—¿Te fue bien en el examen? —preguntó Francis al rubio apenas salieron de clases.

—Ngh, eso creo. 

—La última pregunta estuvo jodidamente difícil. Harrison se pasa.  

—Si ¿Que tiene que ver la vida de los famosos con historia?

Justo en eso vieron a craig acercándose a ellos, y por su expresión no parecía de muy buen humor. 

—Ah, hola craig, ¿que tal tu clase de música?

—Tenemos que hablar —dijo en un tono serio.

—Emm, yo mejor los dejo solos. Adiós tweek—comento Francis alejándose rápidamente de la pareja. 

—Ngh, ¿que pasa? 

—Crei que dejarías el tema de los celos a un lado, ¿que carajos fue lo que le dijiste a Thomas? 

—¿Que qué le dije? 

—Si tweek. Y ni se te ocurra finjir que no sabes nada, porque el mismo dijo que quería evitarse problemas contigo. 

Tweek sintió su molestia y maldijo mentalmente al bocón de Thomas, pero era claro que craig sospechoria de todas formas, por lo que debía enfrentarlo.

—Y entonces, ¿Que tienes que decir?

—Yo, ugh, bueno, le pedí que se mantuviera alejado de ti ya que no me genera confianza —dijo el rubio viéndolo a los ojos. 

Craig no podía creer lo que estaba escuchando, ¿su propia pareja desconfiaba tanto de su relación? ¿En qué momento llegaron a ese punto? 

Tweek siempre había sido algo celoso e inseguro, desde que empezaron a salir, pero el siempre se encargaba de hacerlo sentir amado y seguro en su relación. Le molestaba que ahora quisiera alejar a sus amigos, eso no lo iba a permitir. 

—Disculpa ¿que? me estás diciendo que porque no te agrada Thomas, ¿yo tengo que pagar las consecuencias? 

—Pues eres mi novio. Si no puedes respetar cómo me siento tenía que hacer algo al respecto ¿no crees? 

—Por Dios tweek, no puedes simplemente decirle a las personas que se alejen de mi porque te dan celos ¡no es sano! 

—Ugh, lo único que quiero es cuidar nuestra relación, no te enojes conmigo. 

Craig suspiró pesadamente y luego lo miró con un poco de decepción. 

—No estoy para nada de acuerdo con lo que hiciste tweek. Te estás creando muchos escenarios ridículos en la cabeza y me empiezas a incomodar delante de mis amigos. 

—¿Crees que me invente lo de Thomas? 

—tsk, ¿sabes que? Sea o no verdad lo de Thomas, no es razón para que le andes diciendo esas cosas a mis espaldas. Se supone que nos tenemos confianza tweek, y si  de ahora en adelante vas a andar amenazando a cada chico que me caiga bien no quiero seguir con esto.

Tweek se quedó callado al oír eso. 

—Antes no le daba importancia pero veo que te estás pasando de la raya. Siempre quieres saber con quién estoy, dónde estoy, le lanzas miradas asesinas a cada persona que me saluda —decía craig algo cansado de la situación —. No estás bien tweek. 

—¿Por qué me dices todo esto? ¿Tanto te importa ser amigo de ese chico? —respondió con sospecha. 

El otro soltó un quejido frustrado. Incluso cuando le decía sus verdades no podían dejar de pensar en Thomas. 

—Pero, ¿es que aún no lo entiendes? Thomas no es el problema aquí. Lo eres tú —dijo tan serio que tweek sintió cómo si le arrojara un balde de agua fría en la cara. 

—Ngh, no hablas en serio ¿o si?

—... ¿Tú qué crees? 

Tweek se exalto. 

—¡Oh, vamos! ¡Cómo es posible que te importe más ese pendejo que yo!  

Reclamo llamando la atención de los que iban pasando. 

—Tweek

—¡Te juro que no estoy inventando nada, ese chico oculta algo, lo sé! —insistió el paranoico rubio, haciendo llegar al otro a su límite.

—¡Ya basta, carajo! 

Craig miró a su alrededor y notó a unos cuantos demasiado atentos a su discusión. Resopló con fastidio, eran unos entrometidos. Sin pensarlo tomó al rubio del brazo y lo llevó hasta la salida para alejarse de todos.

 Tweek no opuso resistencia pero ahora estaba demasiado ansioso, algo en su pecho quería explotar y su molestia crecía más y más. 

Ya estando lo suficientemente solos tweek se safó de su agarre y lo miró enojado. Le estaba costando mucho controlarse. 

—Tweek, enserio, no podemos seguir así. Debemos… —dudo.

—Que ¿Que quieres decirme craig?

—Tu actitud —mantuvo su mirada firme—. No te está llevando a nada bueno. Tienes que cambiar, o al menos bajarle dos rayitas a tu intensidad. Esos celos ya no son normales, necesitas ayuda. 

—¿O sino que? —lo reto con la mirada —. ¿Vas a terminar conmigo? 

Hubo un corto silencio. 

—Me llamaste intenso, y ahora piensas que estoy loco. Si, jaja, por supuesto ¡Ahora cierra con broche de oro mandándome a la mierda! —expreso con enojó. A esté punto ya era ciego a sus emociones —. Talvez así te deje el camino libre con Thomas. 

—Oye, no es eso lo que

—¡Claro que si! Ngh, mejor ya lárgate con él si tanto te importa. 

—¡Pero que dices! Lo único que te estoy pidiendo es que dejes de ser tan jodidamente celoso. 

—¡Pues no puedo! ¡No es tan fácil! —dijo frustrado.

—Tweek 

—Escucha bien esto Craig —respiro hondo—. Yo no le suplique a mis padres el poder seguir viéndote después de lo de ayer ¡por nada! Así que si no vas a valorar eso más te vale que lo hagas ahora.

—Aprecio que hayas enfrentado a tus padres tweek, pero no por eso voy a dejar que quieras manipular todas mis amistades. No tiene nada que ver una cosa con la otra y lo sabes —dijo.

—Ugh. 

—Yo, siento que está platica no tendra fin. Así que, lo mejor será terminar de una vez.

—... 

—Nuestra relación se ha vuelto tóxica, y no creó que puedas mejorar quedándote a mi lado. 

—Ngh, ¿que?

—Demonos un tiempo —dijo finalmente. 

Y tweek sintió un fuerte puñetazo en su corazón. 

—Me, ¿me estás dejando? 

—¿No es lo que querías? Bueno, pues losiento, pero piensa que es lo mejor para ambos. 

—Ugh ¡no! ¡Es lo mejor para ti! ¡Tu no puedes terminarme así cómo así! ¡Llevamos mucho tiempo juntos! —decia dolido, pero más molesto. 

—¡Porsupuesto que es lo mejor para ti! ¡Sólo mírate! Necesitas ayuda profesional. 

—N-No estoy loco —apreto los dientes de la rabia —. ¡Eres un maldito idiota! —lo empujó en un impulso de enojo y Craig se alertó. 

—Tweek, tranquilo, respira hondo. 

—¡No me pidas que me calme carajo! Dices amarme pero ahora me sales con esta mierda, ugh, parece que sólo lo dijiste porque deje que te acostaras conmigo. 

—Eso no es cierto. 

—¡Si lo es! —grito para después plantarle una fuerte cachetada en el rostro y mirarlo con odio. Esa acción le hizo llegar a su límite, y al darse cuenta de lo que hizo tuvo miedo hasta de si mismo, pero era extraño, era cómo si al mismo tiempo no le importara actuar así.

Craig sostuvo su mejilla adolorida y vio la mirada aterradora del rubio, nunca lo había visto así, y por primera vez en su vida su cuerpo le pedía huir de ese lugar por su propio bien. 

—Tweek —pronuncio esté. 

—Te vas a arrepentir. 

Y al verlo dar un par de pasos más, craig no dudo en irse corriendo de ahi, sin siquiera mirar atrás. Sólo corrió con todas sus fuerzas por muy cobarde que pareciera, el caso era que tweek había perdido el control de si mismo. Y al estar ya bastante alejado se volteó a ver. No había ningúna señal de esté. 

Mierda. 

Todo fue tan repentino.  Y ahora temia por las consecuencias de su decisión.

Continúara…