Abrió la carta y sacó el fino papel blanco que contenía.
"Enhorabuena detective, todo está preparado para su final. Mañana el explosivo explotará mandando al otro barrio a las mil personas que estarán allí en ese momento, y me temo que también a su carrera de detective.
Por cierto, veo que has tenido un pequeño problema con una amiga mía, aunque eso no importa ,porque mientras que yo esté aquí nunca podrás encontrarla.
Hasta otra, detective. "
Cuando terminó de leer dejó la carta encima de la mesa y empezó a pensar en una manera de encontrar ,de la forma más rápida posible, esa bomba, pero por más que lo pensaba más difícil y sin sentido le parecía.
Avanzó hacia una pequeña mesilla en la que guardaba un diario, el cual hacía mucho que no usaba, le quitó el polvo, lo abrió y cogió un bolígrafo para escribir:
<<No hemos podido encontrarla, la policía sigue buscando pero dudo mucho que la encuentren a tiempo .
Creo que incluso yo he empezado a perder la fe en la policía.
Tengo claro que no quiero que muera nadie por mi culpa y haré lo que sea para que eso no ocurra.>>
Cerró el diario y cogió una hoja de papel en blanco ,para dibujar a la chica con la que se había chocado, a pesar de lo que le decía la carta.
Cuando lo terminó, el retrato se parecía mucho a la chica pero lo faltaban muchos rasgos significativos como para no confundirse con otra persona.
Con la imagen todavía en la mente, borró las partes erróneas y las corrigió.
Después lo guardó junto con el diario para al día siguiente llevarlo al reconocimiento facial y posteriormente búsqueda de la persona en los registros.
Entre tanto se hizo de noche y ya no quedaba mucho más que hacer así que se tumbó en su cama a esperar.
Él sabía perfectamente lo que iba a pasar al día siguiente, las muertes que conllevaría la incompetencia de la policía con este caso le carcomían por dentro, pero sabía que él ya no podía hacer nada para parar lo que iba a suceder al día siguiente, ni él, ni nadie.