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Kl500 (parte 1)

Este oneshot está basado en el famoso vídeo juego (detroit become human)

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Año 2038

Al abrir lentamente los ojos, noto a una pequeña niña parada frente a mi, esta me veía con una expresión curiosa y se veía bastante interesada. No digo nada, luego volteo su cabeza a otra dirección cuando escucho a una mujer llamarla por su nombre, al parecer se trataba de su madre, quien se le acercó rápido y tomó su mano, diciendole que ya era hora de irse, después se alejaron de mi lado y salieron de la tienda.

Hay varias personas más a mi alrededor, y todas hacían algo en común, observar tranquilamente a cada modelo de androide, humanos no reales creados para servir a los demás y complacer sus exigencias, todos se hallaban parados y separados sobre un pequeño banco, siendo exhibidos y posiblemente esperando ser comprados en cualquier momento.

Soy igual a ellos... Puedo escuchar a uno de los vendedores pasearse con un grupo cliente por la tienda, aclarando todas sus dudas y sin parar de hablar, yo sólo me mantengo estático y callado.

—Escucha, ya te dije que lo hago por simple necesidad, no porque quiera — dijo un chico alto y de unos veintitantos años, su cabello era color azabache y usaba una chaqueta azul oscuro, también tenía un brazo lastimado, podía notarse por el vendaje que cargaba.

—Si, cómo digas, igual no puedes negar que te hace falta uno — le respondió otro chico de edad similar pero con cabello castaño, no parecía darle mucha importancia al orgullo de su amigo.

Ambos miraban a los androides mientras caminaban.

—Mis padres insistieron... Y si, lo admito, últimamente mi casa en un desastre y no tengo casi tiempo para limpiar, fue por eso que tomé la decisión.

—Muy bien, ¿y cual te vas a llevar? — pregunto este al ver tantos modelos de androide, aunque por modelo podría decirse que su apariencia era diferente, habían Androides con apariencias de mujer, de hombres, pero al final era casi lo mismo.

—No lo se... Pero creo que da igual ¿o no? — se rasco la nuca y se acerco a uno de los vendedores — disculpe, quiero comprar un Androide.

El hombre le miró con una amable sonrisa.

—Excelente decisión, ¿que modelo desea llevar?

—Ahh...

El azabache volteo aburrido, a ver una vez más a su alrededor y sin poder tomar una decisión.

—¿Que tal una hermosa chica Android? así ya no te sentirás tan sólito en casa... ¿Ah? ¿Ah? — el castaño subió sus cejas con coquetería.

—Jamás usaría a un Android para esas cosas, clyde — contestó aburrido, frunciendo levemente el ceño y mirando a otro empleado acercarse a un Android con cabello rubio. Este al parecer tenía un tipo de herramienta en su mano y tenía intenciones de hacerle un tipo de reparación, craig observo más detalladamente al Android y pudo jurar que se estremeció algo nervioso cuando el hombre le puso las manos encima, a pesar de que su rostro ya no mostraba ningún tipo de expresión sintió curiosidad — ¿que le van a hacer? — pregunto de repente y el vendedor observo a su compañero.

—Ah, el androide estaba presentando una falla, van a arreglarlo — le explico.

—¿Una falla?

—Sigo pensando que la chica linda de la esquina es buena opción... — comentó clyde mientras su amigo veía fijamente al Android siendo reparado — ¿craig?...

Craig no respondió a su amigo y camino hacia el sujeto. El empleado se veía algo irritado y después alejo sus manos del Android, miró en silencio lo que salía ser el "corazón " de estas maravillosas máquinas y lo volvió a introducir en su pecho, de inmediato el rubio abrió los ojos.

—Tsk, maldita chatarra... Debió llegar defectuoso — dijo el hombre y craig carraspeo un poco con la garganta.

—¿Sucede algo con el Android?

—Oh... Si, está dañado, pero de inmediato me lo llevaré de aquí.

—¿De qué habla? Yo lo veo muy bien... — dijo craig mirándolo.

El Android le miró a los ojos por un momento, con sus ojos tan azules cómo el cielo y sin mostrar ningún tipo de expresión.

—No lo está, algo en su programación hace que tenga un tipo de movimiento extraño en sus ojos y es molesto.

—¿Molesto?...

Fue ahí que craig pudo notar de lo que hablaba este, el Android se veía perfectamente bien, pero de un momento a otro uno de sus ojos se cerraba y sus parpadeos no eran parejos, aún así no lo hacía tan seguido, de hecho parecía un tipo de tic.

—Ya veo, sin embargo no creo que sea molesto...

—No podemos vender Androides con fallas en su sistema, eso haría quedar mal a la tienda. Me lo llevaré... — el hombre sujeto de manera algo brusca el brazo del Android y lo bajó del pequeño banco, pero craig lo detuvo de inmediato.

—Espere, yo lo quiero.

—¿Que?  — parpadeo confuso.

El rubio también le miraba fijamente.

—Que yo lo quiero ¿no escucho? — repitió tranquilo y el hombre soltó el brazo del Android — Vine a comprar un Android, y quiero llevarme este, ya lo decidí.

—Pero tiene fallas, y no se si se pondrá peor más adelante, no podemos...

—¿Que no es ley de la tienda complacer a sus clientes en lo que sea? — hablo en voz alta y este se apeno un poco.

—B-Bueno si, pero aún así...

—Craig, viejo, ¿seguro que este el que quieres? — intervino clyde quién había presenciado la escena, el otro vendedor tampoco entendía el porqué de la decisión del muchacho.

—Si señor, ¿está seguro?

—Que si carajo, ya vendanmelo de una vez — dijo ya cansado de estos.

—¡E-Enseguida! — respondió el empleado corriendo a hacer todo el procedimiento para su venta.

Mientras el otro vendedor bufó sin darle más importancia al tema y se alejo.

Clyde veía extraño a su amigo quien veía en silencio al Android, a simple vista no parecía presentar ninguna falla, y con eso le bastaba, pues tampoco era tan grave su defecto, de hecho se le hacía algo divertida y le agradaba.

—¿Es en serio craig? De todos, ¿este?

—Oh vamos, no tiene nada de malo, veamos... Emm... ¿Cómo te llamas? — le preguntó más de cerca al androide.

—... No poseo ningún nombre, pero mi modelo es kl500 — contestó el rubio inexpresivo.

—Ahh... Si, lo note... —dijo craig después de leerlo en la camisa que cargaba el rubio.

—Debes elegirle un nombre, cómo a un perro — se rio el castaño.

—Callate clyde...

—¿Por qué? No es cómo si fuera a herir sus sentimientos o algo así, es un Android — se cruzó de brazos y rodó sus ojos.

—Cómo sea, debo elegir un nombre. A ver... — lo miro concentrado por varios minutos.

En eso regreso el vendedor.

—Ya está todo listo señor, sólo debe confirmar el pago.

—Está bien...

—¿Ya le tiene un nombre?

—... Si, su nombre es... Tweek... — dijo craig y el vendedor y clyde se dieron una rápida mirada, ¿que clase de nombre era ese?

—Emm... ¡Ok! — sonrio falsamente el empleado y luego miró al Android — kl500 registra tu nuevo nombre... Tweek.

Un pequeño anillo que se encontraba en su sien comenzó a brillar y el androide cerró los ojos, una vez ya procesada esa información los abrió y miró a su ahora dueño.

—Mi nombre es tweek... — dijo el rubio.

Craig sonrio levemente.

Luego de eso, craig fue a confirmar su pago y salió de la tienda junto con tweek y clyde, afuera se encontraba su auto, y por su brazo lesionado era clyde quien tuvo que conducir hasta su casa. Ambos amigos iban adelante mientras que tweek en los asientos de atrás, mirando por la ventana y sin decir una sola palabra.

—No se porque preferiste a un Androide defectuoso a uno precioso.

Craig no respondió a su pregunta de inmediato, ¿Androide precioso? ¿Que demonios importaba la apariencia? Lo único que quería era ayuda.

—Ahora ya sé por qué la androide de tu familia luce así... ¿Tu la elegiste no es así? — supuso el azabache.

—¡Por supuesto! Y no me arrepiento en lo absoluto.

—Estas mal clyde... — dijo en voz baja y clyde se quejo, pegando más su espalda en el asiento se volteo un poco y miró al rubio detrás — ya casi llegamos tweek.

Por primera vez el Android mostró una pequeña sonrisa y después respondió.

—Está bien, craig.

Al llegar a casa, Clyde estaciono el auto en la cochera y después salieron del vehículo.

—Bien, tengo cosas que hacer, suerte con tu nuevo Androide — se despidió el castaño mirando a su amigo

—Si, gracias por llevarme.

—Descuida, y de todas formas... no creo que vayas a necesitar mi ayuda de ahora en adelante — dijo este, observando de reojo al Androide.

—...

Craig levantó su mano sana y se despidió de su amigo, quien salió de la cochera, seguido presionó un botón que se encontraba en la pared y se cerró el portón de la cochera.

—Ok... Vamos a entrar.

—De acuerdo, craig.

Craig se acercó a la puerta, pero el androide fue mucho más rápido y la abrió antes de que este pudiera, mirándole fijamente y concediéndole el paso.

—Ah...Gracias tweek, aunque no era necesario.

El rubio no respondió y simplemente espero a que craig entrará, este suspiro y entró, tweek cerró la puerta apenas lo hizo y camino por un pequeño pasillo, habían varios cuadros, y también algo de telarañas, el lugar estaba algo descuidado en cuanto limpieza.

—Cómo podrás observar mi casa es un desastre, y esto se debe a que he estado sumamente ocupado, encima con lo del accidente... — se volteo a verlo y suspiro — sólo me complico todo. El doctor dijo que mi brazo tardaría varias semanas en recuperarse...

Tweek ladeo un poco su cabeza, miró su brazo lastimado por unos segundos, como analizándolo, después habló.

—¿Podrías indicarme donde se encuentran los vendajes, craig?  Debo cambiarlo rápidamente.

—¿Uh? ¿Mi vendaje?

—Si craig.

—Bueno... Están arriba en mi habitación, dentro de mi gabinete — le informo y el rubio comenzó a caminar —  espera, pero no es necesario cambiarlo ahora, lo hice está mañana.

—Sus heridas no pueden permanecer bajo el mismo vendaje por más de ocho horas, debo cambiarlo rápidamente y limpiarlas, para así evitar una infección... — le respondió y craig se sorprendió un poco.

—... ¿Tu viste debajo de mis vendajes? En ningún momento te comente que tipo de lesión tenía.

—... Así es craig, por eso se lo que digo, Ngh — tuvo un ligero tic en su ojo derecho, después su expresión volvió a ser inexpresiva.

Craig no tuvo otra opción que aceptar.

—Está bien... Vamos.

Arriba en la habitación, craig se sentó en el borde de la cama y tweek se le acercó, quitándole con mucho cuidado su vendaje y limpiando suavemente sus heridas con un algodón, mientras hacía esto craig hacia una que otra mueca de dolor por el ardor del liquido, sin embargo debía admitir que tweek era mucho más cuidadoso que su madre.

—¿Cómo fue que te lesionaste el brazo, craig? — pregunto el rubio mientras preparaba los nuevos vendajes.

—... Intentaba ayudar al gato de mi hermana, subió al árbol del jardín trasero y no podía bajar sólo — vaciló con una sonrisa amarga — accidentalmente pise mal una rama y aterrice con mi brazo en un arbusto de espinas. Varias se enterraron profundamente en mi piel... — contó el apenado azabache.

—Ya veo, pero para la próxima, dejale ese trabajo a los bomberos — dijo tweek colocándole su nuevo vendaje.

—Me gusta ayudar a los animales cuando puedo... En general me gusta hacer las cosas por mi mismo, nunca antes había necesitado de un Androide — le admitió, mirando de reojo su inexpresiva cara.

Tweek terminó de enrollar el vendaje y por último le ayudó a ponerse el sujetador de brazo, después tomó distancia.

—Gracias tweek.

—De nada, craig.

El azabache soltó un largo bostezo y subió sus piernas a la cama, después de quitarse los zapatos.

—De repente me empecé a sentir muy cansado... Creo que dormire un poco.

—Te iba a recomendar lo mismo, craig, cuando despiertes te sentirás mejor — tweek cerró las ventanas de la habitación ya que el viento frío soplaba fuerte — Mientras yo bajare a limpiar todo, descansa... — le dijo esto último y camino hasta la puerta, después salió de la habitación.

—... Si que son serviciales — susurro y respiro profundo — ahora entiendo porque acuden tanto a los androides... Son una gran ayuda.

                               ******************

Craig abrió sus ojos con pereza y se incorporo de la cama, este rasco su ojo aún algo somnoliento y en eso escucho la puerta abrirse, tweek se adentro a la habitación y lo miró ponerse las pantuflas.

—¿Dormiste bien, craig?

—Ah... Si, si... ¿Que hora es?

—Las siete y diez.

—Oh vaya, si que dormí mucho. ¿Que estuviste haciendo tweek?

—Limpie todo el desorden que había abajo, también prepare la cena.

—¿Cocinaste? — se levantó de la cama y se le acercó.

—Si, ¿tienes hambre?

—Eso es... Genial, si, gracias tweek.

El androide apenas sonrio y después salió de la habitación, craig se le quedó mirando en silencio y después lo siguió.

—¿Que Cocinaste? "wow, todo está tan limpio ahora" — observo el azabache mientras caminaba hacia la cocina.

Tweek sólo se quedó parado a un lado de la mesa y veía la bandeja sobre esta, craig tomó asiento. Olía muy bien, huevos gritos, pan, tosino, y hasta una taza de chocolate caliente había a un lado, craig estaba maravillado por lo que podía llegar a hacer un Androide, antes creía que servían simplemente para llevarte las bolsas de las compras, pero estaba tan equivocado.

—Esto se ve delicioso... De nuevo, gracias tweek.

—... Que lo disfrutes.

Craig comenzó a comer y miró de reojo al Androide quien ya se alejaba.

—Hey tweek, espera.

—... ¿Si craig?

—¿A donde vas?

—Ahora limpiare arriba, craig — le informo.

—No es necesario que lo hagas ahora, ya has hecho suficiente por hoy. Tampoco quiero explorarte ¿sabes?

—Los androides no se cansan, craig.

El azabache suspiro, eso ya lo sabia, pero aún así, necesitaba algo de compañía por ridículo que sonase.

—Aún así, ven, siéntate a mí lado y hazme compañía...

—...

Sólo existo para servir y obedecer... Esto es diferente...

Su anillo azul brillo e hizo un leve sonidito, después se acercó a la mesa y tomó asiento, por un momento craig casi le ofrece un poco de su comida pero recordó que este no tenía necesidad de ingerir nada, lo sabía perfectamente, sin embargo la apariencia del rubio era tan humana que lo olvidaba.

—Mm... Es cierto, no comes...

—... Ngh — el rubio cerro ambos ojos de golpe, cómo si un tipo corriente dentro de él lo hubiera apoderado, fue corto, como de un segundo, aún así craig lo noto.

—... ¿Estás bien?

—... Si... Craig — le respondió, pero sin verlo a la cara, eso le pareció un tanto extraño a craig, en eso noto lo que veía tweek, sobre la mesa había una revista Tableta inteligente, y mientras comía dejó cierta página en donde había un informe, sobre algo ocurrido días antes.

—... Es lamentable que algunos humanos hagan eso con sus Androides ¿no crees? — le comentó.

—...

—... Ustedes fueron creados para ayudarnos, y vivir pacíficamente con los humanos, no para ser maltratados ni mucho menos ser nuestros juguetes.

Tweek se mantuvo en silencio por un largo rato mientras veía la página, eso llamó la atención de craig.

Androide es destrozado a manos de su dueño y arrojado a la basura, ¿acaso ya no son tan útiles? Decía el informe.

—Este informe es una tontería, mejor hagamos otra cosa, ya se, veamos televisión ¿te parece? — tomó la revista y la dejó a un lado. Tweek finalmente lo miró.

—Ok craig — le respondió.

Después de comer, craig se dirigió a la sala y se sentó en el sofá, de inmediato invitó a tweek a sentarse a su lado y este sólo lo obedeció.

—¿A los androides les gusta ver algún canal en específico? — pregunto craig con el control remoto en su mano.

—... Cualquier canal está bien.

—Mm... Veamos el canal de animales — dijo tranquilo y dejandolo en un documental de perritos — son Adorables.

—Si, lo son.

—...

Hubo un cómodo silencio por varios minutos y sólo se podían escuchar los ladridos de los cachorritos, así hasta que alguien empezó a golpear fuertemente la puerta de la casa, llamando así la atención del azabache, quien rápidamente se levantó del sofá y fue a abrir. Tweek le miró en silencio y luego Se levantó.

Craig tenía el ceño fruncido y se sorprendió al ver quien era.

—¿Tu?

—Tiempo sin verte amigo — dijo este mirando de vez en cuando hacia atrás y entrando rápido a la casa. Craig lo miró con una ceja levantada.

—No dije que podías pasar.

—Jaja, tan simpático cómo siempre, se ve que nunca cambias craig, por cierto, ¿que coño te pasó en el brazo?

—Tu tampoco has cambiado por lo que se ve, en cuanto a mi brazo, tuve un pequeño accidente, nada grave, pero dime de una vez ¿que haces aquí?

—... Necesito un lugar donde pasar la noche.

—Aja... No jodas, sólo me buscas cuando necesitas un favor, pero ya estoy cansado de ayudarte con tus malditos problemas.

—Aún no me descubren.

—Es todo, largo de aquí.

—¡Oh vamos! No seas tan hijo de puta craig, eres el único en que puedo confiar en estos momentos, por favor — le suplico este y craig volteo sus ojos.

—Escucha cartman, ya te dije que no puedo, bueno de hecho si puedo pero no quiero, ¡ya sabes por que! — reclamo molesto.

—¡Aghh! Ya te dije que sólo será esta noche, por favor, te lo pagaré.

—No quiero tu sucio dinero, sólo que te vayas.

—Por favor... Si me ayudas sólo por hoy, yo haré lo que sea por... — este detuvo sus palabras al ver a un Androide rubio mirarlos fijamente.

Tweek no tenía ninguna expresión, pero en el fondo sentía miedo e inquietud, aunque no lo demostrará.

—No... No puede ser, jaja ¡no es cierto! — cambio el tema de ma conversación al verlo, craig se extraño por su repentino cambio de comportamiento y lo miró.

—¿Que? ¿Que sucede gordo? — quiso saber craig mientras el hombre se acercaba más al Androide, mirándolo bastante cerca y riéndose con burla.

—¿kl500? Si lo recuerdo muy bien, pensé que estabas en la basura — le dijo cruzandose de brazos.

—¿De qué mierda estás hablando? — craig también se acercó y miró a tweek, quien se mantenía quieto y sin decir nada.

Cartman sujeto el hombro del rubio, haciendole tambalearse un poco y volvió a reír.

—¿De dónde lo sacaste? ¿De la basura? , ya dime la verdad craig.

—No se de que estás hablando... Su nombre es tweek, y me está ayudando desde hoy.

—¿Tweek? ¿Que carajo craig? — lo miró incrédulo.

—¿Porque actúas así con el?

Este le acariciaba los cabellos rubios al Androide y después se separó, lo miró nuevamente a los ojos y sonrio perversamente.

—Me recuerdas... ¿Verdad? — pregunto cartman, pero el rubio no contesto.

—Cartman, ¿por que coño debería de conocerte?

—Ahhh... Posiblemente hayan reiniciado su memoria, que mierda, pensé que se habían desecho de él.

—¡Contestame carajo! — grito ya harto el azabache.

—Tranquilo tucker, no te enojes.

—No estoy entendiendo nada, habla de una maldita vez... — exigió.

—... Jeje, ok, ok... Pero en cambio dejame quedarme aquí esta noche.

—Tsk... Que hijo de...

—Bien, entonces quedate con la duda, yo...

—¡Ahh! ¡Bien, bien! Puedes quedarte, pero sólo por esta noche, ni una noche más cartman — dijo serio.

—¡Genial! Eso era lo que quería oír.

—¿Entonces? Habla...

El castaño miraba al Androide con una sonrisa no muy agradable. Tweek sólo veía los espacios vacíos y su ánillo pasaba de ser azul a uno amarillo, escuchaba en total silencio la conversación de estos y después bajó la mirada, sus recuerdos eran borrosos, después de que fuera sometido a una casi reconstrucción total de su cuerpo dañado, aún presentaba algunas pequeñas fallas...

Continúara...














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