♤|Pedido por y dedicado a Laura20x y ardb123123

Está hecho con mucho cariño y espero que lo disfruten como  yo al escribirlo ♡^^♡

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___________ siempre fue apegada a las tradiciones de su familia y en especial de las mujeres sanadoras como chamanes, con sabidurías transmitidas de generación en generación hasta llegar a ella por medio de su madre.

Estaba orgullosa y le encantaba poder aprender de hierbas como de los espíritus de cada ser vivo, aunque fue un impedimento más para encajar en el nuevo país donde partió a estudiar medicina, facultad la cual no sólo le abrió las puertas a sus estudios, sino que en esta conoció a la mujer de su vida y a quien había visto venir en sueños mucho antes.

Esa ilusión azabache de las bellas esmeraldas y encantadora sonrisa fue la que la acompañó en sus días de soledad mientras se acostumbraba al nuevo país y al verla en persona poder comprobar que era mucho más que lo que sus sueños le mostraban, cayendo perdidamente enamorada de quien se convirtió en su mejor amiga aunque su corazón anhele el suyo.

Estaba estudiando para los exámenes finales cuando le llegó una llamada de Harriet para una sonrisa automática posarse en sus labios antes de contestar.

—¡_______!........mi _________..... ¡__________!—chilló desde el otro lado para su emoción mutar a preocupación hasta escuchar otra voz

—¿Señorita ___________?, su amiga se encuentra algo ebria para poder marcharse por su cuenta y el bar ya está por cerrar, ¿Cree poder venir a buscarla?

—S...i—confirmo la chica correr y alcanzar tan sólo a coger un par de chaquetas para ella y Harriet cuando puede soltar un suspiro de alivio al verla dormitando en uno de los sofás mientras los meseros ordenaban para cerrar

—Esmeralda—susurró con cariño mientras acaricia su cabello, escuchando un quejido similar a un gruñido en respuesta hasta que tras unos segundos abrió los ojos en grande al reconocer el apodo

—¡________!, tar...daste mucho—chilló al hacer un puchero antes de abrazarse a la chica quien no tardó en sentir su corazón desbocar ante el contacto y su mente embriagarse tan sólo de su exquisito aroma dulzón ahora mezclado con alcohol—Ven a beber conmigo—Caturreó

—Ni lo pienses, te llevaré a casa aunque sea a rastras—gruñó para la mayor al escucharla romper en carcajadas mientras trataba de arrastrarla hasta el auto donde se quedó dormida

________ se detuvo a admirarla por unos segundos, perdiéndose en el brillo que adoptó su rostro por la luz de la luna, para soltar un suspiro al tener que despertarla cuando se veía tan apacible.

Con cuidado acarició su abundante cabellera azabache para la dueña de esta no tardar en abrir los ojos somnolienta.

—Vamos arriba, te prepararé una sopa para que estés mejor antes de dormir—sonrió—mañana debes ir temprano al hospital así que recuerda tomar tus pastillas tras un buen desayuno

Dice para ayudarla a llegar hasta su habitación donde la llevó a que se acueste y partir a la cocina, aunque una mano no se lo permitió al aferrarse a la suya.

Y Harriet tomarla por absoluta sorpresa cuando la jalo contra suyo para unir sus labios.

Su corazón se desboca de su pecho mientras su mente es incapaz de asimilar el suceso que tan sólo vió en sueños, su perfume de rosas predominando en la calidez de sus labios tan suaves como el algodón de azúcar que parecían invitarla a morderlos.

—Me gustas—confesó la mayor fuerte y claro, decidida, tal como su personalidad la definía, aunque para _________ fue como una de sus alucinaciones jugandole una mala pasada, no quería ilusionarse

—Yo...

—Ya sé que te gusto, haz sido algo obvia, querida—rió antes de volver a retomar sus labios y ante _______ seguir sin responder acudir a pellizcar su brazo

—¡Ay!—chilló la menor al sobar la zona afectada mientras su mayor sólo reía

—Para que no creas que es una de tus alucinaciones—sonrió al guiñar su ojo para la contraria terminar de derretirse —Esto–susurró al tomar su mano llevandola a su corazón y la seriedad volver a su mirada—Es muy real

Fue tanto el regocijo en su alma que juró poder alcanzar el nirvana en este mismo momento de sentir los latidos de su amada al compás de los suyos.

—Te amo—confesó al por fin librarse del nudo en su garganta  y corazón, para no darse cuenta cuando sus mejillas ya estaban empapadas de lágrimas que Harriet no tardó en secar

—Ven aquí—susurró al palmear el costado de la cama a su lado—Es una oferta de tiempo limitado, en que el efecto de alcohol se vaya—sonrió por la velocidad de ________ en acostarse a su lado donde unas tímidas manos se acercaron a su cabello, para ella apoyar su cabeza en su pecho y la menor cubrirla con sus brazos, era muy cálido...

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__________ despertó con el frío para al abrir los ojos no haber rastro alguno de Harriet más que una conocida y lúgubre neblina que invadió la habitación.

Con su pecho echo un manojo, se levantó y siguió el camino a dónde está parecía dirigirla, tantas veces le ocurría que lo hizo por mero instinto, simple rutina en seguir una de sus visiones que solían aparecer en sueños.

Aunque esta vez un mal presentimiento se instaló en su interior y con el temor ahora predominando sus sentidos tembló una vez que se topó con el origen de la niebla.

Sus pies se humedecieron y pego un grito al ver como el agua que salía por debajo de la puerta estaba mezclada con sangre. Para al abrir su peor pesadilla mostrarse frente a sus ojos donde su voz no fue capaz de salir.

Harriet se encontraba ensangrentada en una bañera mientras sus muñecas cortadas reposaba en el borde de estas para sus esmeraldas estar apagadas mientras a su espalda un pentagrama volteado estaba dibujado con sangre.

Cayó de rodillas, incapaz de mantenerse en pie al su alma parecer abandonar su cuerpo al no ser capaz de soportar la agonía de su corazón.

No teniendo la oportunidad de asimilarlo cuando bruscamente el escenario cambió a una sala de hospital donde un hombre estaba en una camilla conectado a la máquina de respiración, donde aún con la conmoción a flor de piel se le acercó para este abrir los ojos y con una sonrisa macabra sentarse para tomar y con sus manos simular que corta sus muñecas para convertirse en las de Harriet quien aún seguía con vida.

—¡No! ¡No lo hagas!—gritó desesperada para despertar agitada, sus ojos llenos de lágrimas, el sudor bajando por su nuca mientras su respiración no tenía señales de normalizarse

—Te querré pero no para aguantar tus gritos con esta jaqueca—gruñó Harriet al entrar, hasta ver el estado de _________—¿Qué ocurre?—susurró preocupada al buscar tomar su mano cuando la menor se le adelantó en abrazarla con fuerza, pudiendo sentir su cuerpo temblar contra el suyo

—Ha...rriet—sollozó para la mayor acariciar su espalda y con ese sutil gesto invitarla a desahogarse, contándole todo lo que había visto como fue capaz de modular con el nudo aún presente en su garganta

—Tranquila, sólo fue un sueño—le aseguró con una sonrisa al secar el último rastro de sus lágrimas y besarla al terminar—jamás haría eso porque soy feliz con mi vida y una de esas razones eres tú, aunque seas una rarita que ve cosas invisibles—rió

—¡Oye!, gracias a eso comenzamos a hablar—chilló al hacerse la ofendida antes de inclinarse a alcanzar los labios de su amada, estaban cálidos, ella si estaba ahí, está bien sólo fue una pesadilla...

O al menos quería convencerse de ello...

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El miedo en __________ creció con los días que pasaron y las noches en las cuales su horrible pesadilla se repetía, temiendo que llege el momento de esta cumplirse, porque en su experiencia desde la primera vez que ocurrió al ver el choque que su padre tendría cuando ella tan sólo cinco años, aún se culpaba por no poder hacer nada por evitarlo.

No podía perder también a Harriet... es algo que no podría soportar.

Razón por la cual no dejó de seguirla y cuando no podía hacerlo al tener que estudiar y Harriet estar en el hospital, comenzó a llamarla, hasta que un día la practicante a doctora no lo soportó más.

—Tenemos que hablar—dijo para una vez más el pánico recorrer a la joven médium

—¿Qué ocurre?, ¿Te sientes mal?, ¿Se te ha acercado un hombre extraño?...—comenzó a indagar preocupada y sin permitirle a la mayor una palabra

—Es suficiente, ¡Estoy harta!—gruñó la azabache para la chica quedar muda ante la cólera que sus esmeraldas reflejaban, Harriet nunca le había gritado—Entiendo que estés ansiosa por tu supuesta visión, pero no puedes estar todo el día encima de mi, ni siquiera puedo hacer mi trabajo contigo  llamando cada diez minutos

—Pe...ro puede ser una realidad... si no lo evitas, porfavor déjame ayudarte

—No me ayudas, me estas asfixiando al controlar cada cosa que hago—suspiró antes de su mirada volver a _________ con aflicción —Una de las cosas que más amo de ti es que eres tan libre como yo, pero ahora no lo dejas ser a ninguna de las dos con tu paranoia

—Yo sólo...

—Tal vez no debí haberme declarado a ti—musitó para terminar de romper el corazón de la chica que amaba y no poder verla a los ojos mientras lo hacía que le dió la espalda—Está no he saldré con mis compañeros de práctica y espero no verte merodeando porque no contestaré tus llamadas, ya no más—dijo para el rostro de ________ palidecer al digerir mejor sus palabras, ese hombre seguramente estaría allí...

Esa noche __________ no durmió y fue incapaz de concentrarse en sus estudios de sus ya próximos exámenes. Algo le decía que esa fiesta es un punto importante para lo que se avecina.

No, no iba a permitir que tal tragedia sucediera...

Así se alistó para partir en medio de la madrugada cuando al aproximarse al lugar de la fiesta, pudo ver como uno de los amigos de Harriet subía a otro inconsciente al auto, y no le iba a tomar importancia por seguramente tratar de una borrachera hasta notar la sangre de su ropa en sus sentidos de alerta activarse y peor al reconocer su rostro con el de sus sueños.

—¡¿Qué crees que haces?!—Salió de su auto a tratar de socorrer al chico de su pesadilla sin pensar más que en obtener respuestas, para tan sólo alcanzar a tocar su cabeza y todo a su alrededor tornarse nebuloso para ver el odio en su estado más puro emanar de ese cuerpo postrado en una camilla que circulaba con diversas escenas de un seguimiento de asesinatos de los compañeros hasta llegar a Harriet

Quedó paralizada ante los escalofríos entumecer sus sentidos cuando el otro joven la toma bruscamente del brazo.

—No te entrometas si no quieres problemas—gruñó al tironearla ante la mirada de la chica estar perdida en Kennet—Maldita niña—brama el rubio hasta sus compañeros salir ante el escándalo donde una consternada Harriet los separó

—¡No la toques!—grita al empujarlo y este la iba a golpear cuando los demás lo impidieron

—Yo hablaré con ella—les aclaró al tomar su mano temblorosa y la joven moverse en piloto automático al aún no salir de su trance

Y en un silencio que agradeció por su propia conmoción llevó a la menor hasta su departamento donde la dejó para volver al suyo que estaba al final del pasillo.

Cuando un ligero tirón en su manga no se lo permitió, volteando a __________ quien tenía el rostro envuelto en lágrimas .

—Ese hom...bre es el que vi cuando estabas muer...—jadeó al ahogar un sollozo—Él es el responsable de todo lo que está por ocurrir, tiene mucho odio y querrá vengarse por...

—Basta—gruñó Harriet, interrumpiendola—No tengo cabeza para esto

Bramó y ________ poder notar como estaba en un estado similar al suyo, sus manos temblorosas como sus esmeraldas perdidas como hiperventilacion, quiso hacer algo para apelar a su calma, más Harriet no se lo permitió al dejarla con el alma pendiendo de un hilo.

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Los días siguientes Harriet la evitó y no le volvió a dirigir la palabra, donde al intentar ir al hospital pudo enterarse que Kennet había entrado en coma. Aunque no pudo verlo ante Steve sacarla del hospital cuando intentó hacerlo y antes de sus problemas con Harriet empeorar mejor no insistió.

Su ansiedad crecía con cada día que pasaba hasta el punto de ser un milagro el poder dormir más de dos horas las cuales la imágen de su amada bañada en su propia sangre la perseguían sin descanso.

El retumbar de su puerta la hizo sobresaltar y ante la esperanza de poder tratar de la azabache corrió a abrir, aunque no fue más que una ilusión al no ser más que una de sus compañeras en el hospital que pudo reconocer de la salida de esa fatídica fiesta.

—Hola, soy Catherine, una amiga de Harriet—saludó para la jóven limitarse a asentir—Yo em... quería hablar contigo

—¿Ella te lo pidió?—preguntó la menor esperanzada

—No tiene idea que estoy aquí —confesó para la chica suspirar, aunque de todas formas era lo mejor para no molestar a Harriet y tal vez con Catherine podría obtener respuestas

—Pasa, adelante—invitó _______ al dejarla ingresar mientras rápidamente ordenaba los libros, latas y restos de comida enlatada regadas por el suelo—Disculpa el desorden

—Descuida—calmó la castaña al sentarse en el lugar que la chica le había despejando, mientras observaba con detalle la decoración de su departamento

—¿Qué es lo que quieres preguntar?

—Bueno, hoy muchos rumores y tus habilidades cuando estaba en la facultad y sobretodo de Harriet quien siempre habla de ti por lo que hasta puedo decir que te  conozco—rió nerviosa mientras _________ se ruboriza ante su confesión, ¿Harriet solía hablar de ella?, sintió su pecho llenarse de regocijo—Y quería pedirte ayuda con algo

—¿Sobre Kennet?—inquirió la menor para tan sólo su mencionar y Catherine romper en llanto mientras comienza a temblar sin cesar

—Es ni culpa, le dí una droga que aún está en experimentación para tratar de ayudarlo, pero...—solloza—no sé cómo de alguna forma ha provocado que mis amigos se estén muriendo, todos los que ese día... no sé qué más hacer

—Debo ir con él—interrumpió _______ al extaltarse, mientras podía ver estando despierta todo lo que en sus sueños predijo, no podía seguir, Harriet , no permitirá que la alcance

—¿Sabes que hacer?

—Lo puedo intentar, debo hacerlo—murmuró la joven antes de buscar todo lo necesario y al anochecer partir con Catherine quien  le ayudaría a entrar con Kennet y que nadie los interrumpa

La joven médica no paraba de temblar en su andar por lo que tropezó y casi cae por las escaleras si no fuera por la rápida reacción de __________ en atraparla de la muñeca.

—Tranquila, haremos que esto funcione —le dijo con una sonrisa que ella misma necesitaba para convencerse y le tomó la mano para ayudarla a bajar

Acción que fue malinterpretada por unas esmeraldas delineadas por unas profundas sombras negras y quien no tardó en dejar a su amigo plantado para  seguir a ___________ sin saber que sus celos serían los que ayudarían a retrasar su trágico final ante.

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_________ contuvo el aire por unos segundos antes de soltarlo de un sólo golpe, necesitaba reunir las fuerzas para enfrentar a quien se había convertido en un demonio deseoso de venganza.

Catherine le dio una señal y ella entró a la habitación que la morena mantendrá resguardada hasta que termine, aunque con el historial que pudo ver y escuchar mejor trancó esta desde dentro.

Ahora sólo eran ella y Kennet.

Arreglo todo y se preparó mientras consagra sus hierbas a utilizar como la sal, recordando una lejana vez que prescenció a su abuela practicar un exorcismo al siempre estarla siguiendo, aunque eso fue hace mucho y poco lo que pudo ante su madre llevarla de una oreja hasta su habitación al darse cuenta.

El humo del sahumerio preparado por sus propias manos ya se mezclaba en el aire y no alcanzó a recitar ni el comienzo del ritual cuando los latidos y presión del hombre se descontrolaron.

Maldición, no supo si correr a buscar a los doctores que lo salvarán o dejarlo morir en detener todo este caos.

Aunque la sorpresa no le permitió hacerlo al verlo retorcerse en la camilla, su espalda arqueada como su cuello que parecía desviarse en cualquier segundo para ahora las luces comenzar a parpadear y el suelo temblar.

Ahogando un grito cuando la puerta intentaba ser abierta a la fuerza.

—________ abre la puerta, es hora de salir—escuchó la dulce voz de Catherine una vez que todo a su alrededor se detuvo como si nada hubiera pasado, más aún el pánico le impidió moverse y fue cuando los golpes en la puerta se tornaron patadas—¡Abre maldita entrometida! ¡Te mataré!—gruñó esta vez y la nombrada trago en seco antes de comenzar a recitar en su lengua de sus antepasados que su abuela le había enseñado.

Kennet se volvió a alterar hasta su cuerpo distorsionar a niveles inimaginables donde sus pies se voltearon y sus hombros se dislocaron.

Para Catherine detenerse lo que hubiera sido una buena señal si no fuera por la voz de Harriet que no tardó en reconocer.

—¿Dónde está ________?, ¡Te dije que ni la involucraras en esto—gruñó desde el otro lado para la castaña responder con una risa siniestra

—Creo que será más divertido matar a tu querida antes que a ti—resonó para un silencio sepulcral seguirle

—¡Harriet!—gritó desesperada al abrir y encontrar a Catherine forcejeando para inyectar a la azabache con un desconocido líquido para al intentar socorrerla una patada enterrarse en su estómago haciéndola aterrizar a los metros por la fuerza ejercida, era algo sobrehumano, no podía hacer nada.

Al menos no físicamente.

Así fue como tomó la desición de salvar a su amada a cualquier costo, enfrentando al epicentro del caos al cual tomó del cuello de su bata.

—Tómame a mí, yo pagaré por los pecados de todos, pero déjala ya—exigió—perdónalos por el horror que te hicieron, te daré mi sangre y te liberare  de esa atadura de odio

Dijo al buscar entre los utensilios hasta encontrar una tijera—¿Esto es lo que quieres?—jadeó al trazar una línea con el filo para en un dolor punzante la sangre comenzar a caer de su muñeca hasta el rostro del hombre

—¡________!—escuchó el llamar de su querida Esmeralda antes de todo tornarse oscuro

En ese momento la joven médium se desvaneció como los signos vitales del hombre que entró en un infarto hasta fallecer para la chica levantarse aún sangrante.

—¿___________?—Susurró una conmocionada Harriet—Lo hiciste cariño, déjame atender tu herida—dijo al tomar su mano e intentar detener la hemorragia  cuando la punta de la tijera rozó su cuello

—Todos deben morir—musita con una voz tan fría que pareció congelar su alma, mientras su mirada había perdido todo rastro de brillo mientras sus ojos no parecían ser los suyos y los cuales reflejaban una furia infinita

Aún siendo así Harriet no dejó llevar por el miedo y con total serenidad como amor tomó el rostro de su amada

—__________ soy yo, cariño, sé que estás ahí—susurró al acariciar sus mejillas, apelando volver a encontrar esa tan conocida esencia de amor tras esa neblina de oscuridad, cuando sus manos fueron empapadas por sus lágrimas—¿__________?

La nombrada gruñó al empujarla lejos suyo mientras apretaba su cabeza con ambas mamos al ver el cuerpo inerte de Kennet en la camilla sin signos vitales, aunque en su mente seguía estando y una fuerza mayor presionaba en marearla, perdería el control otra vez.

Viendo por última vez a Harriet siendo socorrida en brazos de Catherine mientras su frente sangraba por la caída, palideció y su corazón se encogió  hasta afixiarla, era su culpa, la había lastimado...

—Perdón...—susurró en un hilo de voz—Terminaré con esto

Dijo al dirigirse hacia la ventana escuchando los gritos de Harriet quien era detenida por la castaña.

Se en el marco de esta y con sus piernas colgando el vértigo la golpeó al observar los distantes metros del suelo donde los autos se veían del tamaño de una hormiga.

¿Tan insignificantes somos en este mundo?...

Al menos si partía lo haría salvando a quien ama como no pudo hacer hace años.

Gimió al su cabeza doler y su cuerpo temblar mientras el rostro de Kennet dominaba sus pensamientos, escuchándolo.

"¡Debes matar a todos!, Sólo así te dejaré en paz, ellos no valen tu sacrificio"...

Dejó ir un suspiro el cerrar los ojos al impulsarse para saltar cuando unas manos aferradas a su cintura evitaron el poder conseguirlo.

—No te dejaré hacerlo—escuchó el jadeó de la azabache antes de su nuca mojarse por sus lágrimas y estremeció al tratar de zafarse, pero la mayor sólo aumentó el apretón corriendo el riesgo de ambas caer

—Sueltame

—¿Recuerdas cuando nos conocimos y te apareciste en mi escondite de la biblioteca de la facultad?, tenías la misma mirada que yo al ingresar siendo señalada por mi apariencia y gustos, aunque eras mucho más audaz al jurar que era tu alma predestinada—susurró al ahogar un sollozo—Desde ese día unidas por nuestra rareza prometimos enfrentarnos a todo, aunque esto da más adrenalina que golpear a Jessica y sus secuaces—rió—Pero estoy segura que lo solucionaremos, juntas

Dijo para __________ poder revivir cada momento y con cada bello recuerdo que su querida forjó en su alma, el poder de Kennet en su consciencia terminar de desvanecer al igual que su cuerpo.

Para al ya no sentirlo más bajarse de la ventana y abrazar a Harriet con todas sus fuerzas mientras ella palmea suavemente su espalda hasta este cesar cuando los latidos de ambas parecieron sincronizar.

—Gracias por salvarme, pero te mataré yo misma si vuelves a ponerte en riesgo—amenaza antes de encontrar su mirada y poder sumergirse en el brillo abrumador que sus ojos adoptaban al encontrar los suyos—Te Amo

Susurró sin dejarla responder al tomar posesión de sus labios en los que ambas ahogaron todo el miedo y angustia que tuvieron que padecer, una dulce cura frente a todo pronóstico....

Catherine fue quien asumió la culpa en los interrogatorios, queriendo espiar sus pecados en memoria de Kennet, y obsequiarles la oportunidad de salir de escapar, donde ambas pidieron un traslado y retrasando sus estudios para el próximo semestre, por lo que aprovecharán de sanar juntas el trauma, aunque con la ayuda de la mamá de ____________ quien ya las esperaba con ansias.

Aunque estas no se comparaban con las de la azabache al estar a horas de conocer a su suegra.

—¿Y si no le agrado?

—Le hablé de ti antes de conocerte, prácticamente ya tiene un juicio sobre ti—confiesa para el rostro de su novia palidecer y ella reír

—¡No te burles de mi desgracia!—chilló para _________ borrar todo rastro de preocupación con un beso

—Ya te adora por hacerme feliz al ser mi alma predestinada, sólo eso importa—sonrió al detallar el rostro de su amada—Aunque sabe muchas maldiciones si me haces sufrir, sólo advierto—dijo antes de romper en carcajadas mientras Harriet le hacía cosquillas en venganza

Un momento tan feliz y puro que no parecían recién haberse enfrentado a la muerte, donde ambas podían atestiguar que el amor todo lo puede...