pero la preocupación de ser descubiertos seguía presente.

-Eso no fue tan mal como pensé -dijo Felix, tratando de relajarse-. Pero todavía me siento preocupado. ¿Qué pasa si alguien más empieza a sospechar?

Hyunjin asintió, entendiendo el temor de Felix.

-Lo sé. Vamos a tener que estar más atentos. Y si es necesario, discutiremos qué hacer si las cosas se complican aún más.

Felix asintió, sintiendo que la conversación con Jeongin había sido un pequeño paso hacia la resolución, pero también un recordatorio de lo frágil que era su situación. Mientras caminaban hacia sus casas, ambos sabían que el camino por delante no sería fácil, pero al menos, por ahora, habían ganado algo de tiempo.

El secreto que compartían seguía siendo una carga pesada, pero también era un vínculo que los unía más que nunca. A medida que avanzaban, sabían que necesitarían enfrentar la verdad tarde o temprano, y que tendrían que hacerlo juntos, sin importar los desafíos que se les presentaran.

Read you soon...
-Mimi 🦋