💙 Chapter Eighteen: Revelations 🤍
La mañana siguiente en la montaña amaneció con una bruma ligera que envolvía el chalet, dando un aire de misterio al entorno. Felix se despertó sintiéndose renovado, el aire fresco llenaba sus pulmones y lo hacía sentir más optimista. Sabía que aún tenían que lidiar con la realidad de su relación oculta, pero en ese momento, la paz del lugar le daba la fuerza para enfrentar lo que viniera.
Después de un desayuno tranquilo, Lia y Yeji sugirieron hacer una caminata más larga para explorar una parte del bosque que no habían visto el día anterior. Felix y Hyunjin aceptaron, aunque ambos sabían que el paseo podría llevar a conversaciones difíciles. A medida que se adentraban en el bosque, los cuatro hablaban animadamente sobre el paisaje, disfrutando de la naturaleza que los rodeaba.
El sendero serpenteaba entre árboles altos, y la luz del sol se filtraba a través de las ramas, creando sombras danzantes en el suelo. Todo era perfecto, pero Felix sentía una tensión en el aire, como si algo estuviera a punto de suceder.
Después de un par de horas de caminata, llegaron a un claro donde un pequeño arroyo serpenteaba entre las rocas. Lia y Yeji decidieron sentarse un rato para descansar, y los chicos se quedaron de pie cerca del agua, lanzando piedras planas para que rebotaran en la superficie.
-Esto es hermoso -dijo Hyunjin, rompiendo el silencio.
Felix asintió, mirando el agua que fluía suavemente.
-Sí, lo es. Este lugar... es como un escape de todo lo que está pasando. Aquí todo parece más simple.
Hyunjin miró a Felix, con una expresión que reflejaba comprensión y algo más.
-Felix, he estado pensando... quizás deberíamos aprovechar esta oportunidad para hablar con nuestras madres. Están relajadas, felices... tal vez sea el momento adecuado.
Felix se quedó en silencio, considerando las palabras de Hyunjin. Parte de él sentía que tenía razón; este ambiente tan tranquilo podría ser el mejor para una conversación difícil. Pero otra parte de él estaba aterrada de que esa paz se rompiera con la revelación de su relación.
-No lo sé, Hyunjin -respondió finalmente-. ¿Y si lo arruinamos todo? ¿Y si no lo aceptan?
Hyunjin lo miró con ternura, tomando su mano de forma breve, asegurándose de que sus madres no los vieran.
-Felix, pase lo que pase, estaremos juntos. Sé que da miedo, pero no podemos seguir escondiéndonos. Esto es real para nosotros, y creo que, en el fondo, ellas lo entenderán.
Felix sintió el calor de la mano de Hyunjin y, por un momento, todo el miedo se desvaneció, reemplazado por la convicción de que tenía razón. No podían seguir viviendo en la sombra del miedo. Asintió, decidido.
-Hagámoslo. Hoy. Después de la cena.
Hyunjin sonrió, agradecido por el valor de Felix.
-Juntos. -dijo Hyunjin sujetando la mano de Felix, transmitiéndole seguridad y calidez.
- Juntos. -termino de decir Felix decido, apretando levemente la mano de Hyunjin.
La cena en el chalet fue un asunto sencillo pero cálido. Las madres prepararon una comida deliciosa y se sentaron alrededor de la mesa con una botella de vino. Las risas y las historias fluyeron libremente, y por un momento, Felix olvidó la carga que llevaban. Pero a medida que la cena llegaba a su fin, sintió que el momento se acercaba.
Cuando todos terminaron de comer, Lia y Yeji comenzaron a recoger los platos, pero Felix las detuvo.
-Mamá, espera... hay algo de lo que Hyunjin y yo necesitamos hablar con ustedes.
El tono serio de Felix hizo que ambas mujeres dejaran lo que estaban haciendo y se sentaran nuevamente, mirándolos con curiosidad y preocupación.
-¿Qué sucede, cariño? -preguntó Lia, mirándolo directamente a los ojos.
Felix intercambió una mirada con Hyunjin antes de respirar profundamente.
-Hyunjin y yo... estamos juntos. No solo como amigos, sino como pareja.
El silencio que siguió a sus palabras fue ensordecedor. Lia y Yeji se miraron, claramente sorprendidas. Felix sintió su corazón latir con fuerza, mientras esperaba alguna reacción, cualquier señal de cómo se lo estaban tomando.
Lia fue la primera en hablar, con una voz temblorosa pero firme.
-Felix... ¿estás diciendo que... ustedes dos están en una relación romántica?
Felix asintió lentamente, sin poder encontrar las palabras adecuadas.
-Sí, mamá. Hyunjin y yo hemos estado juntos por un tiempo. No hemos dicho nada antes porque... porque no sabíamos cómo lo tomarían, y teníamos miedo.
Yeji, que hasta ahora había permanecido en silencio, habló con una voz suave pero llena de emociones.
-Hyunjin... ¿esto es cierto?
Hyunjin asintió, tomando la mano de Felix sobre la mesa en un gesto de apoyo mutuo.
-Sí, mamá. Es cierto. Felix y yo... nos amamos. No queríamos ocultarlo más, pero entendemos si esto es difícil para ustedes.
Las dos mujeres intercambiaron una mirada, y Felix no pudo leer lo que estaban pensando. La tensión en la habitación era palpable, y cada segundo que pasaba en silencio hacía que Felix se sintiera más inseguro.
Finalmente, fue Lia quien rompió el silencio, con lágrimas en los ojos.
-Felix... Hyunjin... esto es una sorpresa. Pero lo que más me importa es que ustedes sean felices. Siempre he querido lo mejor para ti, Felix, y si Hyunjin es quien te hace feliz, entonces lo aceptaré. Necesitaré tiempo para asimilarlo, pero te amo, hijo. Nada va a cambiar eso.
Yeji asintió, con lágrimas también en sus ojos.
-Hyunjin, te he visto crecer, y siempre he sabido que eres especial. Si esto es lo que quieres, si Felix es quien quieres en tu vida, te apoyaré. Pero, al igual que Lia, necesitaré tiempo para entenderlo completamente.
Felix sintió una oleada de alivio que casi lo hizo derrumbarse. No era la aceptación total que había soñado, pero era un comienzo. Un paso hacia adelante.
-Gracias, mamá. Gracias, Yeji -dijo con la voz rota por la emoción-. No saben cuánto significa esto para nosotros.
Hyunjin, que también parecía abrumado por la emoción, apretó la mano de Felix con más fuerza.
-Gracias, de verdad. Sabemos que no es fácil, pero estamos dispuestos a trabajar en esto juntos.
Las madres se levantaron y se acercaron a sus hijos, abrazándolos con fuerza. El abrazo fue una mezcla de emociones: amor, confusión, esperanza. Pero lo más importante es que estaban juntos, y eso les daba la fuerza para seguir adelante.
Esa noche, después de que todos se retiraran a sus habitaciones, Felix y Hyunjin se quedaron despiertos hasta tarde, hablando en voz baja sobre lo que había sucedido. Habían dado un paso importante, uno que temían durante mucho tiempo, pero que ahora se sentía liberador.
-Lo logramos -murmuró Felix, recostado en su cama, mirando a Hyunjin desde la otra-. Fue difícil, pero lo hicimos.
Hyunjin asintió, con una sonrisa en los labios.
-Sí, y aunque aún queda mucho por hacer, siento que podemos con esto. Juntos.
Felix cerró los ojos, dejando que el cansancio y la satisfacción lo invadieran.
-Juntos -repitió, sintiendo que por primera vez en mucho tiempo, el futuro no parecía tan aterrador.
Y con esa seguridad, se quedó dormido, sabiendo que, pase lo que pase, lo enfrentarían unidos.
Read you soon...
-Mimi 🦋
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