♤|Pedido por y dedicado a Holly_Luthor, espero que te guste como a mi escribirlo, está hecho con mucho cariño ♡^^♡
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Había una vez hace muchos, muchos, pero muchos años en un reino muy, pero muy lejano, donde nació una princesa tan bella como el sol renaciendo al amanecer, su cabellera dorada así lo reflejaba mientras su piel blanca como la luna era decorada por un par de hermosas esmeraldas más resplandecientes que cualquier joya.

Era la primera hija, consentida y amada por todos en el reino, aunque sus padres no podían darle toda la atención  que su infancia demandaba por sus grandes deberes con los súbditos, siendo designada a un guardián y una dama de compañía, quienes velarían por su bienestar con su vida.

Un padre joven y su pequeña hija de tan solo cinco años, eran los encargados de esta gran labor, ya que la princesa fue un torbellino en miniatura que empeoró al comenzar a gatear desatandose la tormenta cuando ya sabía caminar y hablar.

Victoria era una niña curiosa, activa y muy descuidada, por lo que su dama quien se había convertido en su mejor amiga tenía que perseguirla y encontrarla en cada rincón que se pudiera imaginar, e incluso muchas veces lo hicieron fuera del palacio, donde la pequeña reina conoció a la familia de Erica quien ya rondaba los doce años.

—Quiero vivir aquí contigo por siempre y comer todas tus preparaciones—decía  la pequeña reina mientras sus mejillas estaban bañadas en crema que su dama  limpió con sumo cuidado, anhelando en su corazón el poder cumplir sus palabras

—Pues siempre estaré para usted mi princesa, y le enseñaré todo lo que sé para cuando sea su hora de casarse

—No, yo sólo me voy a casar si es contigo, sólo hay que esperar a que tenga la edad en que puedas pedir mi mano—dijo la infante decidida al verla directamente, ya ignorando por completo pedazo de pastel que quedaba en su plato

__________ quedó en absoluto silencio al oírla tratando de entender sus palabras provenientes de una niña y la reina que un día gobernará todo, mientras ella es una chica también y además que sirve junto a su familia en un estatus poco menos que esclavos al apenas cubrir sus deudas con sus trabajos.

Viera por donde lo viera era imposible el cumplir lo que ella vió como un capricho más de su princesa, aunque ni podía negar el ahogar de su corazón en una nueva sensación más allá de esa ternura que Victoria siempre le hacía sentir, algo más fuerte crecía en su interior, una dulce calidez que provocaba cosquillas en su panza, y un calor que emanaba de sus mejillas.

Como las de su reina las cuales estaban de un adorable rosa dominando en su palidez mientras sus ceño se frunció como sus labios—¿No responderás al pedido de tu furura reina?, ¿O es qué no me quieres?, aunque eso es imposible porque soy demasiado adorable, o al menos eso es lo que siempre me dices

_________ sonrió al dejar ir un suspiro mientras acaricia su cabello, viendo como sus ojos se cierran ante el tacto por unos segundos y todo rastro de molestia en su rostro cambia a uno feliz.

—Mi deber es acatar a sus órdenes, mi señorita, aunque estoy segura que cuando crezca sus pensamientos cambiaran junto a usted

—Hmp—hizo una adorable mueca antes de cruzarse de brazos—Pues yo siempre te querré como esposa

Pasaron los años y tal como le había dicho la pequeña princesa, los sentimientos de ambas con el pasar de los años no hacer más que crecer en un amor tan bello, inocente, dulce, divertido, comprensivo y tan íntimo, ya que Erica conocía cada rincón del corazón de su amada Victoria como ella del suyo.

Sus almas estaban destinadas a estar juntas, más no era algo que los demás pudieran entender, y al cumplir la edad necesaria para el matrimonio ambas fueron separadas al tener que casarse según las reglas y sociedad dictaban.

—Oh esos dos corazones dolientes se sintieron desangrar al su otra mitad separarse—dramatiza la joven mientras lágrimas reales en sus ojos se revelan

—¡¿Y qué pasó después?!—chilla una de las pequeñas niñas atentas a su cuento

—¿Se vovieron a ver?, ¿Fueron felices?—preguntó uno de los niños preocupado

Donde todo su espectáculo fue roto por unos recién llegados padres furiosos respecto al tema Lgbt de su historia.

—Si fueron felices, con sus "ESPOSOS", como corresponde—dijo uno de los apoderados al tomar llevarse a su hijo, como los demás en alejar a los niños de ella para irse a quejarse con sus jefes

Este siendo el quinto empleo que perdía...

—¿Y qué esperabas?, No puedes tratar esos temas con los niños—bufa su amiga

—Es una historia de amor tan válida como cualquiera, este es el siglo 21 no la edad media—refunfuña la chica al comer pastel en un desesperado intento de ahogar sus penas, hábito el cual tenía de su otra vida—Ya casi junto todo el dinero para ir a verla

—¿Otra vez con eso?, ¿Siquiera sabes cómo localizarla?, ¡Es una actriz famosa!, y aún si pudieras conocerla, ¿Crees que te creería la locura de reencarnar en esta vida para poder estar con ella?, si te oyera te mandaría presa, yo lo haría, como cualquiera en su sano juicio

—Pues tú me creíste o al menos me dejas hablar y me escuchas—rió—Pero de verdad estoy segura que en cuanto Katie me vea, podrá reconocerme—expresó al sus ojos brillar perdidos en su ensoñación mientras su mano se posa en su pecho, sintiendo sus propios latidos revolotear ante su mención

—¿No lo hizo hace años y lo haría ahora?—inquirió Astrid tratando de hacer que entrará en razón, pero la menor no era capaz de ver todos los contras y obstáculos que le presentaba, bueno, ni siquiera era capaz de verlo al divagar aún más en sus memorias...

En esta presente vida como ________ todas sus noches desde que tuvo conciencia fue capaz de ver su vida anterior a través de los sueños, y lo cual un día confirmó a sus nueve años al ver a la mujer protagonista de estos en la vida real.

_______ y su mejor amiga Astrid se habían desvíado de camino a su casa para pasar al centro comercial donde se inauguraba una nueva tienda de dulces.

Cuando en el recorrer por los pasillos de este pasó un grupo de chicas de preparatoria, que iban a pasar desapercibidas por las dos infantes hasta una de ellas voltear y algo dentro de ________ estremecer, una emoción tan grande y de la cual no sabía más que la reflejada en esas historias de sus sueños que sentía en su corazón, ahora le ocurría estando despierta sentimientos que al momento de ver esos ojos poder reconocer a la mujer que siempre vió.

Era ella, después de tantos años y de tantas vidas...

—¡Mi Reina!—La llamó _______corriendo a su encuentro donde las jóvenes se la quedaron viendo ante la infante plantarse frente a Katie y posar sus ojos fijamente en los suyos

——Al fin te encontré—suspira afligida mientras se aferra a la cintura de una desconcertada jóven

—Emm... pequeña creo que me confundes, ¿Dónde están tus padres?—pregunta nerviosa ante la niña no dejar de llorar

—Vine a esta vida para cumplir nuestra promesa, mi Victoria

—¿Victoria?—preguntó para si la Mcgrath ante el nombre parecer resonar en su interior, más la pequeña y desconocida en medio de su llanto en su rostro plantó una sonrisa

—Si, yo soy Erica y en esta encarnación vine a pedir su mano, cuando crezca seremos esposas—aseguró ya feliz mientras el peso de la mirada de sus compañeras recaía en sí, junto al juicio que crecía por medio de murmullos en sus bocas

—________, debemos irnos—trató de llevársela su amiga, pero la nombrada sólo se aferró más a la ya abatida chica

—No quiero—gruñó al inflar las mejillas

—Niña, te aseguro que no nos conocemos, deberías volver con tus padres, ¿Qué no te enseñaron a no hablar con extraños?—dijo al separarla de sí con cuidado para la ahora atención de todos los transeúntes estar sobre si como sus acciones

—¡Pero si nos conocemos!, tú eres Victoria y yo Erica, tu eras mi reina y yo tú dama, nos enamoramos y nos separaron, nosotras...—solloza al ser capaz de revivir todo el dolor de su anterior vida en la cual fue castigada por su amor y odiada incluso por su propio padre

—Creo que tienes demasiada imaginación, yo soy Katie Mcgrath, y te aseguro que jamas e conocido a esas personas —suspiró al ver a sus supuestas amigas marcharse y ella tener que disculparse con las personas expectantes mientras encaminaba a las infantes a sus hogares ante el estado de la niña _________ empeorar.

Recuerdos que estaban tan calados en su alma que tuvo que buscar la forma para expresarlos por lo cual había escrito una novela, "Promesa de Vidas", con tal de soltarlos y poder imaginar su próximo encuentro con su ahora Katie.

Tan sólo un consuelo, ya que estaba segura que sus corazones pertenecían el uno al otro desde esa vida en que su amor no pudo cumplirse, haría hasta lo imposible con tal de no repetir esa historia.

—Ahora será diferente, mi corazón me lo dice—aseguró con una sonrisa mientras su mirada terminaba de perderse en un desconocido y vasto horizonte —Sólo debo buscarla

—No tienes salvación—suspiró su mejor amiga—Está bien, te ayudaré a  publicar tu novela, tienes que reunir el dinero para viajar,  ¿No es así?—dijo para ________ abrazarla hasta casi pasar el límite de afixiarla

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__________ nunca imaginó que su novela tuviera el éxito tal de no sólo venderse si no que llegar a nivel internacional y que fuera el que le dió la oportunidad de viajar a Estados Unidos en promocionar su libro entre los demás novatos con gran talento de los cuales a muchos seguía en sus libros.

Y todo en el transcurso de tan sólo un año, aunque en cada letra hubiera dedicado vida en plasmar cada momento junto a su amada y todo lo que no pudieron vivir lo hacían a través de las letras que le habían dado voz a Victoria como Erica, sobre un amor oculto y repudiado por muchos, pero que ahora era aceptado con todo ese cariño que les fue arrebatado.

—Si tan sólo ella pudiera verlo—suspiró  al perderse en el mundo de sus pensamientos que olvidó que se encontraba en la exposición donde tenía una gran fila de lectores esperando su firma

—Disculpa, ¿Estás bien?—escucha una voz a lo lejos

—Gracias—asiente sin prestar mayor importancia, estaba muy agradecida con sus fans, pero en estos momentos cada minuto era un martirio al poder estarlo usando en investigar donde poder encontrar a la Mcgrath

—Me alegra, ¿Entonces puedo recibir un autógrafo?, tu historia en verdad me ha conmovido, es como si... lo hubiera vivido—susurró lo último por lo que fue imposible de oír la distraída joven

—Muchas gracias—sonrió la joven al hacer una pequeña reverencia mientras cogía su pluma, o al menos la buscaba y encontrarla siendo roida por un perro

—Mil disculpas—pidió la chica

—Descuida, es muy lindo—chilló al acariciarlo y este devolverle el bolígrafo con tal de obtener más mimos, "ella tiene uno igual" suspira en su mente antes de obligarse a regresar a la tierra—¿A nombre de quién dejo la dedicatoria?

—Katie Mcgrath—declaró para ________ sufrir un pequeño infarto antes de fijar su mirada en la mujer cubierta por una gorra y gafas oscuras como su peludo acompañante que ahora podía reconocer como Oisin al su mente tardar de unir los hechos que el amor de su vida por el cual en esta encarnación y la de hace siglos se había esforzado por volver a ver aunque fuera tan sólo por una vez

Sintió sus ojos llenarse de lágrimas en la contradicción de su corazón bombardear desesperado dentro de su emoción, mientras su lengua pareció atorarse al intentar hablar cuando los quejidos de las personas por su demora se hicieron resonar.

—Te recuerdo más osada de tus nueve años—susurró la azabache de una forma tan dulce y risueña que _________ sintió sus piernas flaquear en esa mezcla de sorpresa, ternura y vergüenza

Demasiadas emociones batallan en su interior en un mismo momento que no fue capaz de responder ni mucho menos retener a la actriz que se marchó frente a sus ojos.

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________ maldijo a su suerte al tener que volver a casa sin poder volver a ver a Katie, de quien había perdido todo rastro al no tener cómo encontrarlo y al tener la oportunidad de su vida en la mujer de sus sueños aparecer por su cuenta frente a sus ojos y estar tan perdida en pensarla que fue demasiado tarde al darse cuenta de que se trataba de ella.

Tal parece que el universo jugaba en su contra y estaba destinada a que en esta encarnación tampoco pudiera cumplir su promesa.

—Maldito karma y tus sucias jugadas que disfruta de mis desgracias, ¡¿Qué más quieres de mi?!—gritó a los cuatro vientos en su patio, y el sin fin de ladridos desatarse en su vecindario como uno que otro insulto de sus vecinos ante estos lamentos haberse vuelto una rutina—¡Loca tu abuela!—respondió mientras comía otra cucharada de Nutella de un balde el cual se había vuelto su gran compañero de tristezas desde que había retornado

—No maldigas al karma por tu impaciencia—escucha a su espalda para sentir como sus sentidos revolotearse dentro de su corazón mientras su mente trataba de reconocer donde antes la había oído—Quizás en esta vida debas aprender los frutos de la paciencia—susurró la azabache entre   risillas que le hicieron atreverse a voltear hacia la dueña de tales melodías

Su corazón se detuvo antes de comenzar a latir tan rápido que creyó que se saldría de su pecho para alcanzar esas esmeraldas que vida tras vida no habían perdido su hermosura.

La imagen de Katie y Victoria se tornaron una sola viendo sonreír a su reina en ese risueño rostro con la edad a la que jamás pudo verla, siendo separadas cuando a penas alcanzaba sus diecisiocho años, viéndola ahora en su viva imagen, pero con la felicidad marcando en remplazo de la amargura a la que estaban condenadas y convertida en una resplandeciente mujer.

—¿Haz recordado?—susurró ante el terror y la emoción estancar su garganta con creces

—Me temo que no, pero siento curiosidad por cómo termina la historia  de Victoria y Erica en esta vida—confesó y en todo momento sus ojos se mantuvieron sobre los suyos, aumentando el frenesí de sus sentidos hasta llegar al colapso

Era demasiada información para su débil corazón...

—¿Te moriste?, que lástima tendré que marcharme

—¡No!—chilló la joven al levantarse de un salto y lanzarse a los brazos de una desconcertada actriz—Fue la emoción del momento—chilló al echarse a llorar mientras se aferra aún más en los brazos de la Mcgrath quien sufría un deja vu

—Sigues siendo una mocosa acosadora—rió Katie ante el puchero que hizo cuando se la alejarla de sí—Pero no te hagas ilusiones, solo vengo a retornar esa amistad en honor a tu libro—declara y la seriedad vuelve a su rostro, entregándole determinación a sus palabras, aunque no tuvieron peso alguno para la enamorada joven

—Eso no importa, porque...—sonrió al tomar la mano que mandó un sin fin de corrientes eléctricas a todo su ser y como parecía ser el caso de la Luthor ante un leve tono rosa decorar sus pálidas mejillas, su determinación era mayor—Te prometo que te enamoraras de mi, idepndientemente si te acuerdas o no de Victoria y Erica, lo nuestro está predestinado

Siendo el momento de Katie de sus sentidos detenerse ante la inundación de sus recuerdos.

Una pequeña y sonriente __________ esperaba la salida del colegio de Katie, como se había vuelto una costumbre, escapaba de casa o se desviaba de vuelta de su escuela, para su querida Kavic, apodo que le había puesto en combinar las iniciales de sus dos amores.

Corrió eufórica a su encuentro en cuanto la vió—Kavic, mi reina—la llamó felizmente, aunque se detuvo en seco al presenciar como un grupo de jóvenes estudiantes la rodeaban para insultarla y molestarla

La vió decaer y contener sus lágrimas  mientras mantenía sus esmeraldas fijas en un punto en el suelo, sus puños se mantenían apretados y estaban temblorosos. El dolor de Katie instantáneamente la hizo tener un dejavu de Victoria siendo insultada por sus hermanas cuando un día las vieron besarse, ese día no pudo hacer nada, no podía discutir ni tenía voz frente a personas de la realeza, ni mucho menos hacer algo contra de la desición de los reyes e iglesia de alejarla de su princesa tiempo después.

No tenía poder como mujer, no era dueña de su vida siendo sirvienta, y su atracción por otra chica la convertía en una pecadora digna de la hoguera, años convenciendose de ello, pero ya no era así...

Estaba en una nueva vida en la cual cada vez son menos rechazadas, aquí tiene voz y voto, ya no se dejaría intimidar por nadie.

Así decidida se plantó frente a Katie, y entendió sus brazos mientras volteaba a ver de muerte a sus agresores.

—¡Llegó la novia rara de la rarita pedofila!

—Basta, déjenla en paz

—O si no, ¿Qué?, solo eres una mocosa—se burlo uno mientras se agacha a su altura

—Y tu un idiota—bramó la niña al patearon entre sus piernas y este responder furioso en extender su puño dispuesto a golpearla aún con sus compañeros tratar de detenerlos, como la Mcgrath quien de adelantó en tomar su mano y poder escapar

Corrieron y corrieron hasta desplomarse exhausta en una plaza donde Katie le compró un helado para intentar calmarla, aunque parecía tan feliz aún tomada de su mano que no parecía importarle mucho el hecho de ser casi golpeada.

—Esto ya no puede seguir—suspiró al limpiar el dulce que se había desparramado hasta sus mejillas, encontrándose una tierna sonrisa en respuesta, dificultando un poco el salir de sus palabras—No quiero que vengas más, no es... correcto y... yo no creo en tus historias, no te conozco... no...

—Entiendo, mis papás tampoco lo hacen—susurró sin lágrimas que ella misma reprimía, y en su reemplazo una sonrisa se extendió su rostro—Sé que me amarás como yo a ti, y cuando sea mayor y tan linda como tú nos casaremos—afirmó con sus rosas mejillas mientras veía la unión de sus manos, apretandola delicadamente antes de soltarla—Desde Victoria y Erica lo nuestro está predestinado—sonrió una vez más antes de salir corriendo mientras a lo lejos se seguía despidiendo

No la volvió a ver desde ese entonces y de casualidad un día en buscar nuevas lecturas un nombre le llamó la atención, para al comenzar a leerlo toda las historias que _________ le relataba estar plasmadas, enseñándole una vez ese amor tan dulce y sincero que cada vez atraía más a su corazón.

Con ese sentimiento presente en su pecho que predominó sus sentidos como el control de su cuerpo, no pudo resistirse a alcanzar sus labios con ese toque de adrenalina y misterio.

En ese dulzor que predominó su boca, envuelta en las mil y un sensaciones, pudo ver cada recuerdo vivido con su amada antes de volver a nacer.

Sus ojos se llenaron de lágrimas al separarse y una asustada ________ sacarlas cuidadosamente mientras se disculpaba sin parar.

Katie negó en dejar ir todo el aire retenido y encontró sus orbes tan bellos y resplandecientes tal como en ese antes, para abrazarla sin ya poder contener su llanto, pero esta vez de una inconmensurable alegría.

—Te recuerdo, Erica—confesó, ahora después de siglos su amor tendrá la oportunidad de vivir y esta vez no le dejaría ir....